No sabía cómo había ocurrido, su sonrisa ahora brillaba más, sus facciones se habían vuelto tan maldita mente atractivas que no podía dejar de verlo, sus acciones, sus palabras, sus chistes y decisiones se habían vuelto tan hermosamente bellas que cada vez que abría la boca, que reía o simplemente suspiraba su corazón palpitaba y se detenía, todo al mismo momento
Caminaba por los pasillos de la escuela echo furia, el era el culpable de que se sintiera así, que su corazón no dejará de comportarse extraño, de no poder dormir por estar pensado en el, de su dolor de estómago cada vez que estaba cerca y de sentir toda esa maraña de sentimientos
Había intentado de todo para alejar esa cosa que sentía, ¡lo había ignorado durante semanas! Y para su sorpresa había sido tan difícil que casi se rompía internamente
Llego a su clase y lo miro hablando con un grupo de chicos, bufando se acercó a él
—Kyuhyun acompáñame
Ordenó sin más, Kyuhyun lo miro confundido y después molesto
—¿Ahora si hablas? La última semana tu has...
Rodó los ojos y lo tomo del brazo sacándolo a rastras del lugar a mitad de camino fue Kyuhyun el que tomo su mano y el que lo guió hasta el auditorio el cual estaba vacío y oscuro
Lo miro y se cruzó de brazos al igual que Kyuhyun
—Tu...
Comenzó pero un bufido de Kyuhyun lo interrumpió
—¿Que pasa contigo Mine?—pregunto—. Primero actúas raro, después me celas y ahora dejas de hablarme por casi dos semanas
—Yo-yo nunca te he celado
Hablo haciendo un puchero molesto
—¡Le dijiste a esa chica que asesinarias a sus peluches si seguía hablándome!
Sungmin rodó los ojos restándole importancia
—Palabras más, palabras menos
Kyuhyun volvió a bufar
—Y tambien esta lo del...
—Espera, espera—lo callo y recordó el por qué lo había llevado ahí—. Yo te traje aquí TU tienes que escucharme
Kyuhyun lo miro molesto
—Bien, si me vas a explicar que rayos está ocurriendo
Sungmin se paró derecho
—Haste cargo de esto
Señaló su corazón y Kyuhyun lo miro aún más confundido
—¿De que estás...?
—De esto, no sé que rayos está ocurriendo me, no dejo de pensar en ti todo el día y ni te digo por la noche, también cuando estás cerca siento que voy a vomitar y mis manos sudan, tengo esta clase de sentimientos extraños solo...—suspiro—. Solo has que pare—Kyuhyun lo miraba sorprendido, muy, muy sorprendido y después de varios minutos de silencio río, una carcajada cargada de felicidad pura, el rostro de Sungmin se volvió rojo de ira...o vergüenza—.¡¿ Te estás riendo?!
—¿Es por eso que has actuado así?
Las risas no paraba y eso lo molesto más
—¡Basta!—Kyuhyun paró aún que la gran sonrisa que tenía no se había ido—. ¿Harás que pare?—Pregunto esperanzado a lo que Kyuhyun nego—. ¿Que? ¿Por qué no?
—Espere mucho para que eso surgiera Mine—Tomo la mano de Sungmin haciendo que su corazón latierá con más fuerza—. Pero haré algo mejor
Sungmin lo miro confundido
—¿El que?
Kyuhyun se acercó a él y tomo su cintura para acercarlo, acercó su rostro al de él y ambos sintieron sus respiración
—Lo intensificare—acerco sus labios al oído de Sungmin—. Haré que cada día te enamores cada vez más de mí
Se alejó y junto sus labios con el chico del que había estado enamorado desde hace años