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Por Desgracia o Por Suerte por HoneyBunny

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Notas del fanfic:

Muy bien, al fin me he dignado a subir un fanfic en esta plataforma, este no es la mejor historia del mundo, pero espero sea de su agrado, cualquier cosa háganmelo saber. 

La mayoría de la historia será relatada desde la perspectiva de Naomi, con excepción de algunos capítulos que pueden ser narrados por otros personajes de la historia. 

Notas del capitulo:

¡Capítulo 1! 
Espero sea de su agrado. 

Narra Naomi

–¡Chicas llegarán tarde para tomar su vuelo!-. El puntual de mi padre se encontraba de presionarnos a mi y a mi hermana Emily, al fin había llegado el día, el día en el que yo y mi hermana nos iríamos a estudiar lejos en un internado, el hecho de estar lejos de mis padres no me desagradaba del todo, sí, los iba a extrañar, pero sus constantes comparaciones con mi hermana simplemente ya comenzaban a cansarme.
Ciertamente iba a estar con Emily en el ciclo del internado, pero no es que me fuera a tocar en la misma habitación que ella, puesto que todo el alumnado de aquella institución estaba distribuido en habitaciones de acuerdo con el grado en el que iban a ingresar, y por suerte, Emily es un año mayor que yo, y por ende, no tiene por que tocarme con ella.

–¿Ya dejarás de estar distraída?-. Alguien me sacó de mis pensamientos, haciéndome volver a la realidad, se trataba de mi hermana, lo supe por la manera en la que me habló y me daba leves golpes en la cabeza, haciendo que voltease a verla, aquellos ojos un tanto más grises que los míos me estaban fulminando, casi como si me regañasen en ese momento.

–Oh si Emily, disculpa-. Me limité a responderle atando mi cabello en dos coletas bajas evitando aquellos agresivos que evidentemente no se iban.

–Perderemos el vuelo por tu culpa-. Continuaba regañándome, que fastidio el tener una hermana como ella, siendo una “jefa” en todo momento.  

–¿Perdón? Tú fuiste quien tardó años tomando una ducha-. Me encargué de revelarle una de las verdades de aquel momento. Estoy casi segura que estaba a punto de responderme de mala manera, por lo que le mostré la lengua juguetonamente y corrí hacia donde estaban mis padres, Emily no perdió tiempo, por lo que corrió detrás de mí intentando tomarme del brazo, de no ser por mi padre, quien se puso en medio de ambas para evitar que nos peleáramos, ya habríamos perdido más tiempo.

–¡Niñas! ¿Es así como se comporta una niña con modales?-. Y ahí estaba de nuevo, aquel modelo de niña perfecta que debíamos tener Emily y yo a todo momento.

Ambas nos pusimos derechas en nuestros lugares bajando levemente nuestra cabeza en tono de disculpa por nuestra “falta” de modales, ambas debíamos parecer unas damas refinadas.

–Lo sentimos padre-. Dijimos ambas al unísono dirigiéndonos hacia la salida de nuestro hogar, mi padre se encargó de despedirnos a ambas, la limosina que nos llevaría al aeropuerto ya estaba lista, hasta con nuestras maletas bien equipadas.

Nuestro padre no nos llevó hasta el aeropuerto, simplemente nos despidió a mi y a Emily antes de subirnos a la limosina, digamos que ya éramos unas “adultas” o algo así mencionaba mi padre a diario en cuanto cumplí mis 16 años.

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Emily y yo subimos al avión en cuanto la hora de partida había llegado, estaba realmente emocionada, mis padres siempre nos animaban a mi y a mi hermana al momento de entrar en un nuevo instituto, a pesar de que a mi hermana se le facilitara hacer amistades, a mi nunca me funcionaba eso de ser muy social en ningún momento, por lo que eso me desanimaba un poco, pero Emily había acordado conmigo ayudarme a hacer amigos, o bueno, haré amigas, por si no lo he mencionado, iré a un internado de chicas, así que bueno, haré amigas.

El problema no es ese, sino que la manera de hacer amigas de Emily, implica usar la fortuna de nuestros padres para ser popular, el presumir los bienes materiales nunca ha sido uno de mis planes en la vida, pero como mi padre le ha dicho a Emily que el ser ricos nos abre muchas puertas, bueno, tal vez tengan razón, si Emily es popular por eso, yo igual debería hacerlo.

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Tras un par de horas de vuelo, al fin habíamos llegado a nuestro destino, al internado en el que estaríamos durante algunos años y “El reinado de Emily” estaba por comenzar apenas iniciaran las clases, justo como decía ella misma.

El lugar era bastante grande, era como una clase de castillo, o bueno, no tanto como un castillo, pero era gigantezco.

–Nao, creo que tú debes ir sola a buscar tu habitación, yo haré lo mismo-. Murmuraba con un tono algo autoritario mi hermana mayor, yo simplemente asentí con mi cabeza dejando que esta se fuera, sabía que esto iba a pasar, ella simplemente quería alejarse de mi y fingir no ser mi hermana, a pesar de que seamos muy cercanas, ella siempre ha sido la favorita de mis padres, y bueno, es obvio que hasta ella se sienta superior a mi, siendo que somos exactamente lo mismo.

Tomé mis dos maletas rojas al igual que me puse mi mochila de exactamente el mismo color en mi espalda comenzando a caminar hacia el número de mi habitación, si mal no me equivocaba, sería el número 322, en el cuarto piso. Tomé el elevador que me llevaría hasta el piso de mi habitación y caminé por el largo pasillo hasta dirigirme al número de mi habitación, la puerta estaba abierta, así que supuse que mi compañera de habitación estaría dentro, justo antes de entrar escuché voces, definitivamente no estaba sola sea quien fuera que estuviera dentro.

–¡No puedo creerlo, compartirás habitación con una Fleury!-.

–¡Lo sé! Que emocionante, estoy ansiosa por conocerla, ¿será atlética? La invitaré a unirse al club deportivo-. No lo podía creer, hablaban de mi, tal vez podría ser un buen momento para tener amigas, no perdí más tiempo, así que entré en la habitación, haciendo que las chicas que estaban dentro del lugar voltearan a verme como si hubiesen visto al mismísimo fantasma, haciéndome sentir un alto grado de timidez.

–Buen día-. Me habría gustado saludarles de manera más amigable, pero cuando las vi verme de esa manera, me bloquee.

–Buen día…¿Fleury?-. Cuestionó una de ellas, tal parece que era la chica que sería mi compañera de habitación a lo que le respondí asintiendo con mi cabeza.

–Buen día Fleury, mi nombre es Uxia-. Murmuró la otra chica presentándose a si misma, no pude evitar dejar ver una leve sonrisa ante su presentación.

–Naomi Fleury, para servirles-. Más cortante no pude haber sonado, que vergüenza que piensen que soy cómo mi hermana, pero que más da, no tomo confianza muy rápido y menos si estas chicas tenían altas perspectivas de mi persona.

–¡Yo soy Tamara, tu compañera de habitación!-. La voz de esa chica estaba notoriamente animada, hasta su aspecto era realmente amistoso, su cabello era corto hasta la altura de sus hombros y su color era café oscuro, al igual que sus ojos.

–Bueno chicas, debo irme, un placer conocerte Naomi-. Aquella chica llamada Uxia se despidió de ambas dejándome pasar a la habitación finalmente dejando mis maletas en la habitación sentándome en una esquina de la cama en la que dormiría.

–Es un placer conocerte Naomi-. Mi compañera de habitación se recostó en su cama ya arreglada sin dejar de verme, tal parece que espera que le continuara la plática.

–Igualmente, Tamara-. Me limité a responderle hasta que recibí una llamada de Emily.

–Diga-. Respondí el teléfono viendo a Tamara sonriéndole de vez en cuando.

–¡Mi compañera de habitación es tan ordinaria!-.

–¿Y?

–¡No puedo compartir habitación con una ordinaria!

–Oye hermana, no siempre va a haber ricos en todos lados-.

–¡Pero es una callejera!

–Oye no la insultes, habla mejor con ella…

–¡Quiero que me cambies tu compañera de habitación!

–¡Estás loca Fleury!-.Esto último lo grite colgando la llamada con mi hermana mayor haciendo que Tamara me observara como si estuviera asustada por mi repentino cambio de voz.

–Disculpa, mi hermana es una pesadilla-.

–Por tu manera en la que hablabas con ella, creo que eres mejor que ella-.

–Eres la primera que me lo dice, gracias Tamara-. Le sonreí.

Tal vez me iba a ir bien, por ahora, todo iba bien. 

Notas finales:

¡Gracias por leer!

Intentaré actualizar todos los sábados sin falta, tengan un buen día.


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