Querido orgullo:
Hoy nuevamente, eh vuelto a ser quien tú me has sugerido.
Personalidad arisca, nobleza y sobriedad q hasta carecen de sentido. Un montón de mentiras q no me creo yo pero, hago q los demás si lo crean. Como siempre. Me eh portado caprichoso, eh indiscutible. Querido orgullo, si supieras lo difícil q es seguir tus concejos. Rechazar abrazos, despreciar gentilezas.
Mi verdadera, astucia, si es q la poseo realmente. Es todo gracias a ti.
Gracias querido orgullo.
Vemos pasar la vida, de forma vacía. Yo con ojos muertos. Y tú, con ojos aburridos. Hace tiempo q no estoy bien, orgullo. Hace tiempo q estoy muerto. Pero por ti, querido orgullo. Aun no me han sepultado. Y has hasta confundido a los shinigamis.
Les has hecho creer a todos q sigo vivo.
Que tengo algo q ofrecer. Le has hasta engañado a un demonio. Haciéndole creer q tengo algo q ofrecer, aun q sea en un contrato diabólico. Si no estuviera junto a ti hoy, ¿Dónde estaría? No, más bien creo q debería preguntar. ¿Dónde habría cavado?. Para mí ya no hay inicios solo finales. Pero por lo menos, están de tu lado. Por lo menos no estoy solo nunca más querido orgullo.
¡Gracias, gracias, gracias querido orgullo!
Aun q duela tanto ser tuyo. Aun q gane mucho de lo q no sirve a tu lado. Y pierda tanto de lo q sí importa por seguir junto a ti.
….
Querido orgullo:
Hoy paso, lo impensable.
Hoy él, se me acercó. Pero no en burla. Eso creo. Eso espero.
Eh intento besarme…
Como siempre cedí mi voluntad ante ti, como siempre te antepuse y te escuche primero. Lo rechazé.
Le dije q si tenía el tiempo y el descaro para atreverse a ese tipo de roces, lo mejor era q lo castigara.
Querido orgullo ¿seguro de q no hemos cometido un error?
Tu orgullo mío, me conoces mejor q nadie. Me has visto lamer el suelo suplicando piedad. Y me has visto exigiendo a gritos la muerte, antes q suplicar. Por eso sabes bien. Que desde lo más hondo de mi ser. Ese beso, q casi, pero no se dio. Es lo q más anhelo desde hace tanto tiempo q ya ni puedo contar.
Pero es inútil preguntar querido orgullo. Se q aun q estuviésemos equivocados. Tu jamás te retractarías. Porque la falta de culpa es uno de tus sellos, forma parte de lo q eres.
Pero yo, querido orgullo. Solo yo, independiente a ti. Me permito dudar y arrepentirme, sollozar si es necesario. Por eso, te vuelvo a preguntar.
Querido orgullo ¿seguro q no nos equivocamos?...
…
Querido orgullo:
Definitivamente q nos hemos equivocado.
Ahora a él, lo encuentro apático, renuente, grisáceo. Y porque yo soy tan débil, y estoy tan herido. Me permito reconocer a otros cuando están en un estado parecido. Querido orgullo. …l está herido.
Lo hemos lastimado. Y ni tu ni, una parte, de él. Se están dando cuenta de ello.
Querido orgullo, ¿Por qué te resistes? Más allá de reconocer q obramos mal o no. ¿Por qué querido orgullo? No le dices tú lo q sientes por él.
Yo puedo decirle en cualquier momento. Que lo amo, q estoy locamente enamorado de él. Mi escancia humilde no conoce límites. Y si, ciertamente, fue esto mismo lo q me condeno en infinidad de ocasiones. Yo reconozco q si eh logrado sobrevivir, ha sido meramente porque, tu querido orgullo estas junto a mí.
Pero hay algo querido orgullo, q puede q estés obviando. Y al final, puede q esto, querida orgullo, nos mate a ambos.
La verdad.
La verdad querido orgullo. La mía la tuya. Son la misma. Lo amas, y yo también. Estoy enamorado de él, y tú también.
Y esto, nos va alcanzar algún día querido orgullo. No importa q tan lejos corramos, jamás será suficiente como para huir de esta nociva realidad.
Más bien, querido orgullo. Temo, q el tratar de evitar la verdad. Nos lastime a ambos. A él…
…
Querido orgullo:
¿Por qué me haces daño?
Tanto tiempo. Me has herido, pero también me has protegido.
Hoy amargamente descubro, q solo me haces mal.
¿Por qué querido orgullo, te lastimas a ti también?
Y sobrero todo. Lo lastimas a él.
¿No has visto querido orgullo?
El fondo roto de sus ojos. Cuando le negamos todo, hasta el espacio al lado nuestro. ¿No has sentido, q esa mirada, es la misma q hay en nuestros ojos también?
Querido orgullo.
Estamos muriendo sin él. Pero peor q en la agonía lenta en la q estabas atrapado. Peor q en la muerte en vida, q yo viviva. En este nuevo tiempo de tortura. Renaces para morir una y otra vez, todo. En segundos del día.
Y él se esfuerza, en todo lo q puede. Tú has de saber q incluso está muy limitado con lo q es.
Aun así nos atiende, aun así nos tienta, aun así prueba.
Querido orgullo. Ya ríndete.
…
Querido orgullo:
Ahora sabes lo q es una tormenta en tu interior. Y yo se lo q significa el fin del mundo. Cuando el mundo entero a tu alrededor muere. Porque él no está junto a nosotros.
Querido orgullo. Estoy desesperado, como hace tiempo no lo estaba, querido orgullo. Temo por sobre todo, q ya nunca más volvamos a verlo.
Tu y yo, orgullo. Debíamos habérselo dicho cuando podíamos.
Debimos pelear, no debí dejarte continuar.
Querido orgullo. Hoy más q nunca, me arrepiento de haberte escuchado.
***
Sr. Demonio:
¡¿Qué erro has cometido traidor?!
Tú no puedes. Es q aun no lo entiendes. Eres un demonio, eres yo. Y yo no puedo amar.
Ni a él, ni ninguna alma.
¿Crees q no lo eh notado? Como se filtra en tus instintos. Las reacciones humanas, del cuerpo q te ha dado tu amo.
¿No te aborreces lo suficiente?
¿No quieres torturar al pequeño?
Habiendo tanto mal en el mundo, tanto nuevo por experimentar con la carne fresca y apetecible, q se nos ofrece. ¿Acaso no huele demasiado bien, como para no ser devorado?
Tendrías q desde ya. Estar respetándote y a mí.
Somos un demonio. No hacemos estas cosas.
No somos humanos. Escúchame a mí. Escucha a tu demonio interior.
…
Sr. Demonio:
Me has repugnado en el fondo de nuestro mismo ceno oscuro.
Tus fallas nos están contaminando. ¿Cómo pudiste acercarte de esa forma? ¿En q momento, el pacto pudo más q su creador?
Me arrebata y me place. Me irrita. Que nos haya rechazado….
Esa mescla, del placer y el dolor es lo q siento. Es solo q este dolor, no es ajeno. Es nuestro.
¿En verdad lo sientes. O solo te engañas? Pero como puedes mentirte a ti mismo si somos el padre de las mentiras. Qué caso tiene estar en contra de todas las naturalezas. Nada de esto está bien.
Ni para el cielo, ni para el infierno.
En cualquiera de los dos. Tú, parte débil de mí. Blasfemas.
No lo entiendes ¿verdad? Nadie elegiría a un demonio.
La primera vez es suerte. Nosotros somos pescadores de peses enfermos, q solo por ayuda muerden el anzuelo, eso. Eso es suerte.
Pero nadie, cometería el mismo error dos veces.
Estamos hechos para molestar, la sátira es nuestro aire, la burla nuestro lenguaje, el odio nuestra sangre, la demencia nuestro corazón.
Y el nuestro está aún más loco. Por un niño. Que una vez pescamos.
Un bocadillo de dulce de leche y zafiro.
¿Vale tanto? Eso yo también. Me lo pregunto.
…
Sr. Demonio:
Mírate ahora enorme vergüenza.
Desprendes el mismo olor q las presas. Esas ya moribundas, enfermas. De la q nos alimentamos.
¿Cómo un crio tan pequeño, puede causarnos tanto daño?
Eres tú, es por tu culpa. Porque no lo rechazas lo suficientemente bien.
¿Por qué persistes?
Obviamente el crio de los mil cojones, no va a “adoptarte” “gatita abandonada” me des asco y odio en lo q te estas convirtiendo a su lado.
Nos avergüenzas, nos humillas. ¡Nos pones en tela de juicio frente a la comida!
Deberían matarte. Matarnos. Un demonio tan poco digno. Merece desaparecer…
Estoy… ¡Estoy herido. Y eso es por culpa tuya!
¡¿Qué tanto taladro. Este mal de humanos dentro de nuestra verdadera forma?!
…
Sr. Demonio:
¿Disfrutas? ¿Lo disfrutar realmente?
Salvar a un cuerpo tan delgado y endeble. Alimentar a un cuerpo ingrato q para colmo ni crese.
¿Vale tanto el extraño y único sabor de su alma?
Lo vale lo suficiente como para aguantar su mirada altiva aun cuando no posee nada ni siquiera su mismísimo futuro.
Ese crio si es, un verdadero demonio.
Es una peste, un castigo. Un mal sin nombre recién reconocido.
¿A cuántos otros, ya llevo a la locura? ¿A cuántos tentó y mato, su frágil cuerpo?
…l ya mato más demonios y humanos q tú…
¿Por qué no nos vamos?
Regresar al infierno, traicionarle, encontrar un nuevo contrato…
No suena tan mal, no suena tan alejado de lo q aria un demonio. De lo q deberíamos estar haciendo nosotros….
Hay q irse. Porque si no, nosotros al igual q muchos moriremos a los pies de un crio tan adictivo.
…
Sr. Demonio:
Hay q huir. Antes de q nos hagamos más humanos.
Presiento la rendición cerca. La tuya y la mía. Y cuando eso pase…el maldito enano nos tendrá en sus manos. Y nos destruirá, más rápido de lo q ha hecho hasta ahora.
Hay q irse. Cuando yo también siento. Ese dolor tan diferente, pero tan mortal como las armas de los shinigamis…
Es mejor vivir sangrando. Que morir definitivamente.
Hazme caso.
Escucha al instinto q te mantiene vivo.
Tu propio cuerpo mortal, que reclama una escapada. O perecerás…
Huye, huye. Huye lejos de los ojos cielo….
Vete, no mires atrás porque por la vista entra el veneno…
Déjale. Y mejor si es para siempre.
***
Sr. Demonio y Querido Orgullo.
Conocieron por primera vez la palabra “rendición”.
Cuando ya muchas horas después de, los escapes y las tormentas. Estando entre los brazos del otro, comenzaron a liberar aquello q era incontenible. La verdad.
S-mi pequeño y orgulloso Bocchan. Lo amo, mi lord.
C-y yo a ti mi señor demonio. Te amo también, Sebastían.
Fin.
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español