Los días pasaban y Thor se ponía más nervioso día tras días. ¿Después de lo que había ocurrido los jotuns no se pronunciaban?¿Loki no habría llegado a su casa?¿Habría muerto a causa de las heridas y la enfermedad el dia de la pelea que tuvo con él? Esa idea le perturbó tanto que tuvo que sentarse para no vomitar.
¿Habría asesinado al amor de su vida? El picoteo de alguien llamando a la puerta le sacó de sus pensamientos. Su padre se asomó por la puerta pidiéndole permiso para pasar. Se acercó a la cama y se sentó en la cama junto a su hijo, dejando las muletas a un lado. Thor había empezado a llamarle “capitán pirata” o “pata palo”desde que había podido empezar a andar con las muletas. Entre eso y su característico parche del ojo, el rey tenía una pintoresca apariencia que divertía al joven príncipe.
Hacía cuatro días que Ametre había partido con sus hombres y por el momento no habían recibido noticia alguna. Se tardaban dos días y medio a caballo para llegar a la ciudad helada. Eso significaba que llevaban allí tiempo suficiente para haber hablado con los reyes y llegar a algún acuerdo para solucionar el problema. Algo no iba bien.
-Pese a que Loki sea su hijo...estoy seguro de que Laufey es consciente de la situación y hará lo posible para zanjar este tema cuanto antes-dijo Odín con intención de tranquilizar a su hijo.
-Yo también quiero pensar eso papa-respondió él- pero ¿y si Loki no ha vuelto a Jotunheim? o le ha pasado algo por el camino o…-su rostro se ensombreció
-Loki está bien, es un chico fuerte ¡y muy listo! ¿Como te crees que me pilló de sorpresa?-sonrió intentando animarle- Si no ha vuelto a su casa ¿a donde habría podido ir? Dudo mucho que volviera a las ruinas donde lo encontraste y no conoce a nadie en otras ciudades cercanas. Lo más probable es que su padre lo este protegiendo hasta encontrar alguna forma de liberarlo del juicio o…-dejó la frase al aire.
-¿O...?-le inquirió su hijo
-Oh se haya desorientado por el camino y esté perdido por el bosque. Si es ese caso, estoy seguro de que pronto llegará un mensaje de Ametre informando sobre la situación en corona y que procederá a escudriñar los alrededores de la ciudad para encontrarle.Esperemos hasta entonces ¿de acuerdo hijo?-Thor asintió, pero seguía sintiendo esa punzada de preocupación en el corazón.
Mientras en el palacio de Jotunheim, los soldados habían llevado a los asgardianos ante los reyes.De pronto Farbauti se levantó alarmada
-¿Donde está Loki?-Los gigantes se miraron entre ellos, buscando alguna respuesta
-¿Qué intenciones teníais al acampar tan cerca de la ciudad?-dijo Laufey con su voz fría y punzante. Tenía a los asgardianos aterrorizados, atados y arrodillados ante él. Eso le gustaba pues significaba que aún infundía un gran respeto, pero no le gustaba nada la situación en la que se encontraba- Responded
Uno de los asgardianos tragó saliva y se dispuso a hablar, parecía ser el capitán de la guarnición
-Solo seguíamos órdenes de nuestro superior al mando. Nos dijo que acamparamos y que le esperaramos mientras iba a ocuparse de algo y que si ocurría cualquier cosa con vosotros no ofrecieramos resistencia ya que aún nos encontramos en su reino. Entonces él se marchó y vosotros atacasteis y…-dio su declaración por acabada. Laufey apretó su manos a los reposabrazos de su trono que se estremecieron antes de congelarse por completo. Entendió perfectamente que estaba pasando.
Ordenó que soltaran a los prisioneros y que fueran liberados para volver a Asgard. Al principio los soldados no estaban muy seguros, pero acabaron obedeciendo.
-Antes de que partáis-les detuvo el rey y se dirigió al capitán de la guardia- quiero que mandéis un comunicado de la situación a vuestro rey. Decidle a Odín que alguien de su corte a secuestrado a mi hijo y que no me detendré hasta tenerlo otra vez sano y salvo en casa-todos en la sala se sorprendieron al oír la declaración del rey.
El soldado lo saludó con gran efusividad
-Ahora yo y mis hombres estamos en deuda con vos. El traidor se llama Ametre mi señor. Y no solo me comprometo a cumplir con lo que me exigís sino que además no descansaré hasta darle caza y traeros de vuelta a vuestro hijo.
El gigante asintió conforme. Aún y la traición de Ametre ambos reinos seguirán siendo aliados.
Unas horas más tarde de aquel mismo día, una enorme figura se había plantado en la ciudad de Asgard. Su rostro estaba cubierto por una capucha y su cuerpo por una capa. Pese a eso, no pasaba desapercibido por las gentes de la ciudad. Nada ni nadie lo detuvo hasta que se encontró en la mismísima sala del trono. Entonces avanzó hasta los pies del trono y se destapó de todos sus ropajes para poder hablar alto y claro.
-Mi nombre es Elijnor de Jotunheim y vengo a entregar un importante mensaje. Hace varios días, nuestro príncipe regresó a la ciudad, yo mismo lo acompañe hasta reencontrarse con sus padres. Desconozco qué problemas causó aquí antes de regresar a casa, pero nuestro soberano Laufey envió una invitación para concretar una cita con su alteza para poder zanjar el asunto. Esperábamos una respuesta cuando una patrulla asgardiana llegó a nuestra ciudad exigiendo que entregaramos al príncipe para ser sometido a un juicio. Les pedimos que esperasen hasta que llegara su contestación a la carta de nuestro rey cuando el cabecilla de la patrulla declaró que vos os negabais a la cita y exigiais que entregaran al acusado
-¡Todo eso es mentira!-espetó Thor que hasta entonces se había mantenido callado. Odín, que ya había empezado otra vez a ocuparse de sus asuntos le reprocho con una severa mirada. El jotun también lo hizo, pero mucho más disimuladamente. Lo último que quería era problemas con los asgardianos
-Como iba diciendo, al rey y a su hijo le parecieron un absurdo y descubrieron la trampa. Alguien ha interferido el mensaje y os ha traicionado- dio la declaración por finalizada y esperó. El silencio se había instalado en la sala. Entonces Odín habló.
-Creo en vuestra declaración y os agradezco que hayáis venido hasta aquí para informarnos. Enviaremos cuanto antes una respuesta a vuestro rey para concertar la prometedora cita. Ahora os pido que acompañéis a mi sirviente para que os ofrezca todo lo que necesitéis para recuperaros del viaje.
-Os lo agradezco-dijo el jotun mientras hacía una reverencia- mi brebor ha corrido toda la noche para poder llegar cuanto antes a entregar el mensaje y ahora está exhausto.El jotun se retiró y antes de que Thor pudiera abrir la boca, Odín se levantó y le pidió que lo acompañara a un sitio más privado para hablar.
-¿Que demonios esta pasando padre?¿Quién querría provocar disturbios entre los gigantes?
-No lo se hijo.Pero al menos una cosa es segura. Loki llegó a casa y ahora está a salvo.Te dije que era muy listo. Thor no puedo evitar esbozar una sonrisa que rápidamente se esfumó.
-Ahora lo que realmente importa es descubrir quien nos ha traicionado y cuales son sus motivos.
Odín ordenó que les trajeran una lista donde estaba estipulado todos y cada uno de los soldados y sirvientes que habían partido en esa misión. En cuanto llegara a sus manos se pondría a investigar todos y cada uno de los nombres de esa lista.
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Notaba un dolor nebuloso en la parte trasera de su cabeza cuando despertó.¿Qué diablos había pasado? Entonces notó que alguien le llevaba cojido.¿Thor? Estúpido zoquete! Seguro que le habría golpeado sin querer y...entonces se acordó de la última vez que había visto a su amor.No era él. ¿Sería un gigante de hielo?¿Lo habrían golpeado durante la batalla? Abrió con esfuerzo los ojos y vió una parte oscura del bosque..una parte que no había visto nunca. ¿Qué demonios estaba pasando? Intento voltearse cuando se dió cuenta de que estaba atado y amordazado.Empezó a zarandearse para ver quien lo transportaba. Vió a un hombre asgardiano con el pelo rapado.Entonces paró y lo tiró al suelo provocando le un doloroso golpe en el trasero. Fue cuando pudo verle la cara. El cabecilla de la patrulla, Ametre. Lo miraba desde arriba, prepotente,con una sonrisa en los labios.
-Hola monstruito ¿sorprendido? Es una gran ventaja que justamente el hijo del rey jotun sea una miseria como tu. Si llegas a ser como los demás no habría podido haber cargado contigo-Los fríos y rojizos ojos de Loki lo miraba con ira- No me mires así, no puedo soportarlo-dijo burleta
Loki intento hablar pero la mordaza solo le dejaba farfullar.Se sentía impotente y eso lo ponía colérico, eso y la aptitud de ese hombre.
Ametre le dió la espalda y empezó a deshacer la bolsa que llevaba. Sacó algo de provisiones y una cuerda.Se puso en pie y tensó la cuerda
-Después de comer, andarás.Estoy harto de llevarte y dudo que te apetezca que te arrastre por el suelo.
Acercó al Jotun al árbol más cercano, lo ató a él y después le quitó la mordaza y las ataduras de los pies.
-¿Que diablos crees que estás haciendo? No saldrás vivo de esta maldito bastardo-Ametre lo abofeteó, se puso en pie y se separo de el y se sentó para empezar a comer su parte.
-El que no saldrá vivo de esta serás tu monstruo-empezó con la boca llena- ¿Que crees que pasara cuando Laufey descubra que han encontrado el cadáver de su hijito en medio del paso de Mjelt? Se levantará con todo su ejército y atacara Asgard y con ello, empezará otra guerra ¿no es glorioso?-Loki lo miraba fijamente- Y cuando eso ocurra, acabaremos de asesinar a toda tu gente y vuestra asquerosa raza desaparecerá para siempre. ¡Deberíamos celebrarlo! Por favor, no te cortes y come conmigo
-¿Así que eso es lo que quieres?¿Acabar con los jotuns?
-Si, sois un error de la naturaleza, unos monstruos que nunca debieron haber existido. Mataremos a todos vuestros hombres, degollaremos a todas vuestras mujeres y golpearemos a vuestros hijos hasta matarlos y jugaremos a pelota con vuestras cabezas-Loki intentó tirarse encima de ese desgraciado pero lo había atado demasiado bien.
Cuando Ametre acabo de comer y beber se levantó y a desgana le dió de comer al jotun. Este aprovechó para morder le con saña mientras le acercaba la comida. Se ganó un buen guantazo pero valió la pena. Le había hecho sangrar.
El asgardiano empezó a desatarle para proseguir la marcha. Loki aguardó impaciente hasta el momento que notó la cuerda lo suficientemente floja y echó a correr lo más rápido que pudo por el bosque. Detrás suyo oyó el grito colérico del hombre y como empezaba a correr detrás de él.
Resultaba muy difícil correr por el bosque descalzo, de noche y con las manos atrapadas en la espalda.No podía apartar las ramas de su cara e incluso una se le enganchó en los cuernos, deteniendo lo en seco.Rápidamente se soltó y siguió corriendo. La maldita ramita lo había entretenido y ahora tenia mas cerca a su persecutor. Una raíz levantada lo hizo tropezar y caer de bruces en un montón de matojos. Se maldijo internamente pero aprovechando que estaba en el suelo, pasó sus piernas por detrás de sus brazos. Tuvo sus dificultades, pero ahora tenía mucha más movilidad y en caso de tener tiempo, podría morder la cuerda hasta deshacerse de las cuerdas.¡Viva los colmillos de Jotun!
Poco después de conseguir pasar sus manos hacia delante oyó a Ametre acercarse y detenerse muy cerca de donde se encontraba. Se quedó muy quieto...aguantando la respiración…
Su sudor empezaba hacer acto de presencia en su piel azulada.Ametre maldijo a los cuatro vientos y siguió su búsqueda.
Cuando estaba seguro de que ese tipo ya se encontraba muy lejos, se dió el lujo de relajarse y apoyarse sobre el árbol que tenía detrás. Empezó a morder y tirar de las cuerdas hasta que se deshizo de ellas y se frotó las muñecas, lastimadas por la cuerda. Entonces suspiró y levantó la vista hacia la luna llena. No quedaba mucho para que amaneciera.
Decidió quedarse donde estaba y descansar. A las primeras luces del alba, cuando su amiga se hubiera retirado del cielo, se pondría en marcha de regreso a casa.
Se tumbó en el césped, cerró los ojos y se acurrucó.Pensó cariñosamente en sus padres y cuanto les echaba de menos ahora que de nuevo volvían a estar juntos. Y también pensó en Thor.Rió internamente imaginandoselo salvandole como en los cuentos para crios, con su melena y su capa al viento, su martillo alzado al cielo y su mirada segura y desafiante. Pero su último pensamiento se lo guardó a su otro Thor, el Thor cariñoso, que lo abraza con ternura y lo besa con amor. El Thor que lo envuelve en sus brazos y le trasmite esa calidez que nadie más le ha dado, ese al que desea y ama con todo su corazón. Eso fue lo último que pensó antes de caer en un profundo sueño.
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