Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

The Idol With The Broken Smile [Yoonseok] por Alen

[Reviews - 0]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola de nuevo >.<

Este es un One-Shot Yoonseok, espero que lo disfrutéis

La vida de un idol es complicada. Producir, ensayar, mejorar, superarse, tener que llegar a las expectativas de los fans, cada vez hacerlo mejor para no aburrirles, superarse cada día… y eso, es mucha presión y algo que muchos fans pueden no llegar a comprender.


***


Porque ser un idol no era fácil. Porque ser de uno de los grupos más famosos de corea no era fácil. Porque ser la “esperanza” de dicho grupo no era fácil. Porque, al fin y al cabo, la vida no es fácil. Y eso Hoseok lo sabía mejor que nadie.


¿Y si no les ha gustado? ¿Y se les he decepcionado? ¿Y si se esperaban algo mejor?... eran algunas de las millones de preguntas que Hoseok se hacía cada día al llegar a casa y quedar en silencio en su habitación.


Él estaba seguro de las muchas inseguridades de los demás miembros del grupo, vaya que los sabía, y era por eso que él debía seguir igual que siempre, sonriendo ante todo, para que los demás pudiesen apoyarse en él, para que supieran que él estaba allí. Debía seguir mostrando su sonrisa para ser la felicidad de Bangtan y sus compañeros. Pero con el tiempo se le estaba haciendo demasiado difícil el sonreír a las cámaras cuando sentía su cuerpo desfallecer por el cansancio y la presión. Porque ya no encontraba fuerzas para seguir intentándolo con tanto ahínco.


Cuando aceptó ser idol nunca creyó querer abandonar. Dejar ir su sueño y empezar una vida más sencilla. Una vida que no estuviese regida por reglas, horarios, ensayos, programas, grabaciones, etc. Una vida donde no tuviera que matarse con 12 horas diarias de prácticas, una vida donde pudiera ser más… libre.


Por mucho que fuese la esperanza de Bangtan y la esperanza fuese lo último que se perdía, podía llegar a desaparecer. Y eso era lo que le estaba sucediendo. Los insultos de aquellos haters que se hacían llamar sus fans le carcomían la cabeza cada día, empezando a creer que en efecto no era lo suficientemente bueno para pertenecer a dicho grupo, que sin J-Hope estarían mucho mejor, que sin Jung Hoseok podrían llegar mucho más lejos.


Y a consecuencia de eso sus sonrisas empezaron a no ser verdaderas. Por mucho que se dijese que no volvería a hacerlo ya había perdido la cuenta de cuantas falsas sonrisas había repartido. En los programas, conciertos, fansigns e incluso en los dormitorios cuando los demás preguntaban si estaba bien. Y no pasó mucho tiempo hasta que decidió hablar con su mánager para discutir los términos de su dimisión como integrante del grupo.


***


—¿Estás seguro de esto?


—Sí. El mixtape que estoy componiendo será mi último trabajo como artista. Lo siento por el comeback tendrán que modificarlo un poco, pero seguro que Namjoon y Yoongi serán capaces de rapear mi parte, son mejores que yo después de todo; incluso pueden dárselo a Jungkook si no es demasiado trabajo para él. Y sobre el baile, Jimin es tan buen bailarín como yo y Jungkook ha mejorado mucho en este tiempo, se las arreglarán sin mí, estoy seguro.


—¿No crees que te estás precipitando?


—No. Aunque puede que no lo parezca lo he estado pensando mucho.


—¿Y los demás? ¿Has hablado con ellos?


—No, y le pido que no se lo cuente hasta el día que pueda firmar mi dimisión, sobre todo absténgase en decírselo a Yoongi.


***


—Hoseok, ¿¡qué significa esto!? —le gritó Yoongi entrando estrepitosamente a la habitación que compartía con Jimin.


—¿Algún problema hyung? —dijo quitándose los cascos y apartando el portátil a un lado.


Yoongi estaba que echaba fuego por los ojos y Hoseok no lo había visto tan enfadado nunca; agradecía que Jimin se hubiese ido con Taehyung y Jungkook fuera.


—¿¡Cómo que si algún problema!? ¿¡Puedes decirme qué significa esta mierda!? —enfurecido le plantó su móvil delante de la cara de Hoseok enseñando una conversación que apenas podía ver, conversación que el mayor había tenido con su mánager—. ¿¡Pensabas que no nos diría algo tan importante!?


—No es lo que parece.


—¿A no? ¿Y entonces qué es? Porque a mí me parece que habla de tu dimisión.


—Es complicado —murmuró más para sí mismo que para el contrario.


—¿Tienes idea de cómo puede afectar esto a la carrera de todos? ¿Cómo crees que se lo ha tomado Namjoon o Taehyung o cualquiera de los demás? No puedes simplemente tomar una decisión así por tu cuenta. Deberías de haberlo hablado con los demás, al menos con Namjoon. Sabes que Bangtan no va a ser lo mismo sin ti, no podríamos seguir como antes.


Yoongi seguía soltando todo lo que se le ocurriese para poder convencer al contrario de que la decisión que había tomado no era la correcta. No le importaba si repetía constantemente lo mismo, o si el menor se aburría de escucharlo. No pararía hasta conseguir su cometido.


—Eso no es lo que dicen algunos —susurró en respuesta entre uno de los muchos argumentos sin mucho sentido que le brindaba el mayor.


Yoongi paró de soltar palabras en cuanto vio a Hoseok abrir la boca, lo que hizo que pudiese escuchar claramente lo que el contrario había dicho.


—¿Qué quieres decir? —dijo enfadado el mayor, porque creía saber a qué personas se refería y no le agradaban sus pensamientos.


—Si sabes la respuesta no sé para qué preguntas. No debería de estar en el grupo y hay gente que me lo recuerda cada día. No soy quien mejor rapea, tú y Namjoon sois mucho mejores y Jungkook puede llegar a hacerlo mejor que yo; en cuanto al baile parece que no les gusta mi estilo y Jimin y Jungkook bailan muchísimo mejor; con cuatro cantantes con tanto talento no tengo lugar entre los vocalistas; y ni de lejos soy el mejor parecido de todos. Así que dime, ¿en dónde pinto y-


Y el sonido de una bofetada se escuchó en la habitación que hizo que el silencio predominara en la estancia. Nunca, en todo el tiempo que había vivido con los miembros de Bangtan, nadie había llegado a pegar de esa manera a ninguno de los miembros y ahora allí estaba él, siendo golpeado por el hyung que consideraba como su hermano y mejor amigo. Y aunque las lágrimas se fueron acumulando en sus ojos, logró retenerlas y alzar la mirada, temeroso, encarando a su mayor.


—Retira lo dicho Hoseok —ordenó con voz gruesa. Esa que solo había escuchado utilizar cuando de verdad estaba enfadado y retenía sus ganas de golpear a cualquiera que se le acercase—. ¡He dicho que lo retires! —gritó más de la cuenta haciendo que el menor diera un pequeño salto en el sitio por el susto.


—Y-yo… verás hyung… —no sabía qué decir y tartamudeaba a causa del miedo que le daba Yoongi en aquel estado—. E-esto es demasiado para mí, yo no puedo seguir —dijo mientras una lágrima se escapaba de sus ojos.


—Estás yendo por el camino fácil Hoseok, tú no eras así —suspiró Yoongi más calmado propinándole una mirada de decepción que llegó a dolerle más a Hoseok que la bofetada que hace poco le había dado.


—¿Y-y qué si ahora lo soy? No sabes lo que es tener que sonreírle a las cámaras cuando lo que más quiero en esos momento es mandar todo a la mierda y gritarle al mundo que no estoy bien. Que por mucho que intente fingir, cada día me cuesta más. Llega un momento cuando ya es suficiente y no puedes más y ese momento ya ha llegado. Llevo más de un año fingiendo y no puedo más. ¿Es que acaso no puedes entender eso?


Para cuando terminó ya estaba llorando y avergonzado se dio la vuelta e intentó limpiarse la cara con la manga de su camiseta. Escuchó los pasos de Yoongi acercarse a la cama y sintió un lado de esta hundirse con el peso del contrario.


—Escucha Hoseok, no tienes que ser el mejor en todo y aunque fueses el peor, nadie podría quitarte el puesto en el grupo que con tanto esfuerzo has logrado conseguir. Nadie de nosotros es perfecto, y tú tampoco lo eres. Por mucho que digas que Namjoon y yo somos mejores raperos que tú no significa nada, porque en cuanto al baile no nos acercamos ni un poco a ti. No puedes compararte con los demás, porque cada uno es bueno en algo y no tan bueno en otra cosa. La mayoría de nosotros debería de sentir envidia de ti al ser capaz de bailar, rapear, cantar y además ser tan bien parecido como lo eres tú; así que ahora vas a repetir todo lo que te voy a decir incontables veces hasta que entre en esa cabecita tuya y te convenzas de que lo que digo es verdad.


Hoseok todavía sin atreverse a darse la vuelta, se quedó en silencio y escuchó atento las palabras de su mayor.


—Di que eres buen bailarín, el mejor de Bangtan incluso; di que rapeas espectacularmente; di que muchos raperos envidiarían tus habilidades de cantar, yo incluyéndome; y ni se te ocurra volver a decir que eres feo porque no es verdad. Y mucho, muchísimo, más importante que todo esto, eres una buena persona. Un hijo del cual cualquier padre se sentiría orgulloso, un amigo que sabe cómo ayudar, un hyung que hace que sus menores se sientan cómodos como si la edad no fuera ninguna barrera, un dongsaeng que puede llegar a ser más maduro que sus mayores y ayudarlos en momentos difíciles, y un miembro de Bangtan tan importante como el resto.


A Hoseok se le volvieron a aguar los ojos con aquellas palabras.


—Dilo —repitió Yoongi a lo que el menor solo negó agachando la cabeza—. Sabes Hoseok, ¿recuerdas aquellos tiempos en los cuales temía que a los demás no les gustase mi música, o que solo la escucharan por tener a gente como Jungkook o Taehyung en el grupo, o que incluso nadie lograse apreciarla tanto como yo lo hacía? —Hoseok asintió lentamente a lo que el mayor continuó—. Pues ahora eso no me importa. ¿Sabes por qué? Porque en ese entonces hubo alguien que hizo que me diera cuenta de que lo único que necesitaba era que a mí me gustase y que estuviese satisfecho con mi trabajo; además quería que a vosotros os gustara, y con eso yo ya tenía suficiente. Si ahora, a parte de todo eso, a los demás les gustaba también, mucho mejor. Sin embargo no lo ponía como una prioridad, porque a partir de ese momento le di preferencia a mi propio criterio y no al de los demás. Y eso es lo que deberías de hacer tú. No me vale que me des consejos que no te aplicas a ti mismo.


Tocó el hombro del menor y con cuidado hizo que se diese la vuelta y viendo que algunas lágrimas traviesas seguían saliendo de sus ojos, con los pulgares de sus manos fue retirándolas con delicadeza.


—¿Te gusta cómo rapeas? —preguntó mirándole directamente a los ojos.


Hoseok asintió.


—¿Te gusta cómo bailas?


Volvió a asentir sorbiéndose los mocos.


—¿Crees que cantas tan mal como yo?


Negó sonriendo un poco ante las palabras de su mayor.


—¿Te gusta tu aspecto?


Asintió.


—¿Estás a gusto con nosotros?


Asintió efusivamente.


—¿Quieres irte?


Negó entre triste y avergonzado.


—Pues ya está. Quiere lo que haces, ámate a ti mismo y sé feliz —sentenció besando la frente del contrario con delicadeza.


—Pero…


—Ni pero ni nada. Ahora quiero que repitas lo que te he dicho antes, luego vas a ducharte y tan pronto como estés listo irás a hablar con el mánager para arreglarlo todo. Luego volverás aquí, te disculparás con el resto y descansarás para que mañana estés totalmente recuperado. Y recuerda que cualquier cosa que te moleste, por mínima que sea vas a decírmelo sin objeciones. ¿Entendido?


—S-sí…


—Sí y…


—Soy buen bailarín, rapeo espectacularmente, muchos raperos envidiarían mis habilidades de cantar, y no se me ocurrirá volver a decir que soy feo porque no es verdad. Y más importante que todo esto, soy una buena persona. Un hijo del cual cualquier padre se sentiría orgulloso, un amigo que sabe cómo ayudar, un hyung que hace que sus menores se sientan cómodos como si la edad no fuera ninguna barrera, un dongsaeng que puede llegar a ser más maduro que sus mayores y ayudarlos en momentos difíciles, y un miembro de Bangtan tan importante como el resto.


Hoseok volvía a estar llorando, a lo que el mayor solo lo abrazó y le dio varias palmaditas en la cabeza a la vez que le felicitaba por haber aceptado algo que no quería admitir.


—No sé qué haría sin ti hyung —dijo Hoseok devolviéndole el abrazo más fuerte, no queriendo soltarlo.


—Ser un completo descerebrado y cabezota —contestó entre risas y golpeó suavemente la frente del contrario seguido de un fugaz beso.


—Te quiero hyung.


—Y yo a ti tonto. No sabes el susto que me ha dado el mánager cuando me lo ha contado —dijo medio regañando al menor.


—Lo siento. Ahora estoy muy avergonzado de mi actitud.


—A todo esto, ¿por qué no querías que nos dijese nada? —preguntó curiosos el mayor tumbándose en la cama del contrario llevándoselo con él.


—Nada, razones personales —dijo entre risas volviendo a besar a la persona que era su novio desde hace unos meses, regalándole la primera sonrisa verdadera que había tenido desde hacía mucho tiempo.


***


—¿Y los demás? ¿Has hablado con ellos?


—No, y le pido que no se lo cuente hasta el día que pueda firmar mi dimisión, sobre todo absténgase en decírselo a Yoongi.


—Tienen el derecho de saberlo, sobre todo él, esto les afecta más a ellos que a ti. ¿Por qué no quieres?


—Porque podrían hacerme cambiar de opinión.

Notas finales:

Espero que os haya gustado.

Es verdad que puede que el comeback sea antes de que Hobi sace su mixtape pero bueno, he querido escribir esto así

Ahora sí, me despido y ya nos leeremos en alguna de mis obras.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).