Al ser dado de alta lleve a Marco a casa y como no trabajaría por unas semanas le asigne la misión de ayudar a mi hermano con su boda junto a Ace, no podía decir que no me daban celos el solo pensar que Marco y Ace estarían planeando una boda pero tenía que tenerlo ocupado, cuando llegaba al trabajo Koala lo primero que me preguntaba era sobre Marco y Ace, me molesto pero no podía culparla, sabía que por dentro moría de celos.-
Muy bien, ya está esto.- dije mientras revisaba la hoja.- No se ve tan mal.
Eso dices ahora.- dijo Koala.- Pero cuando lo entregues comenzaras a dudar.
Eso hace mi trabajo mucho mejor.- dije orgulloso.
Pero enfadas mucho.- dijo Koala.
Termina lo tuyo y déjame en paz.- dije molesto.
Como diga jefe.- dijo Koala entre risas.
Las horas pasaban y el trabajo parecía no terminar, Dragón pasaba a mi oficina para ver nuestro progreso y dejarnos algo para comer, aun siendo nuestro jefe nos cuidaba más que a los demás empleados. Al terminar la jornada laboral, salía a toda prisa con dirección a casa, mi imaginación comenzaba a trabajar cada vez que recordaba quien acompañaba a Marco, al llegar a casa vi a Ace molestando a Marco pero en el momento no le di importancia.-
Bienvenido hermano.- dijo Ace tratando de golpear a Marco.
¿Ahora que paso?- dije molesto.- No puedo irme sin que traten de matarse.
En mi defensa el empezó.- dijo Ace acercándose a mi.- Dame tus cosas y ve a sentarte, tengo algo que decirte.
Hice casi y me senté a lado de Marco, en cuanto me acerque el me beso y parecía que tenía meses que no me miraba, esos detalles hacían que mis dudas se fueran por el momento.-
Oigan, estoy aquí.- dijo Ace al acercarse a nosotros.
Estas tardando en irte.- dijo Marco molesto.
Marco, espera.- dije mientras lo alejaba.- ¿Qué ibas a decirme?
Ace acerco su mano y pude ver un anillo.-
Esto, Shanks me propuso matrimonio.- dijo Ace emocionado.
¡Felicidades!- dije emocionado abrazando a Ace.- Por fin se atrevió.
No fue fácil ¿Verdad?- pregunto Marco mientras se acercaba a Ace.- ¿Qué dijo Garp?
Que lo castrara si me llega a decepcionar.- dijo Ace mientras abrazaba a Marco.- Estoy muy feliz.
Ahora si podemos decir que cada quien obtuvo lo quería.- dije feliz.- Pero ¿Cuándo tienes pensado casarte?
Eso lo veré luego de que tú y Luffy se alejen de mí.- dijo Ace.- Quiero que todo vaya bien con ustedes, yo puedo esperar.
Pero...
Ace puso su mano en mi boca, el verlo feliz me indicaba que todo estaba bien y que a él no le molestaba esperar.-
Cuando llegue el momento, tu boda será la más grande.- dijo Marco.
No espero menos de... Mis hermanos.- dijo Ace.- Nunca pensé llamarte así.
Con Marco está bien.- dijo mi novio.
Bueno, ahora lo importante.- dijo Ace sentando entre Marco y yo.- Ya está casi todo, solo falta que tú y Luffy se midan trajes ¿O prefieren vestido?
Jamás.- dije molesto.- Todo puedo hacer menos ponerme un vestido de...
Al ver a Marco rojo supuse lo que se imaginó.-
No.- dije molesto.- No, no y mil veces no.
No dije nada.- dijo Marco sonriendo nerviosamente.
Lo pensaste.- dijo Ace.- Si me pagas lo puedo convencer.
Dame tu precio.- dijo Marco.
Son unos demonios.- dije molesto.
Ambos empezaron a reír pero sabía que no podía bajar la guardia, ver a Ace y Marco convivir como amigos me hizo pensar de nuevo si estaba bien como estaban las cosas, no pensé en cambiar algo pero la duda estaba. Seguimos viendo trajes y sin darnos cuenta llegamos a una revisar fotos de vestidos blancos, vi a Marco y a Ace y perecía como si fuera la boda de ellos, me aleje un poco y al ver de nuevo las escena los celos comenzaban a invadirme pero sabía que no dejar que ellos lo notaran.-
Iré por botanas ¿Quieren algo?- pregunte nervioso.
Nada para mi.- dijo Ace mientras abría una bolsa de papas fritas.- Traje mi propia comida, así no dirás que solo vengo a comer.
Aun así lo pienso.- dijo Marco.- Estoy así amor, ve y come algo.
Al entrar a la cocina revise el refrigerador y vi unos botes de cerveza, asegurándome de que ellos no me vieran tome uno y lo abrí, antes de beberlo oí de nuevo sus risas.-
Parecen una pareja.- dije molesto en voz baja.- Espero que un bote sea suficiente para darme valor.
Sin pensarlo más bebí todo el líquido hasta dejar el bote vacío, tome algunas cosas y salí de la cocina, al acércame a ellos no podía creer lo que veían mis ojos.-
¡Marco!- grite enojado.
Ace y mi prometido estaban besándose deje caer todo y corrí a mi habitación, al entrar cerré la puerta con seguro y me acosté en la cama, afuera se oía como decían mi nombre una y otra vez.-
Me siento traicionado.- dije enojado.- Marco ¿Cómo pudiste?
¡Sabo!
Se escuchaba detrás de la puerta, saque mi celular e hice una llamada pero no pude ver a quien, al oír una voz del otra lado de la línea respire hondo y hable.-
Por favor, ven.- dije antes de comenzar a llorar.
Arroje el celular a la puerta y me escondí entre las cobijas, aun se escuchaban los golpes que Marco o Ace daban a la puerta, cerré los ojos y solo espere a quedarme dormido.
Al despertar mire a mí alrededor y vi la puerta abierta, salte de la cama y me asome al pasillo.-
¿Cómo se abrió?- pregunte, al regresar a la cama vi a Law saliendo del baño.- ¡Law!
Sabo.- dijo Law acercándose rápido a mi.- ¿Estas bien?
S-Si.- dije nervioso.- ¿Qué haces aquí?
Tú me llamaste, al oírte llorar me asuste.- dijo Law abrazándome.- Pensé que algo malo te había pasado cuando Marco me dijo que te encerraste en tu cuarto.
Marco ¿Dónde está?- pregunte aun abrazando a Law.
En la sala con Ace... Ya me dijeron lo que paso.- dijo Law.- ¿Quieres ir a casa conmigo?
No, estaré bien.- dije mientras me alejaba de él.
Que lastima.- dijo Law tomando mi mano.- Vendrás conmigo, prepare la cena y Luffy estará feliz de verte.
Pero, no quiero...
Vamos, toma algo de ropa y vámonos, hablare con Marco.- dijo Law soltando mi mano y caminando a la entrada.- No me hagas empacar por ti.
Sonreí y busque una maleta, comencé a guardar algo de ropa pero mientras lo hacía empecé a llorando al recordar la escena, Marco y Ace besándose.-
Pensé que no me lastimarías.- dije mientras apretaba una camisa.- Dijiste que no había nada de qué preocuparse.
Sabo.- oí detrás de mí.
Al voltear vi a Marco, detrás de él estaba Law.-
Sabo, no puedes irte, hablemos.- dijo Marco mientras se acercaba.- Puedo explicarlo.
Marco, por favor.- dijo Law.- Deja que vaya conmigo, mañana hablan.
No, ya una vez lo deje irse .- dijo Marco.- Sabo, escúchame.
No.- dije enojado.- Quiero ir con Law, hablaremos... Después de una semana.
¿Por qué una semana?- pregunto Marco.
Necesito pensar lo que estoy haciendo.- dije enojado.- Quiero pensar mejor si quiero seguir en este juego.
¡Sabo!- grito Ace al llegar al cuarto.- Escúchame...
No quiero ver a ninguno de los dos, si van a casa de Law a buscarme juro que me iré de la ciudad.- dije enojado.- Tu elijes Marco, perderme por una semana o para siempre.
Marco se hizo a un lado al igual que Ace, cerré la maleta y me acerque a la entrada, al salir oí como alguien daba un golpe a la pared, mi corazón se aceleró y deseaba ir abrazar a Marco pero no podía, debía mantenerme firme.-
Al llegar a la entrada de la casa voltee y vi a Ace en la escaleras.-
Dile a Shanks lo que paso.- dije enojado.- O se lo diré yo.
Law y yo salimos, nos dirigimos a su casa pero en el camino fue solo fue estar llorando, Law solo se dispuso a concentrarse en el camino, al llegar salió Rocinante pero pase de largo y me senté en el sofá, solo pensaba en lo que Marco había hecho.-
¿Debo perdonarlo?- pregunte.
Sabo.- oí detrás de mí.
Al voltear vía Rocinante y me puse de pie rápido.-
P-Perdón, entre sin...
Olvida eso, ¿Qué ocurrió?- pregunto Rocinante.
Marco y Ace se besaron y Sabo no está seguro de que hacer.- dijo Law mientras entraba.- Dejare tu maleta en el cuarto donde dormirás, te lo encargo Corazón.
¿Corazón?
Así me dice Law desde que era niño.- dijo el hombre.- Pero es un apodo que Doffy me puso.
Oh, es... Extraño.- dije apenado.
Lo sé, pero si no me lo dice siento que ya no me quiere.- dijo Rocinante.
Entiendo.- dije al verlo tan feliz.- ¿Quiere que hable?
Estaría bien, pero si no estás listo podemos ver televisión.- dijo Rocinante.
Veamos televisión.- dije mientras me volvía a sentar.
Muy bien, espero que pronto me digas algo, soy bueno para ayudar.- dijo Rocinante mientras se sentaba a mi lado.
Gracias.- dije feliz.
Law llegando al sofá se sentó a mi lado y me acerco a él, me sentí apenado que el novio de mi hermano sea tan atento conmigo, pero no podía rechazarlo ya que lo último que quería era estar solo.