Al despertar y ver a Marco a mi lado solo pude decir que mi felicidad estaba completa, no había otra cosa que deseara, si a eso le agregamos que mis hermanos están conmigo. Estando en la oficina y ver el calendario, me hizo recordar que mañana cumpliríamos un año de casados.-
―Te vez feliz.- oí frente a mí.
―Lo estoy, mañana celebrare mi aniversario.
―Lo sé, tengo marcada esa fecha.- dijo Koala viendo la pantalla de su celular.- Lo marque como el día que no sabré nada de ti por culpa de Marco y su pequeño amigo.
―No es pequeño.-dije molesto al verla reír.
―Nunca había visto a alguien defender "eso".
―Ya no dejare que te burles de Marco.- dije acercándome a Koala, me senté en su escritorio y acaricie su rostro.- Como tampoco dejo que se burlen de ti.
―Eres tan lindo.- se puso de Koala y se acercó a mí, me rodeo el cuello con sus brazos y beso mi mejilla.- Me alegra ver que por fin maduraste y ya eres más... Humano.
―Gracias a las "Lecciones de Koala"
―Luego de que celebres tu aniversario salgamos a comer, quiero hablar de... Lo sabrás después.
―No hagas eso, dime que es, ¿Tienes novio? recuerda que tengo...
Sin dejarme terminar Koala puso su mano sobre mi boca, al verla sonreír supe que no debía dejar que pasara más tiempo y debía saberlo ya pero ella era buena evitando ciertos temas, más si es sobre su vida, aun cuando conozco su pasado me cuesta hacer que me hable.-
―Hoy, saliendo del trabajo iremos a tu casa a cenar y hablaremos, no dejare que me dejes con esta duda.- me acerque a su rostro y bese su mejilla.- Gracias a ti estoy con Marco y no dejare que me veas ser feliz mientras tu cargas con quien sabe qué cosa.
―Hacen una linda pareja.- oímos desde la puerta al mirar ahí estaba Marco recargado de la puerta, se cruzó de brazos y sonrió.-No me hagan caso, continúen, me gusta verlos juntos.
― ¿Celoso?- pregunto Koala acercándose más a mí.
―Un poco, porque Sabo no es así de lindo conmigo.-dijo Marco acercándose, al llegar nos abrazó ambos y beso la mejilla de Koala.- Vine por Sabo pero creo que está bien acompañado.
―Me aplastas.- dije mientras trataba de liberarme.- ¿Oíste todo?
―Un poco, solo lo importante.-mira a la chica y al soltarnos jalo hacia el.- Si algo te preocupa puedes decirme, Sabo tiene tazón, de no ser por ti no estaríamos casados.
―Me deben mucho es cierto pero el problema no es mío, es de otra persona pero acepto que me afecta emocionalmente.- dijo Koala abrazando a Marco.- Son unos niños que encontré en uno de los escondites de Doflamingo.
Al oír el nombre me puse de pie y aleje a Koala de Marco, la expresión de mi esposo sabía que ya no dejaría que Koala se fuera sin explicarnos que es lo que ocurría. Al salir del trabajo llevamos a Koala a su casa, todo el recorrido fue silencioso hasta que mi celular sonó, al ver el número vi que se trataba de Luffy.-
― Hola hermanito-dije al responder la llamada.- ¿Pasa algo? Es raro que me llames sin que seas tú el primero en saludar.
―Hola, no es nada serio o no lo sé, solo ve mañana a casa del abuelo y... Perdona que no te deje celebrar su...
―Está bien, es importante, hay que ver que tramas.-dije sonriendo, me despedí de él y corte la llamada.- Koala ¿Qué ocurre?
―Encontramos dos niños que dicen ser mercancía de Doflamingo, ellos aún no saben que está muerto y me preocupa que al enterarse de lo que paso crean que deben morir.- dijo Koala casi a punto de llorar.- ¿Por qué Doflamingo tenía niños? Otros tipos malos tienen mujeres pero este solo tenía interés en los niños.
― No eran los niños.- dijo Marco mirando al frente.- El solo quería a Law y a Sabo.
― ¿Law?- pregunte confundido.
―No lo dijo pero Law fue una de sus víctimas, cuando lo alejaron y conoció a tu familia se olvidó de él y se concentró en ti.- dijo Marco enojado.- Él pensó que sería fácil tenerte ya que no habría quien te protegiera.
Después de decir eso el resto del camino fue silencioso, al llegar a casa de Koala nos invitó a entrar y nos explicó la situación.-
― Entonces.- dije al ver las hojas donde estaba la información.- Son dos niños ¿Qué pasara con ellos?
―Garp quiere llevarlos a un orfanato pero el modo de actuar de los niños los hace peligrosos.- dijo Koala preocupada.
―Mañana Garp nos dirá su plan, es lo más seguro, si nos quieres a los tres debe ser importante.- dije, deje las hojas y abrace a Koala.- Todo estará bien, lo peor para esos niños ya no está, solo esperemos que Garp no cuide de ellos.
Los tres reímos pero en el fondo sabíamos que era lo mejor si ellos llegaban con Garp, eso lo sé muy bien. Al terminar de bromear nos despedimos y Marco me llevo a casa, al llegar y entrar al cuarto no pude evitar atacar a Marco, sabía que el día de nuestro aniversario no sería posible celebrarlo decidí tomar por adelantado mi regalo.-
― Es la primera vez que me atacas.- dijo Marco sobre mí.- Me gusta eso.
― Mañana estaré ocupado, no quiero quedarme sin esto…
Puse mi mano en su entre pierna y al ver la expresión de Marco me sentí feliz y algo travieso. Al llegar la mañana me dispuse a desayunar para ir a casa de Garp pero Marco me sorprendió con el desayuno listo.-
―Gracias por un año de casados.- dijo Marco acercándose a mi.- Te amo.
― Gracias por aguantarme.- dije acercándome a su rostro.- Te… amo.
Al terminar de desayunar Marco se ofreció a acompañarme, una vez que él decía eso no habría nada que lo hiciera cambiar de parecer, feliz acepte y ambos nos dirigimos a casa de Garp. Al llegar Ace estaba en la entrada y Luffy jugaba con un perro pequeño, al bajar y verlos me di cuenta que algo no estaba bien. Ya todos reunidos Garp llego y nos presentó a dos pequeños.-
― Ellos son los niños.- dijo Garp, al más pequeño lo acerco a mí y a Marco, el niño al verme me hizo sentir que me veía a mí mismo de pequeño.
―Mío.- dijo niño abrazándose de mis piernas.
― ¿Qué?- dije sorprendido.- ¿Yo cuidare de él?
―Sabo… Ambos cuidaremos de él.- dijo Marco sorprendido.- ¿Por qué nosotros?
―Por qué lo digo yo, y si no te gusta podemos hablarlo afuera.- dijo Garp preparando sus puños.
―No… Dije nada señor.- dijo Marco bajando la mirada.
Reí un poco pero al sentir al niño subiendo hasta mis brazos no pude evitar abrazarlo, el había pasado por lo mismo que yo y había una oportunidad de salvarlo, no podía dejarlo.-
―Cuidare de ti pequeño.- dije, al verlo le sonreí y el hizo lo mismo.- Eres tan lindo, ¿Cómo te llamas?
El niño miro a Garp y él le indicó que respondiera, miro a Marco y al verlo sonreír se acercó a él, mi esposo nerviosos tomo al niño en sus brazos.-
―Mío.- dijo emocionado.
―No habla mucho.- dijo Marco cuidando de no dejarlo caer.
― ¿Primera vez que cargas a un ser tan pequeño?- dijo Shanks parado detrás de Ace.
―No.- dijo Marco mientras veía al niño.- Es que, se ve tan frágil.
―Lo haces bien… Papá.- dijo Ace entre risas.
Marco se sonrojo, me volee y sentí mi cara roja, era verdad, Marco y yo seriamos los padres de este niño, era una gran responsabilidad pero al ver al pequeño reír y jugar con Marco mis dudas y miedos se fueron.-
― ¿Cómo se llama?- pregunte al acercarme a Marco y al niño.
― Dante.- respondió Garp.
El niño volteo a verme y volvió a sonreír.-
― Hola Dante, soy Sabo y él es Marco…
―Papi
Al oírle decir eso me sonroje y sentí como mi corazón casi salía de mi pecho, no sé por qué el pequeño me llamo así pero no le di importancia ya que eso me decía que Doflamingo no había marcado al pequeño y aun podíamos salvarlo. Miramos al otro pequeño y este era un poco más grande, se veía molesto y en ningún momento se acercaba, Garp trato de acercarlo a nosotros pero el niño lo alejo y corrió a un rincón.-
―No tengas miedo.- dije mientras me acercaba a él.
― ¡Aléjate!- grito el niño.- No dejare que me toques, nadie volverá a lastimarme.
―Eso es obvio.- se escuchó detrás de nosotros.
Al mirar Izo y Thatch estaban entrando a la casa, traían un regalo y se acercaron al pequeño.-
―No te haremos daño, pero eso lo entenderás poco a poco.- dijo Izo.- Dejare esto aquí y cuando estés listo ven con nosotros.
Al dejarle el regalo salimos de la casa al patio de atrás y aun con el niño en los brazos Marco jugaba con el.-
―Que rápido se acostumbró a Marco.- dijo Izo mientras tomaba una foto.- Esta va para el álbum familiar.
―Creo que Marco no soltara al pequeño en un tiempo.- dije mientras los grababa.
― ¿Celoso?- pregunto Ace.
―Un poco, también quiero jugar con el pequeño.- dije entre risas.
―Sabo.- dijo Marco acercándose a nosotros.- Quiere estar contigo.
Al decir eso Dante extendió sus brazos en dirección a mí y al tomarlo escondió su rostro.-
―Eres tan lindo ¿Qué edad tiene?- pregunte al ver que el pequeño jugaba con los botones de mi camisa.
―2 o 3 años.- respondió Garp.- Pero ya dice unas palabras y camina algo torpe.
―No puedo creer que este pequeño estuviera en las garras del mal.- dije molesto, lo abrace y el pequeño se aferró más a mí.
―No te enojes, ya se fue ese malvado y el este enano se queda con nosotros.- dijo Marco jugando con la mano del niño.- Acomodare mis horarios de trabajo para estar con él el mayor tiempo posible, no quiero que se sienta solo.
―Déjalo en guardería y no estará solo.- dijo Ace.
―Y a ti te dejo en prisión y no estarás solo ¿Te parece?- dijo Marco.
―Ya entendí, no quieres dejarlo.- dijo Ace asustado.- Shanks dile algo.
―Marco ya déjalo, bastante tiene siendo mi prisionero.- dijo Shanks abrazando a Ace.
Todos reímos y al ver al niño el también reía, aunque no sabía por qué. Las horas pasaban y el otro niño no salía de la casa, Thatch trato de ir por el pero Izo no lo dejo.-
―Sabes que no podemos forzarlo.- dijo Izo.
―Igual se ira con nosotros.- dijo Thatch.
― ¿Por qué ustedes?- pregunto Luffy mientras jugaba con el niño que aún estaba en mis brazos.
―Nosotros sabemos cómo cuidar pequeño con traumas.- dijo Izo.- Además eso hubiera hecho nuestro padre.
―Oh, mira Torao.- dijo Luffy emocionado.- Quiere que lo cargues.
Trafalgar volteo rápido y al verlo dio un paso a atrás, me puse de pie y lo acerque a él, al tenerlo cercar el niño lo agarro de la camisa y Law para evitar que se cayera lo cargo.-
―Él es tu tío Law.- dijo Luffy.
―Es… Pequeño…- dijo Law nervioso.
―Supongo que nunca habías visto a un niño pequeño.- dijo Ace.
―No es eso… Cállate Ace.- dijo Law molesto.
El niño vio a Law y comenzó a reír, al llegar la noche Dante se había dormido en los brazos de Marco, y el otro pequeño por fin había salido de la casa, tenía un pequeño camión de bomberos en las manos y se acercó a Izo.-
―Gracias.- dijo el niño.- Esta bonito.
― ¿Listo para ir a casa?- dijo Thatch.
― ¿Con Doffy?
―No… Iras con nosotros, Doffy ya no puede cuidarte ¿Esta bien?- dijo Izo.
El niño soltó el camión y corrió a los brazos de Izo, al verlo llorar imagine que de alguna manera ese niño entendía lo que Izo le quiso decir. Al llegar a casa busque donde podría dormir el pequeño pero como era de esperarse no había lugar seguro para él, Marco lo llevo a nuestra cama y al acostarlo el niño agarro su camisa.-
―No creo que podamos dejarlo solo.- dije al ver a Marco tratando de hacer que lo soltara.
Al liberarse coloque almohadas a su alrededor y al salir del cuarto abrace a Marco.-
―Apenas note que tenemos…
―Un hijo.- dijo Marco.
―No es lo que había pensado para celebrar nuestro aniversario pero… Es lo mejor que pudo pasar.
Al volver al cuarto ambos nos acostamos en la cama dejando al pequeño en medio y al verlo dormir me sentí feliz y aliviado al mismo tiempo. A la mañana siguiente unos leves golpes en mi cara me hicieron despertar, al abrir los ojos vi el rostro de Dante sonriendo.-
―Buenos días Dante.- dije al verlo, con cuidado me senté Dante gateo a donde estaba Marco e hizo lo mismo.
Al despertar Marco abrazo al pequeño y se sentó a mi lado.-
―Pensé que había sido un sueño.- dijo Marco.- Pero aquí estas Dante ¿Tienes hambre?
―Papi.- dijo el niño.
―Si lo vuelve a decir creo que moriré de felicidad.- dijo Marco cubriendo su rostro en mi hombro.
―Papi.- volvió a decir Dante.
Ambos nos sonrojamos mientras que Dante reía, al bajar notamos que no había que pudiera comer Dante así que busque en m celular que podía comprarle, al ver sobre la mesa vi una bolsa.-
―O cierto Garp nos dio algo para que comiera.- dije al acercarme.- Desayunemos y luego iremos de compras, hay muchas cosas que debemos comprar.
―Lo que digas “papi”.- dijo Marco.
Me sonroje e ignore la risa de Marco, al terminar de desayunar y al estar listos salimos de compras, mientras marco jugaba con el niño yo veía que era lo mejor para que Dante comiera, al ver un frasco de comida recordé la primera vez que Garp salió a comprar algo que me gustara, Ace y Luffy peleaba mientras que yo veía como ese hombre que me había adoptado buscaba un cereal que me gustara. Al tener la comida volvimos a casa y Marco dejando que Dante jugara con su mochila vacía que usaba para ir a trabajar el buscaba cosas que había que comprar para que Dante estuviera cómodo, al tener otro listado y tener la comida ya guardada volvimos a salir de compras, Dante al ver el interior del centro comercial se emocionó y trato de correr pero no quería soltar a Marco, al verlo indeciso ambos reímos y lo seguimos por un rato, al llegar a una tienda de articulaos para niños Marco y yo estuvimos en la entrada un rato aun tratando de asimilar lo que nos estaba pasando, Dante no tardo entrar y una empleada de la tienda lo tomo de la no y al vernos afuera nos habló.-
―Disculpen.- dijo la joven.- ¿Este niño es suyo?
―S-Si.- dije nervioso.- Perdona, es que…
―Son nuevos en esto.- dijo la empleada.- Tranquilos, no son los primeros que tienes esa expresión de no saber qué hacer, vengan los ayudare pero necesito que carguen a su hijo, se ve que es muy activo.
Marco lo cargo y Dante solo veía el interior de la tienda.-
―Pueden mirar por su cuenta y si tiene dudas estaré cercas para ayudarles.- dijo la joven, saco una paleta de su bolsillo y se enseñó a Dante.- Este regalo es para ti.
Dante miro a Marco nervioso, tome la paleta y se la di al pequeño, la joven volvió a su trabajo mientras nosotros veíamos las cosas, había mucho que un niño necesitaba pero no sabíamos por dónde empezar, llame a la joven y al ver aún más perdidos rio un poco y nos pidió la lista que habíamos hecho.-
―Muy bien, yo empezaría por un asiento para que el pequeño viaje seguro en el carro.- dijo la joven.- Aquí hay unos para el tamaño de su hijo…
Al oír eso mire a Dante y a Marco, me sentí como extraño pero era una sensación de que ya nada podía faltarme, si antes me sentía completo con Marco y mis hermanos en mi vida con Dante podía decir que la felicidad estaba completa. Al comprar todo lo necesario la joven nos guio a donde debíamos pagar y nos acompañó a la salida.-
―Las cosas llegaran hoy por la tarde pero el asiento si recomendaría que lo colocaran ahora, uno de nuestros empleados les ayudara a llevarlo y a colocarlo, que tengan buen día y suerte, ser padre es todo un reto.- dijo la joven.
―Gracias.- dijo Marco.- Sabes mucho de esto.
―También tengo un hijo, cuando mi esposo y yo vimos lo difícil que era comprar lo necesario hubo personas que nos ayudaron, por eso lo hago también yo.- dijo la joven sonriendo.- Adiós Dante, cuida a tus papis y tenles paciencia.
Dante nos miró y empezó a reír, al llegar al estacionamiento el joven que nos ayudaba nos explicó cómo se debía poner el asiento y como debemos poner al pequeño, se veía complicado y más si Dante no ayudaba mucho. Al llegar a casa entramos y Koala salió de nuestra casa.-
― ¿Cómo entraste?- pregunte al verla salir.
―Marco me dio una llave para que prepara algunas cosas.- dijo Koala mientras comía un chocolate.- Festejaremos la llegada de este pequeño.
―Gracias… ¿Era sorpresa?- pregunte.
―Sí, pero no creo que a Dante le guste mucho.- dijo Koala mientras le daba un trozo de chocolate a Dante.- ¿Rico?
― ¡Ico!- grito Dante emocionado.
Al entrar Ace y Shanks estaban a acomodando regalos y Luffy junto con Torao acomodaban la comida o lo que dejaba mi pequeño hermano, al ver a Dante la fiesta había empezado, más tarde llegaron los hermanos de Marco y al ver al pequeño solo Haruta se acercó a él.-
―Hola.- dijo Haruta.- Soy tu tío, jugare mucho contigo y si Marco se pone de gruñón yo te defenderé de él.
― ¿Y quién te cuidara de mí?- dijo Marco molesto.
―Sabo
―Pequeño…
Golpee a Marco en la cabeza y al ver a Dante se quedó callado, la fiesta siguió y al llegar Izo con Thatch el pequeño que se habían llevado entro corriendo a ver a Dante.-
― ¡Dante! Me dieron muchos juguetes y tengo mi propio cuarto, esta cercas de mis nuevos papas y dicen que puedes ir a jugar cuando quieras.- dijo el niño, Dante sonreía al verlo y le enseño algunos de los juguetes que Marco no pudo evitar comprarle.
― ¿No olvidas algo?- dijo Izo.
―No.- dijo el niño.
―Preséntate, ellos no saben cómo te llamas.- dijo Izo.- Vamos.
El niño se acercó a mí y a Marco nos extendió sus manos y se presentó.-
―Me llamo Alex, tengo 7 años y Dante es mi hermanito.- dijo el niño.- Cuiden de el por favor.
―Mucho gusto, soy Marco y él es Sabo, cuidaremos bien de Dante y puedes venir cuando quieras a jugar con el.- dijo Marco.- En la mesa hay regalos para ti, lleva a Dante y abran algunos, más tarde comeremos pastel.
El niño miro la mesa y fue por Dante, ambos empezaron a abrir regalos y verlos sonreír me hizo aún más feliz.-
― ¿Hermanos?- dijo Ace acercándose a nosotros.
―No son hermanos de sangre, pero ustedes entienden eso.- dijo Izo.
La fiesta siguió, en la noche estando en la sala veíamos como Alex y Dante jugaban.-
― ¿Alguna vez pensaste en que serias padre?- pregunto Koala.
―No, pero ahora entiendo por qué Dragón actuaba muy sobre protector.- dije apenado.- Siento que si dejo solo a Dante un minuto alguien lo alejara de mí.
― ¿Puedo pasera con Dante?- pregunto Alex con un carrito donde estaba sentado Dante.
―Ya es tarde.- dije al ver el reloj.
―Ven, el patio de atrás está iluminado, yo te acompaño.- dijo Vista.- No hace frio y se ve que quieren usar ese vehículo.
―Gracias.- dije, al verlos salir quise ir con ellos pero había algo que necesitaba preguntar.- Shanks…
―Los padres de esos niños están muertos.- dijo Shanks haciendo a un lado su bebida.- Estaban en un orfanato y al ver que encajaban con el encargo de Doflamingo se los entregaron a él, el orfanato ya fue cerrado y los niños están seguros, al parecer vendían a los niños en ese lugar.
―Ahora menos quiero dejarlo ir.- dijo Marco.
―No creo que puedan, ese niño ya los llama papá.- dijo Law.- Garp ya tiene todos los papeles para que lo adopten, espero que ambos olviden a Doflamingo.
―Eso no será problema.- dijo Izo.- Alex aún tiene pesadillas pero poco a poco se dará cuenta que ya está a salvo.
Alex para estar más tiempo con Dante se quedó a dormir con él. Al verlos dormir Marco y yo nos dimos cuenta que nuestra rutina ya cambiaria, sabíamos que no iba a ser fácil pero era una nueva aventura que estábamos dispuestos a vivir.