Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Why him? por XiuXiuLu

[Reviews - 0]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Me siento solo.

A pesar de tenerte a mi lado, me siento más solo que nunca.

Y el hecho de que estés conmigo para no sentirte vacío lo hace mucho peor.

Yo estoy tan enamorado de ti que cada día lastima más el saber que el sentimiento no es mutuo. Año y medio juntos, al menos sé que siempre estaré en tu mente, en un recuerdo como tu primera vez. Como al chico que también le quitaste la pureza, aún recuerdo los nervios que sentía. Pero me encontraba tan feliz, tan enamorado. Fue especial, me trataste con la mayor delicadeza posible y casi no dolió. Aun así se siente una gran ausencia; un vacío que se instala en mi pecho cada vez que terminamos de hacerlo.

Y cuando te veo y tú no lo haces, un momento donde se supone nos entregamos al amor y tú no eres capaz de transmitir ese sentimiento. Evadiendo la mirada, cerrando los ojos y gimiendo mi nombre por obligación.

SeHun

Sólo basta con mirarte a los ojos y no ver ese brillo del que muchos hablan cuando se está enamorado para terminar de romper mi corazón.

Tal vez muchos se preguntarían por qué no te dejo si sé que no me amas. Simple, porque yo te amo y no quiero que te apartes de mi lado.

Es egoísta lo sé. Y recibo mi karma todos los días con tus palabras vacías y tus ojos carentes de emoción.

He intentado de todo para que me quieras aunque sea un poquito.

Aprendí a cocinar, aunque sigo quemando algunos alimentos y dejando crudos otros. Veo contigo los partidos de futbol que tanto te apasionan, compitiendo con mi aburrimiento y mi cara de no entender nada. Pero soy feliz cuando veo esa sonrisa de felicidad cuando tu equipo favorito resulta ser el ganador.

Cambié mi Bubble tea por un café, de esos que no tolero, en cambio tú no puedes comenzar el día sin uno. Soporto la indiferencia de tu padre, te apoyo en el dolor de la pérdida de tu madre.

Aguanto sin quejarme los arañazos de tu gato que parece odiarme, a veces creo que es porque piensa que intento robarte, y la verdad es que no está tan equivocado. Tus amigos se han convertido en los míos. Nunca te reclamo por no contestar mis mensajes y llamadas por estar jugando en la computadora o algún videojuego de consola.

He dado tantas cosas por ti y no me arrepiento, porque de eso se trata ser una pareja, amar tus virtudes y aceptar tus defectos. En una relación a veces uno tiene que ceder, no sabía que yo tendría que hacerlo siempre.

Y duele, duele mucho que a pesar del tiempo tus sentimientos hacia mí no sean genuinos. Al menos tus caricias me hacen sentir querido, protegido.

No quiero perderte y aunque sé que lo hare, es cuestión de tiempo, tal vez cuando entres a la Universidad en algunos meses. Sin embargo, siendo honesto no pienso dejarte ir. Me aferrare a ti porque estoy seguro que en algún momento me amarás.

Que todos mis intentos darán frutos.

Que cuando yo esté esperándote en la entrada del colegio al verme sonreirás tan brillante que iluminarás hasta el día más nublado. Y me odio porque cuando lo miro a lo lejos le saludo con la mano y mi sonrisa sale sin mi permiso, LuHan se acerca con un beso insípido en los labios para después tomarme de la mano y caminar con dirección a la escuela. Pero siempre es la misma rutina, LuHan no cambia su cara cuando me ve, nunca hay sonrisas al verme, algún brillo en su mirar… nunca hay expresiones al verme.

Fantaseo con el que algún día tú serás el que espere por mí, el que corra por mí.

—Te amo.

Trató de aparentar que no duele, que te creo y que todo está bien. Sonrío al oírlo, siempre lo hago. Cierro los ojos cuando tocas mi mejilla y un suspiro se escapa de mi corazón cuando me besas tan delicado. Despidiéndote para ir a tus clases.

Lamento tanto que no seamos de la misma edad.

También te amo, LuHan. Lo hago de verdad. —Mi voz no llega a sus oídos y es lo mejor.

 

***

 

Finges muy bien, tanto, que las demás personas no lo saben, ellos están convencidos de que nos amamos; que somos la pareja perfecta, yo quiero creerlo y a veces hasta yo también caigo en la mentira. Sé que pretendes sentir amor por mí, te he visto intentarlo y es cuando me haces tan feliz. Tus amigos jamás sospecharán, ellos ya tienen los suficientes problemas, BaekHyun lidiando con los padres homofóbicos de ChanYeol, JongIn teniendo que soportar a la novia de KyungSoo y aparentar que no está enamorado de su mejor amigo.

Es lamentable ver como sufrimos por amor a tan temprana edad.

Y mi único consuelo es tenerte a mi lado, que no me dejaras por otra persona.

Mis mejillas se enrojecen cuando nuestras manos se juntan, me pierdo en tu rostro, imaginándome cómo sería nuestro futuro. Si algún día tú podrás corresponder mis caricias cálidas. Y cómo será cuando te llegues a enamorar de mí.

 

***

 

Mirando por la ventana, los últimos rayos de sol iluminando mi cuarto, dejando ver las pequeñas partículas de polvo me pierdo en mis pensamientos recordando cómo comenzó todo:

Mi primer año, todo era nuevo, nueva escuela, nuevos maestros, nuevos compañeros. Te vi, un chico de segundo año, popular y supe que no te fijarías en mí, hasta que cuando menos me di cuenta, entré en ese círculo de la popularidad, nunca fue mi intención, de hecho aun no entiendo cómo pasó. Según las chicas o lo que he escuchado es por mi personalidad tranquila y misteriosa; que mi rostro nunca refleje alguna expresión y que también sea muy atractivo ayudó.

Entonces la puerta para acercarme a ti se abrió.

Nunca entendí qué fue lo que te motivó a pedirme a salir y mucho menos a pedirme ser tu novio. De un día a otro pasó, no mostrabas interés por acércate a mí. Nunca te lo he preguntado y nunca lo haré, el temor de saber la respuesta, no quiero escuchar. Pero supongo que el que estés conmigo lo haces porque es lo que «se espera de ti». Siempre lo he sentido así.

Veo la relación de ChanYeol con BaekHyun, la forma en que se sonríen, se toman de la mano, se besan y observan, todo está lleno de amor, muchas veces los molestan… los molestamos por ser tan cariñosos, tal vez tengo envidia de que mi relación no pueda ser así.

 

***

 

Creo que Yixing tiene un novio —me platicas mientras comes de tu helado, tu primo me cae bien, aunque sólo lo haya visto una vez cuando vino de visita—. Aunque me da mala espina.

—¿Por qué? —mi concentración está en él. Mi corazón se hincha de felicidad cuando él es el que comienza la conversación, cosas tan banales, no importa.

—Se ve mayor y es muy poco expresivo.

Me río de la ironía y LuHan parece no entenderlo. Es gracioso que hable sobre expresividad cuando él no es precisamente el ser más cariñoso.

La cita termina temprano, hay muchos deberes y trabajos que tienes que realizar, todo sonando a excusa cuando sé que ya te has cansado de mi compañía.

 

***

 

Me pregunto cuándo será el día en que cambies. El día que seas expresivo, que muestres lo que sientes, que tus sonrisas sean de alegría pura y que tus ojos brillen con intensidad.

Nunca me imaginé que ese día llegaría tan pronto… y fue horrible y doloroso porque llegó en forma de ojos de gato, mejillas grandes y estatura bajita.

Honestamente nunca sospeche que su llegada representara un “peligro”.

Todo fue tan sutil.

Chicos, él es Kim MinSeok, acaba de mudarse y está en mi curso —llegaste presentándolo ante todos a la hora del descanso.

Para nadie fue extraño, todos fueron corteses, se presentaron y le dieron una acogida cálida al nuevo chico. Sin embargo, yo te conocía, esa sonrisa no la había visto. Era algo así como tímida.

Tengo que admitir que resultó ser alguien agradable, penoso y daban ganas de protegerlo de todo. Por eso no desconfíe nada. Ni siquiera cuando a los pocos días ya eran algo así como mejores amigos, reían de cualquier tontería, discutían sobre futbol, él resulto ser otro gran fanático, nuestras tardes de citas las cambiaste por ir a tomar un café hecho por él.

Y es que su don para la cocina podía competir con el de KyungSoo.

MinSeok irá a mi casa, tenemos que hacer un trabajo para la profesora de historia —dices, despidiéndote de mí con la mano, ni un beso ni un te amo falso; algo tan gélido que ni siquiera pude sonreír y menos cuando note la sonrisa que tenías para él cuando te esperaba a la salida del colegio.

Y ni siquiera en esos momentos se me cruzó por la mente que pudiera estar perdiéndote.

 

***

 

Las cosas fueron avanzando sin sentir peligro.

Los besos disminuyeron al estar frente a otros, ya no me tomabas de la mano dentro de la escuela y ya no había más «te amo» y en cambio yo estaba cegado. Esforzándome cada día más porque me vieras con añoranza.

Y fue cuando estuve en tu casa supe que no sólo tú me estabas haciendo a un lado, reemplazando. El incómodo momento cuando tu padre me saludó con una enorme sonrisa pensando que era MinSeok. Fue hasta gracioso ver la decepción de los ojos de mi suegro. Se notaba que MinSeok se ganaba a todos con un parpadeo.

Tú no dijiste nada, no había algo qué decir.

Tal vez por eso utilizaste tus acciones para distraerme, tus besos para confundirme y tus caricias para que volviera a caer ante ti.

Ese día cuando estabas sobre mí, besando mi cuello e introduciendo tu miembro en mí supe que te estaba perdiendo.

MinSeok… ah.

Me aferré a tu cuerpo tan fuerte que mis uñas arañaron tu espalda para que no te dieras cuenta el daño que me hacías, estoy seguro que ni siquiera te percataste de lo que dijiste.

De que me destruiste.

Yo no dije nada, no te reclamé, no te armé una escena de celos y todo por miedo a perderte cuando ya era obvio que lo había hecho. No quería darte un motivo para dejarme, aferrándome a las migajas de cariño que me dabas.

Aun así hice que me vieras, que me miraras a los ojos y te dieras cuenta que era a mí a quien acariciabas y besabas. A mí a quien le hacías el amor

Lo peor de todo es que yo tengo la culpa. Eres demasiado bueno para dejarme  y me aprovecho de eso para retenerte a mi lado, porque ni siquiera eres capaz de ponerle un dedo encima a él por respeto a mí, de eso estoy seguro. Te enorgulleces tanto de ser hombre, de tu palabra y de tus valores que puedo confiar en ti a pesar de no amarme.

Me siento mal conmigo mismo. Por hacerte esto. Por no permitirte estar con quien quieres y es que me llena de celos que MinSeok te corresponda. Es fácil de saber.

Sus mejillas rojas cuando te acercas, su nerviosismo cuando le hablas y el que nunca pueda sostenerme la mirada, como si se sintiera culpable de algo que no debería sentir.

Y es bajo cuando te tomo de la mano y te beso, seguro de que él nos ve y el dolor en sus ojos no me causa gozo.

 

***

 

A JongDae le gusta MinSeok —comento, mientras vemos uno de esos aburridos animes que te gustan a ti. Finjo no notar cómo te quedas pasmado y con la mirada perdida.

—¿Cómo sabes eso? —tu voz suena oscura… celosa.

Él me lo dijo, de hecho, me pidió si le pudieras hacer el favor de ayudarle a conquistarle. —Y no mentía. Al chico le gustaba, éramos compañeros, no amigos, pero no dejaría perder una oportunidad.

No le haré de cupido. —No hay más plática.

Estás enojado, es fácil de saber.

Sin embargo, no me rendiré.

Cuando le hablo a MinSeok sobre JongDae no se ve entusiasmado o interesado. Todo lo contrario, es demasiado amable para rechazar cuando le insisto tanto y lo llevo hasta él, haciendo que platiquen.

JongDae se come con la mirada a MinSeok, quien tiene las mejillas rojas y contesta con monosílabos, al parecer mi amigo no se da cuenta de lo incomodo que está porque sigue hablando y hablando, invitándolo a diferentes lugares.

Y sólo pido que ¡se enamore de él! ¡que ya no vea a LuHan más!

Pero creo que lo único que hice fue empeorar todo. Ver cómo LuHan moría de celos cuando vio a lo lejos a ellos dos, cómo me dejaba de lado, sin importarle que estuviera hablándole y llevándose a MinSeok con alguna tonta excusa. Aunque tampoco tuvo que insistirle mucho para irse con él.

 

***

 

Bufo al escuchar a BaekHyun.

Dicen que cuando te mira la persona que te ama sus pupilas se agrandan, ¿será verdad? —BaekHyun leyó un “estudio” que salió en las redes sociales, los presentes alzamos los hombros sin saber qué responder.

Sin embargo, cuando LuHan ve llegar a MinSeok a nuestra mesa, con el corazón roto, descubro que posiblemente ese “estudio” está en lo cierto.

Ya no es necesario esperarte en la entrada del colegio, hace semanas que empezaste a llegar antes, ilusionado, siendo un tonto como lo he estado haciendo últimamente sonreí cuando pensé que me esperabas a mí.

Mi sonrisa se borró cuando un MinSeok muy alegre te saludó y te fuiste con él a su salón.

 

***

 

Deberíamos planear algo para nuestro segundo aniversario —me acorruco en su pecho.

Hace tiempo que no teníamos una cita y aunque sólo hayamos ido al parque soy inmensamente feliz porque fue LuHan quien me buscó, quien me llamó y pidió salir.

Tal vez al fin se dio cuenta de que su verdadero amor soy yo. Que MinSeok es sólo una ilusión que vino a reforzar nuestra relación y que lo hizo descubrir sus sentimientos por mí.

¡Oh, que tonto eres, SeHun!

Quiero terminar.

Los sonidos se apagan, los colores pierden nitidez y siento un balde de agua fría en todo mi cuerpo. Mi corazón da un vuelco y duele.

Me separó de ti, no es muy difícil cuando nunca correspondiste mi abrazo. Te miro y tú no eres capaz de hacerlo, nunca lo eres.

Muerdo mis labios, reteniendo las lágrimas.

Si estas bromeando, es de pésimo gusto… —LuHan niega y cierro los ojos con más pesar.

¡Es una pesadilla! ¡es una pesadilla! ¡es una pesadilla! ¡es una pesadilla!...

Me repito una y otra vez.

Lo siento, ya no puedo seguir con… esto.

Las lágrimas lo hacen todo más real y el dolor lo hace insoportable.

LuHan, no. Por favor, no. Te amo —le ruego, no importándome verme patético.

Le tomo por la playera, no quiero dejarte ir. Tus manos se sienten frías sobre mis muñecas al retirar mi tacto.

Te vas.

 

***

 

Las vacaciones comenzaron. Otro curso más finalizó.

A estas alturas toda la escuela ya sabe que lo nuestro no existe más. JongIn fue un gran apoyo, él desde el principio fue el más cercano para mí a pesar de que KyungSoo tenga el puesto de mejor amigo. Es por eso que lo animo a confesarse, su cara se llena de horror al ser descubierto, sintiéndose apenado cuando le cuento que ya todos lo saben.

Una semana después del comienzo de las vacaciones tu sonrisa me cegó.

Él también me corresponde.

KyungSoo terminó con su novia para que poco tiempo después comenzara una con mi amigo.

Y es ahora que me siento solo. Esa sensación jamás se irá.

LuHan, ¿por qué no vuelves? ¿por qué no te das cuenta que te amo como nadie lo hará?

Esos pensamientos son los que me llevan hasta tu casa, con miedo observo a la distancia, sin atreverme a tocar tu puerta. Son risas las que escucho a lo lejos.

Una risa que reconozco y que hace mi piel vibrar.

Por inercia yo también sonrío y te busco.

Ahora entiendo por qué tu risa estaba acompañada. Te vez tan feliz, tu sonrisa es hermosa, tan luminosa, tu mano sostiene fuerte la de MinSeok y lo vez de una manera que no tiene comparación. No hay nadie ni nada más alrededor, sólo son ustedes dos y su amor que me hace enfermar.

 

***

 

Tienes que dejarlo ir —BaekHyun me consuela. ChanYeol me da palmaditas en la espalda—. Él ahora está con otro.

Es una situación horrible en la que pone a sus amigos, porque LuHan también lo es y MinSeok se ha ganado también su cariño.

Ellos creo que realmente se quieren —BaekHyun mira mal a su novio cuando esas palabras son dichas. ChanYeol no quiere ganarse el enojo de su chico, pero sé que quiere que vea la realidad.

Pero es que, ¿por qué él?

¿Qué tenía él que yo no?

¿Qué lo hacía tan especial si yo me había entregado por completo?

Sacrifiqué muchas cosas y aguante aún más. Guardé mi dolor y sólo te mostré sonrisas.

¿Cómo hizo MinSeok para enamorarte en unos días cuando yo no pude hacerlo en los dos años que nos conocemos?

¡Era tan injusto!

Y es otro acto egoísta.

Los celos, la rabia y el despecho me llevaron a cometer mi última estupidez hecha bajo el absurdo nombre del amor.

Citar a LuHan con la excusa de entregarle unas prendas que se han quedado en mi casa.

Me arreglo lo mejor que puedo, me esfuerzo en mi apariencia.

Como siempre yo llegué antes que tú, supongo que sólo MinSeok cuenta con el privilegio de ser esperado por ti. No pasa mucho tiempo cuando te veo a lo lejos, tu cara no muestra emoción alguna y tu ceño se frunce cuando notas mis manos vacías. Asumiendo que aquellas prendas no existían.

No permití que te fueras.

Y menos cuando él llegó. Cuando MinSeok presenció el beso que te di.

Te extrañe tanto, amor… ¡Oh, MinSeok! —LuHan gira su rostro y veo asombro, todo lo contrario a la cara de decepción de MinSeok.

Me dijiste que ya no estabas con él —escuchar la voz rota de MinSeok me deja inquieto y LuHan logra zafarse de mi para ir hacia él.

Sin embargo, mis palabras lo detienen.

—¿De qué hablas? Nosotros sólo pasamos por una mala racha… —le digo a MinSeok y sus ojos se llenan de dolor, las lágrimas salen y se aleja rápido.

Tomo la muñeca de LuHan, impidiendo que vaya detrás de él.

Quédate, serás mucho más feliz si vuelves conmigo —LuHan me fulmina con su mirada.

Sus ojos son de odio.

—¡Suéltame! —me empuja y termino en el piso.

Observo como se va… de nuevo.

Se marcha corriendo. Lo último que logro ver de él es su espalda alejándose. Yéndose lejos de mí.

¿Logrará alcanzarlo?

 

***

 

Ocho años después.

 

Un lindo chico alto de cabello negro, sonreía  acompañado de otro muchacho con cabello verde.

Ambos mantenían las manos entrelazadas y se adentraron a una cafetería para protegerse del frío de diciembre. Pidieron un té con leche, sentándose y esperando a que su pedido fuera entregado.

—Pronto comenzará a nevar —el chico de cabello verde mira fijamente la ventana—. Espero que eso no provoque problemas con los vuelos.

—No te preocupes, seguramente JongIn y KyungSoo llegarán con bien.

El otro le sonríe, haciendo que sus ojos se cerraran formando medias lunas.

Una mesera llegó a la mesa que compartían los chicos con dos vasos en cada mano.

—¿SeHun y ZiTao? —Los chicos asintieron y les fueron entregados sus pedidos.

—Creo que es nuevo este local —SeHun comentó y ZiTao alzó los hombros sin saber.

Bebieron de sus tés y el de cabello verde sonrió y acarició la mano de su novio.

—segundo aniversario, eh —dice y SeHun se sonroja y asiente, feliz.

—Deberíamos terminar la celebración en tu departamento.

Ambos se sonríen, se sonrojan y toman sus manos. Volviendo a entrelazar sus dedos. ZiTao jamás se cansaría de suspirar por SeHun, el chico lindo y callado que conoció en su facultad. Quién diría que el chico chino se terminaría enamorando perdidamente desde el primer día.

SeHun miraba con una sonrisa tonta a su novio, siguió bebiendo hasta que sus ojos se fueron a la puerta ya que la campanilla que anunciaba un nuevo cliente había sonado.

Sus ojos se habían abierto un poco por la impresión.

—Mi mamá quiere que vayamos a comer el sábado, ¿está bien? —ZiTao le preguntó.

—Uhmm… —SeHun se mordió el labio e inconscientemente su vista se fue hacia el mostrador.

—Hey, tranquilo. Mis padres ya lo han superado. Creo que lo hicieron cuando se dieron cuenta de cómo sufría por tu continuo rechazo —dijo el de cabello verde con tono de burla y SeHun rodó los ojos y rió.

—Y… ¿te acuerdas por qué lo hacía? —le cuestiona y ZiTao bufa.

—¡Por supuesto! Fue difícil competir contra tu primer amor —hizo un puchero.

—Voltea —dijo.

—¿Ah? —ZiTao ladea la cabeza sin entender.

—Voltéate, conocerás el que te lo puso difícil.

Su novio aun sin comprender bien hizo lo que el otro le pidió.

Sus ojos buscaron entre la multitud a un chico con rasgos delicados, al menos por lo que recordaba que le había dicho SeHun.

—El rubio —escuchó a éste susurra y entonces lo ubicó con facilidad.

Se encontraba frente a la caja registradora, riendo. Acompañado de uno más bajito y ojos bonitos. Ambos se veían felices. ZiTao se sintió algo incómodo al verlos, su mirada eran las de una persona enamorada, la forma en la que el alto acariciaba la mejilla del contrario de una manera tan delicada, como si temiera romperlo. El más bajo se sonrojaba y se escondía en la bufanda.

Vio cuando su orden les fue entregada y con la misma se fueron con sus manos unidas.

Notó a SeHun que también miraba por donde se habían ido. ZiTao no estaba celoso, estaba seguro que el amor que ambos tenían era, por mucho, más grande que el que había experimentado tiempo atrás.

—Se ve muy enamorado —comentó el peli verde, sin saber realmente qué decir.

SeHun se sintió nostálgico, pero feliz. Esa parte de su conciencia que lo había molestado durante ocho años se había tranquilizado. Ahora podía disfrutar de su amor con ZiTao sin preguntarse o recriminarse el que él haya sido el causante de que LuHan no lo pudiera conseguir. Sin embargo, después de verlo con MinSeok, a pesar del tiempo, ellos se veían más enamorados y felices que nunca.

Era momento de dejar el pasado atrás, disfrutar el presente y soñar con el futuro a lado de una persona que realmente lo amaba. De lo maravilloso que era cuando era correspondido.

ZiTao había visto murmura algo a SeHun, parecía haber dicho algo más para sí mismo que para otros:

—Al parecer sí logró alcanzarlo.

 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).