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NIÑERO POR UN DIA por Yelmar Doker

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Notas del fanfic:

Relató corto 

 

Disfruten~

Notas del capitulo:

Los personajes son de Kishimoto-Sensei 

NIÑERO POR UN DIA


By Yelmar Doker

 

 





Debía cuidar de la mocosa por un día, pues su madre tenia que ir a una reunión de urgencia junto con su padre. Ambos le encargaron a la pequeña Aiko, que a penas tenia 9 meses de nacida.

Todavía no podía creerse que sus padres le dejaran a una bebe de menos de un año. Él era muy responsable y muy maduro para la edad que tenia, pero de allí, a cuidar niños...

Y para el colmo ésta niña lloraba como si la estuvieran torturando.

—¡Ya va! ¡La leche sigue caliente!—le grito a la bebe, que estaba en la sala esperando su mamila— Niños... cuanto los detesto...

Si tuviera que elegir entre tener hijos, o saltar de un paracaídas, con gusto escogería el paracaidismo. A penas eran las once de la mañana, sus padre se habían marchado a las ocho, y ni siquiera tenia la ayuda de su hermano Itachi, quien obviamente estaba muy ocupado en la universidad, defendiendo su tesis.

Apago la hornilla de la cocina y sirvió un poco de agua hervida en la mamadera.

Según las notas que le dejó su madre, tenia que echar tres cucharitas de leche en polvo en trescientos gramos de agua. Agito la formula y la puso a enfriar, como decía en la nota.

—¡Waaaaa!

—¡Que ya está! ¡Deja de llorar! —elevo el tono de su voz, sin importarle si eso pudiera asustarla mas.

Sorprendentemente la nena ceso su llanto. Aliviado, saco la mamila del cubo de agua y fijo si estaba tibia.

—Bien, ya esta.

Con la formula en la mano se dirigió a la sala. La niña estaba sentada en un andador rosa que trajo la madre de Aiko. Ahora estaba tranquila, pero Sasuke sabia que podía echarse a llorar en cualquier momento. Por eso se apresuró a sacarla de allí.

—A ver...—con cuidado le puso la punta en la boquita, algo preocupado por estar haciendolo mal— bebé, tienes que chupar...

—Agu... —los labios de la pequeña empezaron a succionar la leche.

Sasuke se sintió tranquilo y recosto la espalda en el respaldo del sofá. Mientras que la niña comía.

Maldijo el día, la hora y el minuto en el que le dijo a sus padres que no había clases el viernes. Por esa estúpida reunión de padres de familia, ahora tenia que hacer de niñera a una mocosa. El no tenia la mas mínima idea de como se cuidaba a un bebé, hasta ése momento. Estaba aprendiendo a base de práctica, pero era una experiencia traumatizante.

Como era de esperar, la nena se durmio. Aprovechó esos minutos para darse un baño y comer algo. Al salir de la ducha, escucho que su celular estaba sonando. Rápidamente bajo los ultimos escalones y sacó el artefacto del bolsillo de su pantalón.

—¿Quien habla?

—¡Sasuke! ¡¿Donde demonios estas?!

Era Naruto.

—En mi casa, ¿Porque?

—¡Y yo llevo horas buscandote, pedazo de anormal! ¡No me dijiste que faltarias a clases!

Tuvo que alejar un poco el teléfono por la voz estridente del Uzumaki.

—El idiota eres tu. Se supone que hoy es la reunión de padres de familia— mascullo, malhumorado.

—Ah, si. Es verdad, pero todos los demás vinieron y nos pusimos de acuerdo para ir al cine— su voz se oia triste—. Todos preguntaron por ti. En especial Sakura e Ino.

—Déjalas. Sabrán sobrevivir sin mi— se jacto, sonriendo.

—¡Uy, eres insoportable!

—No es ninguna novedad— cambio de tema — y a todo esto, ¿solamente me llamaste para decirme que irian al cine?

—¡No! ¡Es que...!— titubeó—La cosa es que quisimos darte una sorpresa, y por eso nos venimos para tu casa. ¿Por que no nos abres, teme?

—¡Un momento! ¿Están afuera de mi casa?— corrió hasta la ventana y descorrio las cortinas. Efectivamente, ellos estaban allí— son unos ..

—Je, no te molestes conmigo. La idea fue de Sakura. Ella dijo que tu estarias muy solo y no se cómo, pero nos convenció de venir. Así que no seas malo, y abre de una vez.

—Mis padres...

—Ah, si. Ésta mañana me tope con la señora Mikoto, y nos dio permiso para hacerte una visita.

—¿Lo tenias todo planeado?

—Yo no soy tan calculador, teme— se le escapo una risa —. Mierda, Sasuke. Abre de una vez, que nos estamos congelado aqui. 

Sasuke no tuvo mas opción que hacerlo. Si su madre había confabulado con todos sus amigos, entonces lo mejor era no darle muchas vueltas al asunto. Naruto entraria a su casa de una manera u otra.

Así que abrió la puerta y un grupo de personas se asomaron. Entre ellos Naruto, que llevaba una capucha y unos guantes para el frio. A veces olvidaba que estaban en invierno.

—Uff... Que frio tengo— se sacó la chamara y dejo que la calefacción hiciera su trabajo— Si que te tardaste, teme. Por poco me convierto en el próximo eslabón perdido.

—Gracias por recibirnos en tu casa, Sasuke-kun.

—Es la primera vez que estoy en la casa del bastardo, ¿Deberia sentirme afortunado? — se pregunto a si mismo Sai, que era nuevo en el grupo.

—Tienes suerte de que Sasuke acepte a subnormales en su casa— bromeo el rubio.

—Empezando por ti— le dijo Haruno.

—¡Oye!

—¿Que es eso? — Sai señaló la toalla que cubría la cebeza del Uchiha— ¿Te estabas bañando?

—Hn. — asintió, e hizo un ademan para que dejaran sus calzados en el recibidor— prepárare algo de beber, ¿Quieren algo?

—Mmm... Yo quiero limonada— Sakura dijo.

—Yo una coca-cola— le siguió Naruto.

—Yo quiero agua— sonrió Sai.

Sasuke asintió y los guio hasta la sala. Sus tres visitantes se sentaron en el sofá.

Fue Sakura la primera que vio la botellita de leche sobre la mesita.

—Que extraño. No sabia que Sasuke tuviera un hermano menor...

—¿Que? — Naruto le presto a atención.

—La mamila— señaló la botella. Naruto miro en esa dirección y sus ojos azules se pusieron a curiosear por la sala.
También habían juguetes tirados en el piso, mantitas para bebe sobre los muebles y paquetes de pañales en un rincón.

—Que extraño... —una ceja se elevo—Yo no recuerdo haber visto a la señora Mikoto embarazada..

—Sera mejor preguntarle a Sasuke.

En ese momento apareció de quien hablaban, con la dos manos sujetando una bandeja con las bebidas que habían pedido. Sasuke lo dejo en la mesita. Luego tomó asiento en el espacio que había desocupado.

Naruto fue quien hizo la pregunta.

—¿Tienes un hermano, Sasuke?

El moreno le miro con una ceja alzada.

—¿Que pregunta es esa? Claro que tengo.

—¡En verdad! ¿Y como se llama?— se entusiasmo el blondo, preparado para conocer al nuevo miembro de los Uchiha.

—Itachi. Idiota, ¿quien mas va a ser?

Una piedra imaginaria le cayó en la cabeza. Sakura dejo que su Inner tomara posesión de ella.

—¡Nosotros hablamos de tu otro hermano!

—¿Otro hermano? ¿De que están hablando? —el moreno miro a Naruto y luego a Sakura, como si estuvieran hablando un idioma difrente— Yo no tengo mas hermanos...

—¿Y esto que significa?

Naruto alzo la pañalera y tuvo la tentación de aventasela en la cara, pero se contuvo, sabiendo que eso enojaria a Sasuke.

—Ah, eso— hizo una pausa— Son pañales, ¿y?

—Son pañales. Y lo usan los bebes— remarco.

—¿A donde quieres llegar con esto?— cuestiono, ya harto de tanto rodeo.

—Tu tienes a un bebe aquí, admitelo— le sonrió.

Sasuke no lo negó. Se levanto del sillón y fue a buscar un libro para entretenerse mientras Sakura, Naruto y Sai se sentaban a hablar del clima.

—¡Hey, no me ignores!

Mascullo en voz baja. Naruto lo había seguido hasta su habitación.

—¿Que quieres ahora?

—Dime que son todas esas cosas en la sala— le exigió, sin la intensión de marcharse hasta oír una respuesta.

Uchiha rodó los ojos.

—Son las cosas de una niña que estoy cuidando, ¿contento?

Silencio.

Entonces Naruto soltó una fuerte carcajada, confundiendo la mente del azabache.

—¿Ahora trabajas de niñero?

—¡No soy ninguna nana! — le pego un puntapié en el tobillo— ¡Solo es un favor que le hago a mi madre!

—¡Auch! ¡Eso dolió!— se sobo la pantorrilla— ¡ten mas cuidado con tus patadas!

—¡Y tu deja de burlarte de mi!

—Ok, pero ya deja de jalarme el pelo— se removió, con claras intensiones de alejarse de las manos de Uchiha.

Sasuke lo soltó y se dio media vuelta. Empezaba a oírse el llanto de un bebe.

—¡Dobe! ¡Por tu culpa se a despertado la mocosa!

—¿Que? ¡Yo no hice nada!— le siguió.

Naruto entro a la habitación de Sasuke en donde había un bulto en la cama. De allí provenía el llanto. Sasuke se arrodillo y levanto a la bebe en sus brazos, meciondola con cuidado.

—Ya, ya... Shh...

—¿Como se llama?— sintió curiosidad.

—Aiko. Es hija de una amiga de mi madre— contesto, sin dejar de mecerla.

Naruto se tuvo que frotar los ojos con ambas manos. Ver a Sasuke cargando a un bebe como solo una madre lo haría le descoloco por un momento. La expresión del Uchiha se había suavizado notablemente. El llanto de la nena ya había mermado.

— Parece que ya se durmio... — músitó, en voz baja.

—¿No has pensando en tener hijos, Sasuke?

La pregunta tan fuera de lugar logró que Sasuke se sorprendiera y se girara a mirarlo. Con mucho cuidado dejó el bulto nuevamente en el centro de la cama.

—No estoy interesado— fue su corta repuesta. Naruto no se rindió.

—¿Y si cambiaras de opinión?

Sasuke dejo salir un corto suspiro. Luego miro a Naruto.

—Para tener un hijo, primero tendría que casarme y acostarme con una mujer— le puso una mano en la mejilla — tu sabes que soy gay. Tener hijos está un poco dificil para mi.

—Pero existe la adopción...

—¿Y tu que? ¿Vas a tener hijos con cualquier fulana que te encuentres?— cambio de tema. Naruto puso una mueca repulsiva.

—Ni loco. Antes prefiero volverme gallina y parir a mis hijos yo solo.

Sasuke no pudo evitarlo y soltó una breve risa, causando que los latidos de corazon del rubio se aceleraran.

—Estas loco...

—Ya lo sabia— se acerco lo suficiente para darle un casto beso en los labios— por ti, Uchiha.

Intercamiaron una mirada intensa de complicidad, y luego se entregaron a un beso mas largo.

Hasta que la bebé volvió a llorar.






Fin.

Notas finales:

¿Les gusto? ¿Hago una secuela? 

 

xD Bueno, dejenme sus opiniones en un comentario

 

Nos leemos


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