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Loveless por Shima_Suzuki

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Notas del fanfic:

he de decir que esto es bonito pero triste :'''u
yo llore, no se si ustedes lo hagan pero...
-reparte pañuelos-

Notas del capitulo: un nuevo fic, es un One-shot que salio de ni cabeza, lo soñe y bueno, eran las 4 de la mañana asi que loe scribi, esto fue hace como dos meses.
no lo subi porque estaba subiendo uno de mis otros fics :'u
que decir, es bonito pero triste :'''c
-vuelve a repartir pañuelos-
espero no lloren mucho, me gustaria leer su opinion en los rw c:
sin mas, a leer TuT
Ese día era martes.

Iba con Aoi en el auto, teníamos que llegar a tiempo para arreglar todo lo que tenía que ver con la fiesta sorpresa que le haríamos a Shima.

Aoi al ser su pareja se había vuelto un cursi de lo peor con él, y yo, como mejor amigo de Shima, apoyaba a su novio para hacerlo feliz…

Claro, Aoi tenía prisa, así que se pasó un alto.
Creyó que no iba a pasar nada, tal vez solo una multa de transito después…

Pero no.

El auto impacto enteramente de mi lado y nos volcó…
Mi pierna y brazo derecho están rotos.
Los vidrios se incrustaron en varias partes de mi cuerpo, así como trozos de metal del auto…

Aoi está bien, al parecer se golpeó la cabeza, pero nada más que eso…
Yo tuve que ir a quirófano.

Cuando Shima llego al hospital, fue primero a verme a mí…
El abrazo que me dio fue cálido, lleno de cariño…aunque creo que me abrió un par de heridas por la fuerza con al que lo hizo, también me lastimo un poco el brazo, pero no dije nada, estaba feliz de verlo…

—Dios Akira…

Su voz se escuchaba quebrada… ¿estaba llorando?

—Pensé que te perdería…—dijo por fin dándome la cara…estaba sonrojado y con los ojos llorosos, sonreí a sentir su cálida mano acariciar mi rostro.

Lleve mi mano ilesa atrás de su nuca, apegándolo a mí para dejar nuestras frentes juntas.

—Necesitas más que un accidente de auto para matarme…
Fue lo que dije, pude ver como el rojo en su rostro se intensifico, sonreí y ahora fui yo quien acaricio su rostro.
— ¿Cómo paso Aki?...

No di muchos detalles, simplemente dije que Aoi se había pasado un alto y el impacto me había dado a mí.

—Por cierto… ¿Cómo está el?...

—No sé, no lo he ido a ver, vine a verte a ti primero, me dijeron que te llevaron a quirófano…

Después de decir eso acomodo un poco mi cabello, me sonroje levemente, a pesar de que Aoi es su pareja sigo siendo la persona por la que más se preocupa, su mejor amigo, su hermano de otra madre, la persona que lo conoce mejor que nadie.

Hay niveles de importancia.

Y si Shima no estaba molesto con Aoi, ahora lo estaba, pues si no se hubiera pasado el alto, no estaríamos en el hospital.
En fin, que pasaría bastante tiempo ahí metido, hasta que mis heridas se curaran y mis huesos sanaran…
La banda entro en un Hiatus indefinido, mi tratamiento seria prolongado, mi pierna y mi brazo estaban rotos, me quedare bastante tiempo hospitalizado…

Me perdí el cumpleaños de mi mejor amigo, pero me dijeron que no me preocupara, que Shima no quiso celebrar sin mí…
Ese pato es un amor de persona.

~

El doctor dijo que la ser rupturas internas no había tanto problema, mi pierna tardaría un máximo de 2 meses en sanar, mi brazo probablemente mes y medio, no habría problemas entonces, al estar hospitalizado mi movimiento seria nulo, y mi avance rápido.

Aunque aún me quejaba de los dolores de las heridas que sufrí por los vidrios y metales que se me habían incrustado.
Según las enfermeras, era normal que aún me doliera, me dieron varios puntos…

Shima venía a diario a verme y se lo agradecía.
Estar solo en una habitación con muchos aparatos y medicamentos es deprimente, pero al tener a ese pato conmigo lo mejoraba bastante.

Claro que Ruki y Kai también venían a visitarme.
El único que no había pisado el hospital era Aoi, se sentía culpable por mi estado y por eso no se atrevía a venir y darme la cara… o bueno, eso fue lo que me dijo Shima…

~

A Reita lo habían sedado a causa de los dolores en el costado derecho donde un gran cacho de metal se había incrustado a causa del golpe.

Uruha estaba a su lado, sujetando su mano y acariciándola suavemente.

Dios, realmente tenía miedo.

Su pierna y su brazo iban bien, pero las demás heridas no sanaban, seguían teniendo problemas que ni el mismo comprendía.

Shima realmente tenía miedo.

Miedo de perderlo.

A pesar de que Reita le sonriera asegurándole que todo estaba bien, que saldría del hospital tan pronto le quitaran los yesos, a pesar de eso, sabía que Reita no le estaba diciendo algo…por no querer preocuparlo.
Incluso en ese estado se preocupaba por él.

Tal vez fue por eso, tal vez también por otra cosa que el castaño se acercó un poco más y beso sus labios.
Fue tan solo un pequeño beso.

Pero eso sirvió para llenar de sentimientos al castaño.
Cuando besaba a Aoi no sentía nada de eso…
Se separó del rubio y acaricio su rostro.

Reita se veía pálido pero su semblante era bastante tranquilo, se acercó de nuevo y dejo besos por todo su rostro.

Amaba a ese chico…

Si, lo amaba.

¿Y cómo no amarlo?
Reita era una persona increíble, siempre se preocupaba por él, siempre anteponiendo todo para que el estuviera bien, aun si eso significaba descuidarse, Reita siempre daría todo con tal de que Shima no sufriera…

Y estaba haciendo exactamente lo mismo ahora, dejando a un lado su dolor para que Uruha no se preocupara por el…
Era su mejor amigo desde niños, la persona en la que más confiaba.

La persona que sabía todo de él, literalmente todo…

La persona que más quería, que más amaba…

Y tuvo que pasar un accidente así para darse cuenta.

Beso una vez más sus labios sin ser consciente de que la anestesia en el rubio se estaba pasando.
Reita abrió los ojos, encontrándose con el rostro de Shima sobre el suyo, y no solo eso, sus labios sobre los suyos, uniéndolos en un pequeño beso.
Inevitablemente se sonrojo, pero cerro los ojos al sentir como el castaño se alejaba.

—Te amo Ue-chan…

A Reita se le desboco el corazón al oír eso, fue inevitable que sus mejillas se tiñeran todavía más de un suave rosado.
Esto hizo que el castaño se diera cuenta que estaba despierto…
También se sonrojo…

A pesar de eso, solo basto que se miraran a los ojos.
Los sentimientos en la mirada de ambos dejaban bien en claro lo que ambos sentían.
Se sonrieron.

Uruha se acercó de nuevo y beso con suavidad esos delgados labios que el otro tenia, Reita correspondió con gusto, llevando su mano sana al rostro del castaño para acariciar su mejilla.

Así comenzaron una secreta relación…
Porque si, Uruha aún estaba con Aoi…
Pero ya no era lo mismo, el tiempo que el rubio llevaba en el hospital era el mismo tiempo que la relación llevaba muerta, por más que Uruha tratara de hablar con él, explicarle que no lo odiaba por lo que él había hecho a Reita, Aoi no cedía y se alejaba.
Uruha no iba a seguir insistiendo…

~

Reita ya llevaba bastante en el hospital.
Supuestamente iba mejorando.
“Supuestamente”
A pesar de que su brazo y pierna ya estaban casi completamente sanados, las heridas de su costado aún no se cerraban, se abrían con una facilidad increíble a pesar del buen trabajo de los médicos.

Y eso era porque al pasar tanto tiempo en reposo al rubio se le hicieron llagas en la piel.
Así que le aconsejaron caminar lo más que pudiera, así le ayudaría también a ver que tan bien iba su pierna.

Esa tarde en la que Uruha llegó al hospital y lo vio de pie no pudo aguantar el ir y abrazarlo con fuerza.
Reita correspondió quejándose levemente de dolor, pero decidió no decir nada, Shima lo estaba abrazando, podía sentir todo el amor a través de ese simple contacto.
Correspondió su abrazo, dejando un par de besitos en su cuello, Uruha sonrió ante el gesto.

A partir de ahí, Uruha realmente creyó que las cosas iban a mejorar.

Que equivocado estaba…

~

La semana pasada no había podido ir ya que habían surgido un par de cosas en la compañía que requerían la presencia de los 4 integrantes presentes.

Cuando llego ese viernes al hospital solo vio cómo se llevaban a Reita en su camilla, directamente al quirófano.
Había sangre en toda la cama, Reita traía un respirador artificial manejado por una enfermera, había muchos gritos diciendo que tenían que trabajar rápido, que estaban perdiendo al paciente…

Y solo con esas palabras basto para que Uruha casi corriera para ir con ellos, un par de enfermeros le detuvieron el paso, no podía interrumpir la operación.

¿Qué había pasado?

¿Cómo es que lo miraba bien y a la semana siguiente se estaba muriendo?

Llamo a los chicos hecho un mar de lágrimas, necesitaba apoyo, y no estaba Reita para dárselo…
Llegaron los otros 3 rápidamente, si, Aoi también fue.
Y no perdió tiempo en abrazar al que creía que aún era su pareja.

Uruha acepto el abrazo, realmente necesitaba sentirse seguro en ese momento.

Pasaron horas de espera…

Con cada minuto que pasaba el corazón de Uruha se iba haciendo más pequeño y el nudo en su garganta más grande…

Miraban a las puertas por donde había desaparecido la camilla donde llevaban a Reita de manera expectante…esperando a que algo pasara…

Cuando la puertas por fin se abrieron dejando ver a un doctor quitándose el cubre bocas con las manos recubiertas con guantes manchados de sangre.

Uruha se levantó de inmediato, preguntando como estaba.
La mala cara del doctor no ayudo mucho a los nervios de los otros tres.

Se acercaron ya que el castaño se había quedado en shock con la noticia, el doctor lo miraba con pena.

—Shima… ¿Qué paso? —pregunto Ruki con cautela…

—Falleció…—dijo apenas en un hilo de voz.

Las lágrimas comenzaron a bajar de sus ojos a una velocidad increíble para después soltar uno tras otro sus sollozos…
Reita había muerto…

La persona que más amaba estaba muerta…
Y todo por culpa de Aoi.

El puñetazo que el pelinegro recibió se lo venía esperando desde el día del accidente.

Dejo que el castaño lo insultara, que lo golpeara y le recriminara todo lo que no había dicho por ser buena persona…

Pero ahora había muerto Reita, uno de sus mejores amigos, no solo de él, sino también de todos los presentes…
“Por tu culpa perdí a mi mejor amigo, a la persona que más amaba”

Esas palabras le calaron hasta el corazón…
Porque Aoi sabía…

Que el castaño dejo de amarlo para entregarle su corazón a Reita…
Kai se llevó a Uruha de ahí, pero el castaño no quiso…pidió que le dejaran ver por última vez al rubio.

~

El funeral fue realmente de lo más deprimente…

Estaba el ataúd abierto, con Reita dentro usando uno de sus mejores trajes, perfectamente arreglado…

Su madre, su hermana y Shima se habían encargado de vestirlo, incluso traía puesta su bandita negra, Shima insistió en ponérsela “sin ella no puede ser el mismo”…

Y ahora estaban ahí…

Atrás del ataúd estaban todos los bajos de Reita alineados, dándole la despedida…

La madre y hermana de Reita estaban hechas un mar de lágrimas.

Shima lloraba en silencio escuchando el discurso que Ruki dijo:
“Sé que es duro…
Hoy todos perdimos a alguien importante…
Perdimos a un amigo…
Un hijo...
Un hermano…
Una pareja…
Perdimos a un hombre maravilloso que lo único que quería era siempre vernos felices a todos sin importarle su propia felicidad…
Perdimos a Akira si…pero nos ganamos a un angel, que velara por nosotros todos los días hasta que llegue el momento de partir para reunirnos con él.
Por qué sé que nos estará esperando, con los brazos abiertos y con esa gran sonrisa que siempre nos mostraba a todos…
Descansa en paz, amigo mío…”

Tras esas palabras Uruha se levantó…y con todo el dolor de su corazón cerro con lentitud el ataúd…
Se lo llevaron…

El camino hacia el cementerio fue en completo y absoluto silencio…

La habían mandado a hacer un mausoleo…

Había quedado bastante bien…

A Reita le hubiera gustado…

Uruha pudo jurar que si Reita siguiera vivo abría gritado de emoción. Estaba solo a unas cuantas tumbas de Hide…
Hubo una misa más ahí…

Poco después todos se fueron retirando…
Uruha se quedó hasta el final…

Tenía que despedirse…
—Fuiste mi primer amigo…no solo eso…te convertiste en mi mejor amigo…viví cosas contigo que jamás hubiera vivido con nadie…siempre estuviste a mi lado…me cuidaste, me protegiste, pero sobretodo…me amaste…y siempre te estaré eternamente agradecido…
Nunca voy a arrepentirme de lo que viví contigo, tu siempre fuiste el que alegraba mis días, el que me reconfortaba en las noches, cuando lloraba, eras tú quien siempre secaba mis lágrimas al mismo tiempo que me abrazabas y besabas mi frente…diciendo que todo estaría bien, que no me pasaría nada malo, que estaría ahí para cuidarme… y siempre me lamentare…de que tuvo que pasar algo horrible para darme cuenta de que eras tú a quien debí de darle mi corazón…
Ahora que te has ido ya no voy a tener con quien pasarme las madrugadas jugando videojuegos…ya no tendré con quien hablar cuando me sienta solo, ya no tendré el apoyo que siempre tuve cuando me sentía mal…
Ya no te tendré a ti…
A la persona que con una simple sonrisa me hacía olvidarme de todos mis problemas.
A mi mejor amigo, mi confidente…mi más grande amor.
Te amo Akira…y siempre lo hare…
Hasta el final de mis días…



Fin.
Notas finales: y leyéndolo aquí, volví a llorar TTATT
esto es tan triste!!!
pero a la ves tan bonito :''''c
bueno, eso es todo por ahora, vere que mas puedo subir en estos dias xDD
la universidad me come, acabo de salir de examenes y dentro de dos semanas tengo mas D'''':
bueeeeno
nos vemos despues

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