Emil, se encontraba en el aeropuerto, acompañado por los gemelos Crispino- buen viaje amigo- decía Sara- Micky te alcanzara a más tardar dentro de un mes- el checo abrazo a su amiga- cuídate y seguimos en contacto.
Sin verlo venir el checo, Michele le robo un beso- wow, y eso por que fue!- pregunto el Checo.
Es un sí, a tu propuesta de la universidad- dijo Michele, levemente ruborizado. Para ser abrazado por su ahora novio- espérame solo un mes a más tardar cariño- decía el italiano- solo arreglo las cosas aquí y juro por dios que te alcanzo- para darse un beso de despedida.
Tomando su maleta y el maletín de mano- Vi aspetto per te, amore mio (estaré esperando por ti, amor mío)- dijo Emil, para darle un último beso e ir a la puerta de abordaje.
…
Mientras en Italia Emil Nekola abordaba un avión, en Rusia las cosas empezaban a tomar un nuevo giro.
Bienvenido Yakov- saludaba Viktor a su mano derecha- por tu rostro veo que traes buenas noticias.
De las mejores- respondió el mayor. Empezó a contarle la sorpresa que se llevó al conocer a Otabek Altín, así como le platico la historia de su vida; le conto absolutamente todo- que te parece Vitya- dijo Yakov.
Vaya, jamás imagine que Otabek Altín fuera menor de edad- decía el peli plata- pero hiciste bien, en ofrecerle traer a toda la familia- para sonreír- ahora tendrás que buscar una buena casa, en un lugar adecuado y respecto al colegio de las hermanas del muchacho. Te recomiendo el colegio donde estudia el nieto de Nikolay- dijo Viktor.
Iré a recursos humanos, para que preparen el contrato con ese muchacho; así como he pedido le hagan un depósito de la mitad del contrato. La otra mitad se le cubrirá cuando el contrato este firmado por él y su tutor legal; en este caso la madre de Otabek- dijo Yakov.
Excelente trabajo Yakov- decía el peli plata- y por cuanto se hizo el contrato- pregunto Viktor.
Por 6 millones de dólares- decía el mayor- además Otabek ofreció el 50% de la patente- el peli plata se sorprendió- no lo acepte, solo lo que nosotros habíamos estipulado el 35% y le he dicho que cualquier proyecto que tenga en mente y se llega a desarrollar por parte de esta empresa, entonces si será a partes iguales- dijo Yakov.
Ahora solo falta ver cómo le fue a Emil en Italia- dijo Viktor.
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En Japón…
Yuuri ya había firmado los papeles de adopción, para que Minami fuera legalmente un Katsuki. El petirrojo fue sacado del colegio, no sin antes Minako a ver hecho su jugada, llevo al borde de una posible ruina a las familias de algunos ex compañeros del doncelito, esto como advertencia de que nadie se metía con un Katsuki. Los afectados pedían reunirse con el Katsuki mayor y les diera la oportunidad de arreglar el problema en que se habían metido al menospreciar y señalar a Minami.
Pero como todo, Minako se cuidó bien las espaldas. En ningún lugar decían si había sido Yuuri Katsuki quien los había llevado al borde de la ruina; quedándoles lo suficiente para vivir de manera cómoda, mas no de lujos. Yuko había conseguido un buen entrenador para el petirrojo, su nombre: Celestino Cialdini; quien después de explicarle la situación del doncelito se le ofreció vivir en la mansión Katsuki, mas este se negó y acepto una de las casas de la familia Katsuki para las visitas dentro de la misma propiedad. Takeshi, le dio acceso a la entrada principal con una tarjeta magnética y cerradura de retina. Para seguido conocer a su nuevo pupilo, lo analizo detenidamente viendo que el doncelito tenía buena complexión física; ya estaba pensando en una nueva rutina para el jovencito.
Yuuri se acercó al petirrojo- Minami, él es Celestino Cialdini; a partir de este momento será tu entrenador particular- decía el doncel mayor.
El entrenador se acercó a él ofreciendo su mano y ser aceptada con seguridad- mucho gusto Minami; a partir de ahora te llamare por tu nombre de pila y espero hagas lo mismo conmigo, puedes decirme Celestino. No me gustan las formalidades, pero espero tengamos una buena relación de confianza y respeto entrenador-pupilo- dijo el mayor.
Encantado de conocerlo Celestino, espero me tenga la paciencia; daré lo mejor de mi durante los entrenamientos- dijo Minami.
Una vez tomaron asiento el entrenador empezó hablar- Minami, estudias en el colegio o con maestros privados- pregunto celestino.
Tengo maestros particulares- dijo el doncelito- yo tuve problemas…
Descuida pequeño, no tienes por qué contarme. Todo a su tiempo- decía comprensible el varón- eso sí, estaré al pendiente de tus clases. Hablare con tus maestros y ver cómo has ido progresando en los estudios; soy muy exigente al respecto- tanto Yuuri como Minami, estaban interesados- el patinaje es una carrera de sacrificios, pero recuerda que una lesión puede llegar a significar tu retiro de las pistas de hielo- el menor afirmaba, seguro de lo que escuchaba- pero una carrera es tu carta segura, en el caso de que algo así llegara a pasar- dijo Celestino.
Comprendo, no solo daré lo mejor de mi durante los entrenamientos- decía el petirrojo- daré lo mejor de mí en las clases, pero le digo celestino; las matemáticas no son mi fuerte y hasta ahorita mi mejor calificación en esa materia es 8. Le juro que he intentado superar la calificación, pero siempre es igual; mas jamás he bajado de ese número- dijo Minami.
Yuuri rio por lo bajo, mirando el rostro sorprendido del mayor- bueno, para mi es suficiente esa calificación como mínimo en tus materias- decía el entrenador- de que hora a qué hora tomas tus clases- pregunto celestino.
Minami empieza sus clases a las 8:00 a.m. y termina a eso de las 10:30 a.m.- intervino el doncel mayor- pero si usted desea el horario para entrenar por las mañanas, podemos cambiar los horarios- dijo Yuuri.
No es necesario joven Katsuki- decía el mayor- Minami, te parece si empezamos los entrenamientos de 2 a 5 de la tarde, así tendrás tiempo de tomar tus alimentos a buenas horas, terminar tus deberes de tus clases y tener la noche para descansar- decía el japonés de ascendencia italiana- ahora, lo que necesitamos es ver las pistas de hielo y solicitar turno para las practicas- dijo celestino.
Eso no será necesario celestino- intervino Yuuri- en esta casa tenemos una pista de hielo- eso sorprendió al mayor, el par de donceles sonrieron tranquilamente- vera, hace años yo patinaba, mas jamás lo hice a manera profesional. Me dedique a los negocios y solo patinaba para divertirme; así que mi asistente en aquel tiempo mi tutor, mando construirla para que yo no me arriesgara a sufrir algún secuestro- el mayor solo afirmaba tranquilo- y pues se sigue utilizando- dijo el doncel mayor.
Minami!!!!!!- se escuchó un grito en la entrada principal.
Vaya, ya llegaron- dijo Yuuri con una sonrisa- porque no aprovechamos y vamos a la pista celestino- El mayor solo afirmo, para ver entrar a tres niñas idénticas tomar de las manos al doncelito y ser llevado a rastras- son las hijas de mi amiga y guardia personal, Axel, Loop y Lutz- el varón se sorprendió por los nombres- ja, ja, ja, loco verdad Celestino- dijo el doncel, para guiar al mayor.
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Una vez en la pista, celestino estaba sorprendido, realmente era grande la pista. Casi juraría k tenia las medidas de la ISU para sus competencias, eso solo emociono al varón, para ver a las trillizas listas para entrar a la pista y aun sentado a su nuevo pupilo terminando de atar los patines- gusta acompañarnos celestino- invito Yuuri, quien revisaba un estante con patines- de seguro que hay de su número- dijo el doncel, quien tomaba unos patines negros con cuchillas del mismo color.
Una vez todos en la pista, celestino observaba los movimientos del Minami; detallando la flexibilidad y la fuerza para realizar uno que otro salto. En cambio al ver al doncel mayor sí que se sorprendió, al ver con que fluidez se deslizaba por el hielo- definitivamente Katsuki Yuuri nació para el hielo- pensaba el varón.
Estuvieron patinando cercas de una hora, hasta que llego Minako y Yuuri se acercó a la orilla, hablaron de algo cuando el doncel se giró- celestino, me tengo que retirar- anunciaba el peli negro- se queda en su casa, cualquier cosa que necesite hágaselo saber al personal de servicio y ellos se lo proporcionaran- en eso Minako le extendió una tarjeta a Yuuri, para entregársela al varón- es mi numero privado, cuando necesite hablar conmigo hágalo. No dude en que tomare su llamada- para mirar a las niñas que seguían jugando con el petirrojo- ustedes tres compórtense con celestino.
A la orden jefe!!!!- corearon las trillizas, haciendo pose militar.
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Después de media hora en auto, Yuuri llego al edificio de su empresa- entonces dices, que los rusos han hecho un gran negocio en Asia central- dijo el doncel.
También han estado moviéndose en Italia, más aun no han logrado confirmar; si lograron algo- dijo Minako.
Yuuri revisaba los reportes desde su escritorio, mientras Minako estaba revisando un correo electrónico- confirmado- llamando la atención del doncel- han cerrado trato con los hermanos Crispino de Italia. Según el reporte, con esto llevaran la tecnología de los gemelos a varios países de África- confirmo la asistente.
El mercado es grande Minako-sensei- decía el doncel con una leve sonrisa- por cierto; que me dices de los negocios en san Petersburgo- dijo Yuuri.
Las ventas aumentaron un 12% más de lo estipulado- decía la fémina- aún sigo creyendo que fue muy arriesgado invadir territorio de tu rival- dijo Minako.
Tal vez tengas razón sensei, pero los rusos también se han estado inmiscuyendo en territorio nipón. No pienso comportarme como un mafioso para sacarlos del mercado, simplemente a tu rival dale, con lo que te está dando- decía el doncel- ellos me invaden, yo los invado- dijo Yuuri divertido.
Cambiando de tema totalmente- llamando la atención la fémina- aun no recuerdas, nada sobre como escapaste de tus secuestradores- pregunto Minako.
He estado pensando en eso…
Joven Katsuki- interrumpió el interfon.
Dime que necesitas- respondió el doncel.
Tiene una visita, pero no tiene agendada una cita- dijo la secretaria- dice que es Jean-Jacques Leroy hijo.
Eso sorprendió a tanto al doncel, como a su asistente- y ese que hace tan lejos de América- dijo Minako.
No tengo idea sensei- decía el doncel- lo recibimos- pregunto curioso. La mujer solo afirmo, toco el botón del interfon- hazle pasar por favor- dijo Yuuri.
Un toque, un pase cuando se dejó ver al canadiense- gracias por recibirme Yuuri- decía con aquella confianza, provocando que el doncel le mirara molesto- pasa algo Yuuri- Provocando que el doncel se levantara y lo mirara de manera fría.
Sr. Leroy, que falta de respeto el llamarme por mi nombre- dijo el doncel con aquel porte orgulloso- si desea ser atendido, le sugiero y me llame sr. Katsuki. Nada de familiaridad se le permite, tomando en cuenta que es la primera vez que lo veo en mi vida- dijo Yuuri por demás serio.
Eh?!! A si, mil disculpas joven Katsuki. Pero es que al ser tan joven, me hizo sentir en confianza- decía el canadiense un tanto sorprendido.
Pues a diferencia de usted Sr. Leroy, me ha dado una pésima impresión; su forma de dirigirse hacia mi persona- decía el doncel con la mirada fría. Seguido de ofrecerle el asiento, el canadiense se dio cuenta que había metido la pata a lo grande, pues no imaginaba a un doncel con tanto orgullo y mirada tan fría- dígame Sr. Leroy, que desea hablar conmigo- pregunto Yuuri desde su asiento.
Primero, le reitero mis disculpas por mi falta de profesionalismo- decía Leroy un tanto preocupado, intentado arreglar las cosas- hace unas horas hemos llegado de Canadá y en representación de la familia Leroy. Vine a ponerme a sus órdenes, si necesita algo, un favor, cualquier cosa puede contar con nosotros- dijo el canadiense.
El japonés levanto la ceja y sonrió levemente con superioridad- en serio?!!- el tono sarcástico que uso sorprendió y molesto al visitante- y que podría necesitar de ustedes, según su familia señor Leroy- dijo Yuuri.
El canadiense apretó las manos, respiro tranquilamente; aunque por dentro se lo llevaba la chingada de rabia- eso depende de usted joven Katsuki, si quisiera incursionar en América le aseguro que los Leroy y los de la Iglesia le daríamos la bienvenida al continente- dijo el canadiense con una sonrisa.
Interesante propuesta- decía el japonés, para levantarse de su lugar y caminar unos momentos para regresar a su asiento- pero tomando en cuenta que el mercado americano, obvio generalizando al continente en si- aclaraba el japonés con una sonrisa de burla, cosa que no agrado al canadiense- es invadido todos los días por artículos de origen japonés. Y no hablo de tecnología, sino del boom en América latina, para ser más exacto. Con el anime, el manga, películas de corte oriental, el mercado es invadido constantemente con novedades, desde como dije: anime, manga, películas que para ser honestos señor Leroy son versiones originales, de las producciones de Hollywood. Un ejemplo de ello son: las versiones del aro, como se le conoció en E.U. el ojo del mal que también reescribió Hollywood- comentaba el doncel con un sonrisa burlesca, que solo lograba poner al canadiense tenso- y ni que que decir, cuando se les dio a los productores norte americanos hacer la versión de Dragon Ball en película. Déjeme decirle señor Leroy, que fue un auténtico fracaso, mancillaron una de las historias más épicas del manga y anime japonés. Pero volviendo al mercadeo joven, ustedes me ofrecen abrir las puertas para incursionar en América; cuando lo hemos venido haciendo desde hace tantos años, con el manga y el anime- dijo Yuuri.
Eso sí dejo totalmente descolocado al canadiense, eso si no se lo esperaba- nosotros exportamos, todo lo que he mencionado señor Leroy. Y todo por vía legal, pagamos derechos de exportación, hacemos contratos con casas editoriales que se atreven a publicar mangas, tenemos algunas tiendas que distribuyen mercancías originales, que son enviadas desde nuestras otras tiendas, desde el distrito de Akihabara. El sueño de todo Otaku, Gamer, Akiba-kei. Por solo mencionar algunos- continuaba el japonés- pero igual agradezco tan amable oferta joven Leroy, tal vez alguna vez lo pueda considerar, mas no prometo nada- dijo Yuuri.
Comprendo joven Katsuki- el canadiense se moría del coraje, más trataba de disimularlo, pero para el doncel no pasaba desapercibido, quien sonriéndole un poco divertido, le extendió la mano- gusto en conocerlo joven, gracias por recibirme sin cita previa.
Lástima que no puedo decir lo mismo señor Leroy- dijo Yuuri con esa mirada fría otra vez- para la próxima tómese unos minutos y concrete una cita- la asistente le abrió la puerta.
Una vez se fue- Yuuri que fue todo eso- pregunto Minako.
Pon tu gente a trabajar sensei. Quiero estar enterado que es lo que planean los Leroy en Japón- decía por demás serio el doncel- algo no me cuadra para nada- dijo Yuuri.
Esto puede tardarse un poco, pero tendré esa información- dijo Minako, para retirarse de ahí.
Que es lo que quieres JJ Leroy- dijo para sí mismo el japonés. Seguido de llamar a su secretaria- señorita, comuníqueme con el presidente de Nikiforov Enterprise Inc.- dio la orden Yuuri.
Si jefe, pero…- el doncel le miro atento- me llevara unos 10 minutos, no tengo su número- dijo la secretaria con vergüenza.
El doncel sonrió- tomate tú tiempo querida, pero que no sea mucho, por favor- dijo Yuuri.
Si señorito- para salir rápidamente.
Minutos después, la secretaria pedía permiso e ingresaba- joven Katsuki. Logre una video llamada con el presidente de la compañía Nikiforov; pero será dentro de media hora, ya que se encuentra en una importante reunión- dijo la chica.
Muchísimo mejor- dijo con una sonrisa- ya vez querida y tú que te tienes poca fe- acuso el doncel.
Hay señorito, no me diga eso; que solo logra sonrojarme- dijo la chica toda ruborizada.
Ok, no lo vuelvo a decir. Me avisas por favor- dijo Yuuri, para luego la secretaria salir.