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FOLIE por shiki1221

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Notas del fanfic:

Hola a todos :3 Vengo con otra pequeña historia XD este será un three shot que luego de tanto al fin publico.

Quiero agradecer a Pri_Sasukelove20 por ayudarme a darle un contexto a esta historia, lo hizo en una publicación de facebook del grupo en el que estamos Shh narusasu sasunaru

Notas del capitulo:

Los personajes no son propiedad mia, solo la historia es de mi autoria, los personajes son del vendido de Kishimoto

CAP 1: LA TRANSFORMACIÓN

(Basado en el cap 138 “deceso o fallecimiento” de Naruto shippuden)

 

Los escombros de lo que antes fue el techo de las ruinas de los Uchiha, cayeron al suelo, mientras que en el exterior aún ardían las llamas negras del Amaterasu. Era el enfrentamiento definitivo entre los últimos miembros del clan con el poder ocular más poderoso de todo el mundo shinobi. Itachi miraba desde arriba a su hermano Sasuke, quien le veía confiado con una sonrisa en su rostro, mientras la lluvia comenzaba a caer en sus rostros. Esta batalla estaba siendo observada con atención por Zetsu, uno de los miembros de Akatsuki. Todo había pasado con velocidad alucinante y casi imposible de seguir con la mirada, al menos con unos ojos normales. Ataques y jutsus desplegados con destreza por ambos hermanos fueron el espectáculo que sólo Zetsu pudo presenciar.

—Ahora —comenzó a hablar Sasuke—. Es hora de hacer que mi visión de antes se vuelva realidad —afirmó. Luego de que los recuerdos de aquella infancia manchada por tragedia y sangre alimentaran su odio hacia quien compartía su sangre—. La visión de tu muerte.

Su hermano mayor, aun se hallaba en la parte superior, viéndolo sin ningún tipo de expresión en su rostro. Mientras los oscuros cielos se abrían en dos por los rayos y truenos que ambientaban la escena de la cruenta batalla.

—Algo completamente inevitable como el Amaterasu. ¿Qué clase de técnica será? —se cuestionaba Itachi recordando la advertencia del menor.

En una distancia segura, pero a su vez privilegiada para observar a detalle una batalla que sin dudas marcaría un antes y un después en la vida del sobreviviente de tal enfrentamiento, estaba el miembro de Akatsuki conocido como Zetsu. Desde su lugar podía apreciar todo lo que sucedía sin tener que arriesgarse a sufrir heridas por el fuego cruzado, tenía órdenes de vigilar los resultados y no fallaría en su tarea.

—Ya veo. Así que para eso era el fuego de antes —susurró el Zetsu negro mirando desde la distancia.

—¿Qué quieres decir? —preguntó su otra mitad, aquella blanca con la que compartía cuerpo.

—Que Itachi nunca fue el objetivo del primer ataque —respondió la parte oscura.

—¿Y qué con eso?

—Él disparó el fuego a propósito hacia el cielo para calentar rápidamente la atmosfera creando una poderosa corriente de aire creciente.

—¿Una corriente de aire creciente?

—Fue para crear cumulonimbi o en otras palabras nubes de trueno.

—Pero ¿qué sentido tiene?

—En vez de usar su propio chakra para energía, va a utilizar la inmensa energía de la atmosfera y después la usará para una técnica del elemento rayo.

—¿Qué tipo?

—Sea como sea, será totalmente distinto a lo que los humanos pueden hacer sólo con su propio chakra y la manipulación de la naturaleza.

Aquella conversación que mantuvieron ambas partes del miembro de Akatsuki no les impedía seguir observando a detalles los movimientos del vengador. Fueron testigos de cómo Sasuke saltó hasta lo más alto de la edificación para esta cerca de las nubes que generaban los rayos a su alrededor.

—Ya veo, atrajo a Itachi para hacer uso también del calor del Amaterasu —observó un Zetsu sorprendido de la estrategia del más joven de los Uchiha, sin abandonar su zona segura.

—Con esta técnica los rayos caerán del cielo y todo lo que tengo que hacer es guiar su poder directamente a tu cráneo —habló el moreno menor.

—Justamente lo que pensé, pero es imposible de esquivar —afirmó Zetsu mirando a lo lejos.

—¿Por qué? —cuestionó la parte blanca con confusión.

—Porque el rayo puede llegar al suelo en un milisegundo. Es más rápido que la velocidad del sonido —explicó el Zetsu negro a su otra mitad.

—El nombre de esta técnica es Kirin —exclamó con fuerza Sasuke.

—¿Que está pasando? —siguió por completo confundida la parte blanca de Zetsu.

—Sasuke ha domado incluso al rayo. —dijo sorprendido el Zetsu negro

—¡VEN! —gritó Sasuke formando un enorme dragón hecho de rayo— Desaparece con el trueno —escupió las palabras con furia antes de dirigir el ataque contra su hermano.

—Esa cosa definitivamente fue devastadora. —afirmó el Zetsu negro.

—¿Itachi está muerto? —preguntó el Zetsu blanco

La técnica del rayo se desvaneció como el sharingan en los ojos de Sasuke luego de haber acabado el ataque. Éste jutsu era muy desgastante para su chakra y combinado con el sharingan eran una proeza que siguiera vivo y más aún consciente. Todo lo que quedaba en las ruinas, era el cuerpo de Itachi inerte y la copiosa lluvia que caía sobre el lugar.

—Se acabó… por fin se acabó —dijo Sasuke cayendo sobre sus rodillas. Agotado de haber utilizado hasta la última gota de su poder.

No habiendo nada más en el campo de batalla, Zetsu se dirigió de inmediato a notificar a su líder acerca de lo acontecido en ese lugar.

 

En otra parte, el equipo de Konoha intentaba enfrentarse a aquel enmascarado de Akatsuki sin éxito alguno. Los ataques físicos simplemente atravesaban su cuerpo como si sólo golpearan una ilusión, desde que apareció en su camino no les había permitido seguir el rastro de Sasuke. Al fin tenían una oportunidad de recuperarlo y únicamente ese sujeto se interponía en su objetivo.

—¡Rasengan! —gritó Naruto saltando hasta el árbol donde se hallaba su enemigo. Su ataque, cuya dirección era correcta, para su desgracia sólo atravesó al otro.

—Te tengo —exclamó Yamato usando su jutsu del estilo madera para frenar sus movimientos.

—¡Hey! ¿Qué? —dijo aquel sujeto con la capa de Akatsuki evadiendo sus ataques— Duele —exclamó al verse envuelto por múltiples maderas.

—Esto te tiene apretado —dijo Yamato feliz de haberlo capturado. Aunque esa emoción no le duro mucho, ya que el prisionero desapareció repentinamente de su trampa de madera— I-imposible —exclamó con incredulidad.

—Tienes que reconocerme, soy bastante flexible ¿ehh? —decía Tobi en un tono divertido parado de cabeza en un árbol diferente al que usaba antes— Ahora es mi turno de contraatacar —juntó sus manos en posición de hacer un jutsu contra los shinobis de Konoha.

—Retrocedan, Naruto, Kiba —ordenó Kakashi puesto que ellos dos eran quienes se encontraban más cerca de aquel individuo.

—Lagartija estirada —dijo Tobi—. En realidad esa es toda a técnica.

—¿Sólo se está burlando de nosotros? —se preguntaba con enojo el rubio, viendo con ansías asesinas al responsable de que no pudiera avanzar su camino para encontrar a Sasuke.

—Esta formación también parece ser inútil —dijo Yamato con frustración al notar que nada de lo que hacían surtía el efecto deseado—. Hasta ahora ha estado esquivando todos nuestros ataques.

—Kakashi-sensei —llamó Hinata.

—Sí, lo sé —contestó Hatake sabiendo que es lo que quería decirle.

—Naruto la coordinación de nuestros ataques de formación fue perfecta ¿no? —cuestionó Kiba a su compañero.

—Si —respondió Uzumaki.

—Estoy seguro de que estamos haciendo contacto con él entonces, ¿por qué continúa esquivándolos?

—Probablemente sí le dimos —dijo Naruto pensando en lo que sabían de su enemigo—. Lo mismo sucedió cuando lo ataqué con mi rasengan por primera vez —el rubio reflexionó ante el primer ataque que lanzó y que resultó por completo inútil, pese a haber atacado por la espalda del enmascarado esperando un golpe directo al adversario—. Debió haber conectado.

—Entonces básicamente, él está aparentando esquivar los ataques, pero en realidad no lo está haciendo en absoluto —aportó Shino con su observación ante el modo de pelea del enemigo—. Sólo está dejando que el jutsu y el atacante pasen a través de él. ¿Es eso Naruto?

—Mm supongo ttebayo —dijo algo confundido por el razonamiento a su parecer muy complicado.

—¡Demonios Shino! Tu manera de explicarlo lo hace confuso —reclamó el Inuzuka.

—Tal vez es un clon —dijo repentinamente Haruno— O tal vez un genjutsu que nos obliga a ver imágenes de él.

—Yo… pensé lo mismo por eso extendí el alcance de mi byakugan y exploré el área buscando chakra, pero él es el único que parece estar ahí —afirmó Hinata luego de explicar lo que averiguó con el poder de sus ojos.

—Aquí vamos —dijo animado Tobi.

¿Pasan a través de él? Con razón...” —pensó Yamato por lo que se dirigió al Hatake— Kakashi-senpai, ¿qué opinas?

—No cabe duda alguna. Es alguna clase de técnica única en él —respondió Kakashi—. Estamos hasta el cuello con esto —se quejó el ninja copia— Shino.

—Estoy en ello —respondió Aburame liberando de su cuerpo un enjambre de insectos.

En una situación como esta las técnicas secretas de Shino nos pueden ayudar” pensó Kakashi confiando en que el menor podría lograr darles una ventaja significativa.

—¡Ay! ¿Eres del clan Aburame? —preguntó el Akatsuki— Esos enjambres de insectos son muy asquerosos —el tono de su voz era chillona y asqueada ante la técnica que se empleaba contra él.

—Shino no es muy a menudo que te puedo ver tan emocionado —dijo Kiba mirándolo con una sonrisa que enseñaba sus colmillos.

—Naturalmente —respondió el domador de insectos—. ¿Por qué? Porque me dejaron fuera durante la última misión para rescatar a Sasuke. Vayan. —ordenó a sus insectos.

—En serio es muy asqueroso —dijo el Akatsuki esquivando el ataque.

—Oye Shino los está esquivando demasiado fácil ttebayo —reclamó Naruto al ver otro posible intento fallido de golpear al enemigo.

“En vez de atacar a un sólo punto el clan Aburame se concentra en atacar a lo largo de grandes áreas” —pensó Kakashi mirando con atención lo que sucedía.

—Naruto tú no has estado en muchas misiones con Shino —dijo tranquilamente Kiba—. Así que sólo relájate y observa. Sólo te entrometerás en el camino de sus insectos.

—¿A qué te refieres con entrometerme en su camino? —preguntó enojado el rubio.

—Dispérsense —ante la orden los insectos rodearon de inmediato al enmascarado miembro de Akatsuki.

—No hay escape de eso —afirmó en tono de triunfo Kakashi—. Es imposible esquivar todos esos insectos.

“¿Podrá esquivarlos o sólo pasaran a través de ellos? Tendrá que mostrarnos su técnica” —pensó Shino mientras su ataque se efectuaba—. Háganlo jutsu mushidama (cúpula de insectos) —exclamó el nombre del jutsu mientras sus manos realizaban los sellos.

—Momento —dijo Tobi viéndose prontamente rodeado por una nube negra de insectos.

—Muy bien, bien hecho Shino —celebró emocionado Uzumaki animado por lo que veía.

—Resolveré esto ahora —afirmó Shino—. ¿Por qué? Porque estoy participando de esta misión y también tengo que compensar que no haber estado la última vez.

—¡Demonios! ¿Sigues molesto por eso? —bufó con molestia Kiba al ser tan notorio el rencor que aun guardaba su compañero de equipo por ser excluido en la ocasión anterior.

Sus insectos se movieron en un abrir y cerrar de ojos” —pensó Sakura al ver como el enjambre de insectos envolvía el cuerpo del akatsuki—. Él es bastante hábil para ser capaz de manipular tantos insectos con tanta facilidad.

—¿Y bueno Hinata? —cuestionó Hatake dando indicación implícita de que usará sus ojos nuevamente.

—S-si —dijo ella activando el byakugan para observar e intentar desvelar el secreto de aquella técnica que evitaba que sus ataques surtieran efecto—. Puedo confirmar el chakra del objetivo. Definitivamente está dentro del enjambre de insectos de Shino-kun.

—Yamato —llamó Kakashi.

—Sí —afirmó utilizando su jutsu de madera—. Puedo atacar en cualquier momento —informó cuando la madera estuvo en posición apuntando directamente al objetivo.

—¿Cómo vamos Shino? —preguntó el ninja copia.

—Puedo sentir su presencia —confirmó Shino—. ¿Por qué? Porque puedo deducir sus movimientos con mis kikaichuu aún están extrayendo su chakra —explicó orgulloso de sus insectos.

—Bien, sigue extrayéndoselo —dijo Naruto animado de que al fin pudieran quitar de su camino a tan molesto sujeto.

—¿Cómo es posible? —exclamó con sorpresa Shino al igual que los demás que no se explicaban como el Akatsuki se desvaneció entre los insectos—. Los insectos que estaban rastreando su chakra lo perdieron por completo es imposible.

—¿Usó la técnica de reemplazo? —preguntó Sakura en voz alta.

—No. No es la técnica de sustitución —negó Shino—. ¿Por qué? Porque mis insectos habrían seguido su dirección de todas maneras. Escapar habría sido igual de imposible.

“¿Eso significa que uso un ninjutsu espacio-tiempo?” pensó Kakashi— No, eso no puede ser —dejó escapar aquella oración con clara incredulidad por lo que sucedía.

Pensar que se desvanecieron así de pronto” —pensó Hyuga sin entender como su byakugan no fue capaz de seguirle el rastro.

“¿Logró teletransportarse sin utilizar ningún sello, marca o invocación? ¿Eso quiere decir que tiene un ninjutsu espacio-tiempo incluso mejor que el del cuarto Hokage?” pensó Kakashi completamente consternado por ese pensamiento de que alguien superará con tal habilidad a quien fue su maestro.

Su cuerpo se desvaneció por completo” —fue el incrédulo pensamiento que tuvo Yamato—. ¿Puede simplemente desaparecer su existencia? —dejó escapar aquella pregunta en un tono bajo.

—No puede ser —dijo Sakura—. Si realmente puede desaparecer a su voluntad, no me extrañaría que también pudiera hacerlo con partes de su cuerpo. Eso explicaría porque sólo una parte de su cuerpo logró evadir los ataques de antes —afirmó recordando el ataque de Naruto—. Para nosotros sólo se ve como si hicieran contacto, pero en realidad fallaron sus marcas.

—Entonces básicamente no está esquivando los ataques. Sólo están pasando directamente a través de él —dijo Kakashi mirando a su alumna.

—Lo encontré —avisó Hinata captando la atención de sus compañeros—. Ahí —afirmó mirando el árbol donde estaba el objetivo.

—Hola, hola —saludó alegremente el Akatsuki haciendo que Naruto pusiera una expresión de disgusto ante la burla.

—No creas que puedes huir de mi nariz —dijo Kiba antes de lanzarse al ataque fallando inevitablemente.

—¡Oye Kiba no te vayas corriendo por tu cuenta! —regañó la de pelo rosa por la imprudencia del castaño.

—Lo atravesó de nuevo maldición —maldijo Inuzuka tirado en el suelo luego de que su ataque fallara.

—Kiba-kun creo que nada más te esquivó —expresó tímidamente Hinata.

Tobi sólo los observaba desde la rama del árbol donde estaba parado, su único interés en aquellos shinobis era retrasarlos en la búsqueda que llevaban a cabo. Repentinamente Zetsu emergió de entre la madera del árbol, quedando justo a su lado.

—¿Qué tal estuvo? —preguntó al bicolor al tenerlo allí.

—Terminó —afirmó con simpleza e indiferencia por el asunto.

—¿Qué es él? —preguntó Sakura al ver al extraño sujeto con apariencia de planta.

—Él está en la lista de Akatsuki que nos dio Kabuto —dijo el de cabellos plateado recordando como estudiaron aquel libro ofrecido por Yakushi.

—Se siguen metiendo en mi camino —habló enojado el rubio al ver a otro Akatsuki más interponiéndose en su misión.

—Sasuke ganó. Uchiha Itachi está muerto —afirmó Zetsu. Lo que dijo sorprendió a todos los ninjas de Konoha, quienes no sabían que sentir al recibir tal información.

—Eso es genial o tal vez no —dijo con voz alegre, pero de inmediato pasando a una mucho más grave y seria—. Tal como pensé —el tono sombrío en que esas palabras fueron dichas por el enmascarado que antes se la pasó bromeando no era un buen presagio.

—¿Sasuke-kun mató a Itachi? —dijo Sakura completamente estupefacta por lo oído.

—Sasuke también cayó. Entonces ¿ahora qué? —cuestionó Zetsu mirando hacia los shinobis de Konoha— Puede que ya este colgando de un hilo —afirmó con una odiosa sonrisa que desagrado a todos los presentes.

—¡Oye tú, bastardo, aloe vera puntiagudo! —gritó enojado Uzumaki señalándolo— ¿Dónde demonios esta Sasuke?

—Aloe vera —repitió molesto Zetsu por el “apodo” con el que el jinchuriki se dirigió a él—. Ignóralo —le dijo su otra mitad.

—Continuaré mi pelea contra ustedes en otra ocasión —avisó dejándoles ver su ojo a través de la máscara—. Adiós —se despidió al no tener nada más que decirles.

—Rápido tenemos que llegar a donde esta Sasuke antes que ellos —ordenó Kakashi movilizando a todos los ninjas de Konoha una vez que se dio cuenta de que aquel Akatsuki tenía el mismo objetivo que ellos.

—Esta vez de seguro daré todo lo que tenga ttebayo —juró silenciosamente Naruto emprendiendo el camino hacia donde hallaría a su mejor amigo.

Una vez que el miembro bicolor de Akatsuki le informó a Tobi acerca del resultado de dicha batalla, el mencionado dejó a un lado la pelea de distracción que mantenía con los shinobis de Konoha para dirigirse hasta donde se hallaba el menor de los Uchiha inconsciente. Su técnica era muy eficiente y nada más en segundos podía transportarse hasta donde estaba el sobreviviente de la batalla.

 

Mientras tanto en las ruinas, todo era quietud y silencio donde se hallaba el único vencedor de la batalla, hasta que repentinamente ese silencio fue interrumpido por una siniestra voz que conocía muy bien. El azabache creía que ya había erradicado a ese ser de la faz de la tierra, pero al parecer estaba equivocado.

—¡MALDITO SEAS! —exclamó con furia mientras la marca de maldición se extendía por todo su cuerpo en cuestión de segundos. Se había transformado de manera completa sin siquiera proponérselo y no estaba para nada bajo su control lo que le sucedía a su cuerpo.

—Sasuke-kun yo te daré el poder que deseas —oyó la seseante voz de quien fue su maestro en los últimos años, una consecuencia directa de haber absorbido parte de él en su cuerpo.

—Ya no lo necesito —replicó con molestia—. Itachi ya está muerto.

—Me necesitas. ¿No es así, Sasuke-kun? —siguió hablando el de ojos amarillos.

—Qué te calles —exigió sudando por el esfuerzo de mantener a raya aquel diabólico poder. Se sostenía a sí mismo intentado refrenar el poder maligno que tomaba control de su ser y amenazaba con hacerlo perder contra Orochimaru.

—Desata mi poder y tus deseos se cumplirán —tentó el sannin como siempre hacía para conseguir a sus presas.

—Mi único deseo era mi venganza —dijo jadeante por el esfuerzo—. Ya lo logré, no te necesito.

Sasuke no poseía nada de chakra propio por lo cual no había nada que retuviera el poder de Orochimaru, éste último intentaba desde dentro hacerse del control del cuerpo del portador del sharingan. La fuerza de voluntad del de cabellos negros era todo lo que evitaba que su mente fuese tragada por las penumbras en las que buscaba sumergirlo esa serpiente. En su cabeza los pensamientos corrían deprisa.

 

Desde la más temprana edad tuve que conocer la crueldad, al ver a mis padres, tíos y demás miembros del clan Uchiha ser masacrados a manos de mi propio hermano. La soledad y el dolor alimentaron mi odio y mi rencor dejándome sumido en las tinieblas que confundían mi mente, haciendo que perdiera el deseo de una vida tranquila y pacífica y sólo ansiara la muerte de mi enemigo jurado. Ahora que yace muerto frente a mí no sé qué es lo que debería hacer.

No tengo un propósito en la vida, estoy vacío y quebrado por dentro, los susurros de la vil serpiente que habita en mi cuerpo me incitan a seguir odiando y destruyendo. Pero ¿a qué? ¿A quién? No tengo a nadie más a quien culpar, el odio que tengo por alguna razón no desaparece, la oscuridad a teñido por completo mi alma. Tal y como me advirtió aquel sujeto de dos cabezas que fue subordinado de Orochimaru; una vez que me hundiera en este poder no habría vuelta atrás. No sé cómo alcanzar la paz interior, cuando en estos momentos apenas puedo aferrarme a mi cordura para no ceder ante el poder de Orochimaru.

 

El rencor incontrolable por aquella batalla que tuvo el resultado esperado por Sasuke, pero a su vez dejaba una sensación vertiginosa de vacío absoluto, éste fue el desencadenante de que los bordes de la estabilidad mental se quebraran lentamente causando un desorden interno. Sus sentimientos de agresividad estaban al tope de lo razonable, no tenían razón de estar ahí, pero lo hacían. Su vida estaba dando giros en una espiral de dolor, intentaba llenar el vacío que le dejó la falta de amor con ira irracional, pero era mejor sentir dolor a no sentir nada, mas la sensación de perder era desagradable. Resulta más fácil ir en contra de la propia vida por ser tan injusta que intentar enfriar la ardiente ira que hacía hervir su sangre.

En el equipo 7 alguna vez tuvo una esperanza de sanar aquellas heridas que lo marcaron en su infancia, conoció el afecto y creó lazos muy especiales, pero aquellos fantasmas del pasado que lo atormentaron clamando por justicia por la traición de su propia sangre lo llevaron a largarse de la aldea. Ahora había destruido aquellos lazos de afecto que había tenido con sus compañeros y su enemigo yacía muerto. Todo había acabado y él no tenía absolutamente nada, ni siquiera la más ínfima sensación de satisfacción por su logro. Debido en parte, quizás, al hecho de que tal y como dijo en más de una ocasión Itachi, él no había logrado odiarlo lo suficiente y algo de cariño aún se escondía en él. Odiaba admitirlo porque al amor venia de la mano del dolor.

No soportando más el dolor físico y el agotamiento psicológico y emocional cayó en los brazos de la inconsciencia. En medio de la lluvia y las ruinas perdió todo el sentido de lo que sucedía a sus alrededores, la única ventaja de ese estado en el que se encontraba era que la voz de Orochimaru parecía haberse acallado interiormente también. Al menos en el reino de Morfeo aquella serpiente no lo molestaría.

Cuando Zetsu consiguió regresar a donde estaba el Uchiha, el enmascarado conocido como tobi ya se encontraba en el lugar observando todo minuciosamente. Sin perder el tiempo el enmascarado miembro de akatsuki se llevó al Uchiha desmayado a su guarida para atender sus heridas. No lo dejaría morir teniendo la manera ideal de hacer que se uniera a él y lo ayudara a completar con sus planes.

Para cuando los miembros de Konoha pudieron abrirse paso, dado que las llamas negras del Amaterasu parecían formar un muro impenetrable, ya no quedaba ningún rastro, ni de Akatsuki ni de los hermanos Uchiha. La lluvia caía copiosamente sobre ellos, el cielo en esa parte parecía llorar las lágrimas del clan Uchiha al haber tenido a dos hermanos peleando a muerte. Mientras Kiba, Kakashi y el resto hacían observaciones sobre el estado de aquel lugar, Uzumaki sólo tenía una cosa en mente.

—¿Dónde está Sasuke? —preguntó a la usuaria del byakugan mas esta negó con la cabeza al no hallar rastro de él mencionado.

—Los únicos chakras que puedo detectar ahora son los nuestros —respondió Hinata.

—Aun puedo captar algo de sus olores, pero... —dijo Kiba en un tono de resignación que no daba mucha esperanza.

—Llegamos demasiado tarde —anunció Kakashi desilusionado de no haber conseguido rescatar a su ex-alumno.

—Naruto… —susurró Sai, al verlo crujir los dientes y aproximarse al enorme emblema de los Uchiha que estaba pintado en la pared.

—¿Por qué? ¿Por qué nunca puedo alcanzar a Sasuke? —se lamentó el rubio apoyando sus manos sobre el gran emblema. Con la lluvia cayendo era imposible saber si el blondo derramaba lágrimas o no, sin embargo, el dolor por un nuevo fracaso intentando rescatar al azabache, era muy notorio al punto de ser casi palpable.

 

En la cueva de Akatsuki, Tobi le daba los primeros auxilios a su “invitado”, desinfectaba sus heridas y le colocaba los vendajes correspondientes para evitar que se muriera de una hemorragia. Sin embargo, había algo que lo mantenía muy intrigado mientras lo curaba.

—Qué extraño —murmuró para sí mismo el de la máscara.

—¿Qué cosa? —preguntó Zetsu mirando al chico inconsciente.

—Sigue transformado por el poder de la marca de maldición de Orochimaru —explicó Tobi—. Ya debería haber regresado a la normalidad, pero en su caso está perdurando aun cuando ni siquiera está despierto.

El enmascarado esperó con paciencia a que su “huésped” recobrara los sentidos para poder hablar con él acerca de su futuro. Luego de unas cuantas horas descansando, Sasuke abrió los ojos confundido sin saber que había sucedido. Su mente aún era un completo desorden, no sabía dónde se encontraba ni quien era la persona que estaba a tan sólo unos metros de él. Preparándose para un posible ataque en su contra lo miró fijamente, sin hacer nada, pero mantenía su guardia alta.

—Qué bueno que despertaste tenemos cosas que hablar —dijo el enmascarado acercándose a Sasuke, creyéndolo algo ausente por esa mirada vacía que le dedicaba; a pesar de que Uchiha tenía su mirada analizándolo aun sin que lo supiera.

El silencio del hermano menor de Itachi fue la única respuesta que obtuvo del catatónico chico.

—No importa —restó importancia el enmascarado retirando levemente su máscara exhibiendo el magekyo sharingan de su único ojo—. Ahora tenemos que… ¡ARGG! —gritó con dolor cuando las llamas negras del Amaterasu cubrieron por completo su cuerpo.

Al haber hecho que su sharingan entrará en contacto con el de Sasuke hubo reacción refleja en la cual el mortal ataque fue lanzado en contra del enmascarado. El miembro de Akatsuki intentaba detener el avanzar de las quemaduras que producía el ataque con éxito nulo. Zetsu, quien fue a su rescate, terminó recibiendo partes de las oscuras llamas que rápidamente lo consumieron. Aquel ataque hizo que los ojos de Sasuke ardieran y sangraran provocándole un dolor que lo hacía gritar como un animal herido. Para cuando consiguió serenarse tan sólo un poco, en la cueva únicamente quedaban los restos del Amaterasu, dado que de los cuerpos no quedó ni el más mínimo rastro.

Pese al dolor de sus heridas aun frescas, Sasuke se levantó de la improvisada cama y salió de la cueva. En la forma en la que estaba ahora sus heridas parecían cerrarse y sanar en un tiempo tan corto que resultaba alarmante. Su apariencia no era para nada similar a la que tuvo tan sólo unas horas antes. Sus azabaches cabellos ahora eran largos y grisáceos, su envidiada piel de color lechoso adquirió una tonalidad oscura y sus ojos ya no eran aquellas gemas ónix que tanto fascinaban en antaño. La apariencia que portaba ahora era la de un auténtico monstruo para quien lo viera, mas tomando en cuenta las enormes manos en su espalda que parecían alas. Su imagen resultaba abominable y nada más verlo cualquiera huiría espantado.

Caminaba sin rumbo hacia ningún lugar, su triste y dura realidad era ser un monstruo, si antes era perseguido y buscado ahora lo que viviría sería aún peor. En un mundo de injusticia que nublaron sus sentimientos, se destrozaron por completo sus esperanzas haciendo que sólo sobrevivieran sus deseos de venganza. Sin propósito lo único que lo mantenía con vida y guiaba era el más puro instinto de supervivencia, la tormenta que ensordecía cualquier pensamiento cuerdo. Él anuló su cerebro por completo. La ira y el instinto eran sus guías, estaba roto y completamente destrozado por dentro, no dejó a Orochimaru vencer sobre él, pero tampoco logró derrotarlo. ¿Qué sería del destino de Sasuke ahora que se había perdido en un limbo incierto? ¿La marca de la maldición desaparecería algún día?

 

CONTINUARÁ…

Notas finales:

Hasta la próxima janne n_n


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