Cambios, cambios y más cambios desde que salí de la escuela secundaria todo había cambiado, ya en la preparatoria con nuevos maestros, nuevos amigos todo debería seguir su curso, pocas salidas y mas estudio que vida más aburrida la que llevaba. Recuerdo muy bien aquel día, llegue más temprano de lo normal, tocaba clase de matemáticas con aquel sexy profesor que a todos y todas encandilaba con su elegante sonrisa y ese cuerpo tan varonil, su nombre: Choi Siwon y como todo ser endiosado le llovían admiradores y también rumores, uno de ellos: que salía con un joven llamado Donghae que en algún momento fue su alumno y que tenían un bebé.
Como dije llegue temprano y me senté como siempre en uno de los asientos finales a escucharlo, bueno a intentar buscar algo de concentración, me encantaba que pase por mi costado y poder oler su perfume y ese día no fue la excepción. Cuando me entrego la práctica del día, rezaba mentalmente que al recibirla no me temblase la mano- buenos días taemin, espero que seas como siempre unos de los primeros en entregármelo resuelto- me dijo con una dulce sonrisa.
Esa maldita sonrisa que me dejaba sin palabras y apenas podía mantener la calma, apenas le respondí con un movimiento raro de labios que según yo era una pequeña sonrisa.
Babo taemin, contrólate- me repetía cientos de veces, hasta ese momento creía que solo él lograba ese efecto extraño en mi.
No pasaron ni 5 minutos hasta que escuché las instrucciones que faltaba - Jóvenes, se me olvidaba la segunda parte de la practica tienen que resolver con la ayuda de un compañero, así que júntense con alguien ya sea de su costado o detrás, para que logren apoyarse.
Apenas logre dar un bufido que felizmente logró pasar de desapercibido, y ahora con quien trabajaría esa dichosa práctica, aishh si bien es cierto no era una persona antisocial, solo un poco tímido y aun no entablaba una verdadera amistad con mis compañeros de aula, nunca pasaba de un hola o un buenos días, pffff y ¿ahora?
Mis opciones se estaban acortando, todos ya estaban emparejados, hasta que lo vi. No recordaba haberlo visto antes tal vez alguien nuevo que no me había percatado antes de su existencia, talvez sonó algo raro pero hasta ese momento no me enfocaba en otra cosa que era llegar allí a escuchar clase y regresar a casa a seguir estudiando.
Es lo que siempre me repetían una y otra vez mi padre y mi madre, que solo lograre sobresalir y ser feliz si estudio y sigo los pasos de mis hermanos mayores: ir a la universidad y buscar un buen trabajo. Al menos eso es lo que consiguieron ellos, mi hermano mayor Taesung es un gran ingeniero, siempre anda viajando supervisando construcciones y luego estaba mi hermana Tifanny que es una gran abogada y vivía en otra ciudad, ella era la que más me consentía cada vez que llegaba de visita nunca llegaba con las manos vacías.
Cuando me acerque a ofrecerle mi ayuda para resolver la practica con algo de vergüenza, por un momento creí que me rechazaría, no sé porque pensé eso, pero fue todo lo contrario se presento muy amable y pude observar sus facciones varoniles, tenía unos ojos grandes, cabello negro y una piel algo bronceada, en ese momento no lo considere ni feo ni atractivo solo un chico mas. Ojala que mi percepción por él siempre hubiese quedado así.
Su nombre era Minho, para ser precisos Choi Minho.