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El pecado de la obsesion. por RedtheDark

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Notas del fanfic:

Un pequeño oneshot de unos personajes del universo de EP, hecho ya que Caín será uno de los protganistas de una historia futura. Espero les entretenga al menos un poco. Tengo pensado sacar pequeños oneshots de los protagonistas de la historia que estoy haciendo con calma. 

 

Si aun no has leído Escape perfecto, bueno te invito a leerlo. Ya esta finalizado:D

Catrina es también parte de EP, y si les atrajo esta pareja, muy pronto podrán verla en esta historia, ya que tendrán apariciones muy importantes. 

 

Para que entiendan este oneshot les explico un poco, Mark König y Lucke König son uno de los tantos hijos del rey de la mafia, estos tuvieron varios encuentros carnales. El producto de este, Daryl. Pero Lucke decidió casarse con Denzel Hardy, y formar una familia con susodicho. 

 

Mark se caso con Rick Steel, quien crió a Daryl como suyo. Tuvo con Rick a Lenore Steel y Caín Steel. 

 

Nadie sabia del pasado de Mark y Lucke ya que estos rompieron cualquier tipo de comunicación, Mark quería vivir una vida normal sin ser perseguido por ser un König. Y Lucke dirigir su propio cartel de mafiosos. 

 

Lucke crió como su hija a Lana, la hija de Denzel. Aparte, adoptaron a otros muchachos ya, y finalmente la vida bendijo a la pareja con los trillizos Abel, Ben y Elaine.

 

 

Caín x Abel

 

Daryl x Elaine

 

 

*Nota: Hago mención de un apellido, el cual tal vez se utilice para una historia mas que tengo en mente, quien sabe*

 

Notas del capitulo:

Espero les entretenga! <3

Dejen review si gustan nwn 

¿Un propósito para vivir? Nos aferramos a la idea que sin un objetivo, la vida de uno no tendría sentido. Desde ser un gran empresario, a tener una familia. Cada quien elige por quien, o porque vivir. Tan dependientes de eso, pero es imposible no hacerlo. Y si se les quita ese propósito.. Que “Dios” se apiade de las locuras del ser humano. Porque… Este es un mundo desquiciado.




La terrible llovizna, la oscuridad de la carretera, el olor a tierra mojada. Dos autos parados en medio de la carretera. Con las luces prendidas. Separados por metros. El de adelante, tiene dos llantas ponchadas. La sangre escurriendo por el pavimento, llevada por el agua. El cañón apuntando al joven que yace en el suelo, molido a golpes. La mirada perdida hacía el cielo. El dedo en el gatillo, listo para terminar con el dolor de cabeza llamado Caín Steel. Ya está grande para estas tonterías.



—      ¡Basta!    -Pero enfrente del moribundo rubio, se pone alguien para defenderlo. El doncel que desborda belleza pura. Que atrae a varios con solo un pestañeo. Abel Hardy. Su apariencia androgina va muy bien con su condición como procreador.



Caín intenta hablar, pero solo balbucea meros sonidos sin sentido. «Tu.. ¿Lucharás por mi?» ¿Que tan lejos está dispuesto a llegar por Abel?



El androgino doncel y sus grandes ojos turquesa, retadores. Por primera vez está enfrentando a su padre. Las tres personas, empapadas por la llovizna. El señor Hardy mira desaprobatoriamente a su hijo. Esas gemas aceitunadas con un toque de miel, desbordan ira y estrés.



—     Abel..  -Frunce el ceño, fastidiado. Arruino su traje favorito por andar con estúpidas persecuciones solo por el berrinche de su hijo. Está salpicado de la sangre del inmundo, incluso del rostro, y mojado por la lluvia.-  Hazte a un lado.



—     No.   -Ese rotundo no ¿Desde cuando su pequeño es tan desobediente? ¿Porque no le deja de mirar como si le odiara?



—    ¡No te pregunte  -Levanto la voz, frunciendo el ceño.- es una maldita orden!



—    Si quieres asesinar a Caín..  -Agarra su vientre, con ambas manos. La mirada fuera de orbita del capo.-  Antes tendrás que quitar dos vidas.



El brillo en los hinchados ojos del moribundo muchacho, su mundo da vueltas. Siente mucho frío y dolor.. y su cuerpo tiembla un poco. ¿Acaso escucho bien? ¿Realmente oyó lo que cree?



Al instante, el rostro de Lucke Hardy se torna enfadado, rojo de la ira. Incluso las venas se le resaltan en el cuello y en la frente.  Abel permanece firme, sin demostrar una gota de miedo.



—     ¡¿COMO CARAJOS PUDISTE?!  -De alguna manera.. Siente que la vida le está cobrando sus errores del pasado. Su sangre, haciendo lo que él hizo.-   ¡¡ES TU MALDITO PRIMO!!



—    Y el hijo de tu hermano.   -Responde tajante. Lucke consternado, le está hachando todo en cara.-  Hermano con el cual tuviste un hijo, y por alguna ridícula razón, ese hijo llamado Daryl, conoció a mi hermana Elaine.



—     ¡Ella ya está en casa recapacitando! ¡Entiende que solo busco su bien, que salir con su maldito hermano no traería nada bueno! ¡Oh y tu Abel, embarazandote del hermano de Daryl, Caín es tu primo!



—    ¡Es tu culpa!  -Espetó.- ¡Tuya por no reconocer a Daryl! ¡Las mentiras no son eternas! ¿¡Jamás paso por tu mente que nos íbamos a cruzar?! ¡Vaya jugada que hizo el destino, y no me arrepiento de nada! ¡Amo con todo mi corazón a Caín, al igual que Elaine a Daryl! ¡Tu “entender” es estar bajo tus ordenes!



—     ¡No quiero que cometan los mismos errores que yo en el pasado, quiero que sean diferentes!  ¡Mejores personas!



—    Tu mas grande error fue dejar ir a tu hijo antes de que naciera.   -Mira por encima del hombro a Caín. Se siente destrozado por verlo en tal estado.-  Y yo no cometeré la tontería de abortar, aceptare los riesgos.



—     Las probabilidades de que salga con alguna deformación o discapacidad ¿Te importan poco? Podrías morir en el parto, definitivamente tu abortaras.  -Dice el barbudo azabache.



—    Tendré este hijo, padre. Quieras o no.  -Las largas hebras azabaches pegadas en su rostro por lo mojada de su cabellera. Sonríe con delicadeza, y entrecierra sus ojos.-  Definitivamente tu y yo somos tan diferentes.



—    ….    -Permanece callado. No le dará mas vueltas a ese asunto hasta llegar a casa. Porque lo importante ahora, es traer de vuelta a su hijo.-   Tu madre está muy preocupada en casa, es hora de volver, Abel.



—    ¿Por..Porque..   -Lágrimas escurriendo sobre sus mejillas, mezclándose con las gotas de lluvia.-  no tengo.. permitido ser feliz?



—    ….    -Cierra los ojos, realmente le duele ver llorar a su adoración. Pero si el pudiera solo ver las cosas tal como los adultos lo hacen.



-Ab..Abel.. -En sus propios pensamientos, le fue difícil articular el nombre de su amado. Lucke Hardy, capo del cartel knight. Un temido y respetado mafioso, en las venas del hombre corre la sangre maldita de la familia König. Vaya suerte la suya al tenerlo como suegro.



Lucke mira con atención a Caín. El solo verle.. Sabe perfectamente que incluso su hermano Mark debió sentirlo al tenerlo todos los días junto a el por ser su madre. Sentir en el mocoso la pesada presencia de su difunto padre. Caín Steel.. Es la viva imagen del caído rey de la mafia, Ahren König. Y eso.. asusta demasiado. Porque no saben con exactitud en lo que piensa, o lo que se convertira. ¿Habrá heredado los problemas mentales de su abuelo, algo mas que la simple apariencia? No desea averiguarlo, y mucho menos que su hijo este cercas de el. Porque de ser totalmente como el rey..



«¡SOLO ME DEBES DE MIRAR A MI!». Recuerda el abuso que sufría el esposo de su padre. No quiere que su amado Abel sea otro Jess Dahmer. No lo soportaría. De solo pensar en eso, la sangre le hierve. Con paso firme y decidido camina hasta su hijo.



«¡Déjanos ser libres, queremos hacer nuestra vida lejos de ti!». Aquella vez que se le puso al brinco al rey, porque todas las veces que intentaban huir, siempre terminaban fallidas. Si para proteger a su hijo de lo que podría ser Caín, debe ser el villano...



—    ¡Suéltame!   -Aceptara con gusto.



No le cuesta mucho jalar del brazo al doncel. Y sin ejercer nada de fuerza. Lo lleva a rastras hasta el automóvil, abre la puerta, de un empujón lo mete, y al cerrar la puerta está instantáneamente se pone seguro. Los gritos desesperados de Abel. Golpea el vidrio con fuerza, pero es en vano.



—     ¡NO LO HAGAS, PADRE, TE PIDO POR DIOS QUE TE DETENGAS!  -Grita desde adentro, pero si progenitor ni le puede ver ni oír por el vidrio blindado y polarizado.



—    Es hora de terminar con esto..  -Se soba la mandíbula. Y aparta el cabello de su frente. Camina hasta el moribundo chico.



Y le observa detenidamente. El hijo de su hermano Mark, con el estúpido pintor Rick Steel. Entrecierra sus ojos, un poco de bolsas y ojeras por la edad. Verle..  Le trae bastantes recuerdos del pasado.  Abel desesperado por salir, por más fuerza que ejerza, le es imposible salir. El seguro está en todas las puertas. Lo que aumenta su ansiedad es que no puede ver nada por dentro.



Pero un sonido estruendoso lo detiene. El eco retumbando por el bosque, las aves saliendo de su nido, alborotadas y asustadas hacia el cielo.  El pobre doncel, temblando de sus labios al igual que su cuerpo. La primer gota, que recorre su mejilla, es seguida por otras. Gritando, histérico. Es como si estuviese en mute, la conmoción que sufre volvió lento su alrededor, aturdido.




Estaremos juntos..





¿no?

 

 

No ha pasado menos de un mes, en el restaurante italiano favorito de su esposo, disfruta una cena en familia, junto con los prometidos de sus respectivos hijos. Aunque claro faltan los demás engendros. Pero estos no pudieron asistir. Lucke Hardy, un maduro playboy. Casado con el gordito amo de casa, Denzel Hardy. Años de un feliz matrimonio. Toma la mano de su esposo, quien ya los años le está tomando factura. Denzel le lleva a Lucke años de diferencia. Y a pesar de su piel arrugada, Lucke le mira con amor y pasión. El patriarca dirige su mirada hacia el mayor de sus preciados trillizos, Abel. Su adoración. No muestra ninguna emoción, indiferencia es lo que reflejan sus gemas turquesa. Arreglado con un fino traje negro, y su largo cabello azabache agarrado en una coleta. De piel blanca y cejas delgadas. Alto, complexión delgada y tonificado. Frente del mayor, se encuentra la trilliza menor, Elaine. Una joven de buen cuerpo, viste un elegante vestido coral. Con un corte precioso en los hombros. No se parece en nada a sus trillizos. Pecosa al igual que su trillizo mayor, cejas pobladas, tez aperlada, grandes ojos turquesa. Cabellera rizada y azabache, con corte bob. Esponjosos labios bien humectados y un rubor natural en sus mejillas. Una delicia de mujer.



En otra silla, Ben, el trillizo del medio. Ningún parecido con sus hermanos. Corta cabellera rizada, cejas delgadas, piel blanca. Heredó los ojos de su padre. Si de por sí es muy apuesto, hoy se ve mucho mejor con ese traje gris que le queda a la medida.



—    Que lastima que no hayan podido asistir nuestros demás hermanos.  -Comentó Ben, quien sufre al tener a su lado a la insoportable mujer que se carga como prometida.



Laire es una joven muy torpe y despistada. Hija de uno de los importantes socios de Lucke. Una belleza pelirroja e inocente.



—    S-Si..  -Respondió con la mirada abajo y sonrojada.



—    Estoy feliz de verles, suegros.  -Con una radiante sonrisa, el prometido de Elaine. Apuesto, candente pero sobre todo un noble muchacho, Dimitri.



Compromiso arreglado por su tía abuela, la mujer que ha roto tabúes y estereotipos, Elektra Maclntosh. Es nieto de un buen amigo suyo, el prestigioso CEO Baltazar Bitterbuck. El, el hombre más importante del mundo, ella, la mujer.



Y al lado de Abel, el senador japonés Masahiro Nekota. Un hombre alto y robusto, de cuerpo escultural. Bastante apuesto. Sus hebras azabaches peinadas hacia atrás, y sus ojos rasgados de un negro tan profundo. Viste un traje azul petróleo que le hace ver bastante bien. La seguridad en el restaurante y el alrededor de este, es suficiente para evitar cualquier incidente.



—    Luce espectacular hoy señor Denzel.  -Hablo Nekota, tiene un encantador y grave, agradable al oído.



—    Bueno, si espectacular significa que pierdo cabello, los opacó a todos esta noche.  -Responde con su débil tono. Lucke le besa las manos.



—    Tiene razón Masahiro.   -Confíesa su marido, con ese brillo único en los ojos que solo tiene con el.



—    ¡Demasiado deslumbrante diría yo!  -Exclama Ben.-  ¡Debería casarme contigo!  -Pero recibe un taconazo en la pierna, por parte de su hermana Elaine.



—    Hhm..  -Laire se encoge de hombros, avergonzada. Sabe muy bien que Ben no quiere nada con ella, pero aun así duele el rechazo.



Está enterada que el azabache, tiene solo ojos para otro. Pero su padre y el señor Hardy ya tenían arreglado este compromiso desde que el y Ben eran unos críos.



—    Iré al baño.  -Comenta Abel, y apenas se va levantando, Nekota se incorpora, haciendo para atrás el asiento del doncel. Quien mira despectivamente al embajador.-  Gracias.  -Agradece de mala gana.



—    Te acompaño.  -Dijo, yendo detrás de Abel.



Dimitri toma la mano de Elaine, y le dedica una cálida sonrisa. Dimitri no está para nada mal, rubio de ojos azules. Cuerpo grande y fornido. El típico chico de ensueño con la radiante sonrisa. Pero..  «Mira hacia la cámara» prefiere aquel hombre flacucho pero de marcado cuerpo. Pálido como un muerto. Oh como extraña a Daryl. Les importo poco ser medio hermanos, y huyeron juntos. La felicidad les duró poco. De solo recordar, como le apuntaban con aquel cañón.. Ahí entendió, los lejos que puede llegar su padre. No le importaría matar a su propio hijo, pero por piedad, le dejo ir.



Abel se miro en el espejo del baño el pequeño bulto en su vientre, no se nota por la ropa. Ya va para dos meses de embarazo. Su terquedad logro ganar contra de su padre. Apenas sale del baño, encuentra a Masahiro recargado en la pared, cruzado de brazos, esperándolo. Estuvo a punto de pasarlo de largo, pero el japonés le para en seco, solo con una pregunta.



—    ¿Que prefieres que se de como platillo, comida occidental u oriental?  -Realmente le frustra. Abel voltea, y con una linda sonrisa responde:



—    Lo que tu gustes, querido.  -Aun si su padre le hablara sobre el embarazo de este, Masahiro acepto seguir con el compromiso. No piensa soltarlo tan fácil. Quiere criar al niño como suyo.




[....]



El pitido constante de la máquina, marcando su ritmo cardíaco. Es regular. Saturas, y el rostro desinflado. Pero con algunos hematomas aun presentes al igual que el derrame en sus ojos. Le fue retirada una bala en la pierna. Poco a poco va mejorando. Abriendo sus ojos, despacio. Sintiendo de golpe todo el pesar en su cuerpo. Lo primero que ve, es al hombre recostado en la orilla de la camilla. Su madre..  Afuera, por la cortina mal cerrada, puede ver a su padre junto a su hermana Lenore. Daryl.. El debe estar trabajando. Intenta levantarse, pero el dolor se lo impide. El quejido levanta al mayor.



—    Mh..  -Soba su ojo. Y le dedica una bella sonrisa a su hijo.- ¿Como despertaste? -Pregunta amistosamente. Pero la respuesta que recibe, ni siquiera responde su duda. Solo lo asusta.



—     ¿DÓNDE ESTÁ ABEL?  -Exigió saber con demencia. Sombría mirada y ojos de maníaco. La seriedad que muestra, solo le hace ver como un verdadero lunático. El verle así.. Es como ver el reflejo de su padre.




¿Hasta donde estaría dispuesto a llegar por el doncel? Cree que eso está muy claro..

 

y lo demostrará.

Notas finales:

Nos leemos!<3


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