Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Quelqu'un M'a Dit por MiShinChang

[Reviews - 0]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola holaaaaaa

Vengo con este FF que vengo publicando en Wattpad y aprovecho a publicarlo aqui ahora porque es mas bien fluff lol Pero bueno, aqui estamos ahora!

**BangTan no me pertenece. Solo se pertenecen a ellos mismos, a sus familias y a Big Hit Ent. Solo uso sus nombres con fin de explotar mi imaginación de fangirl.

 A Leer!

Min YoonGi levantó la mirada de la mesa para posarla en su amigo y líder. Tamborileaba con los dedos intentando verse tranquilo pero mentiría si dijera que no estaba un poco nervioso.

-Entonces…

NamJoon suspiró y se cruzó de brazos.

-Hyung, realmente no tengo problemas con eso –Dijo –Al menos no personalmente.

El mayor relajó los hombros. Molestaba al chico por ser tan torpe pero le alegraba la aprobación de su respuesta.

-Vaya, gracias. –Soltó. Sabía que a Jimin también le preocupaba lo que Kim opinara sobre el asunto; se pondría realmente feliz…

NamJoon se despeinó el cabello castaño con la mano –No puedo decir que no me sorprende, de todas formas.

El rubio resopló con una sonrisa. –Supongo que entiendo lo que dices.

-Pero, si se puede saber, claro –El líder se inclinó sobre la mesa, bajando la voz de paso. YoonGi sabía que no los iban a escuchar por las paredes a prueba de sonido del estudio, pero lo dejó ser -¿Cómo sucedió?

-¿De verdad quieres escuchar como Jimin y yo terminamos en la cama? -Los ojos del menor se abrieron con sorpresa. El mayor soltó una carcajada como pocas veces lo hacía. –Olvídalo, eso no ha pasado. Borra esa imagen de tu mente, pequeño degenerado.

-Pequeño dice… -Masculló enfurruñado NamJoon. –Hablo en serio ¿Cómo puede ser posible?

YoonGi se acomodó en su silla. –Pues…

 

*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*

 

**Capítulo 1**

 

Min YoonGi frunció el ceño. Esos idiotas, hacían demasiado ruido y no le dejaban dormir. Era su maldito día de descanso después de hacer las preparaciones para el próximo come back y planeaba dormir esta vida y la otra. Cuando se tumbó en su cama la noche anterior, podía jurar que escuchaba los colores, habilidad que presumía Taehyung (Claro que también tendía a exagerar)

Se levantó, sacudiéndose el cabello rubio con fastidio. Si su reloj no le mentía había dormido poco más de doce horas. Rayos, se sentía como si hubiera dormido solo unos minutos, el cuerpo le pesaba y le martillaba la cabeza como una desagradable resaca.

-Ellos son como una maldita resaca –Masculló. Salió de la habitación compartida con Jin, pasando por el pasillo hasta la sala, fuente del infernal estruendo.

-Eres un tramposo, Kookie.

-Soy mejor que tu sin hacer trampa. Deja de distraerme, Tae.

¿Tenían que gritar tanto? El rubio asomó su cara de pocos amigos a la sala. Los dos alborotadores frente a la tele, jugando Just Dance, Jimin los miraba desde el sofá mientras se atragantaba con caramelos.

-¿Podrán callarse, par de idiotas? –YoonGi pocas veces alzaba la voz, pero se sentía realmente irritado. Los menores se congelaron en su lugar, mirándolo con miedo. Jimin, detrás de ellos, soltó una carcajada, golpeando el sofá con una mano y con la otra ocultando su rostro, con las mejillas coloradas por la risa.

-YoonGi, no tienes por qué gritar –Le reprendió suavemente SeokJin desde la cocina –Y Jimin, no es gracioso.

-Lo es para mí –Dijo, encogiéndose de hombros, sin perder la sonrisa.

-Ya decía yo que sentía tu aura maligna cerca –Habló HoSeok detrás del rubio –Déjalos divertirse, hyung.

-Su única diversión es joderme la existencia –Respondió, poniendo los ojos en blanco. Jimin volvió a reír, parecía pasárselo a lo grande. Al menos hasta que el maknae lo golpeó disimuladamente en el brazo.

YoonGi paseó la mirada y al notar de nuevo el ansiado silencio, dio media vuelta y con las mismas volvió a encerrarse.

No sería persona hasta no tener al menos veinte horas más de sueño.

 

*****

 

Abrió los ojos de nuevo. Jo-der. Mataría a esos mocosos por haberle espantado el sueño.

Le había dado no sabía cuantas vueltas a la cama y ya estaba harto. Sería tal vez la primera vez en su vida que sufría de insomnio. SeokJin dormía en su cama con respiración apenas audible. Se levantó, procurando no hacer ruido y salió al pasillo.

Se sorprendió al ver la tele encendida. Miró el reloj y ya pasaban las dos de la madrugada.

¿Pero quién…?

La cabellera naranja de Jimin se notaba aun estando envuelto en cobijas, sentado en el piso.

-Pareces un kimbap –Dijo sin darse cuenta. El menor dio un respingo al escuchar la voz entre la oscuridad y luego le dio una sonrisa.

-Hola, hyung.

-¿Qué haces, Jiminnie?

Jimin soltó las sábanas que lo envolvían y se encogió de hombros.

-No podía dormir.

El rapero se acercó y se sentó a su lado. El menor aún tenía una bolsa de dulces con él  y comía sin parar.

-Jimin, ¿Qué estas comiendo?

Le tendió la bolsa llena de chocolates al rubio descuidadamente.

-Están deliciosos –Respondió –Ya sé por qué a Hobi hyung le gustan tanto.

-Jimin, has comido chocolate toda la tarde, por eso no puedes dormir –Espetó, ese chico era demasiado descuidado.

-Oh –Fue lo único que dijo. Volvió a sonreír, encogiéndose de hombros otra vez.

-Deberías descansar – Intentó sonar enojado, pero de verdad no se sentía de ánimo para regañarlo.

-La verdad, me siento realmente alegre hoy.

YoonGi bufó, pensando que sentía algo completamente opuesto. Jimin y él eran casi como el Ying y el Yang.

-Sabes, hyung –Llamó el menor, pasando una mano por su cabello. Bendita manía. –He estado pensando…

-Eso sí que es una sorpresa –Interrumpió. Sonrió burlón ante el mohín del menor.

-Cruel.

-Gracias.

Jimin se cruzó de brazos, enfurruñado. El rubio amplió su sonrisa.

-Bromeaba, enano.

-Somos del mismo tamaño –Soltó indignado –Es solo un centímetro, es como comparar nueces…

-Sigue siendo un centímetro que no tienes, pequeño –Dijo, enfatizando lo último. Molestar a Jimin era demasiado entretenido, tendría que anotarlo como uno de sus hobbies. Rio suavemente, aumentando el enojo del menor.

-Y yo pensando que usted se veía realmente genial –Suspiró. El rubio lo despeinó, divertido.

-Tu muy genial hyung te lo agradece. –Jimin torció una sonrisa, dejándose hacer.

De alguna manera, YoonGi se había contagiado del buen humor del menor.

 

*****

 

-¿Quién se acabó mis chocolates?

YoonGi levantó la mirada de su sándwich de pollo para ver a HoSeok llegar a la sala pareciendo recién salido de un manicomio.

-Eran mis favoritos –Lloriqueó el más alto, dramáticamente. – ¿Quién puede comerse una bolsa de cien bombones de chocolate en un día?

-Tengo la respuesta –Habló NamJoon desde el pasillo –Jimin tiene indigestión.

-Hey –Gritó Taehyung tras él –Todo lo que diga será utilizado en su contra.

-¿De qué hablas? –Preguntó el líder, confundido.

-Soy el detective Tae, siguiendo la pista del misterio de los chocolates de Hobi hyung.

-Pero si no es un misterio.

-Lo es hasta que se demuestre lo contrario.

YoonGi miró a HoSeok, quien parecía haber olvidado el asunto con la nueva faceta de su rarito amigo. Nada de lo que decía Taehyung concordaba normalmente, menos ahora con ínfulas extrañas de Sherlock. El rubio negó con la cabeza. Estaban todos locos.

-¿Qué más hay que saber? –Insistió NamJoon.

-Elemental, mi querido hyung –Exclamó Tae, acomodó su mentón entre su índice y el pulgar e hizo una mueca graciosa.

-¿Estás pensando o te estás cagando? –Soltó el rubio rapero. Los demás lo miraron como si le hubiera salido otra cabeza. Bueno, HoSeok solo se reía como un idiota, pero eso venía de fábrica.

-Claro que no, hyung. –Protestó infantilmente el menor. Volvió a su pose y chasqueó los dedos –Puedo deducir que Jimin se comió los chocolates, se puso hiperactivo y comenzó a hacer ejercicio para quemar energía y los movimientos después de comer le dieron indigestión.

-Elaborado –Felicitó el castaño líder –Pero ya lo sabía.

-¿Cómo? –Inquirió HoSeok.

-Jimin nos acaba de decir eso, a los dos.

-No sé de qué hablas, todo lo deduje yo con mi gran poder mental –Se jactó Taehyung.

YoonGi simplemente no podía creer a Kim Taehyung. Era increíble y no precisamente en el buen sentido; después de años de convivir, no estaba ni cerca de comprender como funcionaba su mente… si es que funcionaba como debía. Los dejó en la sala y se acercó a la habitación de la mandarina indispuesta. Torció una sonrisa, el cabello de Jimin realmente le recordaba esa fruta y siempre olía a cítricos. Le gustaba ese olor, podría usar su acondicionador la próxima vez.

En ese momento vio al mayor del grupo salir de la habitación, seguido por el maknae.

-Yoon ¿Podrías quedarte con Jiminnie? –Pidió SeokJin, palmándose los bolsillos. –Rayos, JungKook, ¿Tienes efectivo? –El menor asintió y sin decir nada más, siguió a la sala –Iré a comprar algo de medicina para Jimin, volveremos pronto –Le palmeó el brazo descuidadamente y salió.

-Es una maldita casa de chiflados –Se dijo, pasando a la habitación compartida de Jimin.

El menor estaba cubierto por las sábanas pero notaba su cabellera naranja esparcida sobre el colchón.

-Hyung.

El rubio alzó una ceja ¿Cómo sabía que estaba ahí?

-No me siento bien, Jin hyung.

-Jin fue a comprar algo para que se te pase, aguanta un poco.

Jimin, lentamente, asomó su rostro ahora pálido. Asintió con la cabeza, mirando a YoonGi con vergüenza.

-Lo siento, YoonGi hyung.

-¿Qué cosa?

-Debí hacerle caso y dejar los bombones –Cerró los ojos e hizo una mueca de dolor –Lo siento por desobedecer, hyung.

No pudo evitar pensar lo pequeño e indefenso que se veía el menor entonces. Agregarle culpa solo sería peor y un miembro enfermo tan próximo a empezar actividades no era precisamente una buena idea.

 -Creo que esto es suficiente castigo –Dijo, encogiéndose de hombros. Se acercó a la cama y se sentó en ella, haciendo el cuerpo de Jimin hundirse más en la cama, pero no abrió los ojos. Notó que estaba sudando bastante y el aire acondicionado estaba encendido. Calor era lo último que podían sentir en el departamento.

-Hey, Park –Llamó, pero no recibió respuesta. –Park Jimin, te estoy hablando –Lo movió un poco, pero éste no se inmutó. YoonGi jamás lo admitiría, pero quería a esa manada de pendejos y no quería que nada malo le pasara a ninguno de ellos. No mientras el pudiera evitarlo.

Levantó la sábana, encontrando el débil cuerpo del menor encogido en posición fetal, respirando con fuerza y demasiado rápido, sudando lo suficiente como para empapar su camiseta.

-Mierda, Jimin.

El llamado apenas abrió los ojos y lo alejó con la mano. Apenas arrimó la cabeza al borde de la cama cuando las arcadas lo atacaron.

-Joder ¿Estás bien? –Maldijo por lo bajo al ver al menor devolviendo hasta la primera papilla. Se acomodó en la cama y le masajeó la espalda suavemente, casi con miedo a tocarlo o empeorar el asunto. Lo sintió temblar bajo su tacto. –Esos bombones estaban pasados o qué coño pasa –Gritó frustrado, cuando el cuerpo de Jimin se relajó del todo.

Se había desmayado.

 

*****

 

Jimin abrió los ojos, agitado, como si lo hubieran despertado de repente. Quiso levantarse pero el mareo no lo dejó siquiera intentarlo. La habitación estaba a oscuras, estaba solo, olía fuertemente a detergente e hizo una mueca. Al menos se sentía considerablemente mejor. Tontos chocolates, no volvería a hacerle caso a JungKook y robar los chocolates de HoSeok.

-SeokJin hyung –Intentó llamar pero su voz se escuchaba muy débil. No tenía fuerzas ni para estirarse y tomar el teléfono.

Volvió a echarse en la cama, cerrando los ojos. Lo último que podía recordar era a YoonGi entrando por la puerta mientras él se sentía morir.

-Jimin ¿Estás despierto?

Reconoció la voz del mayor y lo miró, el rubio hizo lo mismo a la par que se acercaba a la cama.

-YoonGi hyung, lo siento.

-Ya, olvídalo. –Le restó importancia encogiéndose de hombros – ¿Te sientes mejor?

-Sí, algo.

El mayor se estiró apenas un poco para peinarle el enmarañado cabello naranja con los dedos.

-Toma tus medicinas, come adecuadamente y descansa.

Jimin le regaló una débil pero brillante sonrisa.

-Gracias, hyung.

El rubio dejó su cabello en paz y se acercó a la puerta con intención de salir peor antes de hacerlo se giró a mirar de nuevo al menor.

-Por cierto –Dijo en tono burlón –Los chocolates te quedan prohibidos hasta nueva orden.

-¡YoonGi hyung!

Notas finales:

El prólogo no daba pa subirlo y me toco hacer esto, matenme

Gracias a los que aun leen esta bazofia :'v Loj amo

<3


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).