Entró a la llamativa discoteca. Jamás había estado en un lugar así, por lo tanto le llamaba la atención desde los sillones afelpados rojos hasta los hombres bailando semidesnudos, hombres muy guapos debía decir.
Pues si, Jung HoSeok estaba en una discoteca gay, luego de una discusión con su novio.
La frase "quizás no debería haber entrado", sonaba en su mente ya que apenas puso un pie en el lugar captó la mirada de muchos hombres fornidos con grandes músculos, anchos hombros y de mirada matadora, de ese tipo de hombre que si estás con ellos una noche, apenas y sobrevives, hombres que comparados con su novio, YoonGi, eran mucho más corpulentos y que con solo un golpe lo dejarían en el hospital por meses, así que para evitarle problemas a su novio se alejó de cada uno de esos hombres.
Podían estar enojados todo lo que quisieran pero a YoonGi no se le quitaba lo celoso con nada, así que si se llegaba a enterar de que el muchacho estaba solo en un lugar así, lo iría a sacar con todo y sillón afelpado rojo.
Luego el chico pensó en la discusión con su novio y llego a la conclusión que no tenía porque respetarlo ya que Yoongi no lo había respetado. Su novio no se merecía nada, claro que no lo merecía, ni siquiera se merecía ser llamado novio.
Tal vez al resto de hombres les llamó la atención que un asiático estuviera en una discoteca gay o quizás fue que HoSeok era realmente guapo, la cuál era más probable ya que cuando observo el lugar se dio cuenta que habían unos cuantos asiáticos aparte de el.
HoSeok todavía no sabía el motivo por el cual entró, fue pura coincidencia que estuviera pasando por fuera del lugar, ya que venía de su cena de compromiso, la cual no se pudo llevar a cabo por culpa de su novio, novio que lo había engañado con el primero que se le cruzó, primero que se le cruzó el cuál era su mejor amigo.
HoSeok siguió maldiciendo internamente a YoonGi, estaba seguro que no iba a llorar, ya que no era la primera vez que le hacía eso, no era la primera vez pero si la última, o eso era lo que el chico se había prometido.
El joven muchacho solo pensaba en su desgracia, muchos chicos se le habían acercado para invitarle a bailar o a tener sexo en el asiento trasero de algún auto pero como HoSeok estaba tan deprimido ni siquiera los había mirado, a excepción de uno el cuál era muy escandaloso, estaba bailando en uno de los caños de pole dance con movimientos muy sensuales mientras muchos hombres lo miraban incluyendo a HoSeok el cual dejo de pensar en lo miserable que era su relación apenas lo vio, era el único chico que le había llamado la atención, tal vez era porque se notaba que era asiático o por sus sexys movimientos lo cual era probable ya que HoSeok no quitaba la mirada de su cuerpo, además el joven bailarín no había dejado de mirarle desde hace un buen tiempo, llevaba una camisa blanca ceñida que hacía lucir muy bien su pecho tonificado, con una corbata negra junto con un pantalón elegante negro se podía notar que el muchacho más de veinte años no tenía, HoSeok se sentía un poco mal porque el era un hombre de veintisiete años mirando a un pequeño, pequeño que estaba sonriendo en su dirección bastante provocativo.
El chico al notar la mirada que había estado esperando con tantas ansias se fue acercando lentamente mientras se sacaba sensualmente la corbata, TaeHyung no estaba en sus cinco sentido, había tomado demasiado porque lo único que quería era olvidar a su ex novio así que le pareció perfecto el hombre que estaba sentado en uno de los sillones de felpa, ya que se notaba que necesitaba compañía y además que le habían roto el corazón.
Y dos corazones rotos se pueden armar uno al otro fácilmente o se pueden quemar en las llamas del sexo, y TaeHyung quería lo último, quería que ese hombre lo hiciera gritar hasta quedar sin voz, quizás no estaba pensando coherentemente gracias al alcohol pero de verdad que lo había prendido en todos los sentidos.
Una vez que estuvo enfrente de él, le fue inevitable mirarlo descaradamente, haciendo que el mayor se sonrojara.
—¿Quieres compañía?—preguntó un coqueto TaeHyung para luego ni siquiera esperar la respuesta y sentarse al lado del hombre.
—De todas formas ya me acompañaste—dijo HoSeok pero para TaeHyung no fue audible porque la música empezó a sonar nuevamente—
—¿Como te llamas?—preguntó elevando la voz para que HoSeok pudiera escucharlo—
—Me llamo Jung HoSeok—dijo extendiendo su mano—Un gusto.
HoSeok siempre se había destacado por su buena educación que estuviera en una discoteca gay con un chico mono a su lado no implicaba que fuera cortes.
—Kim TaeHyung—contestó el muchacho tomando la mano del mayor—¿Y que te trae por aquí?—preguntó una vez que se soltaron la mano—
—Bueno pues venía pasando y me llamo la atención...—Intentó explicar HoSeok moviendo las manos alocadamente haciendo que TaeHyung soltara pequeñas risitas—
—No me refería a la discoteca—Habló interrumpiendo la charla y explicación del mayor—Me refería a qué haces aquí en Estados Unidos, se nota que eres asiático ¿De que país eres?— TaeHyung podía ser un poco curioso respecto a las personas que conocía, ya que él creía que podría estar en peligro si no sabía nada de su acompañante—
—Soy de Corea, Corea del Sur—Explicó y la mirada de Taehyung se iluminó—Lo que me trae aquí o lo que me traía aquí era mi novio, ex novio debería llamarlo—HoSeok luego de hablar se encoge de hombros y dirigir su mirada a TaeHyung el cual se veía realmente tierno prestándole atención y sonriéndole.
—¿Y tú de dónde eres?.
—También soy de Corea, Corea del Sur—habló TaeHyung imitando las palabras que el mayor hace un rato había dicho—
—Me pareces un chico muy mono pero creo que tengo que irme—Habló HoSeok levantándose del sillón—
—No puedes irte quédate un rato más—suplicó TaeHyung agarrando al mayor de la chaqueta —
—Pero tengo cosas qué haces mañana temprano—Suspiró mientras intentaba alejar la mano de TaeHyung el cual se aferraba más y más a su chaqueta—
—Por favor—TaeHyung puso su mejor cara de perrito abandonado la cual sirvió a la perfección ya que HoSeok no tuvo más opción que quedarse un momento más junto con el joven de bella sonrisa—
—Bueno, pero solo unos minutos— suspiró cansado para luego volver a posicionarse en el lugar en el que hace un rato estaba—
Ambos chicos se miraron por poco tiempo, los minutos que HoSeok había dicho que se quedaría se habían vuelto horas en la mente de TaeHyung, no necesitaban palabras en ese instante, lo único que sentían era que se conocían desde hace mucho, todos y cada uno de los pensamientos lujuriosos de TaeHyung se fueron y quedaron sentimientos y pensamientos de paz, HoSeok le transmitía paz con solo mirarlo, se empezó a preguntar ¿cómo sería estar en sus brazos? ¿Darán tanta paz como sus ojos? ¿Que se sentirá besarlo? ¿Será tan dulce como su sonrisa?, TaeHyung no pudo más, la curiosidad lo estaba matando y poco a poco se fue acercando al hombre, apenas y se veían por la poca luz que tenía la discoteca, estaban tan cerca y tan lejos a la vez, al comienzo HoSeok estaba preocupado por la gente que estaba en la discoteca, alguno podría conocer a YoonGi pero se fue calmando cuando la mano de Taehyung se posicionó en su muslo, estaba tan nervioso, jamás había besado a alguien que no fuera YoonGi y este niño venía, y le provocaba así.
TaeHyung junto sus labios, HoSeok cerró los ojos, y se dejo llevar. Se dejo llevar por un niño que lo único que hizo fue darle un inocente y corto beso para luego separarse, y tapar su cara.
La cara de HoSeok desde lejos mostraba decepción, el quería más que un pequeño besito, quería un beso más caluroso que lo hiciera perder el control, pero al parecer TaeHyung era un niño en todo el sentido de la palabra o solo era que estaba muy ebrio como para ver que su mayor quería mucho más.
—¿Te ha gustado Oppa?—preguntó el pequeño haciendo que HoSeok se sorprendiera ¿Lo había llamado Oppa?.
—¿O...Oppa?—Se preguntó HoSeok–Algo me dice que sobrio no eres tan cariñoso y tierno.
—¿Quieres bailar conmigo?—preguntó el pequeño ignorando el comentarío que había hecho su mayor para después tomar su mano y dirigirlo hacia la pista—
Una canción lenta empezó a sonar y las manos de HoSeok se posesionaron en la cintura de TaeHyung mientras que el apoyaba las manos en sus hombros.
No hacía falta saber el nombre de la canción, las elegantes y gloriosas voces de las cantantes describían perfectamente a las personas que estaban en ese lugar, por gente que no sabía respetar, ellos tenían su amor secreto, la canción dulce y delicada sonaba por los parlantes haciendo que todos y cada uno de los homosexuales que se encontraban ahí se sintieran libres, aunque en realidad no era así, el mundo, la gente no quería liberarlos, la canción del amor secreto, era su única salvación era su única liberación.
Ambos chicos se miraron y sonrieron, HoSeok se empezó a poner sentimental esa canción lo hacía sentir así mientras que TaeHyung en medio de su borrachera se imaginaba un mundo mejor, un mundo en donde sean libres, un mundo de amor, un mundo de paz.
El mayor apoyó su mentón en la frente de TaeHyung mientras se movían lentamente al ritmo de la canción pero un pequeño percance le surgió, necesitaba ir al baño urgentemente así que se alejó un poco de TaeHyung el cual sonrió para luego susúrrale al oído:
—Voy al baño cariño, ya vuelvo—Lo soltó y sin esperar respuesta empezó a caminar entre la gente buscando el baño. Baño que encontró gracias a un letrero gigante que lo señalaba, así que corrió hacia el y una vez que estuvo dentro, orino y luego se dirigió al lavamanos en donde se miró al espejo y arreglo un poco después lavo sus manos y presto atención a lo que estaba pasando afuera, la canción todavía no terminaba "Menos mal" pensó ya que quería seguir bailando esa bonita canción con TaeHyung pero unos fuertes gritos se empezaron a escuchar, Asustándolo un poco así que salió rápidamente para buscarlo y se encontró con mucha gente corriendo hacia la salida de emergencia, el sin entender corrió hacia la pista donde hacía dejado a TaeHyung el cual todavía se encontraba ahí,se acercó a él e intentó pregúntale qué pasaba pero unos disparos se empezaron a escuchar y la gente empezó a gritar mucho más, HoSeok tomó la mano de TaeHyung el cual se encontraba en una especie de Shook y empezó a correr nuevamente hacia el baño, esquivando a una que otra persona que se interponía en su camino, una vez que estuvieron adentro HoSeok abrazó al pequeño el cual se encontraba tiritando de miedo.
—¿Que sucedió?—preguntó unos minutos después—
—No lo sé, estaba esperándote en la pista cuando un hombre entró y empezó a amenazar con que nos mataría a todos, algunas personas lo intentaron enfrentar pero el les disparo en la cabeza.
HoSeok iba a contestar pero su teléfono lo impidió, se asusto demasiado porque tu teléfono era muy bullicioso y tenía miedo de que esa persona los descubriera porque al parecer todavía no terminaba con su matanza porque se seguían escuchando disparos y gritos asustando mucho más a TaeHyung.
HoSeok sin ver quién era contesto y para su sorpresa era el infiel, como lo hacía apodado hacía unas horas.
—Por favor perdóname, yo te amo—Se escucho entrecortado confundiendo un poco a HoSeok—
De repente se sintió que alguien le disparaba a la chapa de la puerta, HoSeok bajo el teléfono y se movió rápidamente para posicionarse en frente de TaeHyung.
Por algún motivo tenía la necesidad de protegerlo, por algún motivo no sentía miedo, ya que presentía todo lo que les estaba sucediendo.
Por el teléfono se podía escuchar la voz de YoonGi preguntado qué pasaba, y amenazando con ir a buscarlo a donde estuviera.
—Pero miren que tenemos aquí—Habló la persona detrás de la máscara—
HoSeok no contestó y TaeHyung tampoco, ya que el sabía que si lo hacía algo malo pasaría.
—Al parecer les comieron la legua los ratones—Está vez dijo abriendo la puerta del todo para pasar y colocarse en frente de HoSeok enfrentándolo—
HoSeok no titubeó, ya que consideraba a la persona que estaba en frente de el, un Cobarde, no era capaz de mostrar su cara y aparte había entrado a asesinar a un lugar donde la gente era inocente y estaba indefensa.
—No te vengas a hacer el malo conmigo, niñito—volvió a hablar pero esta vez dirigió su arma a la cabeza de HoSeok, el cual no se asusto, ya que el sentía que estaba haciendo lo correcto, TaeHyung se paró de su lugar y tomó la mano con el arma para colocarla justo entremedio de sus cejas.
—¡Dispara!—Gritó asustando un poco a HoSeok—
El enmascarado levando su otra mano la cual también tenía un arma y la colocó entremedio de las cejas de HoSeok el cual no se lo impidió, algo le decía que ese sería su final, y ese algo no era YoonGi el cual todavía estaba gritando por el teléfono solo que esta vez estaba llorando porque había visto las noticias de lo que estaba pasando y porque sabía que HoSeok se encontraba en esa discoteca, un amigo le había llamado para decirle.
Unas manchas de sangre en forma de corazón quedaron en la pared una vez que el hombre disparo, ambos muchachos cayeron, el último deseo de HoSeok fue conocer a TaeHyung en otra vida y el último deseo de Taehyung fue conocer y querer a HoSeok en otra vida.
El hombre soltó una carcajada mientras veía caer a los chicos, carcajada que fue interrumpida por cinco balas que se incrustaron en su espalda. Había llegado la policía, algo tarde para aquellos dos amantes y cuarenta y siete personas que habían muerto.
Su último aliento dio nacimiento a dos muchachos, uno nació en tierras marchitas y el otro en tierras con bellezas puras, en las tierras baldías crecieron girasoles, mientras que en otras hubo una sequía inimaginable.
Y ese lugar era HUIMANG.