Chapter Eight
Celebrar los momentos y fechas que nos regalan y regresan gratos recuerdos, nos brindan distraernos y olvidarnos de la rutina diaria, nos quitamos cargas que traemos y las dejamos de lado por unas horas para ser felices unas cuantas horas y al final del dia quedarnos con esos nuevos recuerdos. Los eventos que vivimos con mucha alegría, son los que a pesar del paso de los años, nunca se van, siempre estan ahi en el alma, dándonos un poco de paz en medio de los que este aconteciendo en ese momento. Son recuerdos vivos que nunca se van a olvidar.
Ese dia Damon había despertado de buenas, en primera era sábado y eso significaba que no trabajaba ese dia, la segunda razón era que hoy haría la fiesta de James de cumpleaños. Ya lo tenía todo preparado con Erick y Sam. Los papás de Ben llevarian a su nieto al cine, ese tiempo lo usarían para decorar su casa y todo lo que conllevaba hacer una fiesta infantil.
-James es hora de levantarse - su hijo gruñó pegándose más y acurrucados en su padre, no era justo según la lógica infantil despertar antes de mediodía - recuerda que los abuelos vendrán por ti para ver una película.
-tienes razon papi, pero solo dejame dormir cinco minutos más quieres - el castaño se quedo viendo a su hijo, mirando las facciones relajadas del niño, inevitablemente se estaba pareciendo mucho a Ben, lo tenía en los genes después de todo -deja de mirarme, me siento incomodo.
-los iento James, es que al parecer tienes algo en la nariz - invento tocándole la nariz con sus dedos - me iré levantando, para arreglar tu ropa.
El niño asintió tomando las cobijas y tapándose hasta la cabeza, Damon abandonó la cama estirándose un poco, se dirigió al gran armario que tenía y tomó el conjunto de ropa nueva que usaria James y lo llevo al baño.
Bajo a la cocina a tomar un poco de agua como en todas la mañanas era costumbre y volvió a subir, tenia que despertar a es niño ya. Su hijo renegó y pataleo para no levantarse de la cama, hasta que su padre le hizo cosquillas y tuvo que huir corriendo y cerrando la puerta del baño. Damon conocía bastante a su hijo.
El castaño se dedicó por mientras a preparar algunas cosas pequeñas estando al pendiente de cuando su hijo saliera de asearse, no queria que por ninguna razón descubriera algo y se echara a perder su fiesta y la emoción.
Después de un rato de estar ocupado en los quehaceres, subió escuchando ruido y la voz del niño tararear una canción infantil. El castaño entró en la habitación viendo a James peinarse, desde donde estaba podía oler el perfume que su esposo usaba y del que se había adueñado su hijo .
-oye deberias de ponerte un poquito menos de loción, puedo sentirla a kilómetros de aquí - el niño sonrió pasándose el peine por su pelo perfeccionando su peinado - vamos a darte de desayunar, ya casi llegan por ti.
-perfecto, ya termine - James se miró en el espejo y camino a la cama hasta recoger su chaqueta - ¿porque no nos acompañas papi?
-no puedo James, estaré algo ocupado, pero tal vez mañana que es tu cumpleaños te llevo a alguna parte - un pretexto de improviso, Damon se arregló un mechón rebelde que se le iba a la frente - hoy estaré en casa con tio Sam.
-bueno igual te voy a extrañar en el cine - los 2 bajaron dirigiéndose al comedor, el mayor le sirvió unos panqueques que ya tenia hechos - esto se ve rico ¿me pasas el maple por favor?
Damon le pasó el frasco y vio cómo el niño embarraba casi en demasía, su hijo era fanático del dulce. Su hermano apareció con pijama y con el pelo apuntando a todos lados como de costumbre, paso a un lado de Damon sirviéndose una taza de café y tomando un sorbo suspirando de alivio, tanto él como su hermanos tenían cierta adicción a la cafeína.
-hola chaparro, no te sirvas mucho, puede darte diabetes - el niño rió asintiendo y dejando el bote de maple a un lado - te ves muy guapo igual que tu tío.
-yo siempre me veo guapo, lo llevo en mis genes - Damon empezó a reír inevitablemente, a veces olvidaba que su hijo podía ser muy egocéntrico si se lo proponia, tenía mucho de quién sacar - deberias de arreglarte un poco tio, ese cabello no es digno de ti.
-estoy en casa nadie me puede ver así, ninguna mujer bonita está aquí - Sam le guiño un ojo a su sobrino, el castaño le dio un pequeño golpe a su hermano solo por molestarlo - oye arruinas mi belleza Damon, ¿ahora como borrare el moretón?
-que poco aguantas, no vaya a ser que el príncipe Sam me haga algo - asi Damon y su hermano empezaron una breve discusión tonta haciendo reír a James, por las ocurrencias de su tío, se escuchó el timbre - anda ve y lava tus dientes James, es hora de ir al cine.
El niño saliendo corriendo a la habitación haciendo reír a su tío y padre. Damon puso a su hermano a lavar los trastes, mientras él iba a recibir a sus suegros.
Hola querido ¿como estas? - Cathy paso abrazando al castaño y entrando a la casa junto con su esposo quien también saludó a Damon - y James ¿ya está listo? ¿Como vas con la fiesta?
-está arriba lavándose los dientes, no debe tardar en bajar, todo bien, yo le marcare cuando todo esté listo - la mujer asintió, callaron al ver que el niño bajaba sonriente y saludando a sus abuelos de abrazo y beso - debes portarte bien James, no des problemas y obedece a tus abuelos.
El niño asintió despidiéndose de su padre dándole un beso y un abrazo, después fue con su tío Sam para avisarle que se iba y reñirle por no bañarse todavía. James salió muy contento en compañía de sus abuelos a ver una película que él por supuesto tendría el honor de escoger.
-¡es hora de empezar a arreglar todo Sam! - su hermano apareció todavía con pijama, con una caja llena de artículos para fiesta - tenemos a lo mucho 3 horas pasadas, debemos apresurarnos.
El menor de los 2 hermanos asintió abriendo la caja sacando todo mientras Damon acomodaba las cosas por orden y las iba armando conforme Sam le daba las cosas, la fiesta debía empezar en poco tiempo. Sus padres llegaron para ayudarles con todos los preparativos para la fiesta de su hijo, era algo sencillo, pero por más pequeño que fuera el evento siempre requiere tiempo.
El patio era todo globos y colores por todas partes, los que estaban en el interior se movían constantemente llevando cosas de un lado a otro, Erick que había llegado hace un rato junto con Lucy, le ayudaba junto a Sam con las cosas pesadas como las mesas y el asador. Los amigo de James llegaban conforme pasaban los minutos recibiendolos siempre con una sonrisa.
Damon tomó un gran respiro al meterse al baño a darse una gran ducha, estuvo más tiempo del que acostumbraba bajo la regadera, pero sentía que el chorro de agua que caía a raudales sobre su cabeza lo reconfortaba poco a poco. Salió vestido haciéndose un coleta, tendría que ir próximamente a la peluquería a cortarse el pelo, ya lo tenía bastante largo, escuchó su teléfono.
-hola, Cathy ya casi terminamos, solo danos una media hora más - descolgo el telefono, tratando de ponerse los zapatos al mismo tiempo - ya está casi todo, incluso ya hay algunos niños aquí.
-no te preocupes hijo, estamos dando una vuelta por el centro comercial, mi esposo le quiere comprar algo a James - Damon sonrió sabiendo como era su suegro - no te preocupes por nosotros, yo me encargo de hacer más tiempo.
-perfecto Cathy, nos vemos en un rato, perdón por colgar pero estoy algo atareado aquí - la mujer entendió despidiéndose, colgo el telefono y el castaño se mir o de nueva cuenta al espejo, se puso los lentes de pasta dura que casi no acostumbraba usar. Vio como su hermano entraba - ¿ocurre algo?
-no nada, solo que se nos hizo raro que tardaras y mama me mando a ver que te sucedia - el mayor negó sabiendo como era su madre, se puso perfume terminando de arreglarse - te ves bien.
-gracias, es solo que es la fiesta de mi hijo ¿recuerdas? - el otro asintió riendo, con que su hermano todavía siguiendo con la broma de la mañana - vamos tenemos que bajar a ayudar.
Damon salió de su habitación siendo seguido por su hermano, ya era época de calor, pero el aire se seguía sintiendo frío. Había niños corriendo de una lado a otro mientras el castaño terminaba de arreglar los últimos detalles, ya sintiéndose mejor de lo que se sentía en la mañana.
-oye tu no descansas verdad - Damon volteo mirando a Erick acercarse, el más corpulento extendió los brazos abrazando al más bajo - ya esta el encargo.
-muchas gracias Edwards, ¿sabes? eres genial - el otro río disfrutando el momento, abrazar a Damon era algo que le encantaba a Erick, el castaño aspiró el aroma del hombre que por alguna razón le gustaba - James estará feliz al ver su regalo.
-vas a ver que si le va a gustar, pero también debes decirle que debe hacerse responsable, tener un perro no es cualquier cosa - el más bajo asintió separándose del hombre acomodándose unos mechones que se le salían - vamos te acompaño por el pastel antes de que llegue James
Asintió el castaño siguiendo al mayor a su carro, platicar con Erick durante todo el trayecto a la pastelería y el tiempo que llevaba de conocerlo, era reconfortante en muchos aspectos. Su compañía y todas las atenciones que tenía para con él eran muchas, lo consideraba un buen amigo.
Tardaron un poco en recibir el pastel de chocolate ya que tenían pedidos extras aquel dia. Esperaron pacientes mientras los 2 hablaban con la recepcionista de la panadería, Damon y Erick se trataban con mucha confianza que a lo lejos parecían más que buenos amigos, el mayor era consciente de su atracción al menor, pero se abstenía de dar a conocer todavía sus sentimientos, sentía que era una falta de respeto a la memoria de su amigo fallecido.
-aquí tienen su pastel - la amable mujer les dio un cartón de color rosa y les daba el ticket del pedido - me saludas a James y le dices que despues le doy su regalo.
-de tu parte, se pondrá feliz cuando sepa que tu le hiciste la tarta - Erick tomó el paquete mientras Damon se despedía de la mujer - igual deberías pasarte y darte una vuelta por la casa eres bienvenida.
La mujer sonrió asintiendo, el castaño salió junto con el otro hombre directo ahora si a su casa a esperar a su hijo. Su suegra ya le había hablado informado que iban de camino a su casa. El par apenas llegó acomodaron el pastel donde debía de ir y escucharon el motor de un carro apagarse anunciando la llegada de James.
-todos guarden silencio que ya llegó - los invitados y amigos de su hijo guardaron silencio observando a su hijo entrar con los ojos tapados bajo una cinta - ya es hora.
Sam se acercó a su hermano mayor mirando como su sobrino era guiado por sus abuelos hasta el patio, Damon les había dado instrucciones anteriormente en la última llamada que le habían hecho. Su hijo se destapó lo ojos lentamente sonriendo al ver el gran alboroto y recibir los abrazos de sus amigos de la escuela y sus vecinos. Damon se sentía feliz.
-feliz cumpleaños a ti - Ben y Damon entraban muy de mañana al cuarta de su hijo, ese dia cumplia 5 años, el niño se despertó sonriendo perezosamente mientras escuchaba a sus padres terminar de cantar el cumpleaños feliz - James felices 5 años pequeño.
-gracias papas, es un poco temprano - el niño sonrió dejándose abrazar por los otros 2, el niño soplo la vela de la pequeña tarta que Ben tenía en sus manos - que rico es de mi sabor favorito.
Damon empezó a reír, su hijo todavía no probaba el dulce y ya estaba dando por hecho que ra de su sabor preferido. Igual a su padre de impaciente, Ben miró a su esposo sabiendo lo que estaba pasando por su cabeza y le dio un pequeño beso en la boca que el otro correspondió gustoso.
Esos momentos en familia eran los que más añoraban y se quedaban en la mente de los 3 integrantes que estaban en la habitación del más pequeño. Se arreglaron para salir de casa y hacer sus obligaciones, no sin antes comer una rebanada de delicioso pastel que le habían comprado a James.
-cuando salgamos de la escuela iremos con papá a comer en donde tu quieras - el niño asintió jugando con sus juguetes en la parte trasera del carro, Damon miró a Ben - espero que llegues temprano y lleves a tu hijo a comer.
-claro que sí, porque fallaría a mi hijo, tengo to arreglado me quedaré toda la tarde con ustedes - por eso el castaño amaba a su esposo - ya sabes como es tu hombre, nunca rompe una promesa.
-ya te he dicho que te amo mucho - Ben sonrió mientras daba la vuelta para meterse en el estacionamiento de la zona escolar, el otro le dio un beso en la mejilla aspirando el perfume de su esposo que lo volvía loco, se había convertido en una adicción, el mayor volteo dándole un beso de pico - te espero en la tarde.
-claro mi amor - se dieron un beso de esquimal costando trabajo separarse entre la burbuja que tenían, su hijo carraspeo haciéndolos reír - ve bajandote James, tu padre irá enseguida contigo.
-no tardaré mucho, ocupo hablar con tu padre - el niño asintió saliendo del carro mientras iba caminando saludando a sus amigo - ¿que quieres decirme?
-no me podía aguantar, pero te ves tan hermoso - el mayor estampo sus labios con los del otro en un beso demandante como él solo podía darlos según el castaño. Todo era deseo y lujuria pero tenían que parar eso, estaban en un lugar público - iremos a comer y después dejaremos a James con alguno de nuestros padres por algunas horas, te necesito.
El otro asintió riéndose mientras le daba un último beso a Ben, el castaño se bajó con la respiración irregular y con la sonrisa boba que inevitablemente no podía quitar después de tan inesperado momento junto a su esposo.
La pequeña fiesta iba bien, su hijo al terminar de saludar a todos fue directamente hasta su papá, para abrazarlo y darle las gracias por tan gran sorpresa. James después se la paso disfrutando de la compañía de todos. Mientras el seguía corriendo para que todo fuera bien.
-hijo siéntate y descansa, todos están bien atendidos - se encontraban en la cocina mientras Damon preparaba otra de las miles de botanas y comidas para servirlas - ve como y disfruta de tu hijo, a preguntado por ti.
-si lose mama, es solo que ya sabes que soy demasiado perfeccionista y no me gusta estar sin hacer nada mucho tiempo - su madre negó con la cabeza tomándolo por los brazos interrumpiendo lo que estaba haciendo - ve y hazme caso Damon Bradshaw, tu hijo quiere tu trasero fuera.
-¿que hiciste con mi madre? -la otra lo miró con una ceja levantada, soltó las cosas en la barra y se rindió ante la mujer que le dio la vida - esta bien vamos.
En el patio había niños corriendo por todas partes, la mesa de postres estaba medio vacía tendría que ir por más. Pero su madre no lo dejaría ir al interior de su casa de ninguna manera. Se sentó en la mesa a un lado de su hermano y de Erick, Sam miró burlón a su hermano diciéndole todo con los ojos, le gustaba molestar a Damon con las órdenes que le daba su madre cuando estaba incomoda o molesta.
-yo no le dije nada, ella solo escucha, observa y carga a la acción - el castaño bufó cruzando los brazos en un gesto infantil, haciendo reír a los demás que estaban en la mesa - tranquilo, no querrás que James te vea así.
-Sam si dejaras de hablar y me alimentaras todo estaría mejor - le riño de manera sarcástica a su hermano sacando la lengua, el otro negó riendo parándose por un plato de lo que hab para quitarse el hambre, erick se le quedó mirando divertido - así nos llevamos el y yo, ya sabes cosa de hermanos.
-bueno tengo 2, pero terminando la preparatoria salieron a estudiar la universidad fuera de la ciudad y se establecieron en lugares diferentes, yo soy el único que se quedó en la ciudad - Damon se quedó pensando en la nueva información que el más corpulento le daba poniendo su atención a la conversación - yo soy el mas grande de los 3 y fui el primero en casarme, por eso me establecí aquí.
-vaya hasta ahorita voy sabiendo que tienes hermanos - el otro encogió solo encogió los hombros quitándole importancia al asunto - lo digo porque hablas mucho de tus padres y de tus tíos, pero hermanos no.
-bueno no es como que tenga algo importante, son mis hermanos y hablo con ellos, pero solo eso, somos muy independientes - Damon se le quedó mirando a su hermano que se acercaba con un plato llenos de comida, imaginar estar lejos de su hermano era algo casi inconcebible, lo quería mucho - anda debes comer.
-gracias por recordarmelo Erick, no era necesario - tomo el plato tomando un trozo de pizza y llevándoselo a la boca, hasta ese momento su estómago rugió dándose cuenta que no le había probado bocado - esto esta riquisimo.
Su madre rodó los ojos dándose cuenta que su hijo mayor a veces era demasiado terco. El día siguió su curso y Damon se olvidó por completo de pasarsela encerrado en la cocina y se relajo conviviendo con los demás invitados y su hijo. Quebraron la piñata que tenía muchos dulces.
James estaba sorprendido por todo lo que su padre y toda su familia le habían preparado, no se despegaba en ciertas momentos del día de su padre, el mejor del mundo. Tenía muchas ganas de abrir los regalos, pero tenía que ser paciente.
-James es hora del pastel - Damon sonriendo apareció seguido de su hermano con un gran pastel con 8 velas mientras se dirigían a la mesa principal - anda debes venir para cantar el cumpleaños feliz.
-voy enseguida papá - el niño fue corriendo junto a todos sus amigos de la escuela que se amontonaban rodeando la mesa donde se encontraba la tarta - es bonito.
-claro que sí campeón, te mereces eso y mas - Erick le revolvió el cabello poniéndose a un lado del castaño que arreglaba todo en la mesa, el niño escuchó como todos le cantaban el cumpleaños feliz mientras veía las velas pidiendo un deseo - ya termine de pedir lo que quiero.
Su padre asintió dándole pase para poder soplar las velas el niño tomó todo el aire que podía retener su boca y lo soltó todo apagando el fuego. Se escucho como todos aplaudían posterior a eso. Partieron el pastel dándole a todos para que prosiguiera para abrir los regalos.
-hijo debes esperar a que se te baje la comida para que se te baje un poco todo lo que has comido hoy - James estaba ansioso por seguir jugando con sus amigos, pero se sentía un poco lleno - no te va a pasar nada.
-esta bien - el niño se rindió quedándose en la mesa un rato más, hasta que le dieron ganas de hacer sus necesidades básicas - voy al baño.
-no tardes, si no pensaré que te ha dado algo de tanto comer - el niño se fue corriendo ya que las ganas de hacer ir incrementaron mucho, Damon volteo a ver a Erick sabiendo que era el momento - ahora necesito que vayas por el encargo.
-no te preocupes deja hago una llamada y me lo traeran - el hombre se paró siendo acompañado por el el castaño quien entraba a la casa para ponerse algo más abrigado y para meter a todos los presentes, el veterinario se encargó de todo y se junto con Damon en la cocina - ya está todo listo, vendrán dentro de poco.
-ahora solo espero no arrepentirme de lo que estoy permitiendo -el mayor río negando - dejame decirte que por experiencia, que yo tendré que cargar con todo el peso de eso, porque ni siquiera Sam me ayudara.
-no le tengas tan mala fe a tu hijo, aparte tu lo ayudaras a que sea responsable - Erick vio la pantalla de su teléfono y contesto un mensaje - voy y vengo.
Con eso Damon entendió que el regalo de James había llegado, pensó en lo que el ex militar le dijo y le dio la razón, dejaría que el mundo rodara pero tendría que llamarle la atención a James cuando se tratara sobre ellos. Aparte una de las razones es que su hijo insistió mucho.
Regreso a la sala donde todos estaban esperando y acomodo todos los regalos en la mesa del centro, su hijo todavía se encontraba en el baño, subió a su habitación para asegurarse que estuviera bien.
Este niño le dije que muchas chucherías le harían daño - se metió a su cuarto y toco la puerta del baño - ¿todo bien james?
-si ya voy solo me estaba limpiando - Damon sonrió por el comentario del niño - bajo en un momento papá.
Está bien cariño solo me preocupo que tardaras - bajo viendo a Erick con el dichoso regalo, un perro Husky de 3 meses que había visto en la veterinaria, fue amor a primera vista en cuanto lo tuvo en sus manos supo que era la mascota ideal y que su hijo se emocionaria mucho.
El can al ver y oler a Damon se removió de los brazos de Erick para soltarse y dirigirse al castaño y morderle el pantalón. Damon vio la ternura en el perro y lo alzó mientras el animal lo miraba con esos ojos grises.
-eres una amor lo sabes - lo dejo en su regazo acariciándolo con sus manos y lo tapo para que no se alcanzara ver, aparte de ponerse detrás de su madre para no ser descubierto por James que iba bajando las escaleras - hijo es hora, ya es tarde y tus amigos tienen hora para irse.
El niño se sentó en medio de todos y fue abriendo todos los regalos, uno a uno. juguetes , ropa y algún dinero por parte de Sam y de sus abuelos. James agradecio a todos. Por lo tanto Damon estaba batallando un poco al estar escondiendo a cierto cachorro que se removía mucho sobre sus brazos queriendo jugar.
-ahora viene el mejor regalo - su hermano Sam lo tomó de los hombros para guiarlo mientras el castaño lo miraba medio ceñudo, no le quedó más que caminar tapándose un poco más - tu padre nos tiene un nuevo compañero de travesuras.
-callate Sam y no arruines el momento - Damon camino estando enfrente de su hijo y se agachó hasta estar a su altura y mostrándole al cachorro, James abrió su boca tratando de creer o que veía un perro peludito - se que has pedido esto por muchos años y yo quien iba a ser para negarte esto.
-esto es genial, gracias papá - el niño tomó al cachorro que le empezo a lamber la cara queriendo jugar, haciendo reír al niño - oye tranquilo cachorro.
-tienes que buscarle un nombre que te busque y te harás cargo de él, al igual que los que vivimos en esta casa - Damon lo miro seriamente dejando claro su punto y dejando que se quedara con el perro - el de nosotros se llamaba Max, tu tío Sam lo escogió y yo no tuve elección.
-pues que se llame Max está decidido - su hermano empezó a aplaudir por tan buena elección según el - ya eres parte de la familia.
Los niños se acercaron para ver al cachorro que era demasiado juguetón y hogareño,. Damon sonrió yendo con Erick que miraba la escena desde una esquina de la sala. Sintió la presencia del castaño y volteo a mirarlo extendiendo un brazo para pasarlo por sus hombros.
-no me digas nada, te ayude porque quería ver la sonrisa de tu hijo - Damon miró a Erick , ese hombre era un ángel de persona, le daba gracias a quien sea que lo haya puesto en su camino - mejor vamos por un cerveza a la cocina.
-eso es muy poco para agradecerte el gesto que acabas de tener - el veterinario río tomando de la mano al castaño y llevándolo a la cocina, en realidad necesitaba tomar una cerveza lejos de toda esa gente - después te pagaré con algo que en verdad valga la pena.
-con tu compañia es mas que suficiente en este momento - el mayor abrió el frigorífico y saco 2 botellas - este dia sido de locos.
-ni me lo digas, hacer una fiesta es cansado, ayer apenas y descanse, Sam me siguio el rollo - Erick abrió una de las cervezas y se la dio al castaño dándole un trago - tenía mucho tiempo sin tomar una gota de alcohol.
-deberias hacerlo mas seguido, veras como te relaja - el veterinario tomo de su botella saboreando el líquido un poco antes de pasarlo - yo lo hago seguido.
-no soy muy de estar ebrio todos los días, pero cuando amerita la ocasion, lo hago cuando estoy tranquilo - Damon se rasco la cabeza y se rió - mis tiempo de salir a bailar y emborracharme han pasado y quedado en un lugar lejano.
--no te estoy diciendo que vayas y te pierdas por ahí a altas horas de la noche - el mayor se recargo en la barra mirando a Damon de cerca - nada como tomar tranquilamente en un bar, no hay necesidad de hacer algo grande, eso es de gente joven, tú ya tienes un hijo y ahora un perro.
-oye tengo 28 no estoy tan viejo como piensas - le riño riendo por el comentario - yo solía salir mucho con Ben, jugábamos billar por horas.
-oye ese es mi hobbie favorito, algún deberíamos salir, podríamos abusar un poco de la bondad de tu hermano - Erick encogió los hombros dando otro sorbo a su cerveza - a el le gusta pasar tiempo con James y Lucy.
-ya se por donde va la cosa, intentas salir conmigo a costa de mi hermano - el castaño levanto una ceja entendiendo el punto - no estaría mal, pero se muy bien que Sam también le gusta andar en estos ambientes.
-pues te lo llevas y ya después veremos con quién dejamos a los niños - Damon pensó en la oferta, no sonaba nada mal, hace tiempo que no salía y pasarsela bien aunque sea un poco - si te preocupa que algo pueda pasar, no te preocupes yo iré contigo, asunto arreglado.
-no suena mal, solo tengo que ver cuando puedo - Damon se tomó la botella de golpe sintiendo el ardor en su garganta, mirando su reloj - debo ir a despedir a los niños que dejaron en casa, sus padres no tardan en venir.
Erick lo acompañó no sin antes también tomarse la cerveza. James se encontraba cansado de el dia tan ajetreado, pero con Max dando guerra apena y podía descansar. Los invitados se fueron yendo al poco tiempo dejando la casa vacía y con Sam, Damon, James y Max tirados en el sofa.
-es hora de descansar - el castaño fue el primero en pararse - mañana limpiamos el desorden que hay.
-yo apenas y me puedo mover - Sam se estiró y tomó camino al segundo piso - buenas noches chicos.
-duermes bien tío, gracias por la fiesta papi - Damon sonrió revolviendo el cabello de su hijo, el niño acarició al perro que estaba acomodado en regazo - Max puede dormir con nosotros?
-cariño, sabes que primero debemos educarlo verdad, Erick quedó de enseñarte cómo hacerlo - el perro lo miró con aquellos ojos que insinuaban inocencia, eso no iba a funcionar de ninguna manera con el - aunque pongas esa cara de cachorro bien portado.
Su hijo se rió levantándose con todo y perro, yendo a la habitación que compartía con su padre. Damon dio una última vuelta por el piso de arriba y apagó las luces para irse a dormir, estaba muy cansado y le dolían los pies horrible.
Las cobija lo recibieron con los brazos abiertos, solo había un problema, era débil. Max se encontraba a los pies de su cama mirando a el par que ocupaba la cama. Eso era algo que no quería volver a pasar, ese perro le miraba de forma muy inocente y parecía muy lindo.
-ven aquí Max, solo no hagas nada malo - el cachorro corrió hacia el regazo del castaño y se acurruco en su pecho - buenas noches niños.
Escucho un gemido quedo de James que se encontraba totalmente rendido y sintió como el perro lamía su mano y respiraba acompasadamente dando a entender que estaba dormido.