Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

10 Razones para Salir - YoonMin por SrMomo

[Reviews - 4]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Nada qué decir, disfruten de la obra.

 

Capítulo 1: 2. Por tu bien mental.

 

Presionó el pequeño botón del timbre —que casualmente era de color rosa pálido— y echó un vistazo al jardín mientras esperaba a que le abrieran. Notó que el mismo estaba bien cuidado, con todo en su lugar y decorado con unas hermosas flores en sus respectivas macetas, siendo coloridas y recibiendo los rayos del sol con sus pétalos extendidos; le daban vida al espacio.

Pronto la puerta de la casa se abrió, dejando ver a un sonriente SeokJin. YoonGi no pudo hacer más que devolverle la sonrisa, siendo invitado a pasar luego de que fue recibido amistosamente.

YoonGi dejó sus zapatos en la entrada, como es costumbre, y siguió al resplandeciente SeokJin hasta la sala. Allí pudo ver a NamJoon, quien se hallaba plácidamente sentado y leyendo un libro grueso; pero al notar su presencia, el joven se quitó los lentes que usaba en ese momento y los apartó junto al libro, para levantarse y saludar a YoonGi.

El pelinegro tomó asiento.

—¿Quieres algo de beber? Té, ¿quizás? —ofreció el mayor de los tres, atento ante la visita.

YoonGi le sonrió amablemente, negando suavemente con la cabeza—: No hace falta, muchas gracias. Acabo de almorzar —aseguró viendo a SeokJin asentir y sentarse en el mueble frente a él, junto a NamJoon. Ambos tenían una chispa de alegría, lo cual YoonGi asimiló con que venían buenas noticias; así que les miró interrogante—. ¿Y?, ¿hubo algún avance, entonces?

La pareja se dio una mirada cómplice antes de sonreír y asentir de manera alegre. Estaban satisfechos ante el pequeño pero significativo avance que hubo en su caso con Jimin.

—Jimin ya come —habló el más joven de los presentes, recibiendo la atención de los otros dos—. Está comiendo la mayoría de las comidas que le llevo, es maravilloso. —Una sonrisa de alivio era lo único que YoonGi pudo ver, sintiéndose satisfecho al oír que Jimin hubo cumplido con lo que le pidió.

—Excepto la ensalada. —Recalcó SeokJin, a lo que NamJoon —su futuro esposo— admitió, encogiéndose de hombros.

YoonGi soltó una risa suave antes de volver a hablar—: Es una buena noticia —suspiró—, es gratificante saber que dimos un buen primer paso. —La pareja asintió animada ante las palabras del pelinegro, totalmente de acuerdo.

Subió al cabo de un rato al segundo piso siendo acompañado por SeokJin. Éste último le entregó el plato de comida que había servido para Jimin, y otro con algunas galletas por si quería picar algo mientras hablaba con el chico.

YoonGi quedó solo frente a la puerta de la habitación de Jimin, y sonrió cuando escuchó unos pasos aproximarse a la puerta. Decidió hablar, ya que no podía tocar la puerta en advertencia de que estaba ahí gracias a los platos que llevaba en ambas manos.

—Jimin —escuchó el sonido de algo —o alguien— deslizarse por la superficie de la puerta rápidamente, dejándose caer en el suelo. YoonGi iba a imitarlo, pero primero debía entregarle la comida al menor—, tengo tu almuerzo —advirtió sin esperar respuesta—. Te lo pasaré ahora mismo.

YoonGi se inclinó para dejar pasar por debajo de la puerta la comida del menor; y una vez estuvo al otro lado dentro de la habitación, escuchó atentamente cómo Jimin tomaba el plato y comenzaba a comer gracias a los sonidos de la porcelana chocar contra los utensilios.

Más cómodo, se sentó apoyando la espalda contra la puerta, en la misma posición que antes.

—Te felicito, Jimin. Estoy contento de que hayas cumplido la orden —habló luego de un rato, una vez escuchó el plato chocar suavemente sobre la madera del suelo. Eso indicó que Jimin había acabado de comer, o por lo menos, comió algo—. Como prometí, te pasaré la nota que te corresponde. Pero primero quiero que me pases la que te di la semana pasada, ¿Quieres hacerlo?

YoonGi se mordió el labio levemente en espera de alguna señal, pero a cambio sólo obtuvo silencio absoluto. Podía jurar que escucharía los autos de la autopista más cercana, pero no alguna cosa proveniente de Jimin.

Pronto oyó al menor levantarse de su sitio y rebuscar entre lo que dedujo serían sus cosas personales. Segundos después estuvo devuelta y pasó por debajo de la puerta la hoja blanca que le pedía, pero estando ésta al revés, de modo en que YoonGi no pudo leer lo que contenía.

YoonGi supo, ante ésta señal, que Jimin no quería que se supieran sus razones y pensamientos al estar en ese estado. Respetó eso, así que lo tomó y lo dobló por la mitad con el espacio totalmente en blanco hacia afuera; teniendo el contenido adentro, estando oculto.

—No lo leeré hasta que lo pidas, eso dije y eso haré. —Guardó el papel en su bolsillo y sacó otro pedazo nuevo para seguir indicando.

YoonGi se apoyó en el suelo para escribir la siguiente razón, cosa que no le tomó mucho tiempo puesto que le salió naturalmente a comparación de la primera vez.

Se dio la media vuelta, quedando con el hombro derecho pegado a la puerta y pasó la carta. No esperó hasta que Jimin la recogiera.

—Para el próximo miércoles quiero que te comuniques con nosotros; pero no tienes que hablar si no quieres —aclaró, siendo lo más cuidadoso posible con su elección de palabras—. Si gustas, puedes comunicarte dando golpes a la puerta empleando un golpe para no, y dos golpes para sí. Podemos empezar ahora mismo, si te sientes cómodo… —sabiendo que no recibiría respuesta, se apresuró en pensar cualquier pregunta que se le viniera a la cabeza para hacer la prueba—, ahm, SeokJin me dio unas galletas. ¿Quieres que te las pase?

Unos segundos de silencio pasaron antes de que Jimin diera dos toques suaves, casi débiles, a la puerta. Una sonrisa en YoonGi nació al ver que el chico era tan dispuesto y obediente. De cierta forma, ese hecho le parecía bastante adorable.

YoonGi colocó el plato sobre el suelo y lo deslizó por debajo de la puerta, de la misma forma que hizo con el plato anterior. Se quedó varios minutos mirando al suelo, a la abertura de la puerta; notando que el otro lado estaba oscuro debido a que el menor conservaba las luces apagadas. Se conformó con escuchar cómo Jimin comía las galletas, una a una, lentamente, casi por hacerlo más que por querer.

Pasaron aproximadamente cinco minutos en los que hubo completo silencio. Durante ese corto lapso de tiempo se perdió tanto en sus propios pensamientos que incluso creyó que el menor se había alejado de la puerta sin que él se diera cuenta, así que decidió cerciorarse de que no fuese así—: ¿Sigues ahí?

A diferencia de muchas otras veces, dos toques suaves fueron lo que obtuvo como respuesta. YoonGi volvió a sonreír prosiguiendo a levantarse, acomodando su ropa poco después. Los sonidos sordos de esta misma estaban resonando por el pasillo; había mucho silencio siempre debido a que el lugar era muy tranquilo y mayormente vivían ancianos cerca.

El menor pasó los platos, ya vacíos, devuelta hacia afuera. El pelinegro se sintió ansioso por abrir aquella puerta y ver a Jimin, de envolverlo con sus brazos por la tristeza que desbordaban sus acciones. Pero contrario a sus deseos, se agachó y tomó los platos que le fueron entregados mudamente; e hizo una mueca cuando vio algunos restos de comida allí.

Antes de siquiera salir de allí, se dedicó a suavizar su voz y habló al menor por última vez ese día—: Nos vemos el próximo miércoles, Jimin. Sigue así.

 

Poco después y en la oscuridad de su habitación, Jimin se acercó a la única fuente de luz que quería usar: su celular. Con ayuda de la luz proveniente del aparato pudo leer adecuadamente la nota y miró con tristeza el papel por unos minutos más, sintiendo su corazón encogido por estar recibiendo tal ayuda. ¿Siquiera la merecía?

2. Por tu bien mental.

 

Notas finales:

¡Spam!

Si les interesa el Kookmin/Jikook, les invito a leer el One-shot "Jungkook's Camera", un fluff bastante lindo. Trata de que Jungkook demuestra a Jimin que lo ama más que a su cámara.

 Lo pueden encontrar aquí en Wattpad .


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).