Historia_del_cielo para tu consumo y adicción, solo en wattpad y bajo el mismo nombre del fic me puedes encontrar. Otra vez LO SIENTOOO, NO PUEDO CREER QUE SEA TAN TORPE TT
—mnh~...
Sasuke soltó un pequeño gemido en medio del sueño, ¿y como no hacerlo? Si Naruto se encontraba abrasado a él, mordiéndole el lóbulo de la oreja y diciéndole —despierta dormilón — suavemente al oído mientras restregaba su miembro en el trasero del pelinegro.
—Aah~...
Naruto metió su mano por debajo de la ropa interior del otro. Sasuke abrió los ojos, pero aún así era incapaz de moverse, no si el rubio seguía estimulándolo como hacía: moviendo su mano de arriba a abajo, tocando la punta de su pene y mordiéndole el cuello hasta dejar pequeñas marcas de propiedad.
Se posicionó sobre él para darle un beso tierno y lento, a lo que le quitaba la ropa, rosando su blanca y suave piel. Lentamente bajo hasta el miembro del pelinegro y lo tomó entre sus manos, mirándolo a los ojos.
—feliz cumpleaños, bebé
—mnh~... N-naruto~
Sin esperar se lo metió a la boca. Las manos de sasuke se aferraron a los cabellos rubios de Naru, despeinandolo y marcando el ritmo a su antojo. Lo hacía lento, disfrutando como la lengua de su novio envolvía su pene. Suspiros salían de sus labios acompañados de sonidos roncos y bajos.
—N-naru...to mhn~. Ya n-no.. Aah~
Se aferró a las sábanas y gritó de placer al venirse en la boca del rubio, quien lo tomó todo. Esto había sido tan repentino que, si no fuera porque era sábado, seguramente abría golpeado a Naruto por despertarlo de esa manera... Aunque no podía negar que era un buen regalo de cumpleaños.
Una vez calmada su respiración se sentó en la cama de forma que la sábana cubriera su entre pierna. Los ojos negros miraban con falsa molestia los azules, mas sonrió al ver la cara de felicidad de su rubio. Así comenzaron el día, dándose un romántico beso para luego salir de casa.
—ya que es un día especial quiero que veas algo especial— tomó su mano aún cuando muchos pares de ojos los veían con desaprobación
—¿a donde me llevarás?
—es una sorpresa—formó una señal de silencio y se lo puso en los labios, aunque no esperó que le robara un pequeño besito—que lindo te ves sonrojado.
—no lo soy, idiota...
Aun con las manos juntas y los dedos entrelazados caminaron hasta llegar a un lugar que ambos conocían muy bien. La casa abandonada a la que solían ir de jóvenes ya no era igual; estaba mucho mas bonita de como la recordaba.
—entremos, tu primer regalo esta adentro
—¿así que hay más que lo de esta mañana?
—lo que pasó podría hacerlo incluso si no festejamos nada— le dio una nalgada para que entre de una vez. Se estaba muriendo de los nervios ¿le gustará?
Abrió la puerta demasiado lento (o eso creía Naruto) encendió las luces y entonces sucedió... Frente a sus ojos pudo ver muchas, muchas fotos de ellos dos. Desde que se conocieron, pasando por momentos tan agradables hasta la actualidad, todo en un hermoso collagecreado por su novio, solo para él.
—esto...
—ya sé, no es de mis más grandes ideas pero...
—dejame hablar, idiota—Naruto tragó en seco— esto... Es lo mas lindo que me han hecho.
Antes de que su tonto novio dijera algo mas lo atrajo hacia el mismo en busca de un abrazo, acto que aceptó naruto.
—¿puedo ver la casa?
Con solo un asentimiento sasuke fue directo hacia su lugar favorito: el jardín trasero. Recuerda muy bien cuantas cosas pasaron allí, cuantas penas y alegrías tuvo junto a su novio en ese pequeño lugar.
Sintió sus ojos escocer al ver lo diferente que estaba; Naruto había arreglado todo muy bien: las flores, el pasto, incluso el viejo banco estaba como nuevo.
Inhaló el fresco aire caminando por el pequeño camino de piedras. Se quedó de pie extendiéndole la mano al rubio para que lo acompañara. Este no dudó en tomarla.
—esto es muy lindo, muchas gracias
—me alegra que te haya gustado, pero como dije este es solo uno de tus regalos, aún faltan dos
—¿tenemos tiempo? Porque me gusta estar así contigo— estaba muy avergonzado por decir eso pero no lo admitiría. Naruto tomó asiento en el fresco pasto y palmeó a su lado indicando al peli negro sentarse junto a él; y eso fue lo que hizo.
—podemos quedarnos hasta la hora de almuerzo.
—me parece bien... Naruto ¿recuerdas lo que hacía para que dejaras de llorar?
—me gritabas diciendo que me veía como un torpe
—e-eso no, idiota. Hablaba de lo otro
—jajaja, Oh ¿te refieres a esto?—se abrió campo entre las piernas de sasuke y recostó su cabeza en uno de sus muslos— Sasuke, ¿vas a acariciarme la cabeza?
—¿porqué haría eso?—agradeció no ser observado pues un sonrojo evidente lo delataba. Quería darle cariño a su tierno novio así que ¿porqué no?
Naru se sintió relajado al sentir el tacto en su cabeza. Esos finos dedos recorriendo con delicadeza su cabello y otro tocando tiernamente su rostro. Estar así con Sasuke era la gloria.
Casi se queda dormido de no ser porque el sonido de mensajenuevollegó al celular de su novio y detuvo las caricias por contestar.
—¿quién era?
—¿eh? Oh, nadie importante... ¿Deberíamos irnos ya? Es medio día
Ambos se levantaron y salieron, ya luego vendrían por las fotos. Afuera un auto los esperaba, de la nada Naruto sacó unas llaves y abrió el lamborghini de color blanco. Los ojos de Sasuke casi se salen de sus cuencas.
—¿de donde haz sacado eso?
—me lo prestó un amigo—sonrió como si no fuera nada. Pero es que era impresionante ¿como un chico de 18 años puede manejar un lamborghini?— cierra la boca bebé, y sube ya que debemos llegar...
Aún confundido sasuke entró al auto
—¿si quiera sabes manejar?—Naruto solo rio por su comentario —oh mierda, vas a matarnos...
—solo relajante... Y ponte el cinturón.
Se podría decir que el pelinegro sudó frío apenas el auto se movió, mas lo olvido cuando presenció el mar. Desde el punto en donde estaba se veía lo extenso que era, y que el sol se oculte lentamente solo lo hacia mas hermoso y especial. Casi podía sentir tocar las esponjosas nubes y colorear el bello cielo de anaranjado, violeta y amarillo. Naruto se detuvo en un restaurante.
—tú... espero que de verdad no estés metido en cosas malas
—no lo estoy, relajate ya—aunque su sonrisa le traía confianza no podía dejar de preguntarse como es que sacó dinero para tanto, porque el lugar en donde comerían no era cualquier restaurante, sino que era uno de los mas recomendados, de 5 estrellas. Eso era simplemente... Sorprendente.
—¿de verdad comeremos aquí? Espera, ¿como se supone que entre así?
—te preocupas como una nena— sasuke hizo un gesto obsceno demostrando que de nena no tenía nada—es solo comida y es solo ropa, no creí que esas cosas te importaran
—ash, ya hasta hablas como uno de esos riquillos que se creen mas que otros.
—claro que no, de hecho si fuera como uno de ellos creo que me importaría mas lo que diría la gente si me ve entrando a un lugar así, y vistiendo como lo hago ahora...
Sasuke no dijo nada pues entendía su punto de vista, y en sierto sentido tenía razón. Tal vez sasuke estaba pensando como uno de esos niños ricos...
Los guiaron hasta el piso mas alto, donde solo había una mesa para dos, una flor decoraba el centro y la vista... Probablemente la cosa mas hermosa que hayan visto.
—primero el auto de lujo y ahora esto... Ya dímelo ¿como lo conseguiste?
—ya te lo dije, fue un amigo—sonrió restándole importancia al asunto— ahora disfrutemos esto y no nos preocupemos más.
Sasuke decidió pasarlo por alto, después de todo era su cumpleaños, quería disfrutar su tiempo con naruto
—bueno, quiero hacer un brindis—el rubio levantó su copa de vino tinto mostrando una enorme sonrisa—porque estemos siempre unidos.
—salud—correspondió Sasuke con una opresión en el pecho. Ambos bebieron de sus copas.
Final 1/2