Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Amor comprado por Kurayami chan

[Reviews - 7]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Todos los derechos a sus respectivos autores. 

Notas del capitulo:

Este fic fue hecho originalmente para un pedido, si quieren pedirme una pareja o trio (ya sea yaoi, yuri o hetero) pueden buscarme en wattpad como Nahila014 y dejarme un comentario en la historia correspondiente (Tu eliges (yaoi) para parejas yaoi y yuri, Tu eliges para parejas hetero, las instrucciones vienen dentro). 

La empresa "Halakati" es la mejor compañía en cuanto a creación de sistemas informáticos y todo lo relacionado a la tecnología, solo igualado por su socio "Kaiba Corp". 

Pero su éxito no se debe únicamente a su tecnología, su presidente y vicepresidente han hecho de esa empresa un hogar para todos, tratando con amabilidad a sus empleados, procurando el bienestar de sus clientes y mejorando día a día la calidad de sus servicios.

Atem, el presidente, es un varón de 23 años, piel bronceada, cabello tricolor con un fleco amarillo junto a tres mechones parados, elevándose ahora de color negro para terminar en puntas rojas, facciones atractivas, un cuerpo tonificado y unos hipnotizantes ojos rojos.

Yami, el vicepresidente, es similar a Atem. Un joven de igualmente 23 años, piel blanca, cabello tricolor en el mismo estilo que el presidente, de facciones salvajes pero atractivas, un cuerpo tonificado y unos misteriosos ojos rojos.

Su parecido es comprensible, pues ambos son gemelos, nacidos del matrimonio entre Aknamkanon Halakati, un reconocido empresario egipcio, y Akira Sennen (nombre inventado) una humilde chica japonesa.

Ambos se conocieron en Japón debido a que Akanakamon se mudo ahí para expandir sus negocios, quedó prendado de su belleza al igual que su humildad y buen corazón, la cortejo por un tiempo hasta que formalizaron una relación y años después se casaron. Tuvieron gemelos, los educó para heredar la compañía, pero su madre se encargo de enseñarles la bondad y la humildad.

Cuando ambos chicos tenían 18 años sus padres murieron en un accidente automovilístico, los tricolores sufrieron mucho con su pérdida pero tuvieron que ponerse manos a la obra, tomaron el mando de la compañía y la condujeron con éxito, sin olvidar los valores que sus padres se esforzaron en inculcarles.

Volviendo al presente podemos notar los frutos de tanto esfuerzo, una empresa reconocida a nivel internacional.

 

*:*:*:*:*:*

 

(como aclaración, los diálogos de Yami serán en negrita, los de Atem en itálica y los demás normales, los pensamientos entre comillas) 

-¡Hey chicos! 

Los gemelos voltearon la mirada al causante de tanto escándalo, se trataba de Joey Wheeler, un doncel de 24 años, pelirubio, alto y delgado, poseedor de unos brillantes ojos miel y una actitud alegre y desafiante, pareja de Seto Kaiba. 

-¿Qué pasa Joey? - una pregunta muy razonable si tomamos en cuenta su repentina entrada a la oficina del mismo. 

-Vengo por ustedes. 

-¿Y se puede saber para qué? 

-Para salir esta noche. 

-Yo no puedo, tengo trabajo pendiente, vayan ustedes si quieren. 

-Tambien tengo trabajo. 

-Vamos chicos, necesitan salir de esta oficina y relajarse un rato ¿Cuándo fue la última vez que salieron a divertirse? 

Los tricolores se quedaron callados, en eso Joey tenía razón, hace meses que no se divertían. 

-Supongo que una noche no hará daño. 

Yami simplemente asintió con la cabeza. 

 

*:*:*:*:*:*

 

Ya era de noche, los hermanos se encontraban listos para ir a donde sea que los llevaría Joey. Atem portaba una camisa color vino de manga corta con los primeros tres botones desabrochados dejando ver un poco de su pecho, unos ajustados pantalones de vestir color negro al igual que sus zapatos, su típico peinado. Le daba un estilo casual pero elegante, además de atractivo. 

Por el contrario, Yami vestía una ajustada playera negra sin mangas, dejando sus brazos al descubierto, un pantalón de cuero negro ajustado y unos botines también negros con una cadena en el tobillo, como accesorios llevaba unas muñequeras negras con los bordes de metal plateados, un cinturon doble y una gargantilla con hebilla. Su estilo reflejaba rebeldía, aunque siendo sinceros, le quedaba como anillo al dedo. 

-No te ves nada mal hermano. 

-Lo mismo te digo, no se nota tu gusto por el negro. 

Yami simplemente dio una sonrisa de lado, en ese instante se escucho el sonido del timbre, al parecer ya habían llegado por ellos. Abrieron la puerta y se encontraron a Joey. Este vestía camisa verde menta junto a un pantalón ajustado azul eléctrico y unos botines, a pesar de su simple conjunto su belleza como doncel resaltaba. 

-Wow chicos ¡se ven geniales! 

-Tampoco te ves mal Joey. 

-Se qué soy hermoso, no tienen que recordarmelo. 

Los tres soltaron una carcajada para después subirse a la limosina que los estaba esperando, al subirse se encontraron con Seto Kaiba, portaba una camisa azul marino ajustada, un pantalón azul que rayaba en lo negro que se ajustaba en la cadera y se holgada conforme descendía, unos botines negros y un saco azul eléctrico que llegaba unos centímetros abajo de la rodilla. 

-Hola Kaiba. 

-Bastante tiempo. 

-Atem, Yami. 

Kaiba y los gemelos son buenos amigos, se conocieron en el mundo de los negocios, más específicamente cuando ambas empresas firmaron un contrato donde se hicieron socios, al principio había algo de rivalidad, pero con el tiempo y la ayuda de Joey formaron una buena amistad. 

-Y...¿A dónde nos dirigimos? 

-Al Club Milenio. 

-He escuchado de el, últimamente es muy reconocido. 

El viaje transcurrió entre charlas triviales, cuando llegaron todos apreciaron un gran establecimiento de color rojo y con letras moradas y brillantes "Club Milenio". 

Un guardia les pregunto si tenían reservación, Kaiba dio su nombre y de inmediato los dejo pasar, por dentro el lugar era enorme, mesas esparcidas por aquí y por allá, barras con distintos licores, una gran pista de baile con mosaicos que cambiaban de color en medio del salón. Se dirigieron al área VIP donde se encontraba otro guardia, Seto mostró su identificación y con eso fue suficiente para que les dieran el paso. 

Se sentaron en una mesa y se dedicaron a disfrutar, Joey arrastró a Kaiba a la pista de baile y lo obligó a bailar unas cuantas canciones, los tricolores de mientras pidieron una bebida y se dedicaron a charlar. 

-Maldito mocoso. 

El CEO se acercó a la mesa mientras maldecía todo lo que se le venía a la mente, los oji-carmin extrañados voltearon a la pista y vieron la causa... Un varón se encontraba coqueteando con Joey, este por supuesto lo ignoraba mientras seguía bailando. Sin poder contenerse ambos estallaron en carcajadas, la asesina mirada que les dirijo Kaiba sólo aumento las risas. 

Así continuó la noche entre platicas y risas, los hermanos se la estaban pasando muy bien, hace meses que no tenían una reunión que no fuera de negocios, ninguno tomó más de una copa de vino, no se les antojaba emborracharse. 

A las 12 de la noche un guardia se les acerco. 

-Caballeros si son tan amables de seguirme. 

-¿A dónde? 

-Es un servicio especial de la casa. 

Extrañados los cuatro lo siguieron, el guardia los llevó por un pasadizo oculto tras una puerta que asimilable ser una pared, al llegar encontraron varias mesas y un escenario. Les condujo a una y les pidió tomar asiento. Así lo hicieron y pudieron notar a varias personas importantes. 

-Damas y caballeros, gracias por estar aquí. 

Una voz empezó a sonar por el recinto a la vez que un hombre se paraba en medio de la tarima, tendría unos 30 años y vestía un traje rojo. 

-Mi nombre es Pegasus, pero ustedes no vinieron para conocerme. Les doy la bienvenida a la venta de acompañantes. 

Todos estaban atónitos ¿venta de acompañantes? Entonces todo encajo ¡el club era una fachada para vender personas! Todos estaban a punto de retirarse pero notaron que la puerta de acceso estaba cerrada, sin otra opción tomaron asiento y se quedaron a ver el horrible espectáculo. 

-Nuestra primera mercancía es...

Uno por uno pasaban mujeres y donceles, ninguno era mayor de 25 años. Los desnudaban frente a todos y empezaba a decir sus características, el público sólo aplaudía y lanzaba palabras poco decentes. Cuando terminaban de describir a la persona empezaba la subasta. 

-Esto es indignante ¡maldita sea son personas! 

-Tampoco me agrada Yami, pero debemos esperarq a que termine para poder irnos. 

-Ahora, nuestra mejor mercancía, ¡reciban con un aplauso a Yugi! 

De un lado de la tarima salió un  doncel, Yami y Atem se quedaron con la boca abierta, era la criatura más hermosa que hubieran visto en su vida. 

-Este pequeño de aquí tiene 20 años, cabello tricolor, un cuerpo de curvas exquisito y unas facciones delicadas, aunque lo mejor son sus ojos ¿no les gustaría tener esas amatistas en su cama? Obviamente es virgen. 

Al levantar la mirada los tricolores mayores quedaron sin habla, eran una bellas gemas amatistas, pero su esplendor era opacado pos sus lágrimas, Atem y Yami voltearon a verse y con la mirada se pusieron de acuerdo. 

-¡Qué empieze la subasta! 

-¡1,000,000!

-¡2,000,000!

-¡5,000,000!

-¡Llevamos 5,000,000! ¿Alguien ofrece más? ¡5 millones a la 1! ¡5 millones a las 2! ¡5 millones a las... 

-¡10,000,000!

Atem fue quien grito. 

-¡11,000,000!

Era el señor que antes había ofrecido 5 millones, no estaba dispuesto a perder esa belleza, miraba retadoramente a Atem mientras veía con lasciva a Yugi, eso solo aumentó la furia de Yami. 

-¡15,000,000!

-V-van 15 m-millones ¿alguien da más? 

-... 

-¡Vendido al caballero tricolor! 

Yami envío una mirada de burla al hombre, el otro simplemente apretó los puños pero mantuvo la boca cerrada. 

-¡¿Qué acaban de hacer?! 

-Concuerdo con el perro, ¿por qué lo hicieron? 

-Acabamos de salvar a ese chico. 

-Si pero... 

-¿Viste su mirada? Joey, tu eres un doncel, debes hacerte una idea de lo queel chico estaba sintiendo, conozco aese hombre. 

-¿Quien es? 

-Es un esclavista de primera, tiene una empresa muy importante en China, hay está permitido tener esclavos. 

-¿Así que tu también lo conoces Kaiba?

Este simplemente asintió. 

-Señor, si es tan amable de acompañarme. 

Yami y Atem se pararon de su asiento, el hombre los llevó por una puerta donde se encontraba una elegante sala. 

-Su mercancía no tarda en llegar. 

NARRA YUGI 

Estoy temblando, están a punto de venderme, no quiero, seguro me tocara un horrible hombre que solo me usará como juguete para satisfacerse. 

Las lágrimas corren por mis mejillas, la puerta se abre y de ella sale un guardia, de manera brusca me jala del brazo y me lleva hasta la tarima, me quitan la camisa que es lo único que llevo y exponen mi cuerpo. 

El presentador esta hablando, pero yo no le hago caso, sigo con la mirada baja, me obligan a mirar al frente y lo hago, la subasta comenzó. 

Varias personas gritan grandes cantidades de dinero, yo solo espero que esto termine. 

-¡15,000,000!

-"¿Qué?".

¿Quien pagaría tanto por un esclavo? Debe ser alguien muy importante. Me regresan al cuarto donde estaba antes, el señor Pegasus se acerca a mi, estoy temblando, ese hombre me da miedo. 

-Querido Yugi, eres increíble, han pagado mucho dinero por ti pequeño, más te vale complacer a tu nuevo dueño. 

Se retiro mientras soltaba una carcajada, unos hombres me pusieron una camisa desgastada y unos boxers. A la fuerza me llevaron hasta una habitación y me empujaron, caí de rodillas y con las palmas de las manos en el piso. 

FIN DE NARRACIÓN 

-Ahí está señores, ahora, si alguno de ustedes es tan amable de acompañarme a pagar... 

-Yo iré hermano. 

-Bien. 

-E-es u-un gusto c-conocerlo a-amo. 

Yami fijo su vista en el pequeño, su voz era melodiosa, a pesar de su tartamudez se notaba dulce. 

-No tienes que seguir así, levántate pequeño. 

Lo ayudó a levantarse, y cuando lo vio una enorme ira se apoderó de el, el doncel estaba pálido y sucio, era bajito para su estatura y se notaba que no había tenido una alimentación adecuada, otra cosa era que en sus brazos y piernas tenía heridas y moretones. La dulce voz del niño lo sacó de sus pensamientos homicidas 

-¿A-amo?- aún tenía la mirada en el suelo. 

-No tienes que llamarme así pequeño, mi nombre es Yami, ven. 

Su voz es agradable, pensó Yugi a la vez que seguía a su nuevo "dueño" 

-¿Este es el niño? 

-Si Kaiba. 

-Hola amigo, me llamo Joey. 

Yugi levantó la mirada y vio a un doncel pelirubio, este lo miraba con ternura, para el menor eso era nuevo, nadie lo había visto así en su vida. 

-¿Dónde está Atem? 

-Fuepaagar, no debe de tardar. 

Como si lo hubieran invocado, Atem regresaba a la mesa 

-¿Todo bien? 

-Si, ¿dónde está el chico? 

-M-mucho gusto señor. 

Atem tuvo el mismo pensamiento que su hermano al escuchar la hermosa voz de Yugi, pero al fijar su vista en el también lo invadió la rabia. 

-Malditos... 

-¿E-eh? 

-Nada, hola chico, soy Atem. 

-"Esa voz también es agradable, es la misma sensación que la anterior pero a la vez distinta".

-¿Ya podemos irnos? No pienso pasar un segundo más en este lugar. 

Y así los cinco chico salieron del local, Yugi siempre con la mirada gacha. Subieron a la limosna, Yugi estaba asombrado, nunca se había subido a un auto, menos uno tan lujoso. 

De repente algo captó su atención, en una mesa que se encontraba ahí había un plato lleno de distintas frutas, su vista se quedó clavada en el y sin quererlo su estómago rugió. 

-¿Quieres una? 

El menor no sabia que hacer, no quería enojar a sus nuevos amos (porque noto que ambos eran sus amos) pero tampoco quería que se enojaran porque no les respondió. 

-Ten. 

Una mano se alzó en su dirección, y sobre ella un plato con distintas frutas, sorprendido tomo el plato y por fin se animo a levantar la mirada. Su amo era realmente atractivo, volteo la mirada y vio a su otro dueño, era igual de atractivo, temeroso porque le castigaran al alzar la mirada bajo su cabeza y comió en silencio. 

-Gracias por traernos Kaiba. 

El nombrado asintió e indicó que siguieran su camino. Mientras tanto los tricolores entraron a su casa. 

Yugi tenía la boca abierta ¡Esa "casa" ocupaba una cuadra entera! 

Siguió a los mayores hasta la entrada donde un hombre de piel morena los recibió. 

-Buenas tardes Yami y Atem 

-Hola Mahad. 

-¿Quien es el chico? 

-Es Yugi, a partir de ahora vivirá con nosotros, luego te explicamos.

-Entiendo ¿necesitan algo? 

-Si, lleva a Yugiuana habitaciónayyudalo a bañarse. 

-Bien, vamos pequeño. 

-Ve Yugi, iremos contigo luego. 

El menor asintió y acompañó a Mahad hasta una puerta, cuando la abrió sus ojos se agrandaron. Era enorme, una cama para tres personas, un escritorio, un librero, un espejo de cuerpo completo un sillón junto a una pequeña mesa y más era lo que contenía dicho cuarto. También había dos puertas, seguramente el baño y el closet. 

-Disculpe, no creo que esta sea mi habitación. 

-No te preocupes pequeño. 

-Ven, sígueme. 

Mahad lo llevó al baño, hay le dijo que se bañara, sin embargo, Yugi no se movió de su lugar, extrañado le preguntó si había algún problema. 

-E-es que... No se como se usa. 

Ante eso la curiosidad del moreno aumento ¿Quién no sabía usar una ducha? Pero no hizo comentario alguno, solo se limitó a enseñarle como se usaba para después indicarle que le dejaría ropa en su cama. 

 

Notas finales:

Espero les guste :)

PD: Disculpen las faltas de ortografía.

PD: Si dejan un comentario estaría muy feliz :3

PD3: Estoy dispuesta a hacer pedidos.

JA NE :D


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).