Sus amigos le decían lento cada que pedía una explicación a un comentario o chiste. No entendía el humor midgardiano y francamente nunca lo entendería.
La noche era divertida por el alcohol y el sarcasmo de Tony. Su hermano estaba a su lado en silencio y sin mostrar alguna expresión aparente, tenía la típica copa de vino en sus manos bebiendo pequeños sorbos.
Hacía mas de quinientos años que el hombre de cabello negro no entendía a su hermano. Thor lo llenaba de halagos y regalos de algunos viajes que hacía y el otro simplemente pronunciaba un ligero y aburrido "Gracias" seguido de un apretón de manos. Raro.
Esperaba como siempre, cuando eran niños, un ligero salto para abrazarlo sonriendo y agradeciendo miles de veces por ello y que regresó a salvo a casa, luego de pequeñas lágrimas de felicidad. Thor sentía que estaba en su hogar cuando sentía el delgado cuerpo de su hermano en sus brazos.
- Me encanta estar contigo, hermano -repetía el pequeño azabache en sus brazos, a su lado en el escondite que tenían en los jardines, siempre reservado para ellos y bien cuidado gracias al menor.
La pequeña vocecilla se repetía en su cabeza cada vez que lograba verlo sonreír, apreciaba esos momentos porque su hermano se había vuelto serio con el paso de los tiempos.
Tal vez él se había alejado, tal vez Loki lo hizo. Estaban tan envueltos en sus mundos que no se dedicaron mucho tiempo, ni en los banquetes podían hablar mucho. Las horas de la comida eran cada uno en su habitación o si se daba la oportunidad, no hablaban de lo apurado que estaba por entrenar.
Ahora estaban en una reunión, sin hablarse. Thor de verdad disfrutaba estar con su hermano y amigos, empezaban a llevarse bien y estaba orgulloso de lo que lograba.
- Thor, ¿Podemos hablar un momento? -pidió el capitán al ver el rostro serio.
Asintió confundido, dejó a su hermano al cuidado de Tony con una mirada, sabía perfectamente la capacidad que tenía si es que se negaba. El traje destruido en el sótano era prueba de ello.
Salieron al balcón y Steve se cruzó de brazos- ¿Qué sientes por tu Loki?
Thor se puso serio- ¿De qué habla, capitán?
- La forma en la que lo miras, siempre estás pendiente de lo que hace, si necesita algo mas. Estás muy enamorado de él.
- ¿Tanto se nota? -estaba asustado de que el personaje en cuestión también se hubiera dado cuenta.
- Todos lo hemos visto, pero él no parece darse cuenta. Realmente es una tortuga -se rio de lo último.
- ¿Tortuga?
- Es un animal de color verde que es lento. Tu hermano es igual para entender que tiene sentimientos por ti -mencionó, apoyó una mano en su hombro para darle apoyo- pero te corresponde, aunque no lo sepa.
***
Estaban en su habitación, dormían n el mismo cuarto pero camas separadas. Era un cuarto bastante grande, derrumbaron una pared para las cosas de ambos dioses (libros de Loki).
Loki terminaba de desenredar su cabello, habito que siempre tuvo. Thor veía el cepillo resbalar con facilidad, el cabello negro y hermoso de su hermano, la gracia se notaba hasta en cosas tan sencillas, era natural en él.
- Loki -el cepillo se quedó quieto, lo dejó en la mesita de su cama para voltearse un poco y mirarlo de reojo- necesito hablar contigo.
Escuchó un suspiro, tenía posibilidades- ¿Es urgente? Me siento algo mareado -volteó totalmente para prestarle atención, deslizándose la bata que tenía para ver la palidez de su hombro. La luna contrastaba perfectamente y acentuaba sus facciones. Era el momento perfecto, no pasaba de esa noche.
- Tengo sentimientos por ti -fue directo al punto, viendo la sorpresa en su hermoso rostro- desde hace años he querido decirlo, pero debido a los acontecimientos no hubo tiempo ni momento para hacerlo. Antes de que preguntes, no, con Jane no hubieron mas que sentimientos de agradecimiento por ayudarme a volver a casa -miró la ventana, se había puesto nervioso y empezaba a sudar frío Estoy siendo sincero, no deseo que me des una respuesta ahorita, entiendo que puedas estar confundido y necesitas pensarlo. Solo tenía la necesidad de decirlo. Buenas noches.
Se cubrió con las mantas y esperó conciliar el sueño pronto.
***
Pasó una semana en la que el ojiverde no salió de su habitación mas que para comer, se la pasaba en su pequeño mundo de libros y Thor estaba ansioso. Loki le ponía de nervios por su silencio, empezaba a desesperarse y quería exigirle que le respondiera.
Finalmente, un día de lluvia apuró el paso hasta su cuarto. Abrió la puerta y la cerró con fuerza una vez dentro, el libro en sus manos casi cae ante el susto que le provocó- ¡Thor! Vaya susto me has dado, ten mas cuidado que no…
- Debo saberlo -exigió acercándose para tomarlo de los hombros- por favor, hermano.
Dejando el libro en su lugar, agarró los fuertes brazos del mayor para deslizarlos hasta su cintura y mirarlo a los ojos. Thor no entendía qué sucedía hasta que sus labios hicieron contacto los del otro.
Cerró sus ojos ante la suavidad, realmente tenían un sabor a gloria.
Agarró mejor la cintura de su hermano, acariciándola con suavidad y sonriendo de lado.
Rompieron el beso contemplándose un momento antes de hablar- si no fuera por ti, probablemente no hubiera admitido que también me siento enamorado.
- En verdad eres como una tortuga -se rio.
Loki frunció el ceño- ¿Qué es una tortuga?
- Luego te lo cuento -prometió abrazándolo- déjame besar tus labios otra vez.
- Todas las veces que quieras.
FIN
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