Tiene 18 años cuando lo ve por primera vez.
Es su primer día en la universidad y se siente muy emocionado y expectante a lo que podría pasar. Estaba caminando por las canchas y observando lo grande que era el campus, contaba con grandes canchas de distintos deportes, diferentes edificios para las distintas carreras, espaciosos patios, y salas de estudio. Estaba tan fascinado que no dudo en sacar su cámara y tomar foto al paisaje.
Estaba tomando una foto, del rio que estaba cerca de allí y que tenía una vista hermosa. Estaba enfocado el lugar cuando de repente una silueta de perfil se puso allí.
Pudo ser la emoción o la simple activación pero pulso el botón de capturar. Al bajar la cámara de sus ojos la silueta seguía allí, pero no lo podía distinguir bien por la distancia.
Toma de vuelta la cámara y busca la imagen recién tomada. Unos ojos cerrados y el rostro elevado hacia el cielo, una fina nariz y unas facciones muy bien definidas, las manos en los bolsillos hacían de aquella imagen un hermoso panorama. El zoom y la resolución de la cámara hacían de aquella imagen una fácil visión.
Cuando quiere volver a ver la silueta esta ya no está.
La persona había desaparecido…
Se pregunta cómo fue que paso, y si alguna vez lo volvería a ver.
Paso toda la semana viendo la imagen constantemente, era algo demasiado fascinante como para simplemente dejarlo ir de esa manera. No sabe si es obsesión, pero tenía como fondo de pantalla aquella imagen que veía al ir en el auto y en el almuerzo. Era tan fascinante que no podía dejar de pensar en ella. Sentía… como si lo conociera de siempre.
Jinki-su nuevo amigo-le pregunta que era tan fascinante en el móvil que lo veía hipnotizado. Él le responde que no era nada y guardo el móvil. De alguna manera se sentía extraño y hasta receloso de aquella imagen. No quería que nadie la viera.
Jinki le pregunta por su escuela y porque se animó a entrar a Fotografía.
-Hmmm después de mi accidente, de repente solo quise hacerlo. De pronto sentía tantas ganas que solo quise venir.
Jinki solo asiente entre confundido y curioso, pensando si podía saber un poco más o si era demasiado indiscreto de su parte.
-¿Tuviste un accidente?-decide hacerlo.
-Sí, el año pasado después de salir del colegio, íbamos con unos amigos. Chocamos por alguien que conducía ebrio. Me tomo todo el pasado año recuperarme, es por eso que no vine inmediatamente.
Jinki le hace más preguntas que él responde, y también le cuenta por qué quiere estudiar fotografía. Jinki lo deja cerca de su casa y le pregunta si quiere que lo recoja, él le dice que sí y ambos se despiden.
Cuando llega a su casa, su madre sale de la cocina, con el delantal puesto, para abrazarlo y decirle que la comida ya estaría.
Mientras esta frente al computador, revisa la foto otra vez. Se siente extraño haciéndolo pro de pronto se había convertido en una necesidad, ver la silueta y ese rostro casi perfecto solo le hace sentir más curiosidad. ¿Quién era ese chico?
La segunda vez que lo vio fue en sus sueños.
Estaba caminando por el campus, por el lugar de las canchas y de repente él estaba frente a él. No dijo nada y solo le tomo fotografías. El chico que tenía de fondo de pantalla estaba en la misma posición, la cabeza hacia el cielo, ojos cerrados y manos en los bolsillos. De pronto sentía que lo conocía y que estar allí con él, le hacía sentirse seguro. Mucho.
-¿Quién eres?-su voz era baja y por la distancia era obvio que no lo iba a escuchar. Pero de pronto una voz retumbo en su cabeza.
-Recuerda. Tú sabes quién soy. Te lo debo. Te amo.
Despertó a las cinco de mañana, con la frente sudorosa y la temperatura fría. Su respiración estaba agitada y su cuerpo tembloroso.
¿Quién era?
Habían pasado dos semanas y había soñado con el chico más de lo provisto, cada sueño era distinto pero seguían los patrones, el siempre obtenía la misma respuesta a su pregunta inicial.
Se ponía atento a cualquier persona en las calles y en la universidad. Pero en ningún lado lo veía. Fue al mismo lugar por las tardes y no aparecía, y eso solo causaba más ansiedad. No le había dicho de esto a nadie pero estaba por hacerlo ya. Tal vez alguien lo conocía y así podría saciar su necesidad.
Las palabras que le dijo solo perturban…
El domingo por la tarde sus amigos del colegio organizaron una pequeña reunión con nombre de “reencuentro”. Él había pasado el fin de semana haciendo deberes y pensando en la foto. ¿Quién era ese desconocido que se había apropiado de sus pensamientos?
Cuando llegó al lugar sus amigos ya estaban allí, y algunos compañeros también. Kibum, Jongin, Kyuhyun, Jonghyun y Changmin lo integraron al grupo. Las risas y los comentarios no tardaron en llegar, poniéndose al día en todo y contando las últimas noticias. Él quería algo de aire libre por lo que salió al balcón a respirar aire fresco.
Estaba poyado en el barandal cuando la voz de Jongin lo interrumpió.
-¿Ya no tienes el aguante para los chicos?- le pregunto divertido poniéndose a su lado.
-No es eso, solo que quería respirar algo de aire-responde relajado.
-Pues yo si debo aceptar que seguirles el ritmo a esta edad…- Jongin hizo exageraciones con sus gestos por lo que él solo rio con él.
-¿Cómo va tu brazo?- le pregunto mirándolo.
-Ya está mejor. Dicen que ya está como nuevo, y que puede que vuelva jugar tenis.- en el accidente que tuvieron, Jongin iba manejando por lo que sufrió un impacto más fuerte que los demás y su brazo estaba muy lesionado. Jongin era bueno en el tenis, estaba en un campeonato nacional, era un finalista e iba tener un futuro extraordinario.
Jongin no pudo asistir a campeonato porque estaba en un hospital inconsciente.
-¿En serio?- la emoción en su voz relucía más que nada y eso le hacía feliz.
-¿Por qué no vino Sehun?- Jongin se pone incomodo ante su pregunta, le dice que esta fuera del país. Y no pregunta más sin saber porque.
-¿Sabes? Conocí a un chico en el instituto-Jongin estaba en rehabilitación en un instituto especializado-Su nombre es Kyungsoo, es un hyung. Y es amable-Jongin miro hacia el cielo lo que solo le trajo una imagen a su mente. El chico…-Y creo que me gusta- Jongin lo dijo en un tono nervioso y feliz.
-¿Tú le gustas?-
-Supongo que sí… Porque me beso…-el rostro sonrosado de Jongin le causaba gracia y ternura. Le dio sus felicitaciones y se quedaron en silencio.
-¿Sabes? El otro día estaba en el campus y le quería sacar una fotografía al paisaje y paso algo extraño- Jongin lo miraba curioso, y el empezó a dudar si estaba bien decírselo, bajo la mirada y jugo con sus pies nervioso.
-¿Y?
-Un chico apareció allí. De la nada. Tome la foto y desapareció sin más.
-¿Y no lo volviste a ver?-Jongin frunce el ceño extrañado.
-Yo… de hecho si lo hice-
-¿Lo conoces ya?
-Lo vi en mis sueños, Jongin.- la mirada de sus amigos se torció preocupada, y su frente se arrugo más, y trato de hablar pero solo volvió a cerrar la boca.
-¿Tienes la foto?- ¿Debería decirle que era su fondo de pantalla? Por la forma en la que las cosas se torcieron decidió que no era lo mejor. Y le dijo que estaba en su computador, Jongin le pidió que se la enviara, por lo que él solo acepto. Pero le pareció extraño era porque Jongin le insistió mucho.
Esa semana estuvo cargada de tareas y proyectos por lo que no tuvo mucho tiempo para pensar en el chico-aunque sí lo hizo- y cuando llego el viernes solo suspiraba aliviado, a su celular le llego un mensaje de Jongin preguntándole por la foto, lo había olvidado por lo que cuando llegó a su casa, cuando ya eran las nueve de la noche.
Se despidió de Jinki y subió a su habitación. Al sentarse frente al computador, vio por la ventana que el cielo estaba tronando y que una fuerte tormenta se avecinaba.
Cuando la pantalla se abrió, él se adentró en la foto y la escogió para enviársela a Jongin. Decidió hacerlo por la red social que usaban antes en la escuela. Por lo que después de mucho tiempo ingreso.
No recuerda cuando fue la última vez que entro, pero su perfil estaba lleno de notificaciones y solicitudes y mensajes. El ignoro esto por lo que abrió una venta de chat con Jongin, él no estaba conectado, por lo que le envió la imagen y decidió esperar a que lo hiciera. A manera de pasar el tiempo, se adentró en el perfil de Jongin. La última foto que había subido estaba con un chico de ojos grandes vestido de azul. Supone que es Kyungsoo, el chico que le dijo la semana pasada.
Había dos fotos más de ellos sonriendo a la cámara por lo que le dio un toque a estas, y noto que habían sido las primeras publicaciones de ese año. Supone que Jongin tampoco utilizo la red. Y bajo más. Había mensajes cortos y publicaciones algo depresivas, por lo que supone son debidas al accidente, Jongin se debía haber sentido muy mal.
Más abajo era el año del accidente. Pasa saliva por la garganta, el medico había recomendado no ver los sucesos del pasado año, porque deberían empezar de nuevo. Jongin y el habían sido los más afectados, por lo que estuvieron inconscientes por más de una semana y habían perdido ciertos tiempos. Su cerebro estaba algo dañado. Y cuando despertó no recordaba mucho de ese año.
Sehun y Changmin que habían estado con ellos habían sido los menos afacetados, pero él no recordaba mucho y hasta ahora no lo hacía. Le habían dicho que no era necesario que se forzara, por lo que no tomo algún tratamiento para hacerlo. Sus padres le dijeron que lo más importante era que se recuperase. Le tomo más de medio año recuperarse, al principio no podía caminar y tampoco moverse.
Con algo de temor le hizo clic al botón. 2014.
Se abrió un portal donde le mostraban las publicaciones de ese año. Jongin el primer día había posteado una foto junto a él y Sehun diciendo cosas como que sería el mejor y que el maestro Kim este año lo iba a felicitar por fin.
Paso desde el principio, fotos, estados y posts en las que estaba etiquetado salía. Con uniformes de futbol y riendo y abrazándose en un partido. Se sentía algo nostálgico y triste al no recordar mucho de allí pero sonrió. Paso hasta llegar a medio año. Y un estado llamo su atención.
<<Con el nuevo amor platónico de mi mejor amigo, keke>>
Era una foto donde se mostraban todos de espalda, estaban con el uniforme de fútbol y sus nombres estaban en su espalda. Reconoció todos los nombres menos uno. Cabello castaño y agarraba el balón a su costado, el brazo de Sehun estaba sobre sus hombros, y al leer la etiqueta de su nombre solo se sintió curioso y confundido.
Choi Minho.
Un trueno hizo que todo se volviese oscuro, por lo que de repente toda su habitación estaba oscuro. La maldita luz se había ido.
Su madre le dijo que se durmiese, que lo más seguro era que tardara en volver.
Taemin se sentía confundido y a tientas llego a su cama y se metió pensando en el nombre.
¿Quién era Choi Minho?