Suele suceder que la universidad es el punto más alto donde culminas tu adolescencia y comienzas una vida adulta, pero antes de entrar a una etapa responsable y estresante, sigue estando presente la necesidad sexual en cada uno de esos pre adultos que viven un día a día lleno de responsabilidades escolares. Cuando llega el fin de semana es cuando pueden desahogar todas sus frustraciones bajo los efectos del alcohol, drogas y sexo. Si uno creería que la secundaria es donde más se fornica, están muy equivocados porque, por lo menos ahora en la universidad, tienen más experiencia sexual o al menos se creería que nadie es virgen y si lo eres, eres un maldito unicornio con tendencia a burla porque... ¿Quién demonios es virgen a los 22?
A esa edad miniimo debiste estar con una chica o chico al menos una vez, de lo contrario puedes considerarte un marginado social por completo. Este no era el caso de Naruto Uzumaki por supuesto, los rumores acerca de él en la universidad eran casi como una leyenda. Se decía que era experto conquistando chicas y chicos por igual, claro no dejaba ninguna conquista inconclusa, siempre terminaban con una apasionada noche que luego se convertía en anécdota para quienes eran más cercanos y como nuevo rumor para aquellos a quienes les llegaba la noticia.
Como buen semental, como los rumores decía, era popular, tenía buenas calificaciones, muy guapo e inteligente. No había nada que se le escapara a Naruto Uzumaki y por lo tanto era un experto armando fiestas a las que, por lo menos, la mitad de la universidad asistía y eso gracias a la mansión de sus padres y a quienes en realidad no les molestaba en lo absoluto lo que hiciera su hijo, siempre y cuando cumpliera con sus responsabilidades de estudiante.
Como cada 10 de Octubre, Naruto organizaba su cumpleaños a lo grande y en esta ocasión cumplia sus 23 por lo tanto, haría un magno evento con luces, musica, fiesta en la alberca y mucho, mucho alcohol.
-¡Perfecto! Las bailarinas aéreas ya están contratadas. ¿Qué te parece mi idea de este año Chouji? -En horario de descanso, Naruto se dedicaba a contratar todo aquello indispensable para su fiesta, junto con su mejor amigo Chouji, quien únicamente le seguía la corriente, no es que le molestarán esas fiestas, solo eran excesivas y al día siguiente terminaba con una resaca de bebida y comida.
-Está bien después de todo todas tus fiestas terminan igual salvo por una cosa -Lo miraba directamente- ¿Crees que este año sea por fin...?
-Ni me lo menciones, solo dejare que las personas hablen como siempre. Me desapareceré un rato y eso es todo. No necesito más, además no es tan urgente ¿no?
-Deberías dar las gracias que soy tu amigo y jamás me atrevería a lucrar con algo así pero...¿No te has detenido a pensar qué sucedería si alguien llegara a enterarse? Yo te recomiendo que soluciones tu "problema" en la primera oportunidad que tengas.
-El momento llegará y mientras las personas hablen será casi imposible que me descubran, ya te dije, no estoy interesado en nadie y además no lo siento vital como muchos otros lo consideran.
-Esta bien si tu lo dices. Quiero ver como todo se sale de control como cada una de tus fiestas, es la parte más divertida de la noche.
No importaba si su cumpleaños caía en miércoles, la parte más divertida de ir a la universidad por la noche es que podías tener resaca sin ningún remordimiento al día siguiente. Como era de esperarse la casa se llenó y Naruto no escatimo en nada, la temática que usó fue estilo las vegas, contrato estaciones de apuestas, bailarinas aéreas y de más y como cada fiesta, sus más allegados y extras asistieron. Todo evidentemente terminaría en sexo.
En una mesa de poker, se encontraba Naruto a la cabeza de la mesa, a sus costados dos hermosas mujeres y quienes jugaban con él eran sus más cercanos amigos, Shikamaru, Gaara, Kiba, Madara y Sai. A Chouji no le gusta apostar, se dedicaba mejor a ver apuestas en la ruleta.
-Muy buena fiesta Naruto... no dudo que tal vez tu habitación esté arreglada al más puro estilo de Christian Grey. - Comentó Madara tomando una carta más.
-¿Crees que yo le jalo a ese estilo? -Naruto sonreía cínicamente mientras mostraba su mazo ganador. - ¿Quien rumorea que me gusta el sadomasoquismo?
-Te sorprenderán el tipo de cosas que se dice sobre ti, que no dudo que ninguna de ellas sea verdadera, viniendo de ti no me sorprende. -Shikamaru tomó las cartas y paso las fichas a Naruto.
-Al menos a mi me gustaría encontrar algo bueno en esta noche... siempre me quedo con gana de algo nuevo y siempre es lo mismo, mujeres, hombres... buscando sexo, nada nuevo. Cada vez me aburren más, quisiera decir que me encantaría estar con Naruto para comprobar los rumores pero ya ven que trajimos... -Shikamaru le dio un codazo a Madara antes de que siguiera hablando.
-Cuentenme... ¿Últimamente que dicen de mi? -Mientras esperaba respuesta e ignorando completamente lo que había comentado el Uchiha, besaba en el cuello a una de sus acompañantes. -No vayan estar diciendo mentiras... -Le dijo a la chica en el oído y lo suficientemente audible para que los de la mesa lo escucharan.
-Que ninguna de primer año se salvo de ti. Dicen que ya estuviste con todas, sin repetir, realmente fueron todas y si es así sería todo un récord.
-Je... pues no están tan equivocados. -Se paró de su asiento -Caballeros, con su permiso iré a ver a los demás invitados, les dejo a mi compañía.
Mientras se alejaba, corrió a buscar a Chouji quien platicaba amenamente con un chico y sin preguntar, lo llevó hasta un lugar donde nadie los pudiera escuchar.
-¡Esta mierda de mentiras se está volviendo cada vez más grande! ¿Recuerdame como es que iniciaron estos rumores?
-¿Y me lo preguntas a mi? Yo tampoco se como inicio exactamente, solo recuerdo que una vez alguien dijo algo al respecto y tu no hiciste nada por desmentir. ¿En serio es tan terrible que se sepa que sigues siendo virgen?
Esa era la grandiosa y terrible verdad que Naruto llevaba ocultando. Todos los rumores relacionados con su persona eran solo eso, rumores y nada más, la verdad era que el seguia siendo virgen y como se habló en un principio, que se sepa ese secreto era igual a un suicidio social, más si ya se tenía una reputación fácilmente arruinable como la suya.
-¿Será mi perfecto físico?
-No seas tan arrogante por Dios... -Chouji solo se sobaba la sien. -Mira, tengo un plan con eso y jamás te tendrás que preocupar por eso nuevamente, solo espera a media noche.
-¿Que demonios estas planeando?
-Tu relajate, disfruta de tu fiesta porque gastaste bastante dinero en ella y nos vemos más tarde.
Chouji le entregó un caballito de tequila para animarlo a que siguiera la fiesta mientras él se encargaba de su regalo especial. Naruto volvió con todos sus invitados y muchos de ellos se insinuaban al rubio, lo único que podía hacer en esos momentos es fingir bastante bien ser un donjuán y experto en ligue y coqueteo. Debía de admitir que el alcohol lo desnibia un poco, pero no lo suficiente como para perder el control.
Si bien Naruto era virgen, no era más que porque de verdad no quería tener una experiencia tan importante estando en estado de ebriedad y mucho menos con un desconocido. Por evidentes razones, mucho antes de entrar a la universidad, tuvo presión social. Pero cuando llegó a la universidad y descubrir que los rumores hablaban de él teniendo sexo con media universidad de verdad lo alivio. Jamás había tenido una pareja en serio y no es porque espera al indicado, simplemente la oportunidad no se presentaba y de ser así, prefería hacerlo con una persona que gustara de él y le gustase.
Entre más avanzaba el tiempo más se iba descontrolando todo, como siempre sucedía en esas fiestas. Muchos se apoderaban de un cuarto para poder tener sexo sin que nadie los moleste, otros no les importaba y simplemente lo hacían a la vista de todos, pero los pocos que quedaban cuerdos y sobrios y la mayoría eran los conocidos más cercanos al anfitrión se preparaban para darle las merecidas felicitaciones. Era casi una tradición entre sus amigos organizarle una sorpresa gigantesca para celebrar que tenía un año más de vida.
-Gracias chicos, de verdad... -Con una copa de champaña en la mano y todos encerrados en el salón de billar, brindaron por su amigo. -Como siempre, me gusta pasarlo con ustedes y que no estén ahogados en alcohol.
-Pero esto no es todo -Se acercó Chouji abrazandolo por los hombros, guiandolo a través de la casa- Entre todos cooperamos para...digamos, conseguir una sorpresa de cumpleaños digna de ti.
-¿Más sorpresas de las que ya me entere hoy? No muchas gracias. -Por más que odiara esa idea, no podía negarse a sus amigos, después de todo siempre hacen un esfuerzo por que la pase bien en su cumpleaños.
-Esta es diferente -Le hablaba al oído Chouji para que nadie más lo escuchara- Es la solución a todos tus problemas, además claro de tratarse del mejor regalo que te han dado en la vida. -Se separó para no levantar sospechas- Solo tienes que decir "gracias amigo" -Lo empujaba para que entrara a su cuarto.
-¿Qué demonios planean? Adoro su regalos... pero no me metas en algo comprometedor por favor.
-No es nada de eso. Tu solo haz lo tuyo tigre -Lo empujó y cerró la puerta.
El comportamiento de sus amigos era bastante extraña, más se dejó hacer. Lo único que pensó fue recostarse un rato en su cama, sin detallarla del todo, se lanzo sobre ella y escucho un quejido debajo de las sabanas cuando lo hizo. Lo hizo enfurecer un poco, ya que creía que algunos invitados se habían infiltrado a su habitación para tener relaciones. Quito las sabanas y su sorpresa fue, no encontrar a una pareja, sino más bien a un chico semidesnudo, con las manos atadas a un moño. La sorpresa y la vergüenza no tardó en hacerse presente en su rostro y una vez que lo detallo, giro la mirada para no incomodar más a aquel chico.
-Perdona eh... ¿Quién te metió en mi habitación? -Trataba de evitar cualquier contacto visual con él desconocido, pese a todo, era muy guapo lo cual le traía incomodidad, ya que por su moral evitaba mirarlo, pero al mismo tiempo quería hacerlo.
El muchacho se incorporó como pudo y lo miraba de forma intensa y con cierta expectativa.
-Soy...algo asi como tu regalo de este aňo. ¿No te gusta?
-¿Mi regalo? -Fue ahí donde hizo el match y comprendió el regalo de sus amigos, en especial de Chouji, quien al parecer se refería a darle la oportunidad de al fin hacer realidad todos esos rumores. -Ok... bueno te trajeron, espero no haya sido a la fuerza y si lo fue, por favor, evitemos posibles molestias y no hagamos algo de lo que nos podamos arrepentir.
-No fue a la fuerza. Yo me ofrecí para serlo -se le acercó un poco- Yo si quiero hacer esto, solo tengo algo que pedirte.
-Ok vale... -Naruto comenzaba a sentir nervios, sentía que de esta no se escapaba y realmente no quería, por él contrario aquel chico en su cama de verdad le estaba gustando, más de vista que de conocerlo, pero tal vez sería un paso para llegar a ello. -Y también dime tu nombre, sería incómodo llegar a algo sin siquiera saber tu nombre.
-Sasuke -Sus mejillas empezaron a ponerse rosadas sin que él mismo quisiera pero no lo podía evitar con lo que estaba a punto de decir- Solo...¿Podrías ser amable? Sonará estúpido pero esta es mi primera vez, quizás no lo creas pero digo la verdad.
-... Dame un momento, iré al baño. -Naruto corrió hasta el baño que se encontraba en su habitación, cerró la puerta con llave, tomó su celular y le marco a Chouji. -¿De donde mierdas agarraste a este chico? ¿Por qué es jodidamente guapo? Y ¿Por qué es virgen? ¡Si sabes que también yo lo soy! Me gusto, claro que sí, pero me pone nervioso esta situación... dime que me puedo ir...
-¿En serio creías que eras el único virgen en la universidad? Estábamos buscando tu regalo y cuando dijimos tu nombre él se ofreció solo, lo de virgen fue un extra, ninguno de nosotros lo creía cuando nos lo dijo pero al parecer no bromeaba. ¿Esta bueno cierto? Yo digo que no desperdicies la oportunidad y por fin desflores a alguien...y tu puedas hacer honor a tu reputación. ¡Ah! Y por cierto, es el primo de Madara seguro que hablará de ti con él, así que haz lo mejor que puedas. -Colgó
Naruto dejó caer el celular al suelo, una gran presión estaba sus hombros. Fue hasta el lavabo, se echó un poco de agua fría en el rostro, para después mirarse en el espejo como una autoayuda y decir "tú puedes con esto". Se quitó la ropa y comenzó a estimular su pene, realmente estaba muy nervioso, nunca había tenido sexo y eso de verdad le preocupaba, ya que si en una mujer era difícil meterla, ¿como diablos sería en un hombre? Había leído millones de artículos sobre el sexo anal, pero nunca espero enfrentarse a el tan pronto. Para su suerte, sus amigos le habían dejado en el baño una bolsa llena de condones, lubricante, juguetes y un libro de kamasutra gay.
-Son maravillosos... -Se dijo así mismo con un toque de cinismo. Ya una vez estimulado, salió del baño con las cosas en la mano. Sasuke al mirarlo tampoco pudo evitar un sonrojo. -Lamento la demora, yo... usualmente procuro preparme, ya sabes...
-No lo sé -Le respondió moviendo los hombros hacia arriba y por su expresión se notaba que de verdad no lo sabía -Tu dime como quieres empezar -Se recostó nuevamente en la cama, esperándolo.
"Esto será más difícil de lo que imagine"
Al otro lado de la puerta de la habitación, todos los amigos de Naruto se encimaban para tratar de escuchar algo, sobre todo él familiar, quien de verdad estaba intrigado por saber que tan bien, se podía tener sexo con él famoso Naruto Uzumaki.
-¡Madara! Tu vete de aquí, será muy incómodo para Sasuke cuando le digas que escuchaste todos sus gemidos. Mejor espera a que te cuente. -Le reprendió Kiba.
-¡Mejor! Será una buena burla. -Cuando intentó volver a poner su oreja sobre la puerta, entre todos lo empujaron y lo sacaron del grupo de chismosos. -¡Malditos envidiosos!
Mientras caminaba de regreso a la estancia para seguir bebiendo un poco, una luz al fondo del pasillo de las habitaciones de aquella mansión llamó su atención y por instinto y curiosidad, no dudo en abrir la puerta en su totalidad. La habitación estaba siendo armonizada por música clásica y al dar un vistazo, encontró a un hombre que se miraba fijamente la ventana.
-Creí haber cerrado la puerta con llave... Todos aquellos chicos pasandola bien y yo aquí, bebiendo un buen vino y mi esposa de viaje en el cumpleaños de nuestro hijo, eso no suena bien ¿cierto?
Madara estaba anonadado ante aquella voz profunda y al analizarlo mejor, pudo notar que el hombre poseía una cabellera rubia como Naruto, pudo deducir que era el papá de Naruto. Era como su amigo pero mucho mayor y evidentemente más guapo.
Aquel hombre lo invitó a pasar y con un poco de vergüenza se sentó en un sillón de cuero que estaba en él entro de la habitación. A juzgar por la estantería de libros y el escritorio frente al ventanal, dedujo que era el despacho de aquel hombre, que aún con añoranza veía por la ventana.
-¿Vino? -Le ofreció el papá de Naruto.
-Si...si quiero -Luego de un pequeño regaño interno reaccionó por fin- Usted es el papá de Naruto, ¿Verdad?
-Debo decir que es evidente, después de todo nos parecemos bastante. -En cuanto el hombre se giró con la copa de vino, noto las evidentes semejanzas entre padre e hijo y si tuviera que elegir entre ambos, elegiría 100 veces más al papá de Naruto. -Toma... espero te gusten los vinos de más de 23 años. -Se sentó a su lado.
-Conozco de vinos -Decía con orgullo- Y se que los que están bien añejados son mejores. A más edad...mejor es el sabor. -No estaba seguro si lo que acababa de decir fue oportuno o se había pasado de la raya pero no perdía nada con tantear terreno.
-Vaya... al fin mi hijo trae amigos conocedores del buen vino. Son de tu preferencia los ¿suaves o más duros? En sabor, cabe aclarar. -Conforme tomaba más rumbo la conversación, el mayor se acercaba aún más al chico.
-No me gustan tan dulces, ni tampoco tan agrios. Los prefiero...como decirlo, en su punto. Aunque siempre hay alguno que me pueda sorprender pero eso hace mucho no sucede es una lástima.
-Entiendo... -Posó su mano sobre su pierna. -Ha de ser frustrante no encontrar nada que se ajuste a tus gustos ¿no? -Madara comenzaba a sentir el aliento del mayor en su cuello. -Y estas consciente de que no estamos hablando de vinos, desde que entraste a la habitación. ¿Verdad?
-Yo no imaginaba que un hombre pudiera tener interés en...¿Como lo dijo hace unos momentos? Creo que usó la palabra "niños". ¿Por qué yo sería diferente?
-Porque eres un niño diferente con el que me puedo divertir usando juegos de palabras y referencias. -Sin escrúpulos, tomó el rostro del Uchiha y lo acercó al suyo para culminar la plática en unos besos apasionados, que no terminaron y no pretendían acabar por un buen rato.
Regresando a la habitación donde todos esperaban a que se escuchará la acción, Ciertamente Naruto moría del miedo, si bien había salido del baño con su pene ya estimulado pensar en el chico que apenas conocía en su cama nuevamente le puso los nervios de punta y por ese pensamiento lastimosamente su miembro se había "bajado" de nuevo, por lo que fue necesario recurrir nuevamente a la estimulación manual mientras abría el empaque del condón con los dientes. Podía sentir la mirada de Sasuke sobre él y claro eso lo mantenía aún más nervioso, complicando aún más la estimulación y pensar: ¿Cómo demonios se pone esta cosa?. Porque la realidad es que jamás había llegado tan lejos como para ponerse a pensar como se ponen correctamente los preservativos.
Cuando milagrosamente lo logró, nuevamente miró a Sasuke quien por más raro que pareciera, no parecía aburrido o abrumado por la extraña situación, solo estaba ahí esperando por él. Instintivamente, se subió sobre él restregando sin haberlo planeado su miembro con él de Sasuke, causando un gemido involuntario de ambos. Eso destenso un poco a Naruto, ya que podía pensar que a Sasuke podría comenzar a incomodarle la situación, pero el mismo debía darse ánimos para seguir y de verdad pensar que lo haría bien así fuera su primera vez.
Comenzó besando su cuello, no sabía si lo hacía bien, pero a Sasuke no parecía molestarle por lo tanto continuó con más besos por todo su cuerpo pero deteniéndose en el principio de sus bóxers ¿Como debía continuar? Ante la incógnita y la premura, tomó sin mucho cuidado, el pene del moreno y lo apretó haciendo que éste emitiera un quejido y un gesto de dolor. Preocupado trato de animarle con unos dulces besos en sus labios para apaciguar, aunque la erección de su compañero comenzaba a bajar y la de él también, por eso como acto desesperado, bajó los bóxers y sin mucha experiencia se engulló el miembro de Sasuke en la boca, provocando de inmediato un grito y a la vez que se pusiera duro de nuevo. Mientras continuaba con su "blowjob", como él había leído que se llamaban, busco el lubricante y gracias a sus lecturas, colocó bastante en su mano y la pasó por el trasero de Sasuke y buscando su entrada, claramente notó su incomodidad al sentir la mayor parte de su trasero pegajoso. ¿Qué no se hacía así?
Lo que continúo después de el blowjob, fue colocarse nuevamente sobre Sasuke y nuevamente trataba de estimularse para pasar a la mejor parte. Después de muchos intentos en encontrar la cavidad de Sasuke, al fin lo logró y todo funcionó de una manera perfecta por los próximos 11 segundos...
-¿Ya terminaste? -Le soltó Sasuke mientras miraba hacia el techo y abrazaba a Naruto.
-No... no solo que no me pude resistir y pasó eso, pero créeme, no soy precoz o una cosa por el estilo. -Naruto volvió sus manos hacia su miembro para volver a la acción.
-¿Ya estas listo? -Todo el rato que Naruto se ayudaba a si mismo Sasuke no había dejado de observarlo, otra vez, haciéndolo complicado, nuevamente .
-Ya voy, ya voy... ¡Listo! -Sin pensarlo mucho, Naruto volvió a encimarse sobre Sasuke para continuar su trabajo, el cual, tomó por lo menos 10 minutos, lo cual fue 9 minutos y 50 segundos más que la primera vez.
Al final los dos llegaron al orgasmo. Ahora estaban mirando al techo sin decir nada hasta que Sasuke se levantó y como si fuera lo más normal del mundo empezó a recoger y a ponerse su ropa.
-¿Ya te vas? -Naruto al mismo tiempo se ponía sus pantalones e intentaba ayudar a Sasuke, quien sin mirarlo a los ojos, tomaba sus cosas lo más rápido posible y salió de la habitación. -¡Claro! Llámame... -Inmediatamente, Naruto cayó sobre su cama con sus manos sobre su frente, sabía lo mal que lo había hecho y ahora Sasuke correría el rumor de que no era el semental que toda la universidad creía. En cuestión de minutos su celular sonó y no era nadie más que su mejor amigo. -Te odio... -Contestó.
-¿Qué? Lo que deberías decirme en estos momentos es todo lo contrario a eso. ¿Qué se siente dejar de ser virgen?
-¡Terrible! Todo salió mal, el chico salió sin decirme ni una sola palabra. Primero me vine en los primeros 11 segundos y después duré 10 minutos. Soy terrible para esto.
-¿No fue mejor así? Digo, no creo que quisieras una despedida incomoda o que finja estar enamorado de ti, amigo son lo peor, te lo digo yo. Al menos con más experiencia podrás mejorar no te desesperes. ¿Te preocupa que este rumor se expanda?
-Un poco sí... creo que iré a buscarlo, le diré la verdad, me disculpare y lo intentaré de nuevo. Aunque es primo de uno de mis mejores amigos, me gusto, de verdad y se los agradezco... creo que fue bueno hacerlo con él... fue el indicado.
Al día siguiente, Naruto se la pasó buscando a Sasuke por todo el campus de la universidad. Lo cual resultaba verdaderamente incómodo, ya que por una paranoia creía que todos lo miraban como él mentiroso que era, incluso sospechaba de sus amigos y mientras almorzaban trato de sacarles la sopa, ya que todos estaban inusualmente callados
-Y... ¿Escucharon algo anoche?
-¿Te refieres a cuando abrias tu regalo de cumpleaños? No -Le sonreía Sai.
-Pensamos que lo mejor era darles su espacio y su privacidad. -Comentó Kiba
-El chico era virgen, no queríamos avergonzarlo con todos nosotros fuera cuando saliera. Pensamos que era lo más prudente. ¿Alguien si se quedó?
-No -Madara había estado mirando su comida todo el rato, no había mirado a Naruto desde que llegó- Yo estaba...embriagandome en otro lado de la casa. Bastante ebrio.
-¿Por qué no me miras Madara? -En su paranoia, creía que Sasuke ya le había contado todo.
-¿Que? Puff -Madara reía nerviosamente- No digas tonterías claro que te miro -Mentira, trataba de huir de su mirada enfocándose en cualquier otro lugar.
-Con permiso. -Sin decir más Naruto se levantó de la mesa en una búsqueda aún más desesperada por Sasuke, ahora tenía más sospechas aún de que le había contado todo a Madara.
Sin ningún éxito alguno, volvió a casa e intentó marcarle, gracias a que Chouji tenía su número pero ni aún así contestó, era obvio que no contestaría después de todo, era un número desconocido.
Al estar en la sala de su casa comenzó a revisar redes sociales, donde posiblemente estaban ya corriendo rumores sobre que él era una farsa y además virgen. Afortunadamente, no encontró nada y al contrario encontró más rumores y mejores.
-Donde se lleguen a enterar estoy perdido. -Mientras seguía sobándose la sien, sonó el timbre de su casa y corrió a abrir, llevándose la sorpresa de quien estaba en el portón, era ni más ni menos que a la persona que había estado buscando. -¡Sasuke! -Lo jalo y lo llevó a la sala. -¡Te estuve buscando por toda la universidad!
-¿Por qué no simplemente le preguntaste a mi primo? Hasta donde entiendo los dos se llevan bien. -Sasuke lo miraba levantando una ceja.
-Porque él desgraciado ni me miraba a la cara, estuvo muy raro en el almuerzo. -Naruto se cruzó de brazos. -¡Le contaste! ¿Cierto?
-¿Podemos ir a tu cuarto? Se donde queda -Se adelantó sin pedirle permiso si quiera.
-Demonios... -Naruto lo siguió y para cuando llegaron a la habitación, el rubio la cerró con llave. -Ya dime... ¿Se siente bien revelar mi secreto? -Cabizbajo solo miraba los zapatos de Sasuke, estaba listo para la pedrada.
-Te digo algo. Cuando pensaba en cómo sería mi primera vez con alguien imagine algo un poco más...-Hacia muecas en un esfuerzo de hacerse entender sin usar las palabras.
-¡Ya se! Lo siento mucho es que yo...
-Por eso quería hablar contigo. Después de mucho pensar entiendo que fue lo que sucedió -Lo miraba directamente a los ojos- Eres virgen...o bueno eras virgen, ¿No es así?
-Si... y lo siento mucho, yo sé que los rumores dicen mucho...
-Lo sé, sé lo que dicen todos los rumores por eso estaba bastante....creo que la palabra es sorprendido. Creí que sabías lo que hacías y por eso no intervine pero debo decirte que fue bastante terrible. No soy quien para hablar porque tampoco tengo un historial largo en lo que se refiere a relaciones sexuales pero hasta yo se como usar un condón -Cerraba los ojos por momentos como si rememorara lo que había pasado la noche anterior- Te vi masturbandote más veces de las que pensé que lo harías y francamente fue un golpe a mi ego...me sé atractivo por lo que cruzó por mi mente la idea de que no era tu tipo y por eso no te excitabas, incluso pensé en pedirte que te detuvieras e irme tan pronto de aquí como me fuera posible para evitarme la vergüenza... al final no se porque no lo hice pero lo que siguió después de eso bueno...te agradezco que trataras de hacer lo mejor posible después de todo eso me evito un dolor innecesario el día de hoy pero todo eso no se asemeja en nada a la idea que tenía de una noche contigo.
Naruto al escuchar todo lo que sentía Sasuke, sintió bastante vergüenza puesto que sabía que lo había hecho mal, pero no tan mal.
-De verdad lo siento mucho. -Bajo su rostro -pero a pesar de todo, realmente lo disfruté y me gusto. Y ante todo a mi si me gustaría intentarlo bien contigo... claro si tú quieres, es decir, después de la terrible noche que te hice pasar.
-Me lo imagine. No te culpo por lo de los rumores es una presión muy estúpida que supiste resolver. Imagine que eras virgen porque yo me hubiera sentido igual o peor de nervioso que tú y no te culpo por querer hacerlo bien. -Se le acercó un poco- En serio me gustas, de lo contrario no habría accedido a todo eso que viste anoche, así que si podríamos hacerlo bien esta vez. Solo no intentes hacer algo que no sabes, algunas "cosas" que intentaste si llegaron a lastimarme.
-De acuerdo, seré más cuidadoso. -Guardó silencio por un momento -Entonces... ¿No le dijiste a nadie? -Naruto por instinto y felicidad, abrazo a Sasuke rodeándolo por los hombros.
-No. Todo lo que ocurrió en la noche solo quedó entre los dos. No gano nada divulgando ese tipo de cosas con las demás personas. ¿En serio creíste que se lo había dicho a alguien más?
-¿No se lo dijiste a Madara? Pero en serio actuaba raro, de verdad me hizo pensar que ya lo sabía todo, después de todo era él a quien le interesaba cómo es que yo cogía.
-Sobre eso...-Sasuke se empezaba a poner incómodo- Mi primo cogió con tu papá.
-¿Disculpa? -Naruto al instante soltó a Sasuke. -Estás bromeando ¿verdad?
-Me gustaría decirte que si, pero no. Hay quienes dicen que lo vieron salir del despacho de tu papá y se estaba arreglando la ropa -Su cara volvía a desfigurarse a causa del tema tan incómodo- Y él me lo confirmo, me dio detalles.
-Ok mira no quiero saber nada, después de todo mis padres siguen casados, si tienen sus problemas y mi mamá se fue en mi cumpleaños pero...
-¿Estás seguro que no quieres saber? Si menciono eso pero también dijo que luego de besarse lo sujetó con fuerza y con todo el deseo lo...
-¡Basta! Por favor... no quiero saber más de lo que hace mi papá con... muchachos de mi edad que horror. -Un escalofrío recorrió la espalda de Naruto. -Solo espero no verlo muy seguido por aquí.
-Tampoco quiero saber nada, no pude evitar que me contara hasta el más mínimo detalle pero no quiero saber nada más -No pudo evitar reír bajo dado que los dos tenían la misma expresión de asco.
Resolviendo los malos entendidos ambos decidieron comenzar una relación, donde ambos podrían experimentar una vida sexual sin preocupaciones y presiones. Podría parecer un amor a primera vista, por parte de Naruto si, aunque Sasuke siempre había deseado ese momento desde que veía a Naruto a lo lejos del campus. Nunca le habían importado los rumores el solo deseaba perder su virginidad con la persona que le gustaba, es verdad que no había salido para nada como se lo imaginaba pero al final todo resulto mucho mejor, para ambos. Quizás en el futuro podrían tener una verdadera primera vez mas memorable.