Galería de fotos
Akabane Karma era su peor pesadilla, el muro que dividía su total éxito sobre todos, una piedra en su zapato, la uña enterrada que quería extirpar…
Tal vez por eso Asano no soportaba verlo caminar por Kunugigaoka de manera relajada… ni siquiera notaba la miradas de desprecio de muchos estudiantes o de algunos sonrojos entre sus compañeras. Con su maleta al hombro y la canción que escuchaba en sus labios como un silbido abrió su casillero de zapatos… comenzaba un nuevo día sin ningún tipo de tropiezos.
- ah, pero mira a quien tenemos aquí, señor numero dos – los esbirros de Asano-kun eran molesto, en realidad si fuera un día normal ni les dirigiría la palabra.
Pero hoy se sentía benevolente, ni siquiera esos idiotas le arruinarían su día, estaba incluso de buen humor para poder perdonarles la vida.
- solo me tome un descanso, después de todo, esforzarse para ser el número uno todo el tiempo me hace perder la diversión de verlos a ustedes llegar en puestos más bajos, sin embargo soy condescendiente –
Karma sonrió con prepotencia al ver como esos idiotas se molestaban por unas cuantas palabras. Se llevó su mochila al hombro de nuevo y les dio la espalda para seguir tarareando hasta su salón.
El pelirrojo logro ver al chico del otro lado del pasillo, se notaba su mirada que detestaba siquiera verlo allí, así que sonrió con prepotencia y siguió su camino sin siquiera molestarse en provocar al contrario… definitivamente Karma andaba de un humor extraño.
Asano Gakushu se encontró totalmente desconcertado. Incluso pensó que su rivalidad era lo que más le divertía al pelirrojo, espero que su derrota en los exámenes del primer trimestre le molestara, pero se había equivocado.
- ese infeliz de Karma – esbozo con molestia Koyama, segundado por Araki y Seo. – Se cree superior a pesar de que obtuviste el primer puesto -
Pero él sabía que Karma tenía algo que ocultar tras esa mascara de desinterés total y Asano quería averiguar que podía hacer que su rival jurado le importara un pepino todo.
- ¿eh? ¿Qué es esto? – Sakakibara llamo la atención de sus otros compañeros, recogiendo del suelo un celular de forro rojo.
Todos sonrieron de forma siniestra.
- es el celular de Akabane… podríamos ver cuál es la verdadera cara de ese idiota… de seguro no es tan listo como todos piensan –
- te apuesto a que tiene porno – Koyama se acercó con una sonrisa malévola dispuesto a desbloquear el celular.
Sakakibara sintió como le arrebataban el celular de las manos, los demás se quedaron callados al ver la mirada amenazante de su líder.
- no sean ustedes los idiotas, así no se derrota a un enemigo… me hare cargo de devolverle esto – les dijo con molestia mientras se retiraba.
Los chicos se quedaron en silencio, reflexionando en lo increíble que era su líder.
Gakushu por otro lado sonrió con el celular en sus manos, el primer semestre no había logrado hacer hablar a Karma de esa misteriosa clase E, pero con su celular en mano podía chantajearlo, o tal vez sus compañeros tenían razón y todas las respuestas que quería podían estar en ese celular.
-.-
Karma busco en su mochila varias veces su celular, tal vez se le había caído sin darse cuenta, después de todo esa semana estaba bastante distraído… todos lo notaron, profesores, alumnos, padres. El único que no se había dado cuenta de su extraña actitud era el mismo.
- ¿Qué buscas Karma? –
Levanta el rostro y se encuentra con unos ojos azules y una sonrisa apacible…
- mi celular, creo que lo extravié por algún lado – Nagisa se iba a burlar, pero la expresión de Karma se veía angustiada ante esa capa de seguridad.
- si te preocupa mucho te puedo ayudar a buscarlo… – el pelirrojo asiente, no se negaría a un par de ojos extra – es extraño verte con esa cara de preocupación, no creí que tu celular te importara tanto -
- no es el aparato… es lo que tiene dentro – buscaba por entre los pliegues del mueble totalmente concentrado – son memorias –
Nagisa se queda mirando su perfil, sin notarlo se sonrojo, era una cara totalmente diferente a la que expresaba todos los días, no había arrogancia en ella. Y ahora que lo pensaba Karma solo usaba su celular para tomar fotos en la clase E, de sus compañeros, de las salidas… entonces pensó que si hubiese coleccionado tantos recuerdos como Karma el estaría igualmente preocupado.
Por otro lado, Karma sudaba frío mientras se empañaba cada vez más en su búsqueda, esperaba encontrar pronto su celular, había una carpeta que nadie, absolutamente nadie además de él podía ver.
-.-
Gakushu desvió su mirada al celular rojo, aun con todos sus libros y la cantidad de material que tenía que estudiar no podía concentrarse teniendo una mina de oro a su lado.
Decidió sabia mente dejar el estudio por un segundo y agarrar el teléfono, la curiosidad le picaba las manos y le volvía impaciente. Para su fortuna, Akabane era tan confiado que ni clave le tenía al celular.
- pero que arrogante – sonrió al ver cómo iba directo al menú principal.
Se fue decepcionando con forme pasaban los minutos y espiaba sin permiso la privacidad de uno de sus peores enemigos, no había mucho de que sacar, estaba limpio. No había nada en notas, ni mensajes de voz, absolutamente nada, Akabane resultaba irritantemente cuidadoso… eso pensó hasta que llego a la parte de galería.
Para su sorpresa eran fotos de el con una sonrisa y con alguno de sus enemigos debajo de él, derrotados, golpeados y poniéndoles barras de Wasabi, curri y picante en la nariz… le dio un tic en el ojo, no podía creer que ese gusano que había llegado a considerar su rival tuviera mañas tan infantiles.
Dejo el celular al lado, frustrado de no encontrar mucho material, entonces fue cuando una carpeta apareció en la pantalla con el nombre más extraño que pudo imaginar
¿Qué quería decir “genero dudoso”?
Le dio clic a la carpeta y por más extraño que pareciera ese sí que tenía clave.
Arrugo el entrecejo, definitivamente Karma era la persona más extravagante que él hubiera conocido ¿Quién dejaba su celular sin clave pero se la ponía a una carpeta?... de seguro debía contener algo que ese sujeto no quería que nadie supiera.
Con la curiosidad renovada, de sentó en su cama, a pensar un par de minutos con detenimiento, tenía límites de intento así que supuso que debía ser algo importante para el pelirrojo…
Entonces una pequeña pista le vino a la mente, posiblemente había un 2% de estar equivocado, pero valía la pena intentarlo.
- debe ser una broma – solo necesito un nombre.
Había logrado entrar.
Comenzó a ver la cantidad innumerable de fotos en las que salía el chico, con coletas, sin coletas, con el cabello largo, con el cabello corto, con uniforme, besando a una chica, en vestido… ya va, un minuto.
Sus mejillas se entonaron de rojo al instante, si sabía que Nagisa Shiota tenía algo raro para ser un chico, ese tamaño minúsculo, su delgadez, su cabello en coletas y su estrecha figura… era atractivo para ser run chico, pero seguía siendo un chico. Así que jamás se imaginó verlo como alguien que le atrajera, era realmente espeluznante como se veía mejor que muchas chicas.
No se esperó que al verlo en esa foto, con esa vestimenta de loli, su corazón comenzara a acelerar a un ritmo antinatural.
- que absurdo… no sabía que ese idiota tenía este tipo de aficiones – menciono refiriéndose a Karma… aun que podía ser solo para molestar a Nagisa, que en realidad no le sorprendería viniendo de Karma. Lo cierto es que tenía una cantidad alarmante de fotos de Nagisa y eso era sospechoso. – hubiera sido mejor encontrar porno -
Fue pasando una en una, donde aparecían los dos juntos o solo el peli azul. Y había algo en Gakushu que le hacía sentir que esas fotos significaban algo más, tal vez el ángulo o porque su modelo era inesperadamente atractivo a sus ojos… o sencillamente estaba cansado de estudiar. Pero lo cierto es que a cada que pasaba las fotos había algo en la mirada de Karma que era distinto a las primeras.
No fue hasta la última que se dio cuenta de la verdad.
La última y más reciente, tomada hace 24 horas, cuando Karma estaba tan insanamente feliz que daba asco…
Era más simple que las demás, era el peli azul durmiendo, entre sabanas con el cabello corto, por lo que podía notar, era lógico que el pelirrojo había tomado la foto… con eso decidió salir y apagar el celular, voltearlo y no volverlo a mirar más.
Pasaron unos minutos de total silencio antes de que Gakushu decidiera levantarse totalmente molesto y salir corriendo al baño, no sin antes lanzarle un mal de ojo al condenado celular.
Mientras se encerraba furioso, maldecía al malnacido de Karma Akabane y su suerte. Porque hasta los momentos no conocía otra condenada manera de bajar la molestia entre sus pantalones que ayudarse con una ducha…
Desafortunadamente para Asano Gakushu, eso no funciono, así que no le quedo de otra que ayudarse con su mano y la galería de fotos de Nagisa Shiota.
-.-
- tranquilo Karma, sé que lo encontraras – el peli celeste anima a Karma con una sonrisa mientras se ponía sus guantes, el invierno estaba comenzando y salía temprano de su casa para poder acompañar a Karma hasta la escuela.
Ya era rutina que Karma lo buscara todas las mañanas.
- ¿eh?... si el celular, tal vez lo deje en los casilleros – dijo más distraído, trataba de hacer memoria de la última vez vio el aparato.
- tranquilo, debe haber una manera de recuperar todas esas fotos del verano anterior en la clase E… -
- ¿Qué fotos?... – Karma no se habia dado cuenta de su error hasta que el silencio de su compañero fue mucho más prolongado de lo normal – ah… si las fotos, si eso es lo que me preocupa –
Si algo era malo Karma, era en mentirle a Nagisa.
Trato de que fuera casual, de que no notara que estaba nervioso y siguió caminando, al menos hasta que sintió el fijo de un cuchillo apuntar a su garganta, muy cerca, muy afilado, muy peligroso.
- ¿Qué es lo que tiene tu celular que te preocupa tanto… Karma? – su voz era sombría y su mirada estaba tapada con su flequillo, algo que Karma no quería admitir, le daba algo de escalofrió.
- no es lo que tú piensas – alza las manos en son de paz con una sonrisa encantadora, solo para que el menor dejara sus instintos asesinos aun lado. – en serio Nagisa… -
- Karma – iba a ser degollado allí mismo.
- ¡Akabane! –
La pareja miro hacia el origen del llamado y Nagisa no tuvo otra opción de esconder el arma entre su abrigo, Karma jamás admitiría que sentido alivio de ver a Gakushu allí.
- ¿Qué es lo que quieres Asano? –
El plan de Gakushu era entregarle el endemoniado aparato al degenerado de Akabane, solo eso, nada más… pero al ver al Nagisa Shiota junto a Karma, con ese cabello corto, esos ojos azules y ese rostro delicado sus fuerzas flaquearon y por una escala muy corta titubeo.
- toma tu celular… deberías tener más cuidado donde lo dejas – paso de largo y le entrego el aparato con la arrogancia de siempre. – tiempo sin verte Nagisa – sus ojos se desviaron al chico que simplemente asintió por cortesía – te vez mejor con ese corte – simple corto y conciso, ni siquiera se detuvo a nada más.
Karma y Nagisa no entendían que había ocurrido allí, pero había ocurrido algo bueno de eso, e pelirrojo finalmente recupero su teléfono y en definitiva no volvería a perderlo de vista.
Fin