Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

SWEET MISTAKE por Blacktsuki

[Reviews - 4]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Hola de nuevo, se que no he terminado el anterior pero este fic se me ocurrio es mas comico, espero les guste

Desde que regrese a Asgard, he estado bastante irritable, no soporto que los guardias me sigan o que la gente cuchichee cuando camino por los corredores del palacio,  puedo notarlo, no soy tonto; incluso noto como mi hermano también está constantemente vigilándome, cuando no está en Midgard

Mi madre finalmente había logrado que me sacaran de aquella jaula de cristal, en la cárcel de Asgard, Odín y mi hermano a pesar de estar renuentes, lo hicieron, lógicamente fue todo gracias ella, si no nunca hubiera pasado.

Sobre todo si dependiera de ese viejo necio y suspicaz, no confía en mí y no lo culpo, en verdad pienso quitare del  trono; no hay nadie mejor para gobernar que yo; ni siquiera ese torpe Odinson.

Por otra parte, en cuanto a mi hermano, el Dios del Trueno…vamos él es… es algo más simple, por un lado espera que cambie y por otro duda que lo haga, sus estados de humor cambia simplemente igual que el clima.

Así que finalmente podía recobrar mi habitación, sé que en realidad sonare mimado, pero lo que pase en la cárcel,  no se compara con como lo pasan los demás prisioneros del lugar, yo tenía prácticamente todos mis lujos, una cómoda cama, libros, alimento tras veces al día,  gracias a mi madre.

 -Amor, no debes guardar rencores, nuestra vida se prolonga al igual que nuestras acciones, y un sentimiento así solo te hace daño en tu espíritu- dijo mi madre, el día que logro que me sacaran de la jaula, estaba preocupada ya que no había comida por días.

-Sobre todo para tu hermano, él te ama en verdad demasiado, desde que llegaste el simplemente se prendo a ti- decía mi madre acariciando mi espalda y había llevado comida que ella misma hizo y espero a que comiera.

En verdad quisiera que fuera sencillo poder olvidar este odio, tan rápido como ella quisiera, lo haría, por ella, por supuesto. Pero es una tortura lo que he pasada, nunca he sido digno a los ojos del Padre de Todo, desde pequeño he tratado de que él me reconozca, ahora ya no me importa, se quién soy y de lo que soy capaz.

Finalmente tenía acceso a la biblioteca había encontrado un libro que llamo mi atención, prolongar o acortar la vida, sabemos que los Dioses somos muy longevos, pero no inmortales, estamos atados al ciclo de vida igual que cualquier cosa en el universo, pero y si podía no ser así.

El hilo dorado del destino, donde todas las vidas humanas están mezcladas en el avance de la vida y los futuros probables, donde los hilos se tensan, se enredan, se trozan y se vuelven a unir;  en una visión hacia las dificultades que surgen a lo largo de nuestra vida, en teoría somos dueños de nuestro destino, pero hay ocasiones que el patrón lleva a los mismos puntos y finales.

Una posibilidad perfecta para manipular los hechos presentes, pasados y futuros; decir por otros mundos alternos y divergentes, perfecto para mis planes de conquista, solo debía de no levantar sospechas, lo cual como es obvio, era imposible, así que lo llevaba a plena vista y poco a poco.

Había convencido a mi madre de que al menos seguiría estudiando como siempre hasta que fuera digno de su confianza y la del Padre de Todo, sorprendentemente Odín accedió a dejarme, supongo que porque Odinson estaba constantemente detrás de mí al asecho, pero vamos no es muy brillante.

-¿Qué haces hermano?- pregunto Thor, acercándose a la ventana en la que estaba sentado disfrutando de la lectura y la briza.

-No soy tu hermano,¿ lo olvidas?. Y estoy leyendo, ¿no es obvio?- dije sin apartar la vista del libro que leía.

-Sigues con lo mismo- dijo cansino Thor arrastrando una silla para acercarse a mí- somos hermanos, puede que no consanguíneos, peor lo somos, y te aprecio mucho.

-Si claro, tanto que me traes amordazado y esposado, para un castigo del Padre de Todo y para encerrarme en una cárcel; note que incluso fue tu iniciativa sacarme de allí, tu mortificación seguro no te dejaba dormir, a tal grado que ahora pretendes ser mi sombra para saber si me encuentro bien…o espera, creo que es  más bien que temas que haga algo - dije desdeñoso dejando el libro y mirando esos ojos azules que siempre demandan mi atención.

-Loki, sé que no lo parece pero en verdad me preocupa; y si te sigo si es porque temo que hagas algo que haga que deba detenerte nuevamente y defraudes la confianza de nuestra Madre- dijo Thor frunciendo el ceño.

-Encantador, como siembre ¡oh gran poderoso Dios del Trueno!- dije desdeñoso parándome y llevando el libro conmigo.

-Solíamos llevarnos mejor cuando jóvenes, ¿En verdad me guardas tanto rencor, hermano?- dijo Thor sujetando mi muñeca, aun sentado en la silla.

Lo miro despectivo desde mi altura, debo admitir que hay algo que siempre hace que mi pecho duela cuando miro esos ojos azules llenos de incertidumbre y tristeza, pero mi orgullo ahoga esa sensación.

-Aquellos tiempos que mencionas solo fueron una ilusión desdeñosa que creo Odín para capturar mi esencia, por el miedo de que yo obtenga lo que por derecho me corresponde- dije sin más tirando de mi mano, dejando de ver aquellos ojos y su expresión, no soy capaz de aguantarla tanto tiempo.

Camino a mi habitación podía sentir su presencia de tras de mí, no era necesario voltear para reafirmar que me seguía, sentía sus ojos en mi espalda y eso me irritaba, cree varios hologramas para tratar de evitarlo, deseaba estar solo, hice que todos corrieran distintas direcciones, Thor se quedó de pie mirando a cual seguir, esperaba que se confundiera.

Cuando logre evadirlo me encontraba de nuevo en uno de los jardines, me interne en uno de los laberintos, esperando por fin seguir con mi labor, cuando me topé con mi Madre.

-¿Decidiste salir a leer al aire libre?- dijo Frigga acercándose. Coloque el libro a mi espalda.

-Si hace un buen clima- dije aun que de antemano sé que mi madre no cae tan fácil como los demás, ella si me conoce a la perfección.

-Cariño, vi a Thor perseguir una de tus hologramas frustrados y regresar en sus pasos, sabes que solo quiere enmendar las cosas- dijo Frigga sentándose e indicándome que hiciera lo mismo.

-A demás en Asgard siempre hace buen clima- comento cuando comenzó a relampaguear y a nublarse- siempre que Thor no haga un berrinche- añadió sonriendo.

-¿Es un crio o qué?- dije cubriéndome cuando la lluvia callo de golpe. Mi madre solo se rio dejando que la lluvia callera sobre su tocado, me quite mi capa y la cubrí para encaminarla a un lugar techado.

-Valla que interesante lectura- dijo mi Madre, había olvidado por completo que llevaba el libro cuando lo tomo en sus manos.

-Haaa si, ya lo creo- dije,  la verdad es que ella me enseño casi todo lo que se, esperaba que no sospechara nada.

-El hilo dorado del destino las conexiones entre la feminidad y las tareas de hilar y tejer, así como distintas visiones del poder femenino, de eso trata este libro de hechizos,- dijo ojeándolo.

-Te recomiendo que tengas una buena interpretación del hilo, ya que muchas generaciones han creído o interpretado más bien, esto de manera errónea, incluso aun no conocemos el poder completo de este hechizo, la clave de temporalidad es difícil de entender tanto puede ser un punto de partida, como nexo para reflexionar sobre distintos aspectos de las vidas.

Mi madre me devolvió el libro, yo la miraba inquietado, ella sonrió y saco un pañuelo para secar mi rostro.

-Lo que planes, medítalo antes de que las cosas salgan de control, ya que el hilo del destino también es  considerado el hilo rojo, en el cual dos personas conectadas, pues su historia transita el mismo rumbo, sin importar el lugar, el tiempo o las circunstancias, nuestros destinos se unen con otros, nunca estamos solos- dijo Frigga marchándose.

Me quede pensando un rato mirando el cielo viendo como caían rayos en algunas partes.

-Estúpido Thor-dije al ver como se acercaba seguramente se había desecho de la mayoría de los hologramas, nuestros ojos se miraron directos y venia hacia mi bastante molesto.

Me gire y me alegue lo más rápido que podía, no lo suficiente al parecer, ya que Thor me tomo de espaldas y me levanto completamente.

-Suéltame, tu troglodita- dije molesto pateando y tirando de su brazo, pero literalmente me puso como costal en su hombro sin hacer si quiera esfuerzo.

-Debemos hablar- dijo simplemente con su tono molesto, mientras seguía caminando conmigo al hombro.

-No, no hay nada que quiera tratar contigo- dije tratando de invocar mis armas, pero una descarga en mi cuerpo me hizo desistir.

Thor prácticamente me aventó a mi cama, me había llevado a mi habitación, estaba frene a mi mientras trataba de incorporarme.

-¿Qué es lo que tramas? Te he visto, mi Madre lo sabe y está preocupada, si te sigo no es porque mi padre me lo pidiera, sino porque ella lo hizo- dijo Thor soltándolo de golpe.

Debo decir que me sorprendí, en verdad ahora entiendo el por qué me dejo cubrirla quería tomar el libro, quería saber de qué se trataba, mi insistencia en aprender más cosas; siempre ha sido muy suspicaz.

-¿Loki?- dijo Thor sacándome de mis pensamientos, comenzaba de nuevo a sentirme molesto.

-No sé de qué hablas- dije sentándome en la cama, bastante frustrado, mi Madre me está vigilando la única persona que creí que podía entenderme.

-Deja ya de evadirme, entiéndelo te amamos, pero no estas ayudando en nada- dijo Thor inclinándose hacia mí –Mi madre y yo en verdad queremos que las cosas fueran como antes.

-Una mera fantasía- dije irritado, sentía que la sangre me hervía-  Creí haberte dicho que quería estar solo.

-En serio Loki, ¿dime que debo hacer para que confíes en mí?- dijo Thor bajando el tono de su voz, sus hombros se relajaron y se hinco en el piso para estar frente a mí.

-Podrías empezar por hacer lo que te pedí…déjame solo- dije cada vez más molesto.

-Estoy hablando en serio- dijo de nuevo casi a gritos Thor.

- Yo también, lárgate- dije apretando el libro que tenía aun en las manos, que  comenzó a brillar, de haber notado que algo sucedía podría haber evitado tanta complicación.

-No lo hare, hasta que me asegure de que en verdad no estás haciendo nada- dijo Thor, fue todo tome el libro sin pensarlo.

-Moiras, tejedoras del destino- dije tomando el libro y comenzando a recitar.

Mis ojos brillaron el libro respondió, comenzó a rodearme aquel brillo de forma sutil como pequeñas luciérnagas, hasta comenzar a girar más rápido.

Thor me miro alarmado se puso de pie, un circulo de luz comenzó a rodear donde me encontraba sentado -Entre el nacimiento y la muerte, tiempo de la vida a por el que nos deslizamos sin saber de cuánto tiempo disponemos, pero con la certeza de que ese tiempo es limitado sujeción al dinamismo y al cambio irreversible –

-¿Qué crees que estás haciendo?- dijo Thor tratando de quitarme el libro pero el círculo mágico lo impidió.

- Moiras, también denominadas Parcas, ustedes que gobiernan la dimensión lineal e irreversible de cada vida humana – Thor saco su martillo y comenzó a agitarlo para lanzar un ataque, lo mire determinado.

-Cambia la naturaleza de este ser finito en devenir y la precariedad originaria que se deriva de su condición natural a la de un  seres mortal.- lo había hecho, debo decir que esperaba otros resultados, el hechizo era para el Padre de Todo, pero al fin y al cabo debía de probarlo.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).