No es hasta que recibe una llamada de emergencias, que sabe que ese puesto le corresponde a él. Sorpresa es poco para describir lo que sintió. La pregunta nunca abandonaba el fondo de su mente (y no será hasta años después que descubrirá la respuesta), ¿por qué yo?
I
Había sido un día bastante aburrido y monótono, una misión bastante simple en las afueras de Konoha para recuperar un pergamino. Poco remarcable. Nada demasiado especial, Naruto cayéndose a un lago, Sakura riéndose de fondo para luego ofrecerse a ayudarlo, Kakashi en algún lugar de Konoha no asistiendo a la misión. Nada fuera de lo normal.
Una simple misión rápida.
Así que, tumbado en su sofá leyendo un libro, queriendo disfrutar de esa tranquilidad, deja que su teléfono suene, y se centra en la lectura, sin darle la más mínima importancia.
Unos minutos después el teléfono vuelve a sonar, insistente, y ahora sí, ante la llamada que perdura y retumba en su cabeza sin dejar que se centre en el libro, coge el móvil del segundo estante, frente al sofá. Se queda mirando la pantalla. Número desconocido.
"¿Quién es?" Pregunta. No se molesta en un saludo porque él no tiene tiempo para una esto. Él quiere seguir con su lectura, muchas gracias.
"¿Es usted Sasuke Uchiha?" Preguntan al otro lado de la línea.
"Sí, por supuesto. ¿Y usted es…?"
No escucha demasiado después de eso, palabras sueltas, largos silencios encerrados en su mente, huecos, largos, infinitamente largos hasta que finalmente dice algo que su cuerpo consigue retener. Remarca algunas palabras. "Contusione leves, un poco de erupción y una conmoción cerebral". Seguidamente, tras esas palabras que suenan a aire fresco u puro que corre a sus pulmones, abandonan su cerebro y todo lo que piensa es "Naruto".
"¿Dónde?" Pregunta, las letras unidas en un suspiro.
"Primera planta del hospital." Cuelga después de eso, y antes de ser consciente de sí mismo, está corriendo.
Ni siquiera se ha parado a pensar porqué le han llamado a él, o qué habrá hecho el torpe del dobe para acabar en una situación así, simplemente corre, salta, trepa y por fin, vuelve a la vida cuando se ve frente a las puertas del hospital.
"Sasuke Uchiha." Respira profundamente y continua: "Para ver a Naruto Uzumaki."
No tienen que decirle ni la habitación o el lugar concreto, pues lo escucha. Bueno, realmente es que no hay habitación en absoluto, pues Naruto se encuentra detrás de unas cortinas, al final de un pasillo cerrado, tumbado en una camilla, pálido y bastante aturdido.
"¿Sasuke? ¿Qué estás haciendo?" Pregunta, quedándose quieto ante el gruñido del enfermero.
Ignora la pregunta mientras se acerca lentamente. "¿Qué te ha pasado?" Se queda a una distancia prudente sin saber cómo actuar. Ni siquiera se pueden decir que sean amigos, entonces, ¿por qué llamarían a Sasuke y no a alguien más?
"Me caí-"Comienza a decir, pero el enfermero completa la información.
"Se cayó de un árbol porque perdió la consciencia." Algo se retuerce en el estómago de Sasuke, duro y amargo, pero se dice que no tiene importancia.
"¿Te desmayaste? ¿Cuándo estabas subido a un árbol?" Se forma un silencio pesado entre ellos, sin saber qué decir ante eso. Una mala caído podría haber hecho que…
"Sí. Creo que cuando me caí en el lago bebí algo de agua y… quizás no era la mejor agua del mundo. Me ha dado urticaria, y, bueno… empeoró un poco a partir de ahí."
El enfermero, que seguía trabajando en los arañazos repartidos por distintas zonas de sus brazos y rostro, detuvo su trabajo para observarlo. Estando satisfecho con ello, dejó el desinfectante y el algodón en la pequeña mesa de metal.
"¿Cómo sabías que estaba aquí?" Pregunta, mientras se gira para ver sus propias heridas. Hace una mueca al mover la cabeza y tiene que cerrar los ojos durante unos segundos.
"Me llamaron." Naruto simplemente asiente, como si fuese la cosa más lógica y razonable. Sasuke está más que confuso. ¿Por qué él?
Se quedan en silencio de nuevo, esperando a que el enfermo diga si se puede ir, o si por el contrario debe quedarse aquí algún tiempo.
"Bueno. Las heridas permanecerán algunos días más, por supuesto. Debes desinfectarlas y cuidarlas adecuadamente. Necesitarás ayuda para las de la espalda." Él dice, mirando a Sasuke. Éste asiente sin saber muy bien porqué, una extraña sensación obligándole a hacer dicho movimiento. "Y respecto a la conmoción cerebral, alguien debe despertarte cada dos horas." Vuelve a decir, de nuevo mirando a Sasuke.
"Yo lo haré. Se quedará en mi casa hasta que mejore." Es todo lo que llega a articular, tendiéndole una mano a Naruto para que se pueda levantar de su cama. Por alguna razón, es un deber que está más que feliz de asumir. No puede apartar de su mente el pensamiento de que, si no hubiese caído de una forma adecuada, quizás no habría ningún Naruto del que cuidar. Esa simple idea molesta un poco a la parte central de su pecho y no puede entender muy bien porqué. ¿Quizás sin Naruto no sería tan divertido volverse un ninja completo, y patear su trasero cuando lo supere adecuadamente?
"Bien. Si tiene la mínima señal de náuseas o mareos, tráelo de nuevo." A pesar de que ambos afirman, siente que, aunque esté malditamente mareado, Naruto no dirá nada.
Mientras el rubio se pone la camiseta y se acomoda la ropa, él se dirige a la recepción, inclinándose sobre el archivo que está frente a él. El archivo de Naruto.
"¿Por qué me habéis llamado?" Pregunta a la muchacha morena que está sentada en una silla, tecleando en el ordenador.
"Procedimiento estándar, es lo que-"
"No, no, me refiero, ¿por qué a mí?" Dice, su tono bajo y dudoso. Naruto podría tener aquí a Kakashi, a Iruka, a quien sea. ¿Por qué él?
Ella simplemente se escoge de hombros y le alcanza el archivo, señalando con un bolígrafo las palabras remarcadas en negrita:
Contacto de emergencia: Sasuke Uchiha.
Relación: n/a.
Bien. Esto es… algo inusual. "Oh." Se escapa de sus labios antes de poder retener la sorpresa. ¿N/a? ¿No se aplica? Bueno, concuerda bastante bien con ellos. Mira las opciones, y ninguna parece encajar con ellos, así que sí. N/a es correcto.
Y no entiende, pero la sensación de decepción en la boca de su estómago es pesada. Pero bueno, quién sabe, quizás es porque esperaba una tarde tranquila y ahora tiene que pasar tiempo con el dobe.
Siempre causando problemas.
Siempre causándome problemas.
Sí, seguro que es eso.