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Colisión (One Shot) por Abadon007

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Notas del fanfic:

Siempre estuvo consciente de la escala social a la que pertenecía, no es que ignorara su débil casta en un mundo donde los Alfas controlaban todo, si, el pequeño pertenecía a la clase más pobre de Gotham y para el colmo un omega.

Notas del capitulo:

Tiempo pasado en la tierra Omegaverse del fic "No, no es él"

Clark Jay

Colisión


Siempre estuvo consciente de la escala social a la que pertenecía, no es que ignorara su débil casta en un mundo donde los Alfas controlaban todo, si, el pequeño pertenecía a la clase más pobre de Gotham y para el colmo un omega, pero no uno cualquiera, era uno que rara vez se encontraba entre los omegas, uno que podía dar a luz a cachorros fuertes. Que irónico se burlaba en su interior, ya que un omega de clase alta debería estar con el mejor de los alfas para que lo protegiera, en el peor de los casos dicho omega era vendido al mejor postor o prostituidos hasta matarlos o los usaban para rentarlos a cualquier alfa que quisiera tener un hijo fuerte, en el peor de los casos utilizaban a esos omegas para que tuvieran bebés sin descanso y así esos niños al crecer eran vendidos ya sea para cualquier uso que se les quisiera dar o tener el mismo destino que la madre, así era como actuaba el mercado negro de Gotham con la casta más débil. Oh cuanto odiaba eso la Venus de la perdición, ser la casta más débil.


— Jasón Todd…


Bruce Wayne junto con un Superman muy joven habían rescatado a un niño de la calle que estaba por ser secuestrado, no era un niño cualquiera y no era que lo rescatara cual omega indefenso necesita de un alfa benevolente, cual príncipe salva a su pequeña doncella. Claro que no.


— ¡¡¡Que me sueltes!!!


Gruñía salvaje entre los brazos del magnate que había presenciado todo, el pequeño procede a morderlo tan feroz hasta hacerlo sangrar, el joven que volaba usando un traje azul con rojo, de ojos azul cobalto va de inmediato y lo toma en brazos, mientras que el menor con uñas y dientes trata de soltarse. 


— Que te tranquilices… nosotros no queremos hacerte nada… El señor Wayne quiere ayudarte y… — Percibe el aroma a putrefacción que el niño salvaje lleva impregnado en su cuerpo, la nariz del niño que levitaba es más sensible a todo los aromas, huele asqueroso se dice para el mismo, pero entre el aroma a basura percibe un olor familiar y agradable.


Fieramente el pequeño gruñe:


— ¡¡¡No necesito la ayuda de ustedes!!! Tenía todo bajo control


El mayor se quita el guante dañado, extrae un pañuelo para limpiarse la sangre que comenzaba manar de su herida.


— Deberías de agradecer a Clark, estabas por ser secuestrado, de no ser por él ya estarías bajo las garras de un Talón.


Bruce le causaba desconfianza, y eso lo notaba el pequeño Clark, así que en tono suave trata de calmarlo.


— Oye… no queremos hacerte daño… el Sr. Wayne es mi tutor, nosotros podemos cuidarte…


Olfatea que el pequeño omega entre su aroma a basura esconde su verdadero olor, Jasón trata de patearlo, pero no logra herir al muchacho que lo trata de sostener, puesto que no le causa ninguna herida, Clark se le dificulta mantenerlo calmado ya que se mueve mucho. 


— Por favor Jasón, no somos malos…


El fiero chiquillo gruñe como animal acorralado, no siente el dolor que le causa cada golpe que le da a esa dura piel del niño de ojos azules. Bruce entre cansado por lo violento y oídos sordos del menor, se talla el rostro escuchando los improperios del mal hablado.


— ¡¡¡Que te metan en el culo las mentiras que dicen!!! No les creo, suéltame hijo de…


Clark se sonroja por las malas palabras, Wayne por su parte ya arto, grita usando su voz de Alfa dominante,  toma al insolente niño del cuello de la camisa sucia que lleva y le grita mientras lo arrastra hasta la limosina y lo arroja al asiento trasero.


— Cierra la boca maldito mocoso mal agradecido, te hemos estado buscando durante un tiempo, sabemos de fuentes que tus padres fueron asesinados por protegerte, sabían que tenían a un hijo omega de alto rango y sabían el destino que tendrías si los mafiosos de Gotham descubrían eso.


Jasón trata de salir de la limosina, pero el hombre lo empuja de nuevo a ella sentándose en la parte de atrás junto con él, otro hombre mayor, un beta, iba en el volante.


— Buenas noches joven Todd… le pediré amablemente que se comporte y también cuando lleguemos a la mansión se dé un buen baño, porque al parecer lleva meses sin asearse.  


El menor por un momento se sonroja, era cierto que lleva tiempo de no asearse, pero no lo hace con intención de que le guste andar sucio, lo hace con el mero propósito de ocultar su aroma, finalmente manteniendo su sentido de supervivencia no se asusta con el olor a Alfa dominante, ni con la voz que Bruce Wayne trata de imponer y controlar al niño quien gruñe salvajemente mostrando sus dientes.


— Me cago en mis pantalones… déjenme salir…


Bruce sonríe sorprendido al notar que el niño no se intimida al tener a un Alfa que lo trata de dominar.


— Alfred, no cabe duda… este niño es especial…


Pennyworth carraspea al escuchar las feas palabras que el chiquillo escupe.


— Las malas palabras no lo hacen especial, amo Bruce a ese niño no solo lo aseare con todos los detergentes que encuentre sino que también le lavare la boca con jabón y cloro.


El pequeño Clark entra a la limosina, apenas es unos años mayor que Jasón,  aun no sabe cómo controlar su aroma alfa, así que en tono suave se aproxima nuevamente y lo toma de la mano.


— Por favor… no queremos hacerte daño…


Jasón se sorprende al sentir el tacto de esa piel cálida, la voz del muchacho lo alcanza, el resto de los alfas con los que trato no lo podían dominar, ni tranquilizar tal y como Wayne intentaba, el muchacho de traje azul y rojo con su voz tranquilizadora comenzaba a relajarlo.


— Tal como has escuchado mi nombre es Clark Kent… El señor Wayne es mi tutor, te hemos estado buscando… Escuchamos que la Corte de los Búhos buscaba a un Omega en especial… solo que no alcanzamos a llegar a tiempo para salvar a tus padres… y…


Los ojos de Jasón se llenan de lagrimas, en un ataque violento se las limpia con la mano embarrándose más la suciedad que lleva en sus ropas, había sido escondido por sus padres para que pudiera huir, le advirtieron del peligro que corría si mostraba que era un omega en especial uno como el que buscaban aquella gente. Salió ileso y se escondió entre la mugre y putrefacción de los basureros de la ciudad tratando de esconder su aroma, maldecía su suerte, maldecía todo ya que por ser un omega sus padres fueron asesinados. Si bien sus padres no eran unos modelos de moral a seguir, pues eran ladrones de autos, unos betas que para su mala suerte al hijo que tanto amaban y educaban, a sus diez tiernos años mostro su casta y que corría peligro a su lado, no dejarían que cayera en manos de gente sin escrúpulos. Lamentablemente conforme pasaba el tiempo sus días ya estaban contados. Todd llora al recordar todo lo que ha pasado en las calles de como lo consideraban un animal salvaje, un niño que se hacía pasar por alguien sin razonamiento, que no entendía palabras, un niño fuera de sí que se ocultaba de la sociedad como un gatito que huye para que no lo pateen, o lo dañen de otra forma, jamás dejo que nadie se le acercara, ni que lo tocaran, siempre huía de cualquier acercamiento humano.  Pero la Corte de los Búhos lo buscaba al igual que Bruce Wayne, solo que la corte se adelanto y lo encontró al mismo tiempo que un joven Superman.


Jasón se lanza hacia el muchacho y lo abraza para llorar, lo abraza porque sabe que ese es su alfa destinado, pero nunca se lo dirá, nunca.  Clark se sonroja porque el menor sin desearlo comienza a emanar un aroma dulce, a cítricos y algo salvaje, un aroma al que está familiarizado el joven Kent.


— Girasoles…


Bruce y Alfred sonríen por el sonrojo de Clark, por el cansancio Todd se queda dormido en los brazos del muchacho.


Los mayores no sabían que estos dos estaban destinados, no tenían idea de que en el momento que el joven Clark lo encontró fue la colisión de dos estrellas.


— Joven Kent usted lavara el auto mientras yo le quito los piojos que el joven Todd lleva.


Bruce se pega hasta la puerta del auto, mientras que Clark por su lado verificaba si era cierto eso de los piojos, en realidad era lamentable el estado en que lo encontraron.


— Bueno amo Wayne, al parecer tendré que verificar que ninguno de ustedes dos y contándome tengamos inquilinos en nuestro cabello, aunque no tendré que preocuparme puesto que por mi edad ya escaseo de cabello.


Clark y Bruce sonríen ante el comentario.


 


Jasón no podía estar más en la gloria, adoraba bañarse a diario con agua tibia, algo que al mayordomo le causo ternura, anteriormente imagino que ese niño continuaría con ese sucio habito de no asearse, pero su alivio fue grande al saber que solo usaba la porquería que encontraba para ocultar su aroma.


— Señor Pennyworth… ¿no me está timando? ¿En serio esa ropa es mía?


Una hermosa mujer de cabello largo y negro se le aproxima, acaricia el cabello húmedo del pequeño omega.


— No te preocupes Jasón todo lo que te estamos ofreciendo es porque te lo mereces, ya no estás en la calle huyendo y padeciendo calamidades, así que bienvenido a casa cariño.


Ella lo abraza maternalmente, el pequeño la reconoce es su súper héroe favorito, la abraza emanando un dulce aroma silvestre, de girasoles y naranja.


— Eres Wonder Woman…


También un joven muchacho alfa de cabello azabache y ojos azules como el cielo nocturno se le acerca abrazándolo con efusividad.


— Oh Little wing, aquí tu eres nuestra princesa rescatada, nuestra blanca nieves con sus cuatro alfas…


La amazona y Alfred sonríen al ver como Todd trata de quitárselo de encima, lo golpea, pero el muchacho no parece importarle.


— Puto Grayson a quien llamas princesa rescatada… 


El mayordomo y la princesa Diana tosen en son de que recuerde que no puede decir malas palabras y menos teniendo a otro niño más pequeño con casta ya definida también a temprana edad.


— Recuerde que el joven Drake aprende muy rápido todo lo que escucha y ve, no quiero que aprenda malas palabras.


El menor de todos entra mostrando curiosidad por el nuevo integrante que es mayor que él, pero que sobre todo huele a hogar, dulce y una flor salvaje.


— Tú eres el omega que el señor Wayne estuvo buscando durante mucho tiempo… pero…


Jasón los mira con recelo, el mayor de los hijos adoptivos de la casa Wayne no aparenta ser un alfa, tiene rasgos muy sutiles como los de un omega, al igual el pequeño niño que mira en la entrada tiene finta de ser omega pero es lo contrario. Solo el muchacho al que llaman Clark es el único que sí parece lo que indica su casta, pero Todd no se queda atrás con esos rasgos de los cuales a todos se les dificulto encontrar a ese omega tan especial, el cual debería ser como todos los que son la casta débil, atributos finos, obedientes ante cualquier alfa cuando se le ordene, Jasón era todo lo contrario. 


— Pero… ¿En serio eres un omega? Entiendo que huelas a uno, pero…


Jasón se burla por ese desdén del pequeño Drake.


— Oh claro enano y tu eres un modelo fuerte de Alfa… pfs…


El niño se molesta.


— No lo entiendes… Dick y yo fuimos confundidos por ese omega que tanto buscaban la Corte de los Búhos, el señor Wayne, de no ser por él, nos tendrían en su sequito y todo porque ellos estaban buscando a ese dichoso omega que resulta eres tú… un niño nada agraciado a lo que imaginaban.


En eso Alfred lo reemprende.


— Joven Timothy no puede hablarle así al joven Todd…


La amazona va y lo toma en brazos.


 — No tiene la culpa de lo que la Corte ha hecho con sus padres.


El menor mira con coraje al nuevo integrante al recordar la pérdida de sus padres, quienes al igual que los de Grayson tuvieron la misma suerte, el mayor de los muchachos no dice nada, abraza con fuerza a Todd, siente que de un momento a otro responderá.


— Lo sé, él no tiene la culpa… ninguno de nosotros la tenemos… solamente no entiendo que quieren de un omega tan atípico.


Al igual que ellos, Todd  no entiende que quieren los búhos de él, no sabe qué decir, Tim al ser un niño comprensible e inteligente entiende el silencio incomodo en el cual lo dejo, baja de los brazos de la mujer y como Grayson abraza al joven omega quien se sorprende  al sentir ese aroma protector de esos jóvenes alfas.


— No temas… no dejaremos que ellos te hagan daño…


Jasón se pone rojo e incomodo, no es una princesa en apuros, trata de quitarse de ese agarre de los chicos Wayne, pero estos lo tienen acorralado. Los golpea, pero a ellos no les importa esos golpes que en realidad les duele, solo lo quieren molestar.


Jasón creció bajo el resguardo de Batman y como tal quiso proteger a los más débiles tomando el manto de Robín ya que tenía la edad de cuando Dick fue el primer Robín, en este caso sería el segundo bajo el entrenamiento de Batman, mientras que al pequeño Drake se le daba mejor todo lo relacionado con meca trónica, informática, era un pequeño nerd que ayudaba desde la cueva,  Wonder Woman y Nightwing, los cuatro alfas convivían  en la mansión Wayne. A pesar de que toda su naturaleza le indicaba que fuera sumiso con ellos cuatro, el menor se negaba ser el típico omega, otra razón más que Bruce tenía para entrenarlo bien, puesto que el chiquillo era demasiado aguerrido y violento cuando se enfrentaban con criminales que vendían a omegas, el celo fue otras de las tareas que trataron ya que Jasón a su corta edad logro tomarlo con calma y no caer en el instinto, tal vez por miedo, tal vez por orgullo y control o por todas las experiencias vividas. Porque no eran solo cuatro alfas, eran cinco junto con el joven Kryptoniano.  


— ¿Por qué cree que la Corte de los Búhos lo quiera en sus garras?


Bruce analizaba todo en su computadora, tenía tiempo que la corte no los molestaba, sabía que su propio hermano mayor estaba metido en la Corte, por rivalidad por mero derecho de eliminar a Batman y todo lo que significara un Wayne. Su hermano Thomas era conservador y tenía la primitiva idea de que los omegas eran solo eso, cosas que solo servían para saciar el más bajo instinto y para reproducirse y conservar el linaje, pero solo serían eso, objetos sin derechos.


— Ellos están conscientes de que los omegas llegaran a un punto de la evolución, donde ellos elegirán, donde ellos nos tengan en sus pies, obedeciéndolos. ¿Qué Alfa quiere a un omega que no le obedece? ¿Qué sucederá cuando todo un linaje venga de uno fuerte que se negó a ser el dócil y dulce omega tradicional? Thomas no permitirá que un atípico omega se salga con la suya, primero lo asesina o…


Alfred se cubre la boca al saber el destino del niño que rescataron ese día.


— Lo ultraja para que tenga un linaje fuerte de Alfas… El señor Thomas no puede… sus padres jamás permitirían tal atrocidad y menos con un menor…


Bruce también estaba molesto y asqueado, su hermano era de ese grupo de conservadores, de ese grupo que tal vez mando asesinar a sus padres en esa conferencia de libertad e igualdad omega, no quiere pensar que su propio hermano tuvo algo que ver con el asesinato de Thomas y Martha Wayne. 


Con el tiempo Bruce se encariño con Todd, trato de proteger a ese niño, pero al verlo tan inquieto y presente en todas las injusticias contra los omegas lo preparo mejor para que se defendiera. Wayne también tenía otro deber y era el entrenar a un joven Superman, hijo de los Kent que fueron amigos de los Wayne. El muchacho venía cada cierta temporada después de clases a Gotham, un muchacho mayor e inocente a comparación de Jasón, que a su corta edad ya tenía decidido quien le quitaría su virginidad y saciaría su calor, porque si bien podía controlar todas sus emociones y necesidades no quitaba que el sexo fuera necesario para agarrar experiencia, pero sobre todo para tomar el control de cada alfa que creyera que lo sometería.


— ¿Qué? ¿Qué estás haciendo Jasón?


Clark se había encariñado tanto con el niño de ojos verdes, lo miraba fascinado y con respeto, cuando Jay le pedía que durmiera con él, le obedecía, siempre con la inocente intención de protegerlo de sus pesadillas, porque a pesar de ser un joven alfa tenía la mentalidad de un niño y la moral en alto a favor de los omegas. Pero Jasón no era inocente, vivió en las calles y a pesar de que nadie lo ultrajo, le toco ver casos de los cuales prefería salir corriendo y esconderse entre la basura de Gotham para no tener el mismo destino. Si, su inocencia quedo en esos callejones.


— Jay…


El menor le había pedido a su compañero que durmiera con él, lo que el mayor no comprendió fue la connotación e ingenuamente le respondió con una sonrisa entrando a la habitación. Estando ya dentro de ella escucho claramente como Jay cerraba con seguro la perilla.


— Diana, Bruce y Dick están en una misión, Alfred y Timbo están fuera de la ciudad recolectando información de dicha misión.  


Clark sonríe voltea para responderle a su compañero.


— Por eso me pidieron que viniera a cuidarte mientras no están, el Señor Wayne vendrá mañana junto con Diana Prince y…


Cuál fue su sorpresa al ver la mirada decidida del menor y su escasa ropa.  


— Me ayudas…


Clark se sonroja como tomate, después el golpe de ese aroma que comienza a quemarle, Jasón estaba en celo, pero su mirada no estaba fuera de sí, era la misma mirada de siempre con un toque de lubricidad. No se mueve se mantiene quieto observa con confusión como el menor se aproxima a él y lo besa, las feromonas invaden sus  fosas nasales, cautivándolo, lo abraza de la cintura para permitirse besarlo con esa devoción que tanto le profesa a ese mal educado y aguerrido omega, Jasón lo había guiado a la cama y tirado, se había desnudado para quedar encima de Clark en la pelvis justamente donde un bulto se estaba mostrando por el roce de los glúteos húmedos


— Vamos quiero tener sexo contigo…


El mayor estaba embelesado por ese rostro y esa mirada verde del más joven, que al igual que él, estaba tan rojo como un tomate, que a pesar de tener la decisión de perder su virginidad no puede evitar sentirse cohibido al ser su primera vez. Aquellas manos fuertes lo acarician de la espalda hasta la cintura, Jasón se inclina para besarlo y rozar más su entrada en aquel bulto que aun sigue cubierto por los pantalones, se besan y acarician, Clark siente como su compañero poco a poco le va quitando la ropa, quedando ambos sin nada solo la piel caliente contra la otra, emanando un aroma mezclado de sus cuerpos, su duro órgano se alza, Jay quiere llevar el control y la manera en que lo penetre, así que Kent permanece tendido acariciándolo chupando un pezón, humedeciendo el camino hasta el cuello, ese hermoso cuello que expone Todd, tentándolo a morderlo, pero sabe que eso no está permitido en Jay, lo sabe, no hasta que él lo autorice, porque si lo marca será como si lo reclamara, como un objeto sin voz ni voto, y es algo que no quiere que el petirrojo sienta. Hasta que él se lo permita solo tendrá eso de él sexo. Antes de entrar en el delirio, el menor le ordena:


— Póntelo, no quiero traer cachorros a este mundo…


Él obedece sin chistar, la atenta y deseosa mirada del menor quien lo observa ponerse un condón, que ante su desesperada necesidad, le ayuda y procede ingenuamente a empalarse, subiendo y bajando, Clark cierra los ojos por la deliciosa sensación, esas paredes vírgenes se niegan a abrirse aun cuando el camino es húmedo y caliente, Jay se muerde los labios, sonríe con algo de dolor. 


— Vaya… eres grande… creo… que necesite prepararme… con esos juguetes para omegas en celo… agh


Jadea y sonríe con dolor al sentir todo el falo dentro de él, no se mueve para acostumbrarse a la invasión, en un suspiro necesitado susurra:


— Pero… un juguete… no se compara nada con esto…


Sonríe humedeciendo el contorno de sus labios, comienza a mover los glúteos de arriba abajo sintiendo como su interior se adapta, Clark también sonríe cómplice,  lo toma de la cadera, mueve su pelvis para penetrarlo y salir con lentitud, lo hace una y otra vez, logrando que esa estrecha entrada se abra para él, Jay grita apagadamente algo había tocado el súper chico que lo hizo estremecer entre el placer y el dolor, el mayor no se mueve se asusta creyendo que lo lastimo.


— Si… sigue… hazlo así…


Le suplica el menor, por la agitación trata de tomar aire, Kent prosigue, con cuidado sin salir de él,  lo recuesta en la cama quedando entre las piernas de Jay, alzándolas en sus hombros, en un lento vaivén de cadera profundiza, Jay cierra sus ojos llora, sintiendo su interior lleno, caliente, todo su cuerpo arde por la necesidad de desahogarse, su animal interior le grita que Clark es su Alfa, pero su yo pensante esta sobre todo y se niega. Entre su arrogancia de no querer ser la casta débil murmura en los labios del joven alfa que lo besa con cariño mientras ese lento vaivén profundiza fusionándolos.


— Esto… esto es solo sexo Kent…


El joven Superman entiende, sonríe, no le importa que Jay lo vea así. La primera ronda fue dolorosa y placentera al mismo tiempo, y vaya que era  insaciable, aun siendo un ser fuerte y de otro mundo, Jasón lograba lo imposible, mostrando que no era cualquier omega. Entre torpes movimientos por ser la primera vez de ambos y besos inexpertos, sonreían por tener por primera vez un beso, sexo, caricias, algo que solo era de ellos, porque Clark lo apreciaba y atesoraba que Jasón se permitiera hacer eso con él, ese contacto del cual se negaba. Pero tendría paciencia ya que el chico que vivió en la calle no era de nadie y lo dejaba en claro a los cuatro vientos y eso era algo que el superhombre adoraba de su ave, esa libertad. 

Notas finales:

Saludos a todos y a todas, esto es un One Shot, una parte del fic que aun no acaba "No, no es él".

Saludos, besos y abrazos estilo Superman. 


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