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Phone Call por Pandita7

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Notas del fanfic:

Hola de nuevo!

se que no he continuado las demás historias y pues la verdad es que no sé cómo seguirlas o terminarlas. Las estoy volviendo a leer para ver si me viene una que otra día para poder terminarlas. 

 

Lamento la espera! 

Notas del capitulo:

Esta historia también está en wattpad 

Tao termino de acomodarse el pantalón negro que se ajustaba a sus glúteos y entre pierna. Miro su reflejo frente al espejo y suspiro, ya quería que la noche acabara. Se puso un poco de maquillaje para ocultar su ojeras y cansancio. Se podía escuchar la música ensordecedora junto a la risa, gritos, y murmullos. 

 

— Tao pásame un poco de delineador, el mío termino -comentó un compañero de trabajo, si es que a eso se le podía llamar el prostituirse-

 

Tao se lo dio con una pequeña sonrisa, no es que no podía negarse, pero si lo hacia... bueno, solo quería evitar problemas. Tao tenia 23 años, y llevaba 4 años en la industria de la prostitución si es que podías llamarlo de esa manera. Al principio solo eran bailes en tubo, pero su jefe, Sunggyu, le dijo que clientes ofrecían el doble solo por pasar una hora con ellos en alguna habitación del Night Club. 

 

Así que solo aceptó, necesitaba el dinero. Tenía que pagar una renta, utilidades, y su pre ingreso a la universidad. Quería terminar sus estudios, solo le quedaban dos años para terminarlo y como la beca no quería cubrirle nada, tuvo que aceptar ese tipo de trabajos. 

 

Aun tenía orgullo, pero la necesidad tenia mas peso en la balanza. Era alto, ojos de un felino, finos labios, de tez clara y un cuerpo no tan definido de no ser por las curvas que tenía. No tenía un mal cuerpo, pero tampoco le enorgullecía. 

 

Se levantó como pudo, ya que luego de retocarse el maquillaje, había tenido anteriormente un cliente con el cual se acostó. Le dolían un poco las caderas mientras se ponía de forma recta y caminaba con pasos temblorosos pero seguros hacia la puerta de la habitación que compartía con otros compañeros de trabajo. Salió por aquella puerta no sin antes de acomodar su camisa, la cual se deslizaba por sus huesudos hombros; mostrando su suave piel. 

 

La música se escuchaba más fuerte a medida que salía por aquel oscuro pasillo en el cual solo estaba permitido los empleados y los clientes que pagaban por una hora privada contigo. 

 

Se mezcló entre gente que baila, para llegar hacia la barra donde saludó al bartender, para pedir un poco de jugo de manzana. Le gustaba, cuando los ojos del contrario se cruzaron con los de Tao, este negó y en vez de darle el jugo, le dio una botella de agua. 

 

— sabes que a Sunggyu no le gusta, además el jugo es para los tragos –le grito para que Tao escuchara debido a la fuerte música- 

 

— gracias -fue lo único que Tao respondió y se giró sobre sus talones para ver a la multitud estrujándose entre sí- 

 

En la entrada de dicho establecimiento, se adentraban unos cuatro hombres y en el medio un joven de no más de 18 o 17 años. Su estatura era promedio, pero baja para ser la de un hombre. Su cabello era negro, ojos saltones y tez blanca como las nubes. 

 

El dueño del club, Sunggyu, lo recibió con puro nerviosismo y miedo, las cuales ocultó con una sonrisa la que no podía ser más falsa. El mismo joven lo noto, y solo asintió. 

 

— es extraño verle por aquí joven Do -dijo Sunggyu mientras los guiaba hasta el segundo piso del club el cual era zona VIP- 

 

— solo quería ver -musitó antes de sentarse en el mullido asiento-

 

Los cuatro hombres que cuidaban la espalda de aquel joven, se posicionaron de tal forma para que nadie pasase al segundo piso ni mucho menos cerca del joven Do. Sunggyu por su parte hizo señas con su dedos para que los que no tenían clientes, subieran rápidamente. 

 

Tao fue uno de los que subió, con otros dos compañeros. Los hombres de la entrada les dieran una que otra mirada antes de dejarlos pasar. Tao se preguntó quién era tan importante para traer hombres a que lo protegieran. ¿Será un senador? ¿Algún político? ¿Un actor? ¿Un cantante? 

 

Salió de sus pensamientos al encontrarse frente un niño, por que así era como Tao lo veía. ¿Qué hacia un niño a estas hora en un lugar como ese? Sunggyu comenzó a introducirlos al tal joven. 

 

— este es Sungjong, Tao y Tiffany -Sunggyu decía mientras les apuntaba con su dedo- ellos podrán asistirte en la noche de hoy 

 

Do les miro seriamente, cosa que asustó a los tres presentes ahí. Su vista se fijó en Tao y en cómo este huía de su penetrante mirada. 

 

— quiero a Tao, los demás se pueden ir, y tú también -miro a Sunggyu seriamente- vamos, no quiero hacerme repetir 

 

Rápidamente sin que Do dijera una palabra más, Sungjong, Sunggyu y Tiffany se fueran más rápido que ligero de aquella situación tan incomoda. Dejando a un nervioso Tao, aun frente el joven.

 

— puedes sentarte -ofreció a Tao y este así lo hizo- ¿te gusta lo que haces? 

 

Tao no respondió, y miro con preocupación al menor.

 

— no sé quién seas, pero esto no es un lugar para ti. Eres muy joven para estar aquí, deberías estar en tu casa, durmiendo o estudiando, no sé -comentó Tao sin darse cuenta, haciendo que el menor se sorprendiera y frunciera el ceño- 

 

— eso no te interesa, pago por tu presencia no para que me des sermones. ¿Quieres algo de beber? -vio a Tao dar un pequeño brinco por el tono tan gélido que uso el menor para contestarle- 

 

— quiero -lo medito unos momentos y se acerco a Do para susurrarle al oído por la música- un jugo de manzana, pero no digas que es para mi por favor 

 

Kyungsoo le vio confundido, pero solo asintió antes de mandar a buscar una botella de agua y un jugo de manzana con uno de sus guardaespaldas. Miro a Tao, y lo estudio. Parecía joven, pero obviamente más mayor que él. 

 

El guardaespaldas volvió y colocó la bandeja con las bebidas sobre la mesa para volver a su posición anterior. Kyungsoo y Tao tomaron las bebidas correspondientes y bebieron de la misma en silencio. A Kyungsoo le gustaba ese silencio entre ambos, no obstante, quería saber y preguntar más acerca de Tao; pero se contuvo.

 

Sintió como el aroma fresco de melón y limón golpearon su nariz. Giró su cabeza hacia el lado para ver el rostro de Tao justo a centímetros del suyo, pero esté tenía su cabeza recargada de la cabeza de Kyungsoo como si fuera un soporte y no es que a Kyungsoo le molestase. 

 

Tao se había quedado dormido, está muy cansado y apenas dormía bien. Dos horas pasaron, en las el club se había vaciado y Kyungsoo ya se tenía que ir, pero no le gustaba la idea de perturbar el sueño del mayor. 

 

— joven, tenemos que irnos. Tiene algo pendiente que hacer respecto a los chicos que habían distribuido mal el cargamento -comentó uno de sus guardaespaldas mientras se inclinaba en forma de respecto frente a su jefe- 

 

Kyungsoo le miro seriamente y movió a Tao un poco para que este se levantara, cosa que consiguió no importándole mucho luego.

 

—lo siento mucho -Tao rápidamente se disculpó, más solo vio a Kyungsoo levantarse y acomodar su chaqueta para luego irse sin decir nada junto aquellos hombres- estoy en problemas -murmuro y rápidamente se espabiló para bajar al primer piso e irse atender otro cliente hasta que llegó su hora de salida-

Notas finales:

Pero sus rws! 

 

XOXO!


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