¡Hola! Sigo rescatando fanfics del fondo del cajón (del pendrive). No sé si alguien aún leerá cosas sobre estos ships y debo admitir que dejé Shingeky no Kyojin tras la primera temporada así que puede que esto esté muy fuera de lugar con lo que haya avanzado la historia, pero no pasa nada porque para eso es ficción. El ErwinxLevi siempre me pareció jugoso, aunque quizás no tanto para escribir un fanfic largo. En su defecto, os traigo este.
Levi me dijo una vez que no le gustaba el frío. Aunque claro, de eso ya hacía mucho tiempo. El hombre que era ahora ya no tenía nada que ver con el joven que había intentado matarme en aquel callejón. Recuerdo perfectamente el arma entre sus manos, las mismas manos que ahora se aferran con fuerza a mi espalda desnuda. Si cierro los ojos aún puedo ver la frialdad de su mirada, típica de quien ha sufrido más de lo necesario.
Sigo preguntándome qué le llevó a dejarme con vida. Sé que si hubiera querido habría acabado conmigo allí mismo. ¿Acaso sabía que yo iba a sacarle de la miseria? Le ofrecí un techo, comida y calor, y él simplemente aceptó. Lo que no sabe es que ese día él fue quien me salvó a mí.
Vigilé cada uno de sus movimientos mientras entrenaba, me aseguré de que lo hiciera todo bien. Su talento natural era notable y no tardó en llamar la atención de todo el mundo. Recuerdo que eso me molestó, y que la molestia se me pasó cuando una noche de tormenta se coló en mi habitación, silencioso como un gato. A pesar de su cuerpo pequeño y su aspecto de niño, era una fiera que no tardó en desarmarme. Recuerdo sus quejidos de dolor de las primeras veces, y que a pesar de ellos siempre pedía más. Hasta que un día ya no hubo dolor, sólo placer para ambos. Como ahora, que siento su cuerpo moverse con el mío en este brusco pero armónico vaivén.
No puede decirse que mantengamos una relación. A veces él me busca a mí; otras yo le busco a él. Es la perfecta medicina en esos días en que siento que ya no puedo más.
Pero ni mucho menos es sólo sexo, le quiero. Mi mayor miedo cada vez que partimos en una expedición es perderle. Estaría dispuesto a sacrificar a mis mejores hombres con tal de salvarlo a él, por egoísta que suene. Me alegra cada noche que aparece por sorpresa y me dice que él solo no puede, que me necesita. Y yo, por supuesto, tengo que darle lo que me pide. Después de todo le prometí que no volvería a pasar frio.
¡Espero que os haya gustado! Si es así, hacédmelo saber :)
Relleno relleno relleno relleno porque la web no me deja publicar el fic si no tiene más de 500 palabras, pero eso no lo sabía mi yo del pasado y la yo del presente (creo) es tan diferente que la historia cambiaría su esencia si lo tocase ahora. ¡Perdonad mi trampita, por favor!
Nos vemos en la próxima :)