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Nobody has loved you like I do por HitsukiHoshiido1711

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Notas del fanfic:

¡Hola! Este es mi primer fanfic yaoi de la parejita JunxToya (Gotcharocka) y está inspirado en la canción "Strange Days" de la banda Three Days Grace. 

 

Autora: HitsukiHoshiido

 

@HitsukiHoshiido @HitsukiHoshiido1711 ©

 

Notas del capitulo:

En este capítulo aparecen solamente los siguientes Jrockers japoneses: 

 

Jui [GOTCHAROCKA]

 

Jun [GOTCHAROCKA]

 

Toya [GOTCHAROCKA]

 

Y Shohei de la banda de Jrock "Arlequin", ya que se menciona en el capítulo.

Los rayos de sol empezaban a iluminar toda la ciudad de Tokyo después de una noche lluviosa. Toya estaba durmiendo en su habitación y al sentir los rayos de sol en su cara,bufó muy molesto. Eran las siete y media de la mañana y no le apetecía para nada levantarse. Después de lo ocurrido con Shohei,se había jurado para sí mismo no volver a revelar sus sentimientos.

Toya podía ser la persona más seria de la faz de la tierra,pero por alguna razón,Shohei acababa invadiendo la mente del pelinegro. Obvio que le había dolido mucho todo. Le había destrozado por completo. Shohei le había roto el corazón y se lo había hecho pedazos.

Para Toya,todo le parecía ridículo o eso pensaba él. Tenía una espina clavada en lo más profundo de su corazón y lo más que deseaba era que esas heridas sanaran con el tiempo.

 Toya se despertó de repente,era Jun. Al desbloquear su Iphone vio un mensaje de Line y algunas llamadas perdidas de su mejor amigo pelirrosa.

" Jun-Kun : 

Me estás empezando a preocupar mucho,¿quieres que pase por tu casa? 07:15 " 

—Oh,mierda... —se pasa las manos por la cara.— Me volví a quedar dormido.

Una vez que Toya recuperó su compostura,se preparó para salir de su casa después de avisar a Jun y así aliviar el exceso de preocupación que tenía por él. Poco después encendió un cigarrillo para darle un par de caladas durante el trayecto.

" Perdón por no responderte a tiempo. Anoche estuve componiendo hasta muy tarde y dormí muy poco. 07:40 " 

Toya se apresuró para llegar al metro y coger el tren de las ocho menos diez de la mañana,debía llegar a tiempo al estudio y no quería que el rudo de Jui le regañara por llegar tarde otra vez. Si había una cosa que Toya odiaba,era la multitud de gente en las calles más cuando había mucha prisa.

—¿Toya no ha llegado? —preguntó Jui.

—Él ya viene de camino. —contesta Jun al mirar la hora en su teléfono.

—Me pregunto qué habrá hecho la noche anterior. No es propio de él porque siempre ha sido puntual... —dijo Jui.

—Sé que le pasa algo,Toya no era así. —añadió Jun muy convencido.

—¿Así como? —Jui miró a Jun confundido.

—Toya siempre viene muy animado al trabajo. —confirmó el pelirrosa.

—¿Y si le preguntamos qué le pasa? A lo mejor nos dice los motivos del por qué está así. —añadió Jui mientras tomaba un sorbo de su café.

—No sé,él es muy reservado. —Jun sabía que Toya no era el mismo desde hacía meses.

A lo lejos se podía ver a Toya caminando,cargaba su bolso y el estuche donde transportaba su guitarra eléctrica.

—¡Toya! —dijeron al unísono el rubio y el pelirrosa.

—Lo siento por llegar un poco tarde. Anoche estuve componiendo hasta altas horas de la madrugada.

—No te preocupes To-Chan,¿estás bien? —le preguntó Jun de nuevo.

—Sí,no se preocupen por mí. —mostrando una leve sonrisa.

Cuando el pelinegro fue a entrar a la compañía,el pelirrosa lo cogió de la muñeca haciendo que Toya se detuviera en seco.

—Toya,mírame. Tienes ojeras... —lo mira fijamente a los ojos.

El pelinegro se detuvo delante de él,se pasó las manos por la cara seguido del pelo y suspiró pesadamente.

—Me siento cansado,sólo eso... —contestó el menor.

—Hoy te invitaré a comer al restaurante que está cerca de mi casa,sé que no has estado de muy buen humor y créeme que te hará bien tomarte un respiro. 

El pelinegro le dedicó una sonrisa a Jun.

—Gracias Jun-Kun,me encantaría ir después de ensayar. Acabas de levantarme los ánimos. 

—De nada,pequeño enano. —rió Jun de broma.

—¡Ey!¡No soy ningún enano! —dijo entre risas.

Toya era la persona más importante para Jun,eso no lo podía negar y siempre estaba preocupándose por él. Cuando terminaron de ensayar,Jun se acercó de nuevo a Toya.

—Los ensayos han ido bien,To-Chan. —Jun esbozó una sonrisa.

—Me alegra oír eso,ese solo que ha sonado en tu guitarra ha sido genial. —rió Toya.

—Gracias,tu guitarra también sonó bastante bien. ¿Cómo te encuentras ahora? —preguntó el pelirrosa.

—Parece que un poco mejor. Sé que estos meses mi actitud no ha sido la misma,pero no lo he estado pasando nada bien. Debo disculparme por mi mal humor y por todo. —reconoció Toya. Sus ojos negros estaban encharcados de lágrimas.

Jui había sido el último en salir del estudio y a lo lejos pudo escuchar a sus amigos hablar,así que se acercó sigilosamente a escuchar detrás de la puerta sin hacer ningún ruido.

—No te preocupes To-Chan,todo está bien y lo entiendo. Pero,¿Shohei te hizo algo? —dijo Jun.

—¡¿U-Uh?!¡¿N-Nani?! —musitó Jui en voz baja como si se tratara de una telenovela.— Vamos,suéltalo ya... —dijo muy entusiasmado por querer saberlo todo. Jui en verdad era un buen amigo pero a veces era un poco cotilla,más cuando se trataban de las cosas privadas de Jun y Toya.

Toya al escuchar el nombre de cierta persona,sus lágrimas comenzaron a caer como cascadas por sus mejillas.

—¡Lo sabía! —musitó en voz baja Jun.— ¿Por qué no dijiste nada?

—¡¿Ah?!¡¿Que Shohei le hizo qué cosa?! —Jui abrió sus ojos como platos y cerró sus puños muy enfadado.— ¡Menudo caradura está hecho!

El menor se abrazó para sí mismo,como buscando algo de consuelo para calmar esa angustia que lo ahogaba cada día en un mar de lágrimas.

—Lo vi besarse con otra persona hace meses. Me traicionó... —balbuceó a la vez que sollozaba.

—Toya,no puedes seguir así por Shohei... —acaricia sus cabellos negros y los revuelve suavemente,haciendo pasar eso como una caricia.— Eres una persona bonita en todos los aspectos y te mereces a alguien que te quiera tal y como eres. Dime,¿acaso va a volver?

—No... —negó éste después de secarse las lágrimas con la manga de su suéter gris.

—Él no sabe lo que se ha perdido después de romperte el corazón sin tan siquiera imaginar cómo te sentirías. 

—Tienes razón,Jun-Kun. No merece la pena estar amargándome por una persona como él. Ya con sus actos me demostró la clase de persona que es.

—Alguien mejor que él te sabrá querer y valorar. —sonrió una vez más.

El pelinegro volvió a sonreír y los dos fueron a almorzar al restaurante,el pelirrosa fue a acompañar a Toya a su casa en Yokohama tiempo después.

—El almuerzo estaba delicioso. —dijo Toya.— Gracias por invitarme,Jun-Kun. Realmente me ha levantado mucho los ánimos.

—De nada,To-Chan. Me alegra saber que te ha gustado todo y que ya te sientes mucho mejor. 

Cuando ambos llegaron a Yokohama,Toya sacó las llaves de su casa para poder abrir la puerta. Las llaves tenían un llavero de él mismo pero en forma de Chibi.

—Me gusta mucho tu casa,es grande y acogedora. —el pelirrosa estaba observando todo como si fuese un niño curioso.

—Si quieres puedes quedarte un rato para ensayar las canciones. Si adelantamos trabajo,será mejor.

—¡Bien! Entonces afinaré mi guitarra. —exclamó contento Jun.

Toya estaba de brazos cruzados mirando la hermosa vista de todo Tokyo bajo nubarrones negros de tormenta con un espectáculo de truenos y relámpagos que bailoteaban acompañados de algunos rayos.

—Te extraño,pero no puedo dejar que sigas rondando por mi cabeza. —musitó Toya para sí mismo.— Me traicionaste con esa persona hace meses y es hora de que te borre de mi memoria. Creía que eras una buena persona y que te preocupabas por mí, pero el único que lo ha hecho es Jun todos estos meses,cuando tú no estabas ahí. Cuando me engañaste sin darme ninguna explicación.

Mientras Toya estaba perdido en sus pensamientos,Jun preparaba algo de té para tomarlo con unos mochis y bolas de arroz que su madre había hecho para él con mucho cariño,queriendo compartirlos con la persona a la que él amaba,con Toya. Desde que empezaron a conocerse sabía que le gustaban mucho los mochis y las bolas de arroz.

—Ojalá nunca te hubiera conoc-... —siendo interrumpido por Jun,saliendo a la vez de ese pequeño trance.

—Toya,el té ya está listo. 

—¿U-Uh? —un leve sonrojo apareció en sus mejillas.— Estaba pensando,al parecer la tormenta no cesa.

Jun soltó una pequeña risa al ver que Toya estaba rojo como un tomate.

—No te preocupes,he traído dos cosas de comer que te gustan mucho. —dijo Jun al colocarlo todo sobre la mesita del salón.

—¿Qué cosas? —Toya inclinó la cabeza hacia un lado,muy curioso.— ¿Has comprado algún dulce? 

—Ven y lo verás. —dijo el pelirrosa desde el salón.

Toya se acercó al salón y vio que sobre la mesita estaba todo,en una bandeja pequeña estaban lo mochis recién hechos y las bolas de arroz.

—¡Mochis y bolas de arroz! —exclamó Toya como un niño pequeño.

—Mi madre me hizo estos mochis y las bolas de arroz hoy,antes de irme. Como no me los iba a comer todos pues quise compartirlos contigo porque sé que te gustan mucho.

—Jun-Kun,debo darte las gracias por todo lo que estás haciendo por mí. No quise ser una molestia... —respondió Toya en voz baja muy triste. 

—No hace falta que me agradezcas,siempre te he dicho que te ayudaría en lo que hiciera falta. —le sirve té.

—Siento mucho no haberles contado lo que me había pasado con Shohei. Me dolió tanto... —suspiró el pelinegro muy dolido.

—No vale la pena que estés así por él.

—Ya le valió con engañarme y darme una buena puñalada por la espalda. Lo he bloqueado en todas las redes sociales y lo he quitado también de mi teléfono. Yo no quiero saber nada más de él.

—Hiciste bien,es una forma de poder empezar de cero.

Ambos conversaban mientras tomaban el té y comían de los mochis y las bolas de arroz. Toya después de contar todo,empezó a tener algo de fiebre. Éste a veces se quejaba del dolor de cabeza que tenía.

—Me duele la cabeza... —dijo Toya muy molesto.— Tengo mucho frío y a veces me dan escalofríos.

—A ver,deja que te vea. A lo mejor has cogido frío esta mañana por la lluvia. —pone su mano en la frente.— Tienes fiebre,voy a ir a buscar el termómetro.

Jun fue a buscar rápidamente el termómetro y con suma delicadeza levantó su camiseta y su brazo para ponérselo en la axila.

Una vez que el termómetro tomó la temperatura,Jun lo cogió para ver cuánto tenía de fiebre.

—T-Tengo m-mucho f-frío... —se quejó Toya cuando le puso una manta encima,estaba tiritando.

—Creo que has pillado un resfriado,tienes 38 de fiebre. —respondió Jun.

—Vaya por dios,si esto sigue así no podré ir a trabajar mañana... —dijo molesto,haciendo un lindo puchero.

—Si quieres puedo quedarme contigo unas horas hasta que estés bien.

—Pero tú no puedes faltar mañana a los ensayos...

—Lo sé,ve a darte un baño con agua templada y después te metes en la cama para que descanses un poco.

—Está bien,ahora voy. —dijo Toya aún con escalofríos en su cuerpo.

Mientras Toya fue a darse el baño,Jun le preparó la cama con algunas mantas y un pijama cómodo de manga corta para que la fiebre no le subiera.

—El baño me ha sentado de maravilla. —se seca bien su pelo azabache.

—Ya tienes todo listo,te dejé ese pijama para que no sudes tanto y no te suba la fiebre más de la cuenta. También te preparé algo de comer.

—Muchísimas gracias, Jun-Kun. —sonríe al meterse en la cama.

—Ahora que todo está en orden,me iré a casa. Llámame si necesitas algo,¿vale?

El de cabellos azabache agarró del brazo a Jun suavemente e hizo que el pelirrosa se detuviera antes de cruzar la puerta para irse. No quería que se marchara antes de revelarle sus sentimientos. 

—Jun-Kun,sé que he sufrido mucho por Shohei... —musitó el pelinegro.— Fui muy ingenuo al creer en su palabra,pero me di cuenta de que encontré a esa persona. Esa persona eres tú. Me has hecho ver el mundo de otra manera estando a tu lado y has hecho muchas cosas que Shohei no hizo por mí. 

Toya se levantó de la cama y se acercó a Jun,acariciando sus mejillas con ambas manos para luego besarlo de la manera más apasionada. El pelirrosa estaba sorprendido y feliz,ya que también amaba a Toya en secreto.

—T-Toya... —gimió entre beso y beso,metiendo sus manos por debajo de la camiseta del pijama de Toya para sentir su cintura y acariciarla.

—No digas nada. —susurró en la boca del mayor,mirándolo con esos ojos.— Me gustas mucho...

—Tú a mí también,pero... —le mira.— ¿Tú no tenías fiebre? —levantó una ceja divertido el pelirrosa.

—Se me ha pasado un poco. —soltó una pequeña risa.

El pelirrosa negó divertido,el contrario se intentó subir a sus caderas y fue tan torpe que él y Jun acabaron cayendo sobre de la cama,uno encima del otro.

A Toya le ardían sus mejillas,le costaba reconocer que él era un calenturiento.

Todo empezó con besos más apasionados y caricias. 

—Gracias por cuidar de mí hoy,la medicina y el té me aliviaron la fiebre,a parte de la comida. —sonrió Toya con sus mejillas aún sonrojadas.

—De nada,pequeño enano. —contestó el pelirrosa poniéndose encima del menor. Éste no hacía nada más que mirarle,su dedo índice recorrió sus labios,cuello y torso.

—Madre mía... —susurró Toya por la astucia del mayor,escapándosele de sus labios un pequeño suspiro de deseo.

—Shhh... —el mayor lo cayó a la vez que posaba su dedo índice de nuevo en sus labios,mirándolo con ganas de sentir su cuerpo con el de él y le susurró al oído en tono seductor mientras se acercaba a él.— Te deseo,Toya...

Toya besó a Jun sin dudarlo,dejándole algo de espacio para que le pudiera besar mejor. El pelinegro acariciaba el torso del contrario,soltando unos cuantos suspiros.

—¿Y qué es lo que quieres a cambio? —el pelinegro soltó una sonrisa divertida,mirándolo.

La pregunta a cierto muchacho pelirrosa le hizo morderse el labio,se dirigió a la puerta para cerrarla y le dedicó una mirada feroz y una sonrisa sensual,dejándole claro al menor lo que quería.

—Mío,solamente mío... —dijo caminando despacio hacia él para abrazarlo.

Toya se levanta y se deja acariciar por el mayor,poniéndose todo su cuerpo sensible cuando éste lo tocaba.

—Soy todo tuyo. —musitó éste acariciando los hombros y besando el cuello de Jun con sutileza hasta bajar a la altura de su cintura.

—Dios mío... —el mayor abrió los ojos sorprendido por la astucia de su pequeño enano,sin poder evitar esbozar una sonrisa lasciva,sintiendo además el recorrido que llevaban sus labios. Él asintió pausadamente lamiéndose los labios en cuanto se detuvo.— ¿Y ahora qué harás al respecto? 

—Pues la verdad es que aún no lo sé... —respondió Toya con fingida mocencia,acercando un poco más su mano hasta meterla dentro de los pitillos para tocar su entrepierna cuando quedó a su misma altura,palpándola con sus dedos.— Aunque puede ocurrírseme algo... ¿No? —susurró sin perder contacto visual con el mayor,dando un casual apretón a esa zona al mismo tiempo que sonreía divertido.

El pelirrosa soltó un pequeño gemido,él no dejaba de mirar a Toya ni mucho menos cuando puso su mano sobre la de él,aquella que apretaba su entrepierna. Le mantuvo la mano retenida contra su creciente erección,saboreándose los dientes.— ¿Y ahora qué haré contigo?

Toya sonrió con un deje de sensualidad al sentir la mano de su amado sobre la propia,apretando un poco más aquella sensible zona,notando cómo crecía aquello.

—Marcarme como tuyo puede ser una buena opción,¿no crees? —respondió en un susurro,mordiéndose el labio inferior suavemente.

—No es mala idea... —el mayor mueve un poco su mano removiendo a la vez la mano del contrario,haciendo pasar eso por una caricia. Se relamió el labio inferior al acercar su otra mano libre hacia la cintura de Toya,acariciándola con cautela.— Quisiera poseerte ahora mismo... 

Ante aquel movimiento,Toya comenzó a acariciar lentamente la hombría del mayor por encima de la ropa. Sonrió al sentir las manos ajenas sobre su cuerpo y al escuchar sus palabras,sin poder evitar soltar otro jadeo por las mismas. La situación y la actitud del mayor le estaba poniendo.

—¿Hay algo que te lo impide? —respondió Toya en un tono bajo,acercándose al pelirrosa.

Jun bajó repartiendo besos por su cuello seguido de su clavícula. Lo tomó con firmeza de la cintura y tiró de él hasta acorralarlo en la pared,clavándole su erección en el vientre,respirando muy agitado y desesperado. 

—Mira cómo me pones... —Jun estaba bastante excitado.— Me vuelves loco,en tan poco tiempo...

Una vez más,besó apasionadamente a Toya y mordió suavemente los labios ajenos con fuerza,tirando del inferior unos instantes y atrapándolos una vez más,ésta vez en un profundo beso.

—Uhmm... Tú igual me pones demasiado,Jun. —susurró en un tono algo ahogado antes de la suave mordida,la cual arrancó también un gemido de su boca antes de corresponder al beso. 

El más mayor correspondió a su beso con la misma intensidad a la vez que pasaba de nuevo sus manos por la cintura ajena. A él lo va empujando de apoco hasta llegar a uno de los bordes de la cama. Jun tenía todo calculado y ladeó la cabeza para besarlo mejor. Su respiración se agitaba cada vez más cuando decide meter sus manos por debajo de la camiseta del pijama de Toya,sintiendo su pecho formado y su piel cálida.

El pelinegro metió también las manos debajo de la camisa blanca que llevaba puesta Jun,notando su piel mientras seguía el intenso beso.

—Mghmgh... —jadeó al sentir las manos del pelirrosa apretando su retaguardia,acercando su lengua a los labios del mayor para adentrarse en éstos y con ello,invadir su cavidad.

El mayor abrió la boca para que el pelinegro lograra invadir su cavidad. Finalmente tomó los brazos ajenos y los levantó un poco,esperando que él entendiera su cometido. Luego volvió a agarrar los bordes de la misma y tiró de ella hacia arriba,sacándosela de inmediato. Desde luego,su beso se deshizo pero se volvieron a juntar sus labios en un beso aún más intenso que los primeros que se habían dado con anterioridad.

La ropa fue desapareciendo hasta que quedaron en ropa interior. Entonces,fue cuando ambos cuerpos se juntaron y el más pequeño intentó desabrochar los pitillos del contrario.

 

—FIN 

 

By: HitsukiHoshiido

 

@HitsukiHoshiido @HitsukiHoshiido1711 ©

 

Notas finales:

¡Bueno! Espero que el fanfic les haya gustado. Sé que hace días lo había subido pero lo borré porque tenía algunos errores y quise dejarlo en condiciones. El fanfic se lo dedico a mi mejor amiga y Onee-Chan Azul,que la quiero muchísimo y la adoro,porque es una persona muy importante en mi vida

((*´ω`*)) (*´∀`*)?

 

Pd: El Fanfic es de un solo capítulo,pero si desean saber qué va a pasar después,puedo hacer una continuación a parte,es decir,otro fanfic nuevo a raíz de este fic. 

 

 

By: HitsukiHoshiido

 

@HitsukiHoshiido @HitsukiHoshiido1711

 


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