-Buaffff….¡¡qué día más soleado!!
-Shu, hoy parece que estás de buen humor
-¿a que si, Hiro?
-¿no será que estuvisteis Yuki y tu haciendo XXX y XXX en la cama XXL?- preguntó K
-¡Anda! ¿Cómo lo sabes?- se sorprendió el pelirrosa- no será que… ¡anoche nos espiaste, ¿verdad?!
- ¿Ehhh...? bueno…yo es que solo pasaba por ahí y….eso…
-en menudo lío te has metido K- le dijo el guitarrista
- ¿y la cámara qué encontré en mi habitación, y en la cocina, y en el baño, y en la ducha, y en el armario, y en….?
-es por tu seguridad- aclaró K- no te gustaría que una fan, o un fan, quién sabe, se colara en tu habitación y te hiciera cosas feas, ¿verdad Shu?
-¡¡¡Argghh!!! ¡¡¡Es verdad!!! ¿Y ahora que hago? No puede ser… ¿y si hay alguien esperándome detrás del armario? ¿Y si el coco me rapta? ¿Ehhh…? Dime Hiro, ¿Qué hago? DÍMELO…¡QUE ME LO DIGAS!, SNIFF.
Al final terminaron por no hacerle caso
-bueno chicos, yo me voy por aquí
-hasta mañana Hiroshi
-por favor, llámame Hiro, ¿vale?-sonrió éste- Shu, me vo….y…
El pelirrosa estaba dando vueltas por su mundo, como siempre, pero Hiro no se sorprendió. Era normal que Shuichi esté así, pensó. Después de que una de las mayores discográficas nos haya permitido grabar en su estudio…me gusta ver a Shu así. Pero… ¿no será… que me gusta? (sonrió de felicidad)
-Shuichi… ¡¡SHUICHI!!- disparó una bala en la sien del chaval
-¿porqué lo has hecho? ¿No ves que casi me matas?
- Je, pero es que es más divertido así.
-¿Cómo que es más divertido así, capullo?
-venga, venga, que ya hemos llegado
- ¿ya? Joder, que rápido (me sorprendo hasta yo)
Se abre la puerta……
-¡¡¡YUKIIIIIIIIIII!!! ¿Dónde estás, Yuki?- gritó- ¿En la cocina? ¿En el baño haciendo popó?
-¿Ehhh? ¿Qué es esto?- se sorprendió K
-¿Quizá en la cama esperándome para hacer xxx? ¿O tal vez en su escritorio desnudo para que yo lo vista?...
- ¿una nota?- La leyó en voz alta: Eiri ha muerto, firmado: Tôma Seguchi- ¡anda…! Si está escrita a ordenador. ¿Quien se habrá tomado tantas molestias para hacer esto? ¿Y encima a ordenata? (qué si, que ha sido a ordenador, inculto)
Pero Shuichi que, en cuanto lo oyó, se paró en seco, no se lo podía creer. Su Yuki había muerto, y ¿cómo es que él no lo sabía?
-así que… ya la has leído- dijo una voz en el fondo
- tú eres…eres…-balbuceó el pelirrosa
-Shuichi, tranquilízate, lo izo por el bien de mi hermano. No le culpes
-pero… Tatsua, él… me lo podía haber dicho (aguantando las lágrimas), y yo hubiese ido al hospital a ver le y ha…
- por eso no te lo dijimos- le cortó Tôma- Aunque me lo hubiese pedido Yuki, que así lo hizo, no iba a permitir que una rata asquerosa como tú le molestara en sus últimas horas de vida. Por lo menos así podría morir en paz, y tranquilo también por una vez en su vida (dijo esto último en voz baja)
- ¡¡¡SERÁS CAPULLO, MARICÓN!!!- gritó K, que disparo su fiel MAGNUM (cómo se nota que lo pongo en mayúsculas) a Tôma, pero esquivó el disparo con una velocidad como los de matrix y le tiró la pistola al suelo de un solo golpe con la mano.
- ¿Cómo es posible…?- K se quedó a cuadros. Ni Ark lo vencía, ¿Cómo podía ser que esa persona más pequeña que él lo consiguiera? (porque, querido amigo, la altura no tiene que ver nada con tu pistola, es decir, la de Tôma es "más grande" (jijijijijiji))
Pero el pelirrosa salió corriendo de la casa con lágrimas en los ojos, sin llegar a creérselo del todo, hacia la de Hiro. Se sentó en la puerta de su amigo.
-¡Anda Shu, si ya estás aquí! ¡Qué poco has tardado!
No pudo aguantar más las lágrimas y se echó a los brazos de Hiro.
-venga ya, Shu. K me lo ha contado todo.
Pero en cuanto oyó esto lloró aún con más fuerza. Sollozó durante bastante tiempo y, cuando se hubo calmado, Hiro le ofreció algo de comer.
- oye Shu… esto… ¿tienes más hambre? Espera que vaya al chino de abajo a comprar algo que te pueda gustar.
El pelirrosa solo asintió con la cabeza. Hiro se detuvo en la puerta…
-¡Mierda! ¿Qué le puedo decir? Si se le hubiera muerto alguna novia, vale; pero es que para él su vida y su mundo es Yuki.
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Hiro volvió con la compra
-¡Shu! ¡Ya he vuelto!- gritó el guitarrista- te he comprado gusanitos ¿los quieres? Si no, me los comeré yo. Pero ¿donde estás? ¿Ein? ¿Qué es esto? ¿Una nota? (como se nota que la historia va de notas, jejejejejejejeje)
La nota decía: Hiro, lo siento. Siento haberos preocupado con mis tonterías, pero ya no os tendréis que ocupar más de mí. Pienso estar siempre al lado de mi Yuki. Y, sin pensárselo dos veces, fue directo hacia la casa de Yuki.
- espero que…no lo haga… ¡QUÉ NO SE LE OCURRA HACER ESO!- gritó mientras corría.
Cuando éste llegó a la casa se encontró a su amigo con la pistola de K (recordad que cayó al suelo, y que son tan guarros que no recogen nada) apuntando en la sien.
-¡Shu! Para…no lo hagas- intentó tranquilizarlo.
-¡CÁLLATE! ¿Porqué no debería hacerlo?- le respondió éste- ya no tengo nada por lo que vivir. Sin Yuki la vida ya no tiene sentido, y la música tampoco. Puede que haya sido un cabrón, pero le sigo queriendo…
-basta Shuichi… ¡¡¡¡PARAAAAAAAAA!!!!
Pero el pelirrosa disparó la pistola y cayó al suelo. Hiro fue a cogerlo para ver si estaba de coña, pero se había disparado de verdad. Lo único que pudo hacer por su amigo era llorar.