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Una historia de amor, placer y negocios. por fussili

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            En una noche oscura de estrellas negras, caminaba solitario sin rumbo fijo, iba pensando en su último encuentro, en uno que jamás olvidaría jaja, se había aprovechado de un chico, era apenas un niño, pero el otro criado también se lo buscó así que no habría problema, unas solas horas antes, él se lo había follado, se había cagado al obre niño…

 

Flash Back.

 

            Estaba en un bar, estaba agotado, esos estúpidos empresarios no lo dejaban ser libre, siempre tenía que arreglar sus asuntos a la manera de ellos, no les molestaba verga lo que pensara, por eso estaba ahí, para sacarse todo eso de la cabeza, en ese bar, en esa ciudad, Venecia…

 

            Daba la casualidad de que un joven pasaba también por allí, había terminado con su novio y se había embriagado, pasó a sentarse en la barra al lado del apuesto joven protagonista de nuestra historia, empezó a beber y beber más de lo que podía, hasta que se cayó de la barra, entonces nuestro amigo lo levantó y le dijo al oído seductoramente, Se lo que estas pasando, hace poco pase por lo mismo…

 

            Entonces se lo llevó arriba, estaban ya casi arrancándose la piel, esa sucia y fétida habitación que había sido escenario de quien sabe ya cuantos arranques de hormonas, sexo y dolor, sería ahora también testigo de esto, de cuando un joven empresario completamente sobrio de 17 años de edad se jode a un inocente chico de apenas 13 (Fussili: Lamento interrumpir pero digo no más que en mi país los chavos ya se joden entre todos a los 14 mínimo)

 

Chico: Espera, ¿como te llamas? Quiero saber.

 

Empresario: Dime el tuyo primero.

 

Chico: Ahhh – Una mordida en su cuello lo hizo reaccionar – Yo…. Y… yoooo. –ss-sooy ahhhh, mio nome è Pietro ahhhhh!!!! – olvidándose completamente de que estaba hablando con un japonés.

 

Empresario: Con que Pietro eh? Jeje ya veremos.

 

Pietro: Alto, quiero saber tu nombre.

 

Empresario: Llámame solo Yami…

 

            Así este joven convirtió lo que pudo haber sido tan solo una amistad en una noche de placer y sexo duro para un niño, apenas lo soportó así que tuvo que salir corriendo de allí para que no lo denunciaran por abuso, pero no le había dicho su verdadero nombre ya que era muy conocido además que no llevaba su usual apariencia, tenía el pelo suelto y lacio, negro como la noche y mechones rubios que caían libremente en su frente, parecía un ángel, mas era desalmado como nadie más.

 

En of Flash Back.

 

Yami: jaja, ese chico apenas sabe lo que le esperaba – relamiéndose los labios. – lastima que haya tenido que desmayarse a último momento, estaba tan estrecho uuhmmm – mientras que un pequeño problema surgía dentro de él, en otras palabras, tarde o temprano se haría paja jeje.

  

            Un chico albino de hermosos ojos mieles hablaba con su hermano.

 

Niño: hermano, no quiero irme de aquí.

 

Hermano: lo sé Ryou, pero tenemos que ir, debemos atender los negocios d nuestro padre en Venecia, además no estaría nada mal conocer más el mundo ¿no te parece? Es decir, Inglaterra no lo es todo, y podrás contarle a Malik de tu viaje, después de todo el tuvo que irse a Egipto por la misma razón por al que vamos nosotros a Italia ¿no lo crees?

 

Ryou: Si creo que tienes razón Kura, además, ¡¡¡¡tomaré muchas fotos y se las mostraré a Malik cuando volvamos!!!!

 

Bakura: Claro hermanito

 

            Mientras el pequeñín se iba quedando dormido, su hermano recordaba la verdadera razón por la que había aceptado ir a Venecia, sus ojos carmesí, ese joven tan apuesto que lo había cautivado, desde el instante en que lo vio no pudo quitárselo de la cabeza, estaba muy metido en ella, Atemu, susurró

 

Bakura: Pronto serás mío Atemu jeje

 

Uno no sabe si fue una sonrisa de felicidad, miedo, sadismo o satisfacción la que se formo en su rostro, pero si mirada era fácil de distinguir, estaba sedienta de gozo y placer, sus ojos rojo parecían dos dagas que podrían clavarse en el pecho de uno y no salir, ojos que te cautivan y te dejan prisionero para no poder escapar nunca, para así, servir solo de algo, de un juguete, como los anteriores que habían caído ante él, como el hermano del novio del suyo, Marik, quien se había dejado engañar hasta tarde, tuvo que romper por lo sano ya que sino Malik se separaría de Ryou, y eso fue lo que menos querría, lastimar a su hermanito, pero Marik ya estaba con otra así que problema hay con eso.

  

Bakura: algún día pagarás por lo que me hiciste, miserable sabandija.


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