Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Confesión de un Acuario por Aquarius No Kari

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Me gusta mucho este one-shot nOn… no es la gran cosa, pero aquí desglosé muchos de mis sentimientos hacia una persona a la que kiero mucho…

Espero que les agrade n.n

NOTA (segun las reglas tengo k ponerla o.o): Todas las series así como sus personajes tienen unos dueños, es nuestro deber respetarlos, el autor sólo los toma prestados para escribir su relato, siendo suyos todos aquellos personajes que decida introducir y que sean de invención propia. Nosotros no tenemos ninguna vinculación con las series, así como tampoco la tiene el autor. No tenemos intención alguna de violar ningún tipo de Copyright.

 

 

Confesión de un acuario

 

Nervioso es un calificativo adecuado, que podría describir esta cadena de sensaciones, que me cuesta... ¿interpretar?

 

Dioses...

 

Me parece que es más complicado de lo que pensé. Las manos me suban, las piernas me tiemblan... creo que eso explica el que no pueda estar simplemente de pie, sin mover músculo alguno; forzosamente tengo que caminar de un lado a otro, o golpear el piso con la punta del pie, insistentemente, como si esperara que la tierra se abriera y me tragase –Buena idea, dice mi subconsciente-. Mis dientes están mordiendo mi labio, por lo que no me extrañaría que su tono se acentuara, o incluso, que este comenzara a sangrar...

 

Oye, ¿Conozco al tipo que ahora me dirige la palabra?

 

¡OH!... se supone que es uno de mis mejores amigos.

 

-"Es hora"- Sonríe. -¿por qué lo hace?-

 

¿Qué ya es hora?... pero aún no estoy listo... no sé si quiero hacerlo... Es decir, si quiero; pero tú sabes que hay tanto en contra. Demasiado. Es como tratar de nadar en sentido opuesto al fluir del río.

 

-"Valor amigo, valor"- Me dice otro al que –supuestamente- quiero de igual forma, dándome una suave palmada en el brazo izquierdo. –Otro amigo, y la gente dice que no soy sociable-.

 

Tomo una gran bocanada de aire, indispensable para dar el primer paso, así como exhalar para dar el siguiente.

 

¿Sabes algo? No entiendo porque estoy tan nervioso. Sé que a tu lado no me faltará nada, que contigo me eh sacado el premio mayor, en todos los aspectos. Tienes tantas cualidades que me parto entre la envidia por no poder ser tú, y el sentirme tan poca cosa a tu lado...

 

¡UY...!

 

Ahora que detengo mi andar, me doy cuenta de que es una de las principales cosas que me detienen a hacerlo. No tengo nada que ofrecerte, y soy medio masoquista. Los amores que eh tenido –y que conoces perfectamente- no han sido lo que yo esperaba. No pienso rememorar completamente mis pasadas experiencias. No seria justo sólo pintarme como mártir, cuando fui testigo, juez y verdugo. Además de todo, tú conoces mi pasado, mi vida, mis emociones... no sé... conoces tantas cosas de mí que a veces me provoca miedo. Tienes algo –que me atrevería a llamar cualidad- que te convierte en la única persona en la que consigo confiar tan plenamente, que incluso pude llamarte mi confidente, porque ante nadie más logré desudarme de la forma como lo hice contigo, con nadie más pude ser tan abierto sin sentir temor al rechazo.

 

Tú me salvaste -¿Lo sabes, cierto?-.

 

Mi corazón estaba destrozado cuando te conocí. Fingí que mi vida era ‘perfecta’, o que al menos, yo quería mantenerme hermetizado, solo, sin que alguien se metiera a donde nadie lo vino a llamar. Alejé a muchas personas de mi vida, no quedé satisfecho hasta no lograrlo; de hecho, la más reciente herida es de una persona a la que amé mucho, y que ahuyenté... Pero tú te quedaste, aún cuando todo parecía perdido, cuando la situación apuntaba al fracaso me tendiste la mano y me ayudaste a salir del abismo al que me arrojé...

 

-"Ya no quiero sentir... estoy cansado..."- Te dije totalmente abrumado.

 

-"¿Por qué? Dame una razón"

 

-"Porque es malo... te hace débil..."

 

-"Te hace humano..."

 

-"¡Pues los humanos son débiles, son basura...!"

 

No recuerdo lo que siguió. Creo que esta emoción llamada nerviosismo, me nubla la mente. Únicamente recuerdo que hablamos, que te escuché, que tú hiciste lo mismo. Luego reímos porque a ti no te gustan los niños, cuando yo los adoro. Extraño, lo sé.

 

Esa noche surgió un nexo especial, jamás lo había tenido con nadie. Fue cuando te volviste mi confidente, te lo dije.

 

Me prohibí creer en la amistad, en el amor, en la mayoría de las cosas que nos otorga la vida, hasta el día que te conocí; ya que entendí que esas simples palabras encierran más cosas que las que un diccionario puede explicar. No me pidas que lo desglose. -Tengo el estómago revuelto... me extraña que aún no me haya desmayado...-

 

Estoy por llegar a la mitad del pasillo, a la puerta, para ser más exacto. Voy seguro, ya no tengo temor... los mismos síntomas de hace un rato, aunque subidos de nivel...

 

Nuestra relación fue bastante extraña. Yo estaba acostumbrado a hacer cuanto quería con mis parejas, sin restricciones de ninguna clase. Y si, muchas veces sentí que esas personas no me amaban por dejarme hacer cuanto yo gustase. Pienso que si uno ama a alguien, por su bien, le prohíbe ciertas cosas; aunque, bueno, ya eh dicho que no pretendo ser un mártir, y que hice cuanto estuvo en mis manos por que se me odiara. Lo conseguí y lo pagué a un alto precio. Me alegra saber que no estaré del todo solo... te tengo a ti...

 

-"Camus, escúchame"- Alguien me tomó por ambos hombros en un intento por hacerme ‘reaccionar’. –"No puedes casarte únicamente para no quedarte solo"- Yo evité su contacto.

 

-"No lo hago por eso. Déjame en paz."- Quise evadir la cuestión. Huir como el cobarde en el que me transformo, cuando se toca el tema de mis sentimientos.

 

-"Según lo que nos cuentas, yo diría que si. Acabas de terminar con..."

 

-"¿Y? ¿Acaso no puedo volver a enamorarme?"

 

-"En ningún momento Kanon dijo que no podías hacerlo. Somos tus amigos y te queremos, nos preocupamos por ti. Piensa bien las cosas y descubre si en verdad quieres unir tu vida a la de Milo..."

 

-"Aioria, tú lo dices porque no te pareció que terminara con..."

 

-"Lo admito. Hacían bonita pareja; pero no, no es eso. Ustedes tienen muchos obstáculos: Tú familia, la familia de él, personas como nosotros que sólo buscamos tu felicidad"

 

Ante el recuerdo de aquella conversación, me declaro culpable por querer emprender la carrera fuera de esta habitación, de huir de la mirada de quien que ah de casarme contigo, de los testigos, de tus amigos, nuestra familia, de tus ojos...

 

Juro que mis pies han dejado de moverse por voluntad propia, que yo no eh tenido nada que ver...

 

Dioses... Me falta valor. Justo ahora siento que voy a claudicar, que no podré casarme contigo porque quizá no valga la pena atarte a mi lado...

 

-"No quiero que seas plato de segunda mesa."- Dije yo, alguna vez

 

-"¿Eso crees que soy?"

 

-"Perdona que te lo diga de esta forma, Milo; pero no te atiendo como tú te lo mereces, lo sabes. Mi tiempo lo gasto en otras cosas, no lo invierto en ti, en lo que debería ser lo más importante en mi vida..."

 

-"Camus... ¿Puedo decirte algo?"

 

Lo pensé. Aseguré y juré que me mandaría al diablo como todos los demás... Era demasiado bueno para ser sólo mío...

 

-"Pongámoslo así: Yo soy feliz con lo que quieras darme. No te exigiré ni pediré nada más allá de lo que tú estés dispuesto a compartir conmigo"

 

No me pareció justo en ese momento, no creo que alguien pueda vivir así; sin embargo, esas palabras se convirtieron en llave y candado, porque desde entonces sólo me reservo para él, y es el único por quien me freno o le doy rienda suelta a mis emociones. Como lo explicaba al principio. Contigo no tengo ataduras en mi mismo, puedo ser yo sin temer a que me rechaces y puedo abrirme a sentir nuevas cosas contigo.

 

Es imposible describir como me siento cuando el sonido de tu voz viaja hasta mis tímpanos, o tu silueta es admirada por este par de privilegiadas pupilas cafés; únicamente soy conocedor de lo afortunado que puedo llegar a ser sin aceptas compartir el resto de tu vida conmigo.

 

Y aquí me tienes, frente a ti. Sonríes como siempre, con la línea de perlas adornando los labios, que tantos besos atrás me regalaron, los mismos que despidieron palabras de consuelo en mi aflicción y me otorgaron una segunda oportunidad de existir.

 

Sé que titubeé tantas veces en este camino, y que por ello merecería la pena máxima consistente en tu indiferencia; mas te diré, si dudé fue por los tantos impedimentos en esta boda, jamás por elección propia. Pero yo te amo, tú me amas, no necesito quedar bien con nadie, ni probar nada en especial. A ti te debo cuanto eh llegado a ser, y el poder proclamar "estoy con vida". También sé que más de uno me odiará por esto... pero...

 

-"Yo te acepto..."

 

Ahora si, juntos hasta que la muerte nos separe...

 

Y no es final... si no el principio de algo mucho mejor.

Notas finales:

Eso es todo... gracias por su lectura ^^


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).