Narradora Ino:
Veo como mi padre y mi ex mejor amigo se besan enfrente de mí y ni siquiera hacen algo, disimular no estaría nada mal, entiendo su relación y aun me cuesta trabajo entender como es que mi padre de 34 años se enamoro de mi mejor amigo de 18, entiendo que mi padre tenga gustos diferentes, el mismo me lo dijo, y lo entiendo, si bien yo había nacido de un hombre, no me incomodaba, de hecho de cierta manera me sentía feliz, pero lo que si me enojaba era el saber, de que yo, había presentado a Deidara Uchiha, como ahora se llamaba, a mi padre, aun recuerdo el día en que los presente, y la mirada que hizo mi padre, como si hubiese visto al más bello ángel de toda Inglaterra.
-FB- Deidara y yo íbamos rumbo a mi casa, era la primera vez que lo invitaba, casi siempre yo iba a su casa, pero a veces sentía que molestaba mucho así que esta ves yo lo había invitado, solo esperaba que mi padre no me digiera algo como “Ino ese tu nuevo galán” o “Ino ese muchacho me da mala espina” siempre me hacia lo mismo, pero lo quería y sobretodo por protegerme tanto. Entramos a mi casa, no se oye ningún sonido, supongo que mi padre no ha de estar, por ello me voy rumbo a mi cuarto seguido de Deidara, pero mis sospechas son falsas, al notar que mi padre esta acomodando un closet y se le caen un montón de camisas y suéteres. De in mediato se ase presente mi risa, esperaba que Deidara tamben se riera junto conmigo, pero en vez de eso noto como el va y ayuda a mi padre y le ayuda a coger las cosas del suelo. Faltaba por recoger una última prenda, ambos querían agarrarla, pero sus manos chocan y con ello, se voltean a ver a las caras, es extraño esa sonrisa que hizo mi padre al ver a Deidara, o el sonrojo de mi amigo, o más bien mejor amigo. Deidara quito su mano, y mi padre coje aquella prenda, yo me quedo realmente sorprendida, ambos se van a el cuarto de mi padre mirándose estupidamente y ahí guardan la ropa juntos, creo que mi padre no sintió que ya había llegado, le reclamare y me pondré sentimental talvez así se sienta mal y me compre algo jejeje. Entro a mi habitación olvidándome de Deidara y mi padre, me quito mi uniforme, lo doblo y lo guardo, seguido de esto me dispongo a buscar mis jeans, una camisa de manga larga y de color café, y unas zapatillas cafeces. Al salir noto como mi padre esta hablando animadamente con Deidara, pero algo me sobresalta al notar como mi padre empieza a poner su mano alrededor de la cintura de mi amigo. -Disculpen-Hago presente mi voz y de inmediato ambos se separan sonrojados mientras yo los miraba con algo de enojo, aunque no sabia el porque realmente. Fin del Flash BackDesde ese día, no quise invitar más a Deidara a la casa, pero me era imposible ya que este mismo iba o lo invitaba mi padre, desde ese día también mi padre ya no me dejaba venirme sola de la universidad, me recogía cada día solo para verlo a el, y no faltaba algo, que cada día mi padre me preguntara “y como esta Deidara” “Tiene novio” esa pregunta me dejo en shock, yo sabia de los gusto raros de mis padre, que eran similares a los de mi amigo, pero que tu padre preguntara era raro y escalofriante.
Entonces el maldito día llego, ese día que me da asco de solo imaginarlo…quiero morir…
-FB- Yo regresaba de la escuela, era raro esta ves mi padre no me había recogido y Deidara no había ido, por ello decidí venirme sola y no pasar a ver a Deidara, le llamaría luego… Entro a mi casa como lo hago de costumbre, pero algo atrae mi atención, la ropa de mi padre esta votada por el suelo, y no solo eso, si no que también su ropa interior, empiezo a asustarme, y me dirijo a su habitación, pero empiezo a escuchar cosas muy raras dentro de su habitación, pero nuevamente algo atrae mi atención, al notar un chaleco igual al mió, era el de mi escuela, solo que se veía para talla de hombres, y decidía y atemorizada entro a el cuarto a saber que aya o encuentre a ya dentro. No puede ser, encuentro lo más asqueroso que pueden ver mis ojos. Mi padre y Deidara estaban en pleno acto, ósea…estaban…teniendo sexo… Rápidamente se ase presente mi presencia, ambos me miran, Deidara empieza a llorar y yo solo puedo decirle “Hipocrito” mi padre se levanta y trata de explicarme, pero yo me voy corriendo a mi habitación, con mis ojos envueltos en lagrimas y enfurecida. Me encierro en mi cuarto, oigo como mi padre toca la puerta y me ordena que le abra, pero solo me aviento a mi cama y lloro más. -Fin del Flash back-Desde ese día, mi padre y yo teníamos poca comunicación al igual que la que tenia con Deidara, es más a el ni le hablaba, lo estaba odiando, lo consideraba un prostituto, por haber seducido a mi padre, pero sabia que se necesitaban de los dos para llegar a tanto y dudo que mi padre no se aya dejado seducir, seguro el también lo seducio.
Dos meses más tarde me entere de la terrible realidad que Deidara, ¡estaba esperando un hijo de mi padre!
Mientras Deidara y mi padre gritaban como locos emocionados del fruto de su amor, yo me enojaba, y más me enoje al enterarme que mi padre le pidió matrimonio a Deidara.
Este no dudo en aceptarlo, y en menos de una semana se fue a vivir con nosotros, estaba más que claro que ya estaban casados, la edad no era problema en Inglaterra, de hecho era común este tipo de casos.
Desde esos días padecía de insomnio, ¡¿y como no!? Oír a mi papá y a mí “Padrastro” gemir la mayoría de las noches me dejaba sorprendida y llorando, de solo imaginar como mi padre arremetía sin piedad contra mi ex mejor amigo, y oír gemir a este, jamás pensé odiar tanto a alguien.
Y aquí estoy, viendo como ellos se besan y como Deidara ya tiene nueve meses de embarazazo, estaba apunto de tener a su hijo, y cada día mi padre actuaba más raro, desde que había conocido a su “Dei-chan” me desalojaron de mi habitación, para dársela al nuevo bebe, a mi me enviaron a otra habitación mas chica, que paso con eso de que “todo en la casa es tuyo hija” si como no, me quitaron lo único con lo que se puede decir, me sentía más o menos feliz, y encima mi cuarto lo pintaron de color amarillo y le pusieron dibujitos, el cuarto era solo del bebe, y era sumamente grande.
Mientras que yo dormía en un lugar horrible, ni siquiera me pregunto si necesitaba algo o algo así, solo me dijo “Ino te cambiaremos la habitación, ya que la tuya será para el bebe” eso me puso rabiosa, ¿ importaba más el que yo? En esos días deseaba que Deidara muriera al igual que su hijo.
De lo cual me arrepentí muy tarde…
A Deidara se le había adelantado el parto, y ahora tenían problemas, el bebe estaba atorado y a Deidara se le rompía más y más la matriz, aparte de que estaba perdiendo mucha sangre le empezó a dar un paro cardiaco en el parto.
Yo estaba en la sala de esperas con mi padre, me sentía mal, no sabían si Deidara y Susuki, mi nuevo hermanito se salvarían, lagrimas de mis ojos brotaron, ¿En que estaba pensando cuando dije en esas palabras? Así…mi felicidad… no me importo un segundo la felicidad de mi padre…años cuidándome y el no había podido hacer su vida…
Lo volteo a ver y veo que llora, y ¿reza? El siempre me dijo que no creía en esas cosas, pero desde que conoció a Deidara se empezaba a interesar más en eso, y ahora le rogaba a Dios de que su bebe y su amado no murieran.
Cuidadosamente me acerco a el, y lo abrazo el se sorprende y me ve, yo solo le puedo decir perdón, realmente no se en que pensaba, creo que eran mis celos de hija los que hacían actuar así…
-Hija…-Me dice mi padre-Perdóname…Se que debo haberte dicho que tenia un romance con Deidara…pero…no quería decírtelo, porque tenia miedo de que te enojaras con el o conmigo, entiendo que estés así, pero trata de comprender de que ahorita estoy muy triste por que no se si Deidara o Susuki se salvaran y si ambos mueren…ya no tendría sentido mi vida….veras yo jamás creí que podría superar lo de Tsubaki (Así se llamaba el padre de Ino, que por cierto la abandono) yo pensaba que nuestra relación iba enserió, pero me dijo que era un juego y luego el se embarazo de ti, y yo creí que podríamos formar una familia, pero me entere de que tenia otro…y me abandono y yo cuide de ti como buen padre….
Realmente eso me dejaba impactada, mi padre estuvo con aquel ser repugnante que odiaba, por haberme abandonado, mi padre le conoció a los 16 años y a sus 34 no había salido con nadie, ni si quiera un pretendiente o algo así, estuvo 18 años de su vida solo, sin nadie a quien besar o algo así, y ahora que podía yo se lo impedía.
Ahora entendía, mi padre se merecía ser feliz alado de Deidara, realmente no se porque pero debería alegrarme, Deidara seria como mi padre, solo es mayor que yo por un año, intentare llevarme mejor con el, el si me quiere incluso me decía hija y yo solo decía “Cállate idiota” y el se ponía muy triste.
Imite a mi padre he hice una oración…prometí que si mi hermanito y mi papa salían de la operación seria mejor persona, que trataría de afrontar aquel hecho, y no actuaría como entupida y niña mimada cada vez que veía una escena comprometedora.
De pronto veo como la luz que dice en operación, se apaga y empiezo a sudar al igual que mi padre, ambos no perdemos la esperanza, ahora se aproxima un doctor, muy sudado por tan larga operación.
-El niño y Deidara…están bien…ambos se están recuperando-Dijo el Doctor.
Tan pronto mi padre y yo ollemos eso, nos alegramos y nos ponemos a saltar como idiotas, mi padre insiste en ver a Deidara, el doctor le dice que apenas se esta recuperando, después de tener a su bebe quedo cansado además que estaba en estado sensible por el momento, ambos entendemos y nos disponemos a salir de la sala de operaciones para ir al salón de la paternidad, donde veo algo realmente hermoso…
En la incubadora esta un bebe, es mi hermanito, es muy bello, al parecer tendrá ojos azules y pelo negro, es algo pálido como papá, pero sonríe mucho para la edad que tiene, a pesar de que duerme sonríe, eso me alegra, sin querer empiezo a llorar y veo a mi hermanito, mi padre me observa, y se dirigí a mí para decirme algo…
-Deidara y yo hemos decidido devolverte tu cuarto…el bebe dormirá con nosotros por un tiempo mientras conseguimos una casa más grande…-Me dice algo apenado alo que yo respondo…
-No papá, mi hermanito debe dormir bien cómodo, y le cedo mi cuarto…solo que no quiero que cuando el tenga seis años me raye mis posters de mis cantantes favoritos…
-Jejeje no lo hará, mientras tú no molestes y le pegues sin razón…
Sonrió de lado, ambos salimos, estamos muy cansados, mi padre tiene sueño, pero no me dice nada, le pido las llaves del auto para ir a recoger algo de ropa y cambiarnos aquí en el hospital, además de que Susuki y Deidara no trajeron un cambio.
En fin ahora me siento feliz…creo que lo único que realmente me importo fue yo, yo y yo, pero ahora entiendo que primero son las personas queridas, y ellas son mis padres y mi hermanito…
Tiempo después…Ahora vivíamos en Paris, había días que realmente no dormía, y es que Susuki podía ser alegré pero era un llorón, pero en vez de enojarme le ayudaba a Deidara, el pobre estaba aun débil, por ello le ayudaba con el bebe mientras el descansaba, incluso por Deidara mi papá me dejaba ir más a fiestas o de compras, y todo era gracias a Deidara.
Toda nuestra familia era bella, se sentía el amor en la casa…aparte de los gritos del tonto de Susuki cuando no lo cargaban.
Un día algo inesperado llego a mí casa, una persona ala cual no quería ni oír su nombre.
Era Tsubaki, mi dizque padre, tan pronto lo veo, le cierro la puerta, pero el la detiene y me empieza a lanzar sermones, de que lo sentía que quería restaurar aquel amor de padre e hija…
¿Cual restaurar? ¿Se empezó alguna vez? No me di cuenta, me las iba a arreglar sola cuando viene Deidara, bañado, arreglado y ¿sexy? Seguro se vistió así para mi padre.
-¿Disculpa que quieres?-Dice mientras arrulla a mi hermanito, no me había dado cuenta que lo traía, así que dispongo a quitárselo y lo empiezo a arrullar.
-Vine a ver a mi hija y a mí esposo…-Dice con incredulidad, que no le importa dejarnos solos, esta vamos bien así como esta vamos.
-Pues aquí no vive su esposo-Wuao realmente me sorprendo, Deidara tenia un carácter diferente…
-Si aquí vive, se llama Uchiha Itachi…-Dice mientras sin pena se asoma por la puerta y dice, “Itachi querido”
-No le diga así a mí esposo, además el esta…-Antes de que termine la frase, mi padre se ase presente.
-Aquí estoy mi amor-Dice al tiempo en que besa los labios de Deidara, causando rabia en el otro.
-¡Itachi! Que crees que haces, ¡se supone que tu me amas a mí…!-Dice tratando de entrar a mi casa, al parecer quiere quitarme o insultarme pero Deidara se mete en la conversación, y sus palabras me asombran…
-El te amaba antes, ya no, lo dejaste solo, y más a un con una hija, ¿no tienes vergüenza de venir aquí? A reclamar algo que no es tuyo, Itachi es mi esposo, y tenemos a dos hijos, ambos son míos, uno se llama Susuki Uchiha y la otra Ino Uchiha, así que no vengas a reclamar algo que no es tuyo, tuviste tiempo para remediar tu error y no lo hiciste, Itachi hizo su vida, e Ino la suya así que le pediré que salga de mi casa, que estoy muy dolido como para gritar en este instante, además no quiero despertar a mi bebe, no venga lanzando sermones, hoy ya es tarde, usted ya no es el padre de esta muchacha…yo si…así que se va, que mi marido y yo estamos cansados y mi hija Ino esta molesta por su presencia…-Ante esto Deidara cierra la puerta y se apresura a llamar a la policía, acusando al señor de daños ala propiedad privada, realmente Deidara me sorprendió, y no solo a mí, si no a mi padre, me asome por la ventana viendo si aquel señor seguía ahí, pero el muy cobarde salio huyendo, me dispongo a entregarle mi hermano a mi padre, este lo carga y se va a su cuarto para arrullarlo, mientras que me acerco a Deidara y sin querer dijo…
-Gracias…papá…-Ante esto lo abrase mientras lloraba, y el lo asía igualmente, el me quería y no era el típico padrastro que te aria la vida imposible, es más el trataba de arreglármela ¡a mí!
Realmente, quiero a Deidara y a Itachi, quizás haberle presentado a Deidara no fue un error después de todo, termine siendo muy feliz, y no solo eso, aprendí que antes que yo están todos lo demás, aunque eso implique mi felicidad, pero la mía no la perdí, es más, esa felicidad, se hizo más grande, gracias a Deidara…mi mejor amigo…mi peor enemigo ahh si y mi papá.