Hay cosas que no cambian con los años...
Sasuke hoy cumple cinco años, incluso al ser tan pequeño sabe perfectamente que día es hoy. Las 7:30 de la mañana y ya está completamente despierto, aún sin querer levantarse de su cama.
Escucha como lentamente se abre la puerta de su habitación, como tratando de no despertarlo. Su mamá entra y deposita un cálido beso en su frente al notar que los ojitos negros de Sasuke están completamente abiertos, sin pizca de cansancio. Sasuke se sienta en su cama para recibir un reconfortante abrazo que su madre le proporciona.
Baja las escaleras con rapidez, con su madre tras él, cuidando que no se vaya a caer. Llega a la cocina, su padre ya se fue, frunce el seño, ¡que mal padre tiene!. Una sonrisa vuelve a su cara al notar que su desayuno preferido está sobre la mesa, junto a un enorme pastel de fresa, los ojos le brillan, adora el pastel.
Al terminar de comer corre hacia la sala para encontrarse con una montaña de regalos, de su madre, de su hermano, de sus familiares, de los socios de su padre e increíblemente también hay uno que le deja su padre, sonríe ante esto y corre a abrirlos. Triciclos, camiones, carritos, pistolas, uno que otro peluche y un feo y grueso libro, cortesía de su padre.
Escucha pasos en las escaleras y avienta el libro de gruesa pasta negra a algún lugar detrás del sofá, olvidándose completamente de su existencia corre a las escaleras, para ver como un muy desvelado Itachi de diez años baja por éstas. Itachi llega hasta su pequeño hermano y después de un bostezo reprimido, junta dos de sus dedos y golpea la frente del pequeño Sasuke - Feliz Cumpleaños ototo - y se dirige a comer algo del pastel sobrante en la cocina.
La noche llega a la mansión Uchiha, su mamá lo llevó al zoológico todo el día y un gracioso gorrito de elefante se asoma por encima de su cabecita, es hora de dormir, pero afuera está lloviendo.
Le da miedo cuando llueve mucho, se pone el pijama de tiernos ositos, pero en vez de meterse a su cuarto, se mete al de su hermano, quien está leyendo un gran libro sentado en su cama. Sasuke solo asoma la cabecita, avergonzado, por la puerta de la ordenada habitación de su hermano.
Itachi lo ve y le sonríe un poco, deja el libro en la mesa de noche y golpea suavemente a su lado, mirando al pequeño, para que sepa que puede meterse con él a la cama. Sasuke sonríe y entra por completo, cierra la puerta y sus pies descalzos pisan la alfombra color vino, corre y sube tiernamente a la cama, abrazando a su hermano que ya está acostado. Itachi regresa el abrazo y le da un pequeño beso en la frente.
La lluvia no deja de caer afuera y después de un rato en el que Sasuke le contó un par de cosas de jirafas, elefantes y leones al mayor, ambos se quedaron profundamente dormidos, uno muy junto al otro.
-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
Sasuke hoy cumple once años. Abre los ojos al escuchar el despertador, a las nueve y media todo Uchiha debe estar ya despierto y vestido, regla de su padre. Se mete al baño y se queda un rato, sale y se pone ropa ligera, hace mucho calor, es pleno verano. Baja las escaleras y entra en la cocina.
Su madre con una enorme sonrisa lo mira desde la estufa, se limpia las manos con una pequeña toalla y va hacia su hijo a darle un abrazo. Sasuke responde al gesto algo fastidiado, pero al fin y al cabo así es su madre, no hay nada que pueda hacer al respecto.
Itachi baja las escaleras, el menor ni se molesta en voltear a verlo, el mayor junta sus dedos y golpea la frente de su hermano cuando ya está lo suficientemente cerca de su espacio personal - Feliz Cumpleaños ototo - le dice como cada año, para ir a la cocina.
Los tres se sientan a comer, pues su padre una vez más no está en la casa, lo cual realmente no le importa pues ya está totalmente acostumbrado. Huevos con tocino con jugo de naranja y un pedazo de pastel de fresa para cada uno es lo que hay. Sasuke hace una extraña mueca, hace mucho de dejaron de gustarle las cosas dulces, pero no dice nada y se dedica a comer.
No ha parado de llover en todo el día y Sasuke tiene muy mal humor, ¡no ha podido hacer nada más que jugar scrabble con su estúpido hermano! Y para colmo ¡No ha podido ganarle ni una maldita vez! Toma el control de la televisión y comienza a cambiar canales para ver si puede encontrar algo interesante. Caricaturas, noticias, series de acción, y una que otra película cursi. Frunce el seño y escucha como tocan el timbre de la puerta.
Se pone de pie y se dirige a abrirla, cualquier cosa mejor que no hacer nada o tener que jugar otra partida de scrabble. Abre la puerta y un lindo niño de más o menos su edad está del otro lado. Ojos azules, piel morena y cabello rubio, Sasuke sonríe y el menor le da un pequeño abrazo. Son amigos desde hace un año que el rubio llegó a la escuela y por alguna razón Sasuke lo protege mucho.
Sasuke invita a pasar a Naruto y el rubio le da una cajita con un regalo. Sasuke la abre y encuentra un vale por un tazón de ramen, le sale una gota en la sien, que usuratonkachi, ¿para qué quiere él eso? Y también hay una pequeña cadenita color plata, esa sí que le gusto.
El resto del día se la pasa jugando con el rubio, juegan a las escondidas, a patea la lata y a cualquier juego de mesa que encuentran, ¡incluso al scrabble! Y está vez a Sasuke si le gusta, pues gana todas y es algo obvio si el rubio solo quiere escribir ramen.
Una mirada oscura se posa seriamente sobre el pequeño rubio, quién sin proponérselo a pasado a ser su enemigo número uno, nadie le roba a su estúpido hermano menor, se retira a su habitación antes de hacer algo que no debe.
Sasuke juega twister con Naruto y luego comen unas galletas que su madre prepara para ambos, es de noche y Naruto ya se tiene que ir, su abuela viene por él, pero Sasuke no quiere dejarlo ir, una porque la estaba pasando tan bien y otra porque la abuela de Naruto es una vieja alcohólica y está más que seguro que está borracha. Aún así se despiden y Sasuke se va a su habitación.
Cierra la puerta y se tumba en la cama, mirando el techo blanco que en ese momento parece ser realmente lo más interesante en todo el mundo. ¡Qué aburrido está ahora sin Naruto! ¡Maldita vieja alcohólica! ¡debió haberlo dejado quedarse a dormir!
Sasuke escucha pasos fuera de su habitación, pero lo que menos hace es prestarles atención, hasta que alguien toca su puerta. Sin esperar la respuesta del menor, Itachi abre y entra a la habitación. Sasuke frunce el seño al verlo ahí de pie, ¿Qué acaso su nii-san no tiene modales? Itachi le dice con aparente indiferencia - Traigo tu regalo - Sasuke estira las manos, esperando que el mayor le entregara algo.
Unos labios contra los suyo es lo que recibe y al separarse solo puede observar a su hermano con desconcierto. Itachi lo mira con una sonrisa, para después volver a juntar sus bocas en un beso un poco más demandante. Los ojos cerrados, los labios entreabiertos, las lenguas jugando una con la otra. El primer beso de Sasuke con cualquier ser humano. Sasuke está disfrutando el contacto y no se molesta si quiera en intentar ocultar lo que está sintiendo. Ahora está realmente agradecido que Naruto no se hubiera quedado, ¡Gracias Tsunade -sama!
La oscuridad reina la habitación, por alguna extraña razón la lluvia no ha dejado de caer y solo dos pares de ojos se observan en la penumbra, ambos sonríen y se acuestan en la cama, para quedarse dormidos, uno muy junto al otro.
-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
Sasuke hoy cumple 16 años. Suena el despertador, pero él ya no está en la cama. El cuarto perfectamente recogido, sin un solo granito de polvo. La cama ya está tendida.
Frente al espejo mira como ha crecido. Suspira molesto, el crecer lo ha hecho más guapo y perfecto, con un cuerpo que toda persona o desea o envidia, sí, pero también le ha traído más de un problema. Millones de fans tras él cada día y un molesto hermano posesivo son las principales inconveniencias.
Baja las escaleras, sus padres no están en casa, fueron a algún importante desayuno de negocios que a él realmente viene a importarle menos que el que la presidenta de su club de fans se caiga por un precipicio, es más, eso sería algo agradable, haber si así dejan de fastidiarlo.
Mira el refrigerador y hay una nota de su madre "Hay comida en la estufa, y feliz cumpleaños Sasuke... mamá" Es lo que dice. Sasuke lo deja pegado y se acerca a la estufa, todo está frío y él no piensa mover un dedo para calentarlo, así que saca un tazón de la alacena, la caja de su cereal y regresa al refrigerador por un litro de leche.
Come tranquilo hasta que escucha las escaleras, se inquieta un poco, ¿cuándo demonios había decidido empezar una relación con su hermano? Maldecía ese momento, oh, bueno en realidad no.
Itachi entra a la cocina y se acerca a él, golpeándolo con sus dedos como cuando era niño y después plantarle un húmedo beso en la boca a su hermano - Feliz Cumpleaños Ototo - y se dirige a prender la estufa. Él no piensa comer algo tan degradable como cereal con leche, así que calienta la comida que les dejo su madre.
Ambos se encuentran mirando la televisión, viendo una entretenida película del más puro terror. Es una afición que ambos compartían. Itachi desde que lo recordaba y Sasuke, desde una vez que su hermano intentó asustarlo para que se acurrucara en su pecho, cosa que obviamente no le funcionó, pues desde que había cumplido los doce años, Sasuke ya no era un gatito asustadizo, como el dobe de su amigo Naruto.
Al terminar la película, Sasuke se levanta y se dirige hacia la salida. Afortunadamente para él, el día está soleado y había quedado de ir con sus amigos al karaoke a festejar su cumpleaños, oh, bueno en realidad lo habían obligado. Un alto moreno, hermano suyo lo intercepta en la entrada con ojos de ¿a dónde vas? Y una vez más aparece esa extraña posesividad que Itachi tiene con él.
Antes de que pudiera decir o hacer algo, el mayor lo estrella suavemente contra la pared, devorando sus labios y luego pasando a su cuello, donde se entretiene unos momentos, succionando, hasta dejar una pequeña y hermosa marca roja en la blanca piel del menor, un claro signo de que Uchiha Sasuke le pertenece a Uchiha Itachi. Nuevamente se va a ver televisión dejando a Sasuke con claro enfado y es que ¡Odia que lo marquen! Está bien que tengan una relación, pero ¡Uchiha Sasuke no era de nadie! Estúpido aniki...
Aunque no lo quiera admitir, el día lo pasó bastante bien, fue con sus amigos de la escuela al karaoke y pidieron comida y unas cuantas bebidas, algunas incluso ya con alcohol, pues en plena adolescencia están en la etapa de "ya somos grandes".
Lee había hecho la mayor vergüenza de su vida, y mira que fue grande porque generalmente Lee siempre da pena, mira que con todas esas tonterías sobre la juventud... El punto es que había besado a Neji, su amor desde hace dos años, ya que estaba completamente borracho. Cosa por la cual Tenten lo había golpeado, pues también está enamorada de Neji. Neji quedo totalmente sonrojado y en esta de shock y su prima, Hinata terminó desmayada y nadie pudo despertarla después.
Sakura e Ino, como siempre habían intentado abalanzarse sobre él, cosa que el "sutilmente" impidió. Shikamaru prácticamente se durmió todo el día, a pesar de los intentos de su novia Temari por mantenerlo despierto, pero a él le pareció simplemente problemático.
Shino se fugó con Kiba y el perro de Kiba en algún punto del día que nadie había notado. Sai se la pasó fastidiándolo e intentado meterle mano, cosa que siempre impedía o él, o Naruto. Choji se acabó toda la comida que habían ordenado, Kankurou hizo un show con esas tétricas marionetas de las que está enamorado y para su sorpresa Gaara cantó varias canciones moviditas, ¡con todo y baile! El alcohol si que saca otro lado de la gente.
Ahora va para su casa, junto con su mejor amigo Naruto, que está enamorado de él aunque aún no se lo dice, pero vamos, ¡Sasuke no es tan tonto para no notarlo! Y él debe admitir que en cierta parte también le atrae el rubio, le gusta mucho estar con él y ver esa sonrisa, además ya se han besado "accidentalmente" un par de veces, cosa que Itachi nunca debera saber.
Oh, casi lo olvida, ese dobe también es la persona que despierta más que nadie el lado celoso-posesivo-insoportable de Uchiha Itachi y cuando se conocieron cinco años antes, se habían inmediatamente declarado la guerra y él había decidido que no tenía nada que ver con eso.
Entra a su casa, sus padres o no están de nuevo o no han llegado desde en la mañana, en fin, su hermano mayor lo mira claramente enojado y es que seguramente vio que Naruto lo acompañó. Decide ignorarlo y pasa olímpicamente de él, cosa que claramente enoja más al mayor, quien lo toma del brazo y lo jala a su habitación.
La puerta se cierra, las luces no se encienden y Sasuke es empujado a la cama, eso ya le está dando miedo. Su hermano comienza a besarlo y a pasar claramente de unos simples besos, cosa que el menor intenta detener, ganándose simplemente una nueva marca en su hombro. La ropa volando a lugares desconocidos de la habitación, las caricias, los suspiros, los besos, los gemidos pronunciando el nombre contrario y un baile prohibido es lo que pasa después.
¡Qué buen cumpleaños había tenido Sasuke! Itachi le había robado a Sasuke su primera vez y eso a Sasuke realmente no le molesto, simplemente se acurruca en el pecho del mayor y así desnudos se quedan dormidos, uno junto al otro.
Muchas cosas diferentes pasan siempre en cada uno de sus cumpleaños, pero también hay cosas que nunca cambian y que espera nunca cambien, sin importar cuantos años pasen...