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+ Monochrome No Kiss + por Gabrii

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Notas del capitulo: Kufufufu CB amor a la pedofilia de Sebastian LOOOL xDD

Tenebrosa, oscura, fría, es así como podría sentirse aquella triste noche, el silencio en la mansión Phantomhive era inmenso, ni siquiera aquellos sirvientes revoltosos se hacían oír, tal vez porque ya eran altas horas de la noche pero el amo de esa enorme casa aun seguía despierto, dando vueltas en la cama sin poder conciliar el sueño, últimamente así era pensaba y pensaba cosas que según el eran sin importancia pero sabia bien que si eso era la causa se equivocaba al decir que eran sin importancia.

 

Se levanto hacia el ventanal abriendo un poco la enorme cortina viendo hacia fuera todo se sentía tan triste y vació escucho una voz tras de el volteo de inmediato y ahí estaba su inseparable mayordomo al que nombro el mismo como Sebastian.

 

- … ¿Que haces aquí?- pregunto con un tono serio y con un poco de molestia, ciertamente era la persona a la que menos quería ver en ese preciso momento.

 

- ¿Que hace usted fuera de la cama joven amo?- contesto sin prestar atención a la pregunta del peligris.

 

- Te hice una pregunta si vas a evadirla largate de mi habitación no estoy de ánimos para verte- fue cortante estaba al tanto de ello mas los que le pasaba a el no era razón para desquitarse con su mayordomo que culpa de nada tenia.

 

- ¿Se siente bien? ¿quiere que le traigo un poco de te?- siguió sin hacer caso, estaba preocupado por el chico al cual la tristeza la tenia pintada en la cara.

 

“¿Por que me haces mas preguntas Sebastian?, solo vete, vete.. vete” pensó el menor aun deprimido pero casi al instante afilo la mirada.

 

- No estas siguiendo el contrato, si yo te ordeno algo tu lo cumples sin queja alguna o pretextos soy tu amo y tu mi perro fiel así que sigo esperando que te vayas de mi habitación, Sebastian- recalco lo ultimo, le dolía tratarlo así enserio le dolía horrores porque desde algún tiempo había comenzado a agarrarle cariño un cariño mas allá de amistad o de la relación amo y mayordomo, el mismo tampoco sabia cuando fue que empezó a sentir ese sentimiento catastrófico que no se atrevía a mencionar ni en sus mas ocultos pensamientos.

 

Lo miro serio sin quitar la mirada de el, sus ojos rojos se tornaron como un remolino de rosa oscuro es como si quisiera negarse a aquella orden que para el era estupida, se inclino un poco llevando la mano a su pecho para recitar las tres palabras mágicas ‘ Yes my Lord ‘ dio media vuelta y finalmente se retiro de la oscura recamara solamente iluminada por un rayo de luz lunar.

 

Apenas escucho cerrar la puerta se dejo caer de rodillas al suelo, con los puños cerrados golpeándolo con fuerza al poco tiempo se detuvo al sentir como sus lagrimas recorrían su rostro hasta caer a sus puños, se sentía patético, Ciel Phantomhive líder reconocido y muy mencionado entre las grandes familias de poder como un gran empresario, estaba sollozando por … amor. Y no hacia cualquiera, era un amor hacia su mayordomo y mas importante aun un demonio, un desgraciado demonio que solo estaba ahí por el contrato no por el era lo que mas le calaba si le decía un ‘ te quiero ‘ el demonio te respondería un ‘ te amo ‘ porque es lo que quiere oír y porque es parte del contrato.

 

- Maldito contrato, te maldigo y te bendigo- susurro parándose a como pudo echándose a la enorme cama, duro así por un rato mas hasta que logro dormir.

 

Junto a el se encontraba el susodicho demonio, observándolo dormir, entro a la habitación cuando dejo de oír los sollozos de su amo y supuso que había logrado dormir y así era, acerco su mano a la mejilla del menor, estaba húmeda solo confirmaba mas que lloro por un rato pero ¿Por qué?, el sabia la respuesta la sabia muy bien, estaba al tanto de los sentimientos de su amo y que le causaban sufrimiento el no permitiría eso jamás dejaría que Ciel sufriera por algo y menos por su causa, sonrió dando unos pasos hacia atrás y perdiéndose en la sombra.

    

- Joven amo es hora de levantarse, ya es de mañana- abrió las cortinas sin previo aviso dejando entrar los rayos de sol el niño reacciono cubriéndose por completo con la sabana- amo tiene muchos deberes por hacer- se acerco destapándolo por completo recibiendo como respuesta del crió un gruñido.

 

La mañana paso rápido, a diferencia de cualquier día esta vez no dejo que Sebastian lo cambiara ni que lo ayudara a bañarse cosa que le pareció extraña al mayor mas decidió no preguntarle nada pues ya sabia la respuesta, el pequeño solo estaba pensando en el ¿Qué había de Sebastian? a el también le afectaba como lo trataba su amo siempre estaba tras de el cuidándolo y velando por el este día se sentía todo un inútil el niño no dejaba que hiciera nada por el ni siquiera el té eso ya era el colmo.

 

- S..S-sebatian- murmuro una pelirroja de anteojos cargando varios con la intención de acomodarlos al segundo siguiente ya estaba en el suelo pero como era de esperarse el mayordomo logro tomar todos los platos sin que ninguno saliera roto- h..haaa l-lo sientooo- se inclino varias veces en disculpas mas noto que este no le prestaba mucha atención- ¿esta preocupado por el amo?- el pelinegro la miro sorprendido debía ser muy notorio para que preguntase eso- el amo a estado melancólico se que si yo le pregunto no me dirá nada pero a usted le tiene mas confianza- sonrió abandonando la cocina.

 

- ¿Melancólico?- repitió en la soledad de la cocina.

 

- Hu Hu Hu- bueno casi soledad el viejo Tanaka estaba junto a el bebiendo té.

 

El niño se encontraba en su escritorio firmando algunos documentos, miro por la ventana sus sirvientes se divertían en el jardín, el nunca fue un niño normal por un momento se pregunto como seria hacer eso.

 

- Amo debería intentarlo- dijo de la nada sacándole un pequeño susto al menor.

 

- Tsk no me interesan esas cosas- se volteo y regreso a leer y firmar documentos.

 

- A mi no me puede mentir ni engañar- puso su mano sobre los papeles impidiéndole proseguir- se que quisiera ser así muy en el fondo, pero usted no puede, usted es un Phantomhive- sonrió como es costumbre- pero eso lo hace mas especial.

 

- … Te dije que no me interesan esas cosas- contesto finalmente volteando a verlo.

 

- Amo no se esta comportando como es usualmente quiero saber el porque y aunque crea que no me afecta se equivoca me importa lo que le sucede y su actitud me esta molestando- dijo firmemente ya era hora de aclarar las cosas.

 

- Tu no te preocupas por mi, tu preocupación o interés es falso, como lo eres tu escondido tras esa facha de mayordomo- murmuro por fin no sabia por cuanto tiempo seguiría sintiéndose fuerte para decir aquellas cosas a la causa de su tristeza.

 

- ¿Es eso?, joven amo yo estoy con usted porque tenemos un contrato en el cual no debo dejar que nada le pase ni que sufra yo no aceptare que usted sufra lo complaceré en todo y no es solo por el contrato es porque lo valoro- sonríe un poco mas tierno cosa que no suele hacer se veía comprensivo y dispuesto a entender el dolor de su amo, el cual solo estaba en silencio escuchando lo que decía- lo amo.

 

 

Silencio.

     

 

Un sollozo.

 

 

 

 

 

     

Lleno de lágrimas.

     

 

“ Yo sabia que me dirías eso, que me dirías un te amo solo para no verme sufrir, ¿como se si tus sentimientos no son falsos? “

  

 

- Mis sentimientos son verdaderos, porque un demonio se aprovecha de la inocencia humana y usted que aun es un niño inocente, yo jamás me e aprovechado de usted desde el día en que lo conocí- dijo el de ojos marrones, ya prediciendo lo que pensaba el peligris- la única vez que abuse de su inocencia fue el día del contrato, me maldigo por haber hecho eso pero fue la razón que me permitió conocerlo y gracias a eso estoy junto a usted hasta que su cometido se cumpla me llevare esta alma que me pertenece- acercándose a los labios del menor- este cuerpo que por derecho es mío- rozándolos- su corazón me ama ya que a pesar de todo solo soy un simple mayordomo- los unió en un calido beso, el primer beso del niño.

  

 

“ Ciel Phantomhive todo tu eres mío “

 

 

 

Después del primer beso vinieron mas en ese mismo instante, Sebastian tomo asiento en donde Ciel posesionándoselo en las piernas y besando el cuello del menor saboreando su suave piel sacando algunos leves gemiditos del inexperto niño.

 

- Hnnn s-se siente bien- dijo casi inaudible pero claro para el mayor el cual sonrió.

 

- Y se sentirá mejor, pero la pregunta aquí es ¿hasta donde puede llegar joven amo? Usted es aun un niño incapaz de mantener una relación sexual y yo estoy siendo un pedofilo- el ojiazul se sonrojo a mas no poder su mayordomo había mencionado ‘ relación sexual ‘ ósea sexo eso nisiquiera se le había pasado por la cabeza cosa de la cual se dio cuenta Sebastian al ver el notorio sonrojo de su amo sonrió internamente acariciando la pierna del menor sensualmente mientras lamía los labios de este y con su otra mano libre le recorría la espalda haciendo que al pequeño le recorriera una rara sensación la cual nunca había sentido antes era de esperarse hace casi nada dio su primer beso.

 

La puerta se abrió un poco asomándose la sirvienta se sorprendió al ver aquello quitándose los lentes y limpiándolos seguramente había visto mas se los volvió a poner y miro de nuevo en efecto para nada se havia equivocado, y una hemorragia nasal salio al instante se cubrió con la mano estaba invadiendo la privacidad de su amo pero no podía dejar de ver, finny estaba tras de ella y como la chica no se apartaba de la puerta decidió también asomarse, acto seguido llego el cocinero y aparto a ambos de la puerta cerrándola igual estaba sonrojado como sus compañeros.

 

- Ni una palabra de esto- dijo con una gotita

 

- Haaa Ciel tiene casi mi edad y esta con… -murmuraba el niño rubio, ruborizado.

 

- S-s-sebastiaaan –la chica entre lloraba sonrojada, aquel mayordomo le gustaba pero sabia que a el solo le importaba el amo.

 

La puerta se abrió rápido y salio Sebastian cerrándola de inmediato, oyéndose gritos tras de esta los cuales eran de Ciel berreándole.

 

- J-joven amo lamento mi falta de autocontrol- dijo tras la puerta con una gota y una cachetada marcada en el rostro, volteo para percatarse de la presencia de los tres chismosos los cuales se pusieron a silbar como si nada supieran.

 

- Hu Hu Hu- de la nada ya estaba ahí alado Tanaka… bebiendo té.

  

- Haa señor déme paciencia- llevándose el pelinegro una mano a la cabeza, ahora tendría que tolerar a cuatro metiches y a un niño puberto.

 

 

Notas finales:

hee espero les haya gustado CB y me encantaria ke dejaran review 8'D me gusta leer los comentarios


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