Bueno, mi nombre es sasori, tengo 23 años y soy un importantísimo abogado en mi ciudad.En este momento no tengo pareja, por la simple razón de que soy homosexual, y no me avergüenza decirlo, aunque he tenido varias parejas, pero todas me trataban de una forma muy suave, pero aunque suene raro, me gustaría que me trataran con mas dureza, que no fueran tan delicados conmigo, que me tomaran por el pelo, que sean brutos, pero hasta el momento no he podido encontrar a ningún hombre que me haga sentir el placer del dolor.
Ahora voy en mi auto, manejando hacia un sitio de la ciudad que nunca antes había visto, creo que es un caso de homicidio, pero ahí veremos de qué se trata todo
Creo que estoy un poco perdido, ya que el lugar es bastante tenebroso, y no signifique que tengo miedo, es que no me esperaba que me llamaran a un lugar así
Bueno, que después de diez minutos he llegado, el lugar es totalmente diferente a lo que me esperaba, ah! Ahí esta el recepcionista...valla es muy guapo, es alto, cabello negro, y unos ojos con un ligero tono rojo
-buenas, estoy buscando al jefe de este lugar, me ha citado para una reunión de un caso- el tipo es bastante serio, pero ahí algo en el que me atrae
-ok, espere un segundo, iré por el jefe- veo que se va por una puerta, que se bastante misteriosa, me pregunto ha donde llevara, pero no esta bien espiar en sitios ajenos, pero la curiosidad....que hago....iré a ver, la curiosidad me carcome el cerebro
Oh...dios...mío, este lugar esta lleno de juguetes, dios, como me encantaría usarlos, cadenas, látigos, esposas, cuerdas...creo que voy a morir aquí adentro
Ups, veo que el tipo de la entrada esta bajando, no debería estar aquí, me meteré en problemas si me ven aquí...esperen...el tipo viene con una camisa negra abierta y unos ajustadísimos pantalones negros, dejando ver todos sus atributos.Me mira con una pequeña sonrisa en sus labios
-lo...siento, no debería estar aquí...siento la intromisión- me trato de disculpar pero veo, como su mirada esta cargada de deseo, creo que me estoy poniendo un poco nervioso.
-no tienes nada que disculparte- veo que se acerca a mi, y bruscamente me toma por el pelo
El tirón izo que un escalofrió recorriera todo mi ser, pero, me gusta, me gusta sentir esta sensación tan placentera. Se acerca a mi cuello, respirando agitadamente, para luego empezar a besarlo de una manera desesperada, la cual esta provocando que me vuelva loco, su húmeda lengua tocando mi piel, su respiración agitada, esta provocando que me excite cada vez más, y más
-levanta tus brazos- sin saber lo que me va a pasar, obedezco en su petición, pero veo que me esta amarrando, con unas esposas, dejando mis brazos colgando desde una barra de metal, que afirmaba las esposas.
Se dirige a una de las mesitas, donde habían demasiados juguetitos, seleccionando un látigo, el cual empieza a pasar por mi cuello, pecho, piernas, subiendo otra vez a mi pecho, pero esta vez con sus fuertes manos, desgarrando mi camisa literalmente, la cual la arrojo en un lugar cualquiera, yendo desesperadamente a lamer mis tetillas, las cuales estaban duras de la excitación que sentía. Sigue lamiendo, dando pequeños círculos, y mordiéndolos de una manera salvaje, para luego subir, con su caliente lengua, por mi pecho, pasando por mi cuello, para luego, besar de una manera desenfrenada mis labios. Es un beso lleno de lujuria y desesperación, su boca es tan deliciosa, su lengua se introduce rápidamente a mi cavidad, mientras que la mía se coloca en la contraria, besándonos de una manera tan salvaje, jugando con nuestras lengua de una manera desenfrenada, y mordiéndonos de vez en cuando nuestros labios, pero siento que se aleja de mi, para luego subir sus manos hasta las mías, sin separar nuestras miradas, ni por ningún instante, para luego sentir la libertad en mis muñecas, el tira las esposas a un lado, para volverme a besar de esa forma tan salvaje.
-siéntate ahí- veo que me indica una silla la cual tenia unas amarras para las muñecas, y sin preguntar me siento en la silla.
Al sentarme, el se posiciona entre mis piernas, quitando mis pantalones de la misma forma que mi camisa, dejándome en ropa interior solamente, mientras yo me quito los zapatos con mi pies, para hacerle un poco mas fácil el trabajo.Cuando quedo totalmente en ropa interior, el empieza a acercar su boca hacia mis muslos, mordiéndolos, dejando marcas, las cuales se trasformaran en chupones. Sigue subiendo por mis piernas, hasta llegar a una partecita, que la tengo bien dura, veo que queda mirando aquella parte, para luego poner sus dedos, en la pretina del bóxer, y sacarlos de una sola vez, dejándome completamente desnudo.
-valla...tienes un cuerpo delicioso- y al terminar de decir aquella frase, se lleva a su boca todo mi pene, lamiéndolo, succionando, de una manera tan fuerte, pero placentera para mi.
Nunca había sentido semejante placer, ni siquiera con alguna de mis parejas, siento que voy a morir de placer, mi vista se esta nublando, y mi respiración se agita cada vez, que el sube y baja por mi miembro, jugando con la punta de mi pene, con su caliente lengua, provocando que mi espalda se arquee, por el placer, pero se detiene, lo cual me molesta un poco, pero el me toma un sus brazos, dejándome recostado en una pequeña cama, la cual no la había notado al principio, posicionándose otra vez sobre mi, sacando su camisa y pantalones, quedando completamente desnudo.
Su cuerpo es perfecto, me he quedado sin palabras para describir, su bello cuerpo., siento como me separa las piernas, para ponerse entre ellas, colocando la punta de su glande en mi entrada, y sin avisar, se introdujo de una sola vez en mi, ocasionando un escalofrió en toda mi espalda, pero no es dolor, lo que siento, es placer, siento placer al ver su forma ruda de ser conmigo.
Sus embestidas se hacen cada vez mas rápido, subiendo de ritmo cada vez, me decido a ayudarlo, así que me pongo sobre el, para aumentar de ritmo, mientras el me ayuda con sus manos, las cuales estaban en mi cintura. Nuestros cuerpos están llegando al límite, lo puedo notar en su cara, en su respiración, en su frente sudorosa, yo también estoy al limite, siento que un escalofrió me recorre entero, llegando hasta mi parte baja, provocando el orgasmo.
-aaahh!!!- mi semen cayo entre los vientres de los dos
-ahh!!!- el también ha llegado a su limite, rociando toda su esencia en mi interior
Ahora veo....el si es el verdadero jefe.....
Fin