***
--(Ruki)--
~Había terminado el ensayo. Se quedo en la oscura sala apenas mirando de vez en cuando la ventana que le traía los bostezos de una ciudad cayendo en la fría noche.
Miraba el brillo de sus anillos producidos por apenas los rayos de luna que entraban al lugar. Un poco más lejos, en un sofá, estaba sentado su amigo rubio librando de algunas notas su bajo…una tonada reconocible…~
Había decidido quedarme para respirar un poco de aquella atmosfera melódica que The GazettE deja, pero…. ¿Por qué te has quedado conmigo?
~ De repente las notas dejaron de sonar y el vocal cerro los ojos ~
Cuando estamos en el mismo mundo solo vivimos conforme el presente, conforme algo del futuro, pero, cuando abandono todo y me dejo llevar hasta el rincón más oscuro dentro de mi. Pierdo tu forma y tú ser…. Amigos, bajista, mentiroso, amigo, confiable, amigo, músico, amigo, mentiroso, amigo, fuerte, ¿amigo? Si, amigo, justo eso….
-ne…, Ruki?
-hummm- respondí borrando aquellos pensamientos.
-últimamente estas más calmado – se acomodo mejor en el sofá dejando el bajo de lado- Es verdad que como demonio eres un puto insoportable –sonrío- Pero se me hace extraño – termino para darme una mirada fija y penetrante.
- Te has vuelto vieja, Reita- Lo miré de reojo- y una bien dramática.
-Ya quisieras.
-Ya quisieras tú- hable provocándolo, pero con un deje, al fin y al cabo, de timidez.
Reita bajo la cabeza, lo noté.- que pasa nenita- y recibí su mirada seria… ¿nervios?-Neee, Suzuki, ¿Qué pasa?
No sabía si podía decir todo lo que pensaba
***
~La sala de reuniones estaba llena, integrantes de la banda, directores, manager, y demás de la compañía veían atentamente la pantalla.
-Necesitamos más vida en el escenario, movimiento…. Contacto…~
***
--(Uruha)--
~Exacto, espalda con espalda, y hay más que melodía. ~
Aoi acariciaba mi mejilla, le respondía con una sonrisa simple, honesta.
Hoy voy a jugar un poco más…
~las luces ya brillaban sobre el escenario, gritos iban y venían, todos perfectamente actuando. ~
Pero yo no quería actuar. Una de mis manos abandono mi guitarra. Lo busque, lo mire fijamente y supe que lo que iba a hacer no era para nada actuado, lo abrace, lo tome, lo besé…
--(ruki) --
Te vi a los ojos ¿acaso te estaba cantando? Me viste, sonreíste, y esa sonrisa te ha hecho dulce desde entonces…
~ en los camerinos Reita se colgaba una toalla, mientras que lo miraba fijamente~
-Hombre ¿Qué pasa?-Dijo revolviéndome el cabello.
-No me siento del todo bien- atine a decirle…
me miro, me tomo de los hombros y me recostó en su pecho. Amigos, pensé fugazmente…
Solo hasta ese momento.
***
~Estaban sentados, todos en las mismas sillas, la misma sala llena.~
-Vamos a editarlo. Necesitamos que la atención sea más centrada. Una mirada junto a Ruki y Uruha en la misma escena.
Los dos serán la pareja que juegue en el escenario. Fue algún tipo de sentencia.
“Pareja”- el sin nariz hervía de ira ¿Por qué esa era la IDEA a VENDER?
“Pareja”- Lamento el pelinegro guitarrista. Bajo su mirada…
No sabía si podía confiar.
pero casi instantáneamente una mano conocida le tomo fuerte, hay estaba él. –calma.
“pareja”- pronuncio el líder frente a las miradas tristes apenas indiscretas- Se trata de un juego inocente.
***
-Vaya idiota!- Grito Reita ya en el pasillo.
-Deja el drama, no me voy a enamorar de las deliciosas piernas de Uruha- Ruki sonrió de medio lado.
Solo recibió el silencio y la mirada fulminante de su acompañante.
-hey!- lo abrazo por la cintura- Solo es cosa de escenario.
-Aprovecha y disfruta- Respondió Reita cortante.
Ruki se acerco a su oído- Si te imagino en su lugar, hasta intento…
-No te atrevas!- chillo Reita-No quiero que violes a nuestro pato.
Y Ruki se hizo dueño de aquellos finos labios.
No sabía si podía ser querido.
--(Uruha)--
Estaban en el backstage del tonto programa.
Estaba nervioso, pero, entre aquella oscuridad pude notar que él se acercaba.
- ¿Desde cuando el gran Uruha se siente nervioso?
-Sonreí de medio lado.- nervioso yo?
-nervioso, si, sino ¿Por qué tiembla tu labio inferior?- dijo esto último acercándose peligrosamente a mi rostro, acorralándome al apoyar su brazo en la pared.
Ok, ya estaba nervioso, podía sentir su respiración tan cerca. Casi que por inercia iba a apoyar mis manos en su cintura Pero….
No sabía si podía entregarse
-¿les puedo recomendar un lugar más privado?- dijo Ruki en un tono pervertido.
Aoi se separo de mi, susurrando quien sabe que cosas hasta llegar a un sofá acomodándose en el.
-¿ya casi salimos enano? Invente para distraerlo.
-vamos!!! Si se ven tan lindos juntos. Aparte, por fin se dan la cara era realmente incomodo verlos comerse con la mirada “sin que el otro se diera cuenta” –chilló el vocal con un tono tan infantil que Aoi y yo rompimos a reír. – Si son la pareja más linda- comento esta vez con ademanes femeninos.
En eso llego Reita, que no hizo ningún comentario.
- Y dime Aoi- continuo Ruki en tono burlesco acercándose al moreno- tú eres el de smoking o el de vestido. Sin embargo antes de que el aludido abriera la boca Ruki ya estaba diciendo estupideces. – ah! Pero si Uruha es el que hace pucheros de quinceañera celosa! Si! Sii!...Uhm Pero Uru- volteo a mirarme- Tú no te puedes casar de blanco pato impuro!!!
Su tono era tan dramático, no se realmente que pretendía, cruce mis brazos y como casi todos me empecé a reír.
Como casi todos… por que alguien seguía muy serio…
--(Reita)--
Estaba cruzado de brazos, apoyado en la pared, viendo como te referías a la parejita de guitarras que por fin habían tenido el coraje de darse la cara…
Coraje.
Yo seguía callado, mirando como los molestabas, ¿era esa tu forma de apoyarlos, aceptarlos?
…Envidiarlos?
¿Qué demonios me pasaba?
Si yo te dijera que me gustas (que gay, reita! Que pasa!!)
Trato de olvidarlo, de no darle importancia. Eso… que se siente tan profundo y punzante…
Maldita sea, mira como se observan las guitarras. Mírate! Jugando con ellos!... mírame, callado, ahogado.
….si te lo dijera… ¿te burlarías de mi?
Tantas preguntas me estaba estresando!, tanto dramatismo, tantos pensamientos encontrados, tantos sentimientos homosexuales .Dios! me estoy llenando! Se me hace un nudo en la garganta… y sus risas! Tu actuando como payaso! ¿es tu forma de apoyarlos? Tanto drama, y tu risa, tu adorable risa… mierda, que gay! Si…. Osea no, si soy un ruder!....yo… no más… tu risa… no… aguanto!
-cállate de una buena vez enano inmaduro! –grite… te grite
Uff se fueron las risas, ya era hora.
Tu mirada ¿Qué pasaba?... ¿más preguntas? Ya estaba cansado.
Ese grito…. Me disponía a salir corriendo.
.ahora sentía un vacío incomodo.
Pero
-salimos en 2 minutos chicos – dijo eufórico Kai.
Y caminaste… en otra dirección
¿Qué debía hacer?
***
--(Uruha)--
Podemos comportarnos como unos tontos niños y saltar en el escenario.
Podemos mirarnos de lejos y apenas levantar nuestras manos.
Podemos tocar melodías diferentes para luego ser uno solo suspiro en el escenario.
Podemos reír y posar como héroes fracasados.
Podemos bailar.
Puedes pararte en las sombras, puedo darte la espalda.
Podemos gritar a una multitud excitada, y a esta misma podemos silenciarla con nuestras guitarras.
Podemos tenernos apenas en recuerdos.
Podemos abrazarnos como amigos.
Podemos entregarnos, lo hacemos, lejos de todo lo que pueda ser dañado.
Podemos con solo una mirada poner y quitar aquel cristal que nos deja ser amantes para ser amigos, indiferentes y distantes.
--(Aoi)—
¡
Te ríes y yo apenas si hago un gesto de aprobación. Corres y rozo tu mano hasta el último instante en que esta se pierde de mi tacto. Me miras serio y me embriagas, tu perfil pensativo, tu mirada perdida.
Me abrazas y apenas si rozo tu mejilla. Te angustias y busco una y mil formas para que vuelva tu risa. Me llamas, y mi cuerpo apenas si responde frente a mi alma perdida.
No te vayas, susurras y pido que tu susurro se lo lleve el viento al loco cualquiera que maneja el destino. Te abrazo. No quiero que palabras en respuesta sean mal aviso. Te beso, descubro con cada centímetro de ti que eres lo único que necesito. Mi vida, escribo con mis labios en tu piel. Lo sientes y nos condenamos mutuamente a un nuevo encuentro.
Te ríes, y miramos tan de frente el mundo que se alza imponente ante los dos. Corres y confió en que sabes de donde provienes para cuando decidas volver. Exacto, vuelves…. Me miras y descubro algo nuevo en ti. Tu perfil pensativo, que no opaca aquellos sentimientos de los dos. Tu mirada se pierde. No dudes.
Y te sonrió abiertamente. Has vuelto con algo diferente. Tomo tu mano de forma firme, fuerte.
Seguramente lo nuevo que traes también lo amo. Te miro seguro, consiente. Así va a ser siempre, Uru, todas las veces. Más allá de la vida.
Me besas, “Te amo”, silencias aquellas palabras.
“ no queremos que el loco cualquiera que maneje el destino descubra nuestra trampa!”
Te beso y deseo que aquel loco confabule en crearnos un largo destino.
Me amas confiesas, te amo lo admito. Y cualquier premonición se borra al sentirnos, en ese instante, dueños de nuestro propio destino.
---(Uruha)--
Maldita compañía.
Me acerco a Ruki para que lama mi guitarra, tan robótico como siempre.
Simplemente me hundo en la melodía, no quiero enfadarme, ni tener esas discusiones ambivalentes de los diferentes puntos de vista haber quien gana.
Tocar al lado de Aoi cambiaba radicalmente nuestras expresiones, era más divertido
Apenas si nos acercamos y jugamos un rato. Ambos sabíamos que no podíamos jugar por mucho tiempo, así que nos separamos y caímos de nuevo en aquella melodía que nos dejaba sin pensamientos, quedaba yo con los fans, quería tocar para gritarles, que escucharan todas las porquerías que la banda sentía… Ruki, él lo podía trasmitir… también quería que sintieran el enojo y la frustración.
Cuando todo termino y para cuando yo llegue a los camerinos ya habías bromeado con Reita, quien luego de mi llegada, partió.
-¿quieres algo de tomar? Me preguntaste.
-nee. Te respondí sin dejar de mirarte.
Suspiraste y pensabas salir del camerino, pero justo cuando abrías la puerta yo te la cerré y te acorrale contra esta. Pegue todo mi cuerpo contra el tuyo y soltaste un gemido, te tome de la cintura y ataque sin previo aviso tu cuello, me rodeaste con tus brazos, y ladeaste la cabeza dándome más espacio.
Sabes delicioso- susurre rozando aun mis labios con tu piel provocándote un escalofrío que te recorrió completo. Sonreí de medio lado y apenas tus suspiros llegaban como respuesta.
Una de mis manos abandonó tu cintura y se adentro a tu pecho, debajo de tu camisa, estabas tibio y suave. Mandaste tu cabeza para atrás mientras enredabas tu mano en mi cabello.
Uru…- apenas casi audible.
***
Durante el programa actuaban normal, primero fueron amigos, primero cualquier otro titulo, y ninguno se oponía a esto.
Terminando, Ruki entro rápido al camerino, recogió sus cosas y salió sin reparar en cualquier ser viviente que se cruzara por su camino. Quería estar en su apartamento, a oscuras, permitiendo a la tristeza devorar su ser, para que al final apenas pedazos de poeta se hicieran frente a la pluma y unas cuantas hojas de papel.
Salió del edificio sin interrupción alguna, llego y tal como lo planeo su noche se hizo oscura y con aroma a tabaco.
-rubio teñido y barato- soltó al recordar el grito
-Traicionero- Dijo, esta vez para probar su cigarrillo.
-seguramente, después de unas semanas entando juntos se dio cuenta que yo no era todo lo que el imaginaba. Y ya no me quiere….- hablo para la sombra que se imaginaba frente a el.
Dejo caer su cabeza hacia atrás ¿Qué debía sentir?
-Odiarlo, Ruki debes odiarlo por haberse enamorado de algo que no eres.
Si! Lo voy a odiar, se va a sentir mal… y lo voy a lograr sin necesidad de gritarlo, no voy a caer tan bajo para llegar a su nivel.
Infantil
Testarudo
Ciego
Cobarde!
Calló y dejo que el silencio gobernara.
Realmente no podía odiarlo, le dolía que fuera tan ciego ¿Por qué no se había disculpado por gritarlo? ¿No se fijo que salió sin despedirse? ¿Por qué no lo detuvo? Y si estaba arrepentido ¿Por qué aún no lo había enfrentado?
Escondió su cara entre las manos hasta que los golpes en su puerta lo obligaron a pararse en busca del culpable de la interrupción
-uhm- fue su expresión al encontrarse con un rubio sin nariz al otro lado de la puerta.
-Puedo pasar?- Apenas si pronuncio de forma audible viendo algún punto entre las rodillas de Ruki y el suelo.
Ruki frente a estas palabras suspiro y llevó su cuerpo a un lado dándole paso al rubio sin nariz. Cerró la puerta y camino hacia la ventana, dándole la espalda a cualquier cosa que exigiera su atención en ese momento.
El recién llegado se sentó, en medio de la oscuridad se sentía desubicado, más de lo normal, más… con aquel sentimiento de lejanía al no tener a Ruki como de costumbre, al menos sus ojos…
-Que quieres? Corto fríamente Ruki aquel silencio sin recibir respuesta alguna…
Bajo su mirada del cielo hacia las calles bien iluminadas de Tokio.- si vas a decirlo no es necesario que me des explicación alguna.- Pronuncio con voz melancólica y cansada- nunca lo has dicho de frente, seguramente seria una situación incomoda, siempre… era yo el que te abrazaba y te arrastraba, era yo el que malinterpretaba las palabras y después de eso seguramente todo lo que sentías hacia mi te ha quedado claro.- apretó sus puños, no entendía por que le dolía tanto. Entonces sintió un leve roce de unos dedos en sus puños cerrados. Suspiro.- y aún tu silencio ahora es parcial sin jugar aliado de ninguno. Ya nos acostumbraremos a todo… ya me acostumbrare a la lejanía… y al… abandono y… al odio.- sentenció.
--(Reita)--
Después de hablar con Aoi en el camarín, definitivamente me decidí.
Fui al apartamento de Ruki, pero las cosas no se dieron como yo había esperado.
Iluso.
Nervioso y algo confundido con todo lo que pasaba por mi mente me resigne a bajar la mirada.
Ruki abrió la puerta, pero… se alejo tan rápido.
Realmente no quería decir algo, temía que él me rechazara, preferiría ser mil veces amigo que perderlo definitivamente.
Pero Ruki rompió el silencio.
-¿Qué quieres?
Fuerza, por Dios ruki quiero fuerza para enfrentarte con todo lo que tengo dentro
- si vas a decirlo no es necesario que me des explicación alguna.
Imposible, ya lo sabia, y no le quedaban dudas
- nunca lo has dicho de frente, seguramente seria una situación incomoda,
Eso mismo, sería incomodo y… realmente arriesgado ¿Qué pasa si te pierdo? Si te pierdo como amigo, como hermano, como compañero… como mi todo…
- era yo el que te abrazaba y te arrastraba, era yo el que malinterpretaba las palabras y después de eso seguramente todo lo que sentías hacia mi te ha quedado claro.
Justo eso, escucharte, mirarte, sentirte, habías hecho todo lo que Zusuki Akira no se había atrevido a hacer, todo lo que no se había permitido aceptar… pero que ya no podía negar, por que ya no sería el único que se torturaría al hacer eso, si continuaba negando todo, te haría daño, Ruki, y no quiero eso. Todo estaba claro- me puse de pies sin llamar la atención mientras continuaba escuchándote- ¿Por qué apretabas tus puños?- los acaricie suavemente, casi como si aquella caricia no existiera.
- y aún tu silencio ahora es parcial sin jugar aliado de ninguno. Ya nos acostumbraremos a todo…
Ruki… eso quiere decir que...¿Confrontaremos lo nuestro contra el mundo? ¿Estarías dispuesto?
- ya me acostumbrare a la lejanía… y al… abandono y… al odio
Me quede sin aliento, y apenas cuando pude reaccionar lo abrace por la espalda, aún sin ver su rostro.
Quiero vencer el sentimiento de lejanía.
-No puedo odiarte, por que no me ames- podía sentir su mirada estaba clavada en el piso…
Entonces, amigos?
No, no quería solo ser su amigo, quería tomar su mano y besarla, acercarlo a su pecho, abrazarlo, escuchar su corazón para luego alzar esa carita, y verle a los ojos. Profundamente, para dar lugar a un beso que pudiese hablar mejor que sus palabras… si, eso quería…
-Pero, ¿Por qué dices eso?- por fin la voz salió de mi pecho. Sin embargo, Ruki estaba muy débil como para dar algún tipo de explicación. Sentía entre mis brazos su cuerpo pequeño y frágil. Nunca pensaría en abandonarle.
- Ruki- Susurre ahora en su oído. – Yo te amo- lo abrace tan fuerte como podía, apoyé mi mentón en su hombro.
Quería tenerlo así siempre.
***
(uru)
Luego de Aquel encuentro sentí que todo lo vivido, todo lo pensado y todo lo dicho anteriormente se había esfumado en el olvido, y que volvíamos a ser dos seres completamente diferentes. ¿Acaso no era eso lo que estabas esperando?
-¿Como te sientes?-
Pierdo mi tiempo preguntándotelo mientras te miro a los ojos. Por que se que no sientes… se que ya no son tus ojos y bajo mi mirada, entrelazo mis dedos como si fueran los tuyos… es mi consuelo y son mis recuerdos.
Siento como se resbala todo aquello, abandonándome… de a pocos, aún más doloroso.
Te pones en pie sin hablarme y sueño con el sonido de tus pasos alejándose.
Aprieto entonces, mis ojos, mis puños y me pongo en pie buscando huir de todo aquello.
Entonces me encuentro que estas frente a mi.
Con una mirada de incredulidad.
-¿Qué tienes? Le oí preguntarme.
(aoi)
-¿Qué tienes? Apenas si pude preguntarle.
Como si no lo supiera, le he hecho tanto daño. He tratado de negar lo que siento y por encima de eso, he tratado de negar todas las señales que él me ha dado… para poder aceptar, felizmente, lo nuestro. No quería creerlo, aún así, esto no cambiaba el hecho de que él estaba frente a mi, llorando, lleno de ira, dolido.
Di unos pasos inseguros mientras que él se quedaba justo en su lugar. ¿Estaba mirándome?
Seguí acercándome…
-déjame curarte. Dije casi en un susurro, un lamento casi audible ¿me abra escuchado?
(uru)
-¿Podría curarme?
Después de todo… ¿podría aliviarme?
Se acerco más a mí hasta que sus brazos me rodearon por la cintura. Las punzadas de dolor asistieron cuando los recuerdos de sus abrazos dejaron de ser recuerdos. Justo ese momento. Solo ese momento.
Levanto uno de sus brazos y acerco su mano a mi rostro, limpio mis lágrimas y acaricio mi mejilla de forma tierna, dulce… cálida….
¿A caso era él el único que podría curarme?
Y el Miedo que vendría después…
(aoi)
Le mire aún con ciertas lágrimas que se escapaban sin consuelo. Lo abrace más fuerte, no habían razones para que su llanto continuara, no quiero que existan razones para que él llore.
-Quiero librarte. Le susurre al oído esperando que me diera alguna señal, aparte de sus lágrimas, de que aún seguía vivo. De que seguía aquí, conmigo.
Deposite un beso en sus labios, un beso tenue…
(uru)
-Librarme.
Retumbaron sus palabras como eco en mi mente. Yo mismo había tratado de librarme de todo aquello. De lo que sentía por él. Sin embargo caí vencido, cedí, cedí a darle cualquier manifestación de ese sentimiento que mi alma pidiese, cedí a esperar su mano cerrarse en la mía, cedí a que al siguiente día me ignorara por completo… Cedí a todo lo que él producía en mí. ¿Podría él mismo liberarme de eso?
Vi cerrar sus ojos. ¿Podría ahora besarlo yo? Deseaba hacerlo, me moví para acercarme más a su rostro y sentí como sus brazos me abrazaron más fuerte.
(aoi)
Me tense cuando le sentí en movimiento. ¿Saldrá corriendo? Lo abrace más fuerte. No le dejaría ir. Primero, tendría que curar todo el mal que le he hecho. Primero tendría que escuchar de sus labios un grito de odio irreversible.
Sus labios, se estaba acercando a mi.
Empecé a temblar.
¿Se trataba de un sueño?
(uru)
¿Podría sentir él mis miedos? Quería que al besarlo todos mis miedos se fueran. Aún así se juntaron para hacerme ver la peor pesadilla, en segundos, él lejos de mi.
Me apreté contra su pecho.
(aoi)
Acaricie su cabello. Era hermoso. Era mío, ahora todo estaría bien. Podremos enfrentarnos al mundo… mirando de frente, sintiéndonos al lado uno del otro.
-Uru. Le susurre. -¿Cómo te sientes? - Le mire a los ojos sin dejarlo escapar de mi abrazo.
(uru)
Le mire a los ojos. No le pensaba responder. ¿Podría descubrir como me sentí?
(aoi)
-Estas feliz. Dije con una sonrisa mientras admiraba sus ojos, ahora libre de cualquier pesadez.
(uru)
-Estas feliz. Dijo y me sonrió.
Sonreías por mi ¿verdad?
Yo también sonreí. Y si, sonreía por ti.
…
Solo ciertas circunstancias nos hacen sacar lo mejor de nosotros solo con ciertas personas nos damos cuenta que nos falta algo, que algo debemos cambiar, para ser felices, o simplemente para continuar.
Lo más difícil que tuvimos que hacer para llegar al escenario no fueron los ensayos que duraban horas, sin descanso, no fueron las noches en vela, no fueron los problemas de sonido o las muñecas heridas, las gargantas cansadas… los cuerpos adoloridos. Lo más difícil que tuvimos que hacer para llegar al escenario, fue creer, cada uno, en nuestro sueño.
Gazerock is not dead