Capítulo único.
Quien maneje la Death Note, una maldición cae sobre sus hombros, nada bueno puede pasarle.
Esas palabras, me he cansado de oírlas. Ya lo sé, mejor que nadie. Yo puedo manejarlo, tengo el intelecto, habilidades deductivas y un corazón frío, imperturbable, un perfecto dios del nuevo mundo, mi ideal.
Todo iba muy bien. Créeme, L, tenía el plan perfecto para matarte y que pareciera el acto de un Shinigami.
Sí, caíste de tu silla, en un movimiento seco. Me hice el sorprendido, para no levantar sospechas… te sostuve entre mis brazos, mientras tu corazón replicaba y deseaba sobrevivir. Una sonrisa apareció en mis labios, de perfecta victoria. Te había ganado, pensé.
Pero, lo único que había hecho, durante todo este tiempo, fue engañarme a mi mismo.
Tarde es cuando valoramos lo que perdemos.
Cierras tus ojos, luego de recuperarse de la sorpresa. Y ese último suspiro, murió en tus labios. Al igual que la verdad. De mi verdadera identidad.
Grito, y los demás investigadores se quedan muy impresionados. Sus ojos, sus mentes, estaban confundidos. Al final, la maldad de Kira no tenía límites.
-Ryuuzaki, tu muerte no quedará sin culpables- dice el castaño a los investigadores- ¿dónde está el Shinigami?- pregunta con aparente enojo.
-Hay arena en el pasillo- dice Matsuda.
Así se fue cerrando la verja entre los dos. L estaba muerto y yo, bajo la sombra de Near, su sucesor.
Pusieron muchas trampas para atraparme, más yo, creí ser más hábil, tanto, que perdí mi vida en el intento.
Fue cuando estaba frente a tu tumba, que me percaté de algo.
Estaba tan ciego, por ganarte y destruirte, que no fui capaz de ver que detrás de todo ello, eres el único que había logrado provocar alguna emoción en mí.
Fue allí, cuando recordé tus palabras...
FLASH BACK...
-Sería triste que Yagami-kun fuese Kira- dijo Ryuuzaki, mientras la lluvia lo cubría.
-¿Por qué dices eso, Ryuuzaki?- pregunta Light.
-Porque eres mi primer amigo.
FIN FLASH BACK...
Así es. Todo el tiempo corrí tras la corriente y dejándome llevar por mi egoísmo e idolatría. Perdí más de lo que gané. Entre todo ello, lamento, ahora mismo, que tú no estés aquí.
Suena raro, ¿cierto?... bajo toda esta capa de deseos retorcidos y pureza a la vez, sigo siendo un humano con necesidad de expresarme.
Te necesito, L.
Por primera vez, he pensado tantas veces en tu nombre con otra tonalidad. Y he reunido todos nuestros recuerdos dentro de mi mente. Como si fuese una especie de CD o DVD de nosotros.
Trabajamos lado a lado y jamás dejaste de percibir mi culpabilidad. Tienes el gran mérito de ser mi igual.
Ahora sólo quiero decirte una cosa...
Hasta frente al espejo, busco tu reflejo....
Sí, parece de locos. Creo que me he vuelto loco. He matado tanta gente que ya no recuerdo sus nombres. Hombres corrompidos y que hirieron a más de alguien en su vida.
Podrías incluso reírte de mí. Aunque me molestaría. Te necesito, L.
Quisiera... desnudarte. Plasmar mis marcas en esa piel tan blanca. Besarte hasta que nuestros labios lleguen a estar heridos. Que sientas que ya no puedes vivir sin mí.
Que sólo yo puedo hacer que alcances ese punto cúlmine, donde te entregas hasta ya no poder más. Ese punto del cual ninguno quiere regresar... si L, ríete de mí en estos momentos.
Era ta sencillo decir estas palabras... te amo, maldita sea.
¿Qué puedo hacer ahora?, seguir escapando de tu sombra, como un fugitivo que aprendió a temer de su propio poder. Sí, ríete de mí, L. Aprendí lo que es el miedo, uno que es tan profundo y no se compara con nada que haya vivido antes.
Desnúdate L. Eso haré yo también.
Hasta el tiempo en que estuvimos encadenados, no podía admitir que mi corazón en verdad estuviese vivo. Que latía cada vez que nos mirábamos por más de unos minutos.
Estaba perdido. Aún cuando nuestros cuerpos estaban expuestos, el uno del otro, creía que iba a explotar de tanto calor que irradiaba mis poros.
Después, ya no era tan sólo nuestras respiraciones, que se perdían en el eco de nuestra habitación. Te sentía tan cerca y a la vez, demasiado lejano como para alcanzarte.
Aunque, también sabía que si estiraba mi mano, allí estarías. Que gran contradicción.
Y llegó el día de mi condena. Fui traicionado y me dispararon varias veces en venganza.
Near me había acorralado. Logró quitar mi máscara de cinismo y ya lo había perdido todo. No tenía un padre, ni familia, ni a ti. Sólo me aguardaba la muerte, aquella que me arrancó el aliento, lentamente, como un beso que te quita el alma.
En mi agonía, sólo pedía una cosa, volver a verte.
Lástima que jamás pude cumplir mi fantasia de desnudarte, L, pero simplemente, coseché lo que sembré.
Debía aceptarlo. Un simple humano con una maldición a cuestas, una justicia letal y destructiva. Pensé, que tal vez, ya no tenía un alma que salvar. Después de convertirme en un genocida psicópata, no podría abrirse la puerta de ese mundo de paz. Entonces, sólo me quedaba un capricho.
Verte una vez más.
Y apareciste. Mi capricho se hizo realidad.
Por primera vez, en toda mi vida, deseé aferrarme con todas mis fuerzas. Tener el poder de revivirte, como eres.
Sólo eran pensamientos que iban y venían dentro de mi agónica mente.
Un sentimiento de nostalgia, tal vez, me inundó.
Te necesito, L.
Te acercaste hasta a mí. Yo hice lo que pude, para levantarme, pero todo fue inútil.
Sólo cerré mis ojos, y nuestros labios se encontraron. Sería la primera y única vez que los probaría.
Quise aferrarme, pero te traspasé con mi mano. Aunque me digan que eres un fantasma, yo les diría que se fuesen al demonio. Un fantasma, no puede transmitir lo que tú me diste en ese beso...
-Es hora, Yagami-kun, ya es hora- el pelinegro extiende su mano y Light, la toma, ahora sin traspasarla.
-Al fin L, te estaba esperando- dice el castaño y desaparecen.
Unas horas más tarde, hallaron sin vida el cuerpo de Light Yagami.
Desnúdate,
Entrégate,
Hasta sentir que eres complemente mío.
Te llevaré,
A lo más alto del placer
Y sentiré por primera vez.
Jamás podremos volver a aquellos tiempos,
Donde por azar del destino, nuestros caminos se cruzaron.
Ya no hay luna en este cielo,
No la necesito,
Tampoco aquellos recuerdos de nosotros,
Sólo me recuerdan lo ciego que he sido.
Te necesito,
Te espero,
En una vieja escalera,
Donde mi corazón está dejando de latir,
El beso de la muerte ha comenzado,
Y el miedo, se ha ido.
Lentamente,
Se unieron nuestros labios,
Cuánto había esperado por ello,
Mientras podría jurar que te reías de mí.
Nuestras sombras al fin se han dispersado,
No las necesitamos.
Parezco un ave enjaulada...
No deseo, perderte...
Te necesito, L.
Te amo, L.
Créeme...
Desnúdate.
FIN...
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español