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Tu fragilidad por Karura

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Notas del fanfic:

sé me ocurrió mientras veía un doujinshi... ojalá les guste.

Notas del capitulo: Hola a todos, acá estoy con mi primer fan fic de slam dunk, ojalá que les guste... sí, sé que mi fic es muy típico, pero quise darle un poco de mi propio toque, ojalá les guste.


Esta serie no me pertenece, pertenece al señor takehiko inoue, solo pido prestados a sus personajes para un fan fic, bueno espero que les guste.



Capítulo 1: “ocultando el dolor”

Era una mañana de viernes, los alumnos de la preparatoria shohoku corrían hacia la entrada intentando escapar de la lluvia que caía cual balde sobre la ciudad.

Se le había hecho tarde y estaba completamente empapado, montado sobre su bicicleta maldecía el no haber podido pegar el ojo la noche anterior, desde que había comenzado su segundo año de preparatoria que se veía incapaz de conciliar el sueño en su propia cama, así que se desvelaba en aquella cancha del parque, practicando tiros libres, entonces agotado, cerró por un momento los ojos.

Estaba a punto de llegar a la preparatoria cuando de pronto un automóvil lo impactó con fuerza desde atrás, el conductor no había alcanzado a verlo debido a la torrentosa lluvia que empañaba los cristales del coche y además

¿por qué ese chico se había cruzado derrepente en su camino? ¿Acaso quería que lo atropellasen? el joven quedó tirado metros más allá junto a su bicicleta, el hombre se bajo del automóvil para comprobar si el muchacho estaba bien y se sorprendió de que se estuviera levantando del suelo como si nada.

-oye chico ¿estás bien?

-si-dijo con voz de hielo y tomo su bicicleta para llevarla hasta la entrada de la preparatoria, mientras que el conductor no muy convencido, con actitud cobarde, se subió a su automóvil y se marchó.

A medio camino el joven de cabellos negros se detuvo, jadeaba, sudaba frío y un hilillo de sangre bajaba por su nariz hasta llegar a su boca.

-“maldita sea…”-pensaba haciendo un esfuerzo sobrehumano para poder dar un mísero paso… al darlo, el punzante dolor de su rodilla izquierda lo hizo estremecer, se quedó paralizado bajo la lluvia, reprimiendo arduamente las ganas de gritar… nadie pudo ver el accidente, ni siquiera el portero que corrió en busca de un paraguas, nadie podía ayudarlo, además ¿Quién ayudaría a un tipo tan frío como él?

-¡¡waaaa voy a llegar tardee!!-conocía esa voz estridente y chillona, de pronto el dolor que sentía se multiplicó por 1000.

-“lo que me faltaba”-dijo para si rogando para que el pelirrojo se fuera lo antes posible.

-¡¡Maldita lluvia del demonio!! ¡¡¡Cómo te atreves a mojar a este tensaaaiiiii!!!-berreaba Sakuragui corriendo a toda velocidad y cubriéndose la cabeza con el maletín… pasó de largo a su compañero de equipo y continuó corriendo, pero algo lo hizo detenerse…

retrocedió en sus pasos hasta donde él estaba y lo miró de reojo, un aura peligrosa rodeaba al muchacho frío, pero no se sintió intimidado, estuvo apunto de decirle algo cuando el sonido del inicio de clases llamó su atención.

-zorro apestoso…-murmuró el pelirrojo y siguió su camino, no supo por qué razón lo hizo, pero miró hacia atrás contemplando al alto joven que seguía inmóvil junto a su bicicleta ¿es que acaso no planeaba entrar a clases? Volvió a retroceder, solo para quitarse la duda, solo por curiosidad.

-¿y tú vas a quedarte allí parado como idiota? no me digas que te gusta mojarte con la lluvia zorrito.

-do ` aho-susurró apenas el moreno, incapaz de mover un solo músculo, el chico pelirrojo notaba como el pecho del otro subía y bajaba agitadamente, también notó un ligero temblor en su mandíbula…

-oye zorro…

-…-lo miró hastiado.

-¿te pasa algo? …e… ¿estás temblando?-dijo nervioso desviando la mirada, no es que estuviera preocupado nooo, nada de eso ¿o si?

-no te metas en lo que no te importa… torpe-dijo tajante convenciéndose a si mismo que el dolor en su rodilla no era tan horrible… si como no.

-¡¡hnngg!!-gimió tapándose inmediatamente la boca, el dolor era jodidamente insoportable y estaba comenzando a temer que se tratara de algo grave, así como también temía que el idiota de Sakuragui se diera cuenta de su padecimiento…

éste último se sorprendió al escuchar ese quejido, de reojo vio su bicicleta, una de las llantas estaba magullada ¿es que acaso el zorro se había lastimado?

El pelirrojo no sabía por qué de pronto el corazón se le había acelerado con tanta fuerza, un nudo se le formó en la garganta, aún así, haciéndose el duro, lo miró decidido a los ojos frunciendo el ceño.

-camina-le ordenó el pelirrojo con actitud seria.

-….-el silencio después de unos minutos llegaba a ser desesperante.

-¡que camines te digo!-le gritó con ¿preocupación?

El muchacho pelinegro lo miró atónito, aunque luego desvió la mirada para no ver el fuego furioso de sus ojos.

-n… no… no me puedo mover-confesó ruborizado casi con un hilo de voz.

-¿Qué dices? ¡Llueve muy fuerte no te escucho!-molestaba el pelirrojo.

-dije… ¡que no me puedo mover!-estalló el moreno con tanta rabia que el eco de su voz quedó rebotando en el aire y la lluvia seguía cayendo…

-¿Por qué no?-era una pregunta estúpida… el pelirrojo lo sabía muy bien, pero aún así insistió, quería de alguna forma humillarle, hacerle sentir que era débil y frágil, quería sacarle la máscara a ese zorro.

-“duele… duele demasiado… pero no pienso perder… sé lo que intentas desgraciado anormal… pero no te voy a dar en el gusto”-pensaba el ojiazúl con los ojos acuosos, tenía que aguantar ese horrible dolor para no sufrir el de perder su orgullo, antes prefería morir que mostrarse débil ante el idiota de Sakuragui.

Desde hace semanas que la relación entre los dos jugadores de Shohoku estaba mucho más tirante de lo normal, últimamente no querían ni verse ni en pintura, cuando terminaban en puñetazos hasta sangre corría y un “ya no te soporto” salía unánime cuando los separaban.


-¿¿no vas a responder zorro??-sakuragui lo miró altivo.

-vete…

-¡quiero que me respondas primero!

-¡no tengo nada que explicarte! ¡Vete!-le gritó fuera de sí, la sangre de su nariz comenzó a caer nuevamente…y aunque el pelirrojo se dio cuenta, no dijo nada… comprendía su honor y su orgullo de hombre, se sabía de memoria esa regla… “nunca le muestres a tu enemigo que eres débil”… le miró las rodillas, éstas hacían un gran esfuerzo para no temblar… volvió a mirarlo a los ojos y lanzó un suspiro.

-estupido zorro, estás herido ¿no es así?

-no…-negó fríamente, antes muerto que admitirlo.

-entonces si yo… te golpeo aquí… ¿no te va a doler verdad?-dijo triunfante señalándole la rodilla con el pie, Rukawa se puso más pálido de lo que ya estaba… no tenía palabras para eso.

-a ver… vamos a ver…-dijo preparándose para patearle la rodilla, lo miró con esperanza de que se arrepintiera y le contara lo que le pasaba, pero el moreno no se movió así que le dio con todo… o eso es lo que pensaba hacer de no haber sido por que resbaló con el lodo y cayó de espalda golpeándose el trasero.

-torpe-le dijo el moreno riéndose bajo su capa de indiferencia, ¿cuan más torpe podría ser el do´hao? Hanamichi por su parte ruborizado y refunfuñando intentaba ponerse de pie, pero en ese momento se le ocurrió una mejor idea y antes de que el zorro pudiera reaccionar le levantó el pantalón hasta la rodilla provocando que su rival lanzara un lastimero grito.

-¡¡¡¡AHGGGG!!!!!-Aquél grito resonó en los tímpanos de Sakuragui, pero lo que veía en ese momento lo remeció desde el fondo de su corazón… la pierna del muchacho estaba teñida de sangre y un trozo de hueso se escapaba por la piel… tenía que afirmar su estomago, tenía que reaccionar de una vez por todas, el zorro no estaba simplemente lastimado, estaba SERIAMENTE lastimado, había que llamar a una ambulancia cuanto antes…

-no…no es para tanto…-dijo el ojiazúl mordiéndose el labio.

-¡¡¡¡¡¡¡¡¡que no es para tantooooooooo!!!!!!!!!!! ¡¡¡¡¡¡¡¡Que no es para tantooooooooo!!!!!!!!!!! ¡¡¡¡¡Tienes la pierna rota maldición!!!! ¡¡¡¿Acaso sabes lo preocupados que estarán en el equipo?!!! ¡¡Nooooo!!! ¿Por qué? ¡¡¡¡Por que a ti te vale madre!!! ¡¡No te importa nadie, ni siquiera tú mismo!!

-a ellos solo les importa que juegue en el equipo, solo por eso se preocuparían por mi.

-…. Sinceramente… me das lástima zorro-le dijo el pelirrojo haciendo un esfuerzo enorme para no matarlo… Rukawa no tenía ganas de abrir la boca, hasta respirar le dolía, de pronto el ojimiel se volteó agachándose un poco.

-sube…-ordenó Hanamichi.

-ni de broma-le contestó su rival

-¡bueno vas a subir aunque no te guste idiota!-dijo agarrando sus brazos y haciéndolos pasar sobre sus hombros, el moreno se quejó de nueva cuenta al percibir el movimiento y se quejó más cuando le sostuvo firmemente los muslos para cargarlo en su espalda.

-sostente de mi cuello-no recibió respuesta solo sintió esos brazos afirmándose suavemente por sobre sus hombros, ese agitado aliento calido en su oído, esos acelerados latidos contra su espalda…

-te llevaré a la enfermería y allí llamaremos a una ambulancia-le dijo mientras caminaba a la entrada de la preparatoria, el silencio se hacía cada vez más incómodo entre ellos.

-¿por qué?-dijo Rukawa al fin.

-por que me importas-soltó el pelirrojo ahorrándose la excusa de que era un miembro del equipo y que por eso se preocupaba, le haría entender que no era tan superficial como él pensaba, continuó su camino con el moreno a cuestas, bajo la lluvia que caía torrentosa unas lágrimas cayeron confundiéndose con la lluvia y aunque Sakuragui no las vio, si pudo sentir su fragilidad, a través de ese silencio molesto.

Notas finales: bueno ahí está el primer capitulo, creanme sé que la trama del fic está trillada, es solo que de verdad quería escribir algo así ^^ me gusta cuando esos dos pelean y me mata el morbo saber quien dejará caer su muro impenetrable primero, bueno gracias por leer y ¡¡dejen reviews!! ¡¡hasta la próxima!!

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