Probablemente yo, le repudiaba, era tan escalofriante y lastimero, no olía mal pero por su aspecto pensaba que si, lo peor que me pudo pasar cuando estaba en 6 grado fue haber perdido matemáticas, sino recuperaba no pasaba séptimo grado, ¿y porque de todas las personas alguien como él?, la maestra me dijo que él me podía ayudar a realizar el taller, aun me acuerdo que tenía mucho recelo de ir a hablarle y que ella me dio una palmadita acompañada de un ‘'anda intenta hacerte su amigo'', me guiño un ojo, no lo tome a mal, siempre le dicen a uno lo mismo cuando le presentan a alguien así que no lo tome enserio
-enano
Lo admito el chico no me había echo nada pero de entrada yo no estaba tratándolo bien pero es que hay individuos que con el solo hecho de existir me causan migraña, enserio, cuando digo que no me agradaba es que no me agradaba, la ropa era muy grande para él, era tan pequeño que parecía de cuarto de primaria, no se para que rayos se cubría la cara con la capucha del buzo aunque supongo que de haberle visto la cara me caería aun peor , tenía un jodido comic en las manos y no despega sus ojos de él ni siquiera con mi insulto
Oye enano
Volví a llamarlo, era completamente inútil, me estaba ignorando, ahora tras de feo y raro, grosero, me estaba planteando la posibilidad de repetir el año, pero eso sería también cambiar de equipo de futbol y era el capitán en el que estaba y por nada en la vida quería cambiar de compañeros y amigos ¿Por qué a mí? de haber sabido juro que hubiera al menos pasado arrastrando la materia
Sentía asco de tener que tocarle, pero lo hice, sacudí su hombro y me agache para quedar de cara a él, vi que usaba lentes, muy gruesos por cierto ¿es que no ha escuchado sobre los lentes de contacto?, eso fue lo primero en lo que pensé, el chico se quito de los oídos unos audífonos y ladeo la cara, la cual no pude distinguir bien por la espesa sombra que producía aquel buzo feo como el dueño
-¿Qué quieres?
Era tan repelente como me lo imaginaba, y es que claro una persona como el no podría tener amigos, créanme, yo no era una mala persona, ahí el buena onda era yo, yo era el pobre desafortunado chico bien que tenía que lidiar con el fenómeno de la escuela, no es que ese niño no era el fenómeno de la escuela sino de la ciudad, del país, nunca había visto a un individuo mas asqueroso
-escucha, perdí matemáticas y...
-tienes que hacer un taller de recuperación, hazlo tu mismo, no voy a hacer tus tareas
Pensé que era un grosero un repelente, un raro, un resentido, y que no era mi culpa que fuera feo y raro y que no tenía que responderme así
-mira niño, no me extraña que no tengas amigos, solo te estoy pidiendo que me ayudes con un estúpido taller seguro que para un traga libros como tú no debe ser ningún problema
En aquel momento tenía tantas ganas de decirle todo lo que era, tenía un repertorio de palabras que lo describían perfectamente empezando por: feo, resentido, odioso, grosero, envidioso, repelente, fenómeno, raro, asqueroso, nerd (freak), en fin, ustedes pueden seguir con la lista después, yo cuento con mucho tiempo libre para seguir pero preferiblemente sigo con la historia
-mira, no te conozco y no te debo nada, no tengo porque hacerte ningún favor, haz tu mismo tu recuperación
En el momento en el que abrió la boca me aleje no fuera a ser que también tuviera mal aliento y me callera de lleno en la cara
-fenómeno
Dije antes de darme la vuelta para ir a buscar a mis amigos
aquella tarde jugué futbol con mis compañeros jugamos contra los de octavo, éramos buenos, por eso ganamos, recuerdo que siempre ganábamos, recuerdo que siempre comprábamos el refresco más grande y pedíamos vasos para compartirlo por esa razón no podía estar tranquilo pensando en tener que quedarme atrás, enserio quería pasar de curso y ya había perdido una vez un año, pensaba mucho en que mi padre me iba a dejar sin mesada quien sabe cuántos meses y no quería, pensé en pagarle a un profesional pero tendría que usar la billetera de mi padre y eso sería decirle que iba a perder matemáticas y el hubiera venido al colegio a hablar con la maestra ella le diría lo que podía hacer y mi padre me obligaría a ir a pedirle al raro ese que me enseñara y ayudara con el taller
No podía sacarme de la cabeza a ese chico, me tenía con tanta rabia, es que me causaba un no se que, no sé como que me hacia odiarle y echarle la culpa de mi desgracia, es decir un matado como él no podía tener ningún problema con un trabajo de matemáticas y no creo que tenga nada mejor que hacer, en mi mente solo podía repetir las palabras ‘'jodido nerd'', mientras miraba los ejercicios que debía realizar, sabia y entendía que él no me debía nada y que no tenía que hacer mi tarea pero si uno de mis compañeros necesitara que yo hiciera algo por el yo seguro que lo iba a hacer, es lo normal ,'' ¿necesitas algo?, si ¿me ayudas?, por supuesto'', eso era lo normal, pero no ,ese estúpido resentido como siempre lo pintaba , tenía que negarse
‘'si un a un cuadrado de 2x le quitamos de cada esquina un cuadrado de 1/3 x ¿Cuál es el nuevo perímetro del cuadrado?, si el perímetro de los cuadrados obtenidos de quitar 1/3 del cuadrado inicial es 8 cm ¿Cuánto valía x? ‘'
Para ser sincero no entendía ni la mas mínima palabra, para mí en aquel momento era como estar leyendo en chino, me frotaba las sienes y repetía el ejercicios a susurros, ese era apenas el primero de los 20 que debía realizar, y créanme que no podía ni pensar en mirar los otros si no hacia ese primero
Esa noche llovía a cantaros y hacia mucho frio, yo tenía la ventana de mi cuarto abierta, sobre mi escritorio habían un montón de hojas llenas de cálculos inútiles y yo chasqueaba la lengua arruinando otra hoja mas con la esperanza de resolver el primer ejercicio, pero como me había dado pereza cerrar la ventana un fuerte viento se coló en mi habitación regando las pobres hojas desperdiciadas por el suelo
-jodido nerd
Fue lo único que balbucee levantándome para recogerlas, era inútil, ciertamente no sabía ni como debía empezar, así que me deje caer en mi cama para dormir, hacia frio y me gustaba que hiciera frio así me acurrucaba bajo las mantas y abrazaba mi almohada calentita, hablaría con el inútil otra vez y trataría de convencerlo, esa noche me quede dormido después de plantearme ese reto, por mas asquerosa que me fuera la idea
sentado en mi puesto espere su llegada, sería fácil de distinguir, vi que apareció, parecía un espanto, si algo como eso se parara al lado de cama en la noche seguro que yo gritaba, es que era como un anima en pena, solo le faltaban las cadenas, casi podía imaginármelo merodeando por las calles a media noche arrastrando cofres, cadenas, candados y todas esas cosas con lo que supone cumplen su penitencia, pero para mí en ese momento la peor penitencia era tener que hablarle otra vez
Vi que camino hasta el final y se sentó en el último puesto de la ultima dila contra la pared, los puestos eran para dos y yo sabía muy bien con quien se sentaba cada quien y allí no se sentaba nadie
¿Qué no los nerd se sientan adelante?
Eso pensé mientras dejaba salir un suspiro, camine hasta el lugar, tratando de no respirar, de alguna manera siempre pensaba que olía mal aunque cuando estaba cerca de él me daba cuenta que no, de todas maneras me sentía hastiado, seguro por su aspecto
Recuerdo que rogaba porque mi hombro no se chocara con el suyo, no quería tocarlo, no quería, me senté a su lado y creo que hice cara de fastidio por la cercanía, pero nada, nuestros cuerpos no hicieron contacto ni siquiera pude sentir el calor de su cuerpo, de hecho como die él era pequeño y pues supongo que no ocupaba mucho espacio
-este no es tu puesto
En mi mente una voz le gritaba ‘'eso ya lo sé'', no como si hubiera querido estar ahí o que ese fuera mi puesto
-mira, disculpa por lo de ayer, yo soy marcos
Le tendí la mano alzando las cejas para evitar que mi expresión se volviera de asco, pensé que tendría las manos sudadas y que me quedarían oliendo mal pero eso no llegue a saberlo ese día porque él no me dio su mano
-bueno, marcos, ve a tu lugar, aquí no encontraras lo que quieres
Pensé que mantenía la guardia muy alerta, es decir, al menos debió dejarse llevar un poquito, alguien se le estaba presentando a él, al fenómeno, debería estar agradecido y contento, mas si era alguien como yo, pero en lugar de eso solo volteo la cara para mirar a la pared
-¿Cómo te llamas?
La verdad me importaba poco pero así no tendría que decirle fenómeno o enano para dirigirme a el y tal vez me ayudara con el estúpido taller
-¿la maestra no te lo dijo?
-si me lo hubiera dicho no estaría preguntándotelo, enano
‘'mierda'', ¿y que mas podía pensar?, se suponía que estaba tratando se der amable
-no te importa, dame tu taller, mañana en la mañana te lo entregare resuelto o puedes ir en la noche a mi casa por el
Este sujeto es raro, una vez más las descripciones llegaban a mi cabeza, el me lo dijo con un suspiro y corriéndose mas a la pared
-gracias, pasare en la noche
Por supuesto, no quería que me dijera que lo olvido o que no me lo regresaría, vi que saco un cuaderno y dibujo algo, la hoja en la que lo hizo me lo entrego
-la dirección y un mapa y nunca vuelvas a hablarme ¿bien?
-bien
Estire mi mano con el taller pero él no lo recibió, entonces lo puse en el pupitre al frente a él, mi mente de nuevo repitió ‘'este sujeto es raro''
De hecho me sentí mal pero no quería gastar neuronas en un fenómeno asqueroso como él y me fui a mi puesto
Durante el descanso mi vi interrogado por todos, descubrí que muchos de mis amigos ya habían tenido que acudir a él no solo para talleres sino que también se sentaban a su lado durante los exámenes, yo no haría eso de nuevo, sentarme junto a ese chico no era una buena idea
Pensé en él porque alguien como le no era victima de burlas y malos tratos en el salón y me di cuenta que realmente si lo era, que yo estuviera muy ocupado jugando futbol no significaba que le resto del colegio se quedara quieto
Esa tarde quedamos libres porque pronto se acabaría el curso y tendríamos vacaciones, siempre que llega esa época, el estudio se vuelve pura flojera
Mala suerte la mía
En eso pensé al verle sentado al lado de un árbol, fin ji no haberle visto aunque mire de reojo, ciertamente no puedo negar que me causaba un poco de curiosidad, como si me mostraran un perro con 5 patas, no curiosidad de la buena, sino, bueno, ustedes entienden vi que rajaba el árbol con una pequeña cuchilla, temblé, me acuerdo que sentí que una corriente me recorría
¿Será buena idea ir a su casa?
Mi mente me envió esa pregunta, ahora tras de asco le tenía miedo, era RARO con mayúscula, mi mente no dejaba de hacerme preguntas
¿Y si es un sicópata?
¿Y si trata de hacerme algo raro?
De alguna manera pensé que tendría toda clase de objetos raros te tortura en su casa, no es que rallar un árbol con un cuchilla fuera para mí el acto más enfermo pero cualquier cosa que viniera de e, para mí era algo muy malo, es decir un loco, raro es algo muy malo y un loco y raro con una cuchilla es mucho más malo
Cuando digo que odiaba a ese chico es que lo odiaba, yo no quería tener nada que ver con él, que bueno que acepto hacer el taller y que me pidió lo que me pidió, ‘'intenta hacerte su amigo'', si como no, pensaba que eso era lo más loco que se le pudo ocurrir a la maestra ¿yo amigó del fenómeno?
Recuerdo también que esa noche al llegar a mi casa revise la hoja que el medio, la tenia arrugada en el bolsillo del pantalón, su casa no estaba lejos de la escuela, de hecho el plano estaba tan bien dibujado y explicado que llegar no me costaría nada
Eran las 7 de la noche y yo tragaba saliva nada mas de pensar en tener que tocar la puerta, ver al esperpento de de nuevo y en su habitad
Toque la puerta y espere, pero no me abrió, pasaron un par de segundos y volví a tocar, escuche un papel deslizarse y mire a mis pies, allí estaba el talle, el no me abrió, me acuerdo que eso me hizo sentir mal, es decir, una cosa es que no quisiera verlo pero eso era exagerar las cosas, lo tome y me fui
-‘'jodido nerd''
Recuerdo que esa noche hacia mucho frio, recuerdo que la otro día lleve el trabajo y lo saque en excelente, recuerdo que lo odie por saber hacer algo bien, recuerdo que solo el ocupaba mi mente, solo todo el odio que cargaba a él me ocupaba, lo odiaba recuerdo que no hacía más que estar pendiente, me reía cuando me daba cuenta de que alguien lo golpeo, recuerdo que le gastaba lago en la cafetería a quien lo golpeo o a quienes lo golpearon
Todo
Todo lo que tenga que ver con le esta perfectamente guardado en mi memoria
En esa época me volví paranoico, loco por su culpa
Ahora estoy loco por el