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como sigo amando? por Scarlett_Iwaki

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Notas del fanfic:

bueno este es otra mas de de mis locuras, no contendra nada violento, a lo menos a mi parecer, sera una historia por decirslo asi rosa, espero les guste, en verdad lo espero. Los personajes no me pertenecen ni me perteneceran, son del grandioso mundo que Nitta sama creo en Haru Wo daiteita.

Notas del capitulo:

hiiiii, espero les guste este cap, lo ire modificando segun mis espectativas y si le gusta a las personas que lo leen, estoy abierta a propuestas.

katou e iwaki tendran la misma eda, asi es mas facil para hacer mis fics ya que los hago en tiempos cuando estan mas jovenes y es la unica manera que encuentro para que no haya tanta distanca entre ellos.

Estaba cansado de su vida, todos los días era lo mismo, su familia lo hostigaba diciéndole que debía hacer algo con su vida que el ser partícipe de una banda no lo era, pero porque no entendían que eso era lo que le gustaba a él, que era lo que su familia no lograba captar?, estaba tan concentrado en sus pensamientos que no pudo evitar chocar contra una persona, pero si era lo único que le faltaba, no podía creer su mala suerte, y para colmo estaba lloviendo y había caído al suelo completamente, ahora sí, ese sujeto la pagaría, nada mas necesitaba con quien desquitar su coraje.
Pero sus planes murieron al levantar la mirada y ver, más bien deslumbrarse con la imagen que se le presentaba enfrente, un chico más o menos de su edad, con los cabellos mojados de un color negro como la noche mirándolo preocupado con esos ojos, por dios esos ojos de un verde imposible y esa cara angelical tan pálida y esos labios, tan solo de verlos las protestas murieron en los propios.
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Era el peor de sus días, su padre era capaz de todo con tal de mantener su nombre en alto, no le importaba lo que él pudiera sentir, jamás le había importado su bienestar, tan solo su apellido, si por él fuera renunciaría a todo con tal de tener una vida que le perteneciera, pero ahora no podía, ahora se encontraba comprometido, COMPROMETIDO, y con quien, con alguien que ni siquiera conocía, no podía mas y salió de su casa no importándole lo que su hermano o padre le digieran, ahora se encontraba caminando sin rumbo, sintiendo como la lluvia enfriaba de a poco su delicado cuerpo, tan dentro estaba de su mundo que no se percato de la presencia de otra persona hasta que choco con esta, por suerte pudo conservar el equilibrio y no caer, pero parece que la otra persona si lo hiso, había sido su culpa tenía que disculparse, cuando volteo a ver a la persona a la cual había tirado lo que vio lo dejo sin aire, frente a él y exactamente en el suelo se encontraba un joven que parecía quererle decir algo y si era un reclamo estaba seguro que se lo merecía, pero al parecer el joven no pudo articular palabra alguna.
Era un joven de cabellos tan rubios que los comparaba con los rayos del sol, aunque se encontraba empapado, podía ver cierto brillo en el, al igual que sus ojos, eran diferentes, tan diferentes a los suyos, parecían tener luz propia, algo que a él le faltaba y ese cuerpo, jamás había visto un cuerpo que le pareciese tan perfecto, parecía tener su misma edad, pero este era un poco mas musculoso que él, y eso, eso le gustaba, lo que apreciaban sus ojos le estaba comenzando a gustar.
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Tenía que reaccionar, de seguro el chico estaba pensando que era un tonto o algo por el estilo, al fin cuando pudo articular palabra y todavía en el suelo lo único que dijo fue:
---: QUE?, ni siquiera porque me tiraste me vas ayudar a parar, pero que mal educado.
Genial, él y su gran bocata.
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Y todavía él que se preocupaba, pero al parecer el otro era un verdadero tonto.
---: bueno pues no te veo tan desvalido como para que no puedas hacerlo, además no era el único distraído el que tú seas un tonto y no te puedas mantener de pie, eso ya no es mi culpa.
Si él podía comportarse como un cretino, porque él no? Aunque no lo habían educado de esa manera no permitiría que viniera alguien como la persona frente a él y le digiera que no tenía modales.
Antes de que pudiera decir algo más el chico se había levantado del suelo y lo miraba de una forma que ni siquiera podía descifrar.
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Hmm pero que carácter se cargaba ese angelito, aunque era su culpa, como pudo haber dicho semejante estupidez cuando pudo ver la preocupación del otro chico al haberlo tirado.
--: bien, creo que comenzamos mal, acepto que fue mi culpa el haber chocado, bueno no completamente, pero lo fue y siento haberte tratado así, pero debes admitir también que es un poco grosero no ofrecerme tu ayuda.
Y seguía hablando, pero que no podía mantener la boca cerrada, así jamás lograría ni siquiera saber el nombre del chico.
---: si… admito que es una grosería, y también me disculpo, así que… puedo hacer algo por ti?
---: primero creo que deberíamos quitarnos de la lluvia, las personas que han pasado nos han mirado como si estuviéramos locos, además te ves muy pálido, no estarás enfermo?.
Antes que nada, había tomado al chico del brazo arrastrándolo prácticamente al interior de una cafetería, la señora muy amable del lugar les dio un par de toallas para que pudieran secarse, les había guiado hacia una mesa vacía que por el clima estaba un poco deshabitado el lugar, y les había servido un par de chocolate caliente.
---: vaya todavía hay gente amable por estos lugares – había dicho el chico de cabellos dorados con una enorme sonrisa, lo cual desoriento al azabache, como era capaz de sonreír así? – oh pero que mal, ni siquiera me he presentado, hmm creo que eso lo debí de hacer antes de entrar aquí, no?
El azabache solo lo miraba, ese chico estaba un poquitín loco, a su parecer, parecía que no tenía ni la mas mínima pisca de vergüenza, primero le decía que no tenia modales, después se disculpaba y lo arrastraba hacia un local que en su vida había visto y aun así los atendieron como si fueran de la familia, pero antes que eso le había dicho que parecía estar enfermo, que? Tan mal se veía?.
---: la verdad? – lo dijo alzando una de sus cejas, dándole a entender al otro que era más que obvio- estás loco, me acababas de reclamar que era mi culpa el que tu no tuvieras equilibrio y te cayeras, después te disculpas y para rematar te burlas de cómo luzco, no y para colmo me arrastras sin siquiera decirme nada, y me traes a este lugar y ahora quieres decirme tu nombre como si ya fuéramos grandes amigos, si que estás loco.
En definitiva ese angelito solo tenía la pinta, porque lo demás para nada cuadraba con su imagen, y eso, eso le estaba agradando de sobremanera.
---: tienes razón, lo siento, es que no ha sido un buen día – pero estaba mejorando – y por lo que veo tampoco has tenido un buen día, si no, no andarías caminando bajo la lluvia tan despreocupadamente, y sobre burlarme de tu apariencia, eso para nada, lo que pasa es que te ves un poco pálido, estas bien?
Le preocupaba, pero quien en su sano juicio no se preocuparía al ver a un joven con un cuerpo tan frágil, caminando sin siquiera un saco bajo la lluvia, además su semblante no ayudaba mucho, parecía que caería desmayado en cualquier momento.
---: claro que estoy bien, no soy tan frágil como parezco – antes de siquiera poder decir algo mas el chico estornudo.
---: no pues si ya lo veo – la cara que puso el otro le había causado mucha gracia, se veía tan lindo con ese puchero en sus labios – eres tan fuerte que ni el aire te hace nada, mucho menos la lluvia, jajaja en serio nunca te has visto en un espejo?,
---: mira si vas a seguir con tus t-tus – y otro estornudo se escucho en el lugar, la lluvia había cedido un poco por lo que el blondo decidió que sería mejor cambiarse de ropa.
---: será mejor que te seques si no será peor – se levanto y le hiso una seña de que lo esperara, fue a pagar la cuenta y de paso compro unos deliciosos pastelillos y regreso a la mesa tomando del brazo al chico – bien ya nos podemos ir, será mejor que nos apresuremos antes de que comience de nuevo a llover – el azabache iba a replicar, pero tal parece que el blondo ya había decidido hacia dónde irían – mira iremos a mi departamento para que te cambies de ropa, ya después puedes reclamar todo lo que quieras.
Por el camino los había agarrado otra vez la lluvia, suerte que su departamento no quedara lejos de ahí, porque parecía que la lluvia esta vez no cedería, tal parecía que llovería toda la noche.
Al llegar el azabache se zafo del agarre del blondo, pero era el colmo, ese rubio había decidido todo desde que le conoció.
---: óyeme quien te crees que eres, ni siquiera me conoces y ya parece que fuéramos amigos de siempre, como puedes estar seguro de que no soy un asesino… o un ladrón, eres muy confiado, en este momento te podría estar haciendo no se qué cosas, deberías de pensar un poco más.
---: en primera, si fueras un asesino, ya me habrías matado y más aun si fueras un ladrón no me lo comunicarías, y eso de hacer no se qué cosas, la verdad no suena tan mal – lo había dicho con una mirada picara y sonriendo a más no poder, cosa que le causo un escalofrió al azabache – y lo de desconocidos ahora lo arreglo – le extendió la mano en forma de saludo – soy Youji, Katou Youji, y tú?

Notas finales:

que tal? merece un comentario?


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