Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

The Fact and the Fiction por just breath yaoi

[Reviews - 46]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Es mi primer fanfic K-pop~ *O* Me siento una niña grande xDD. Llevaba años haciendo fics de Naruto, pero ya, suficiente xD (no os preocupéis, acabaré con ellos xD)

Quiero decir que~ es sólo expermiental xD Si gusta, lo continúo, si no, lo borro -w-

También quiero decir, que el inicio es RARO xD y que NO tendrá mucho que ver en un principio con el título y resúmen, así que nu se me asusten -w-

Notas del capitulo:

Ëste es más como el intro, ya después sabrán más. No los entretengo mucho :D sólo espero que les guste. 

Aclaraciones: Usaré los nombres de los grupos (SHINee, B2ST y Super Junior) como si fueran pandillitas de las calles :D

Nota: Nu se me asusten con el inicio xDD

El texto en cursiva son sueños :P

Cap. 1: Intro: Decisiones/ Conóceme

Ser, o no ser. Esa era la cuestión, mas no aquella con un significado filosófico acerca de la vida. Cuando muchos piensan en estudiar o no, o quizá asesinar o no. Otros sólo lo usan para jugar. Pero en mí, ésta situación de mi vida, a la que en ese momento podía llamar “decisión”, era donde aplicaba tal frase.

Frente a mí estaba JongHyun, mi mejor amigo, esperando de mí una respuesta con grandes expectativas. Semanas…no, meses atrás, JongHyun venía haciéndome la misma pregunta día tras día desde que cierto incidente pasó un buen tiempo atrás, y yo, finalmente y tras varios día de haberlo pensado, estaba a nada de zafarme, o quizá de condenarme. Sólo esperaba que mi respuesta fuera la correcta.

-¿Y bien?- dio un ruidoso trago a su malteada, mientras clavaba su mirada en la mía.

-Es que…no sé- dije encogiéndome en mi asiento y desviando la mirada- ¿Qué pensarán los demás de eso? Creerán que es…raro.

-¡Oh! ¿Y eso desde cuando viene a importarle a su Alteza, Choi MinHo? –dijo con un tono burlón.

-Esto es... ¡algo totalmente diferente, Jong!- no pude evitar el sonrojo que apareció en mi rostro.- ¡S-somos hombres!

-¡Pero ya no estamos en los tiempos de nuestros padres!- rió con fuerza. No sé por qué le parecía tan gracioso- Si las chicas pueden, ¿por qué nosotros no?

-Por eso, precisamente porque son chicas.- fruncí el ceño.

-Pero nos veríamos lindos~. HeeChul hyung siempre ha dicho que somos atractivos, deberíamos aprovecharlo. Además, imagina, así atraeríamos a las noonas de aquél instituto. Les gustan ese tipo de cosas, ¿no?

-¡Me viene importando poco si nos vemos lindos o no! Además, hay de dos: o eso las aterraría, o seríamos la burla más grande y así menos nos hablarían.

-Buen punto… ¡pero es una buena manera de ganar dinero!

-¡No lavaré autos con shorts pequeños! ¿Tienes idea de cuánto cuesta forjar una reputación para entrar a la universidad?

-Anyo~… No, ni idea. ¡Pero eso es lo de menos, MinHo!

-Es lo de más, y fin de la discusión.- cogí mis cosas y me puse de pie, dispuesto a irme.

- A  ti…- me habló de pronto, cambiando su tono de voz…precisamente ese tono de voz.-…te sigue gustando esa noona. Tiffany, ¿no?- me volteé a verlo al instante. Detestaba cuando me hablaba así…

-…No me convencerás así, JongHyun.

-Piénsalo.- me ignoró rotundamente, tomando una pose seria.- Si ella te llegase a ver en esas prendas que te mostré ayer, necesitaría traer un balde con ella todo el tiempo. Te adoraría, y no sólo ella, ¡todas las noonas del universo!

-Yo…-no podía creer lo que estaba a punto de decir en ese momento. Odiaba cuando usaba esa táctica- está bien… ¡Pero más te vale que ganemos bien, Kim JongHyun!

-Lo haremos, descuida.- volví a sentarme y tomé mi taza de café.- Por los pantalones cortos, MinHo.

-Sí, sí…como sea.

Claro que…en ese momento desconocía lo que podía pasar. Pero confiaba en mi hyung,  no era mucho más grande que yo, pero podía confiar plenamente en sus instintos de supervivencia…bueno, en realidad aún no podía hacerlo del todo, puesto que continuamente solía meterme en problemas, en las situaciones más extrañas que se pudieran imaginar, y en contadas ocasiones, salíamos  ilesos o librados de ciertas consecuencias… Sólo esperaba lo mejor de esto, no por cualquier cosa, sino porque necesitábamos algo de dinero.

En ese entonces, yo tenía apenas los diecisiete años y faltaban pocos meses para cumplir la mayoría de edad. ¿Y a qué venía eso? Pues…al simple hecho de que hasta ese momento, el dinero de mi familia, el que tras su muerte, yo había heredado, me sería liberado para mis gastos personales hasta ese entonces. Así que sí, durante los últimos siete años, me había valido del dinero que ganaba en las calles a base de mis propios méritos, o de la comida que otros de mis hyungs  me habían dado. Ahora, ¿por qué no había estado en algún centro infantil? Porque luego de aquel incidente donde mi familia pereció, yo huí, huí sin mirar atrás. Olvidé los cadáveres de mis padres y de mi hermano mayor en aquella lujosa sala de mi antiguo hogar. Lo había olvidado, y no pensaba dejar que lo mismo me llegara a pasar a mí. Para mi propia suerte, había encontrado apoyo y cariño en las calles de otras personas, que más tarde se volvieron importantes en mi vida.

Entre ellas, estaba  JongHyun. Lo había conocido unos meses después de cumplir los quince años, en algún callejón de la ciudad, mientras él enseñaba a leer a otros pequeños que corrían la misma suerte que nosotros. Yo me acerqué por curiosidad, y el JongHyun de entonces dieciséis años, me dijo las primeras palabras:

-Has pisado un poco de porquería de perro, ¿sabías?- dijo como si tratara de cualquier otra cosa

-¡Hyung, que asco!- los pequeños que estaban con él rieron.

Luego de eso, nos volvimos inseparables, pues habíamos forjado una fuerte amistad en un mundo tan complicado como el nuestro. Yo aún hoy en día, desconozco muchas cosas de él, pues jamás me atreví a preguntarle demasiado de su vida antes de las calles, algo que llegué a sentir que él agradecía infinitamente en silencio, pero en cambio, él sabía todo acerca de mí, a tal punto que podía leer mis expresiones corporales.

Y de haber sabido que él era un problema con pies, probablemente jamás lo hubiera conocido. JongHyun era conocido en las calles por sus elaboradas bromas, y tras haberme conocido, esa fama me cubrió también, sólo que a diferencia suya, yo salía perjudicado más veces que él. Pero fue gracias a eso, que al cumplir los dieciséis, pude conocer a la chica más linda de la ciudad; Tiffany, que a diferencia nuestra, pertenecía a una buena familia, me escondía en varias ocasiones en las que huía de mis persecutores. Ella me comenzó a gustar luego de esas tantas veces que nos libró de problemas, cosa que a Jong le molestaba, él la odiaba con todo su ser.

 

Finalmente, había llegado ese día que tanto hubiera deseado retrasar. Ahí estábamos, vestidos de una manera que yo consideraba en extremo ridícula y denigrante, esperando por nuestra primer clienta.

-¡JAJAJAJAJA!- una risa estruendosa apareció de pronto. Escuché mis nudillos crujir, y al voltear a ver de quién trataba, estaba ese molesto rubio, de nombre YoSeob, que venía acompañado por nuestro hyung, HeeChul.

-No puedo creerlo…- notaba cómo aguantaba las ganas de reír. ¡Y cómo no iba a hacerlo!- ¡No puedo creer que hablaras en serio, Bling Bling!

-¡A que nos vemos lindos!- gritó mi otro hyung con emoción, ignorando el hecho de que YoSeob estuviera literalmente rodando en el suelo de risa.

-Prefiero guardarme el comentario, Bling. MinHo, te veo rojo, ¿te encuentras bien?- el tono malicioso en su voz era apenas perceptible, pero yo alcanzaba a notarlo, estaba muy sensible, hablando de emociones, y no al hecho de que los pantaloncillos en extremo cortos apretaban demasiado ciertas zonas, por cierto.

-¡YoSeob hyung, basta!- pero él seguía riendo, ya menos que antes, pero ahora ya no rodaba.

En eso, HeeChul se había acercado a JongHyun, susurrándole algo, y por la cara que ponía Jong, me parecía que tramaban algo.

-MinHo~, ¿podrías acercarte?

-Aigo~…-suspiré, resignado y me acerqué a ellos con pesadez.

-¡Atrápalo!- de un momento a otro, HeeChul hyung me tenía sujeto de tal manera que no podía moverme, mientras que JongHyun reía abiertamente y me quitaba la camisa, dejándome sólo con los pantaloncillos.

-¡Re-.regrésamela!

-No, llevamos diez minutos y nadie ha traído el auto.- en eso, se escuchaba la bocina de un auto que se aproximaba al terrenito sin usar en el que nos encontrábamos.- ¿Ves? La gente vendrá si te ve así.

-¡Estoy casi desnudo!

-Casi.- y sin decir más ni dejarme replicarle, se fue atender a la noona que recién acababa de llegar…y no dejaba de mirarme.

-¡Listo!- escuché decir a mi hyung- MinHo, a trabajar, no te pago por tu linda cara.

-Deberías.

-Como sea, a trabajar, pero antes tráele una silla a noona, esperará por su auto.- sí, claro. Seguramente el hecho de que esté casi desnudo no tiene absolutamente nada que ver. En fin, luego de dejarle una pequeña silla casi destartalada, empecé a hacer mi trabajo. Trataba de sólo pensar en que lo hacíamos por necesidad a un poco de dinero, y no en que esa pervertida noona no dejaba de verme trabajar. Me sentía visualmente violado.

Y al fin, luego de terminar empapado casi por completo, dejé el auto brillando en un tiempo récord, lo que fuera para que ella se fuera cuanto antes, lo que no esperaba, es que sin darme cuenta, ya tenía más público y una larga fila de autos esperando por ser lavados.

-¡JongHyun!- estaba totalmente rojo y me cubría de manera inútil para protegerme de las miradas de esas mujeres, y algún hombrecillo verde.

-¡¿Puedes creerlo?! Y todavía hay más, MinHo!- gritaba desde el otro lado de un auto que ya limpiaba.

YoSeob y HeeChul sólo nos miraban, ahora sí ambos riendo.

-¿Sabes, MinHo~? Me parece que necesitaremos ayuda- me decía al tiempo que acababa el que tenía y yo empezaba con otro.

-¿Tú crees?- respondí con sarcasmo y molestia.

-¡Ne! Las noonas han corrido la voz…pero mira esto- me mostró una bolsita gorda y tintineante- ¡Seremos ricos en un rato!

El día siguió su curso, los autos llegaban por montones, estando realmente sucios o apenas con alguna manchita, inclusive había visto un par de veces a la misma persona. Para el final de la tarde, ya estaba acabando el último auto, cuando vi a JongHyun platicando con un par de chicos a la entrada del establecimiento, bastante risueño.

Busqué algún trapo con el cual cubrirme  y me acerqué a mi hyung, entregándole la última paga del día. Estaba agotado, de eso estaba seguro.

-¡MinHo! Me alegro que ya hayas acabado. HeeChul se fue hace un rato, pero me ha traído finalmente un poco de ayuda. – señaló al par de personas que se encontraban frente a nosotros- Te presento a TaeMin- indicó a un chico bajito, de aspecto más aniñado que el otro- y a DooJoon.

Hice una reverencia al igual que ellos. Por suerte ya teníamos al menos un poco más de gente para ayudarnos el día siguiente.

-Choi MinHo.- me presenté, sonriendo agradecido.

-HeeChul hyung nos dijo que es algo pesado el trabajo - dijo uno de los chicos, DooJoon

-¡Ne! Trabajaremos duro, appa.- terminó el otro, TaeMin, dirigiéndose a Jong con una amplia sonrisita.

Ahí me perdí un poco, pero lo dejé pasar, estaba tan cansado que sentía que en cualquier momento caería dormido.

-Aigo~, no te preocupes, Tae. Será mejor que ambos vuelvan a casa.

-Hasta luego- dije y ambos se fueron. El pequeño tardó un poco más en irse, y sentí que me miraba disimuladamente, pero como dije, estaba bastante sensible y lo alcancé a notar.

-Hmm… -escuché suspirar fuertemente a mi hyung.

-¿Qué?- le di un ligero codazo en el costado- Espero que estés feliz de la humillación que me has hecho pasar.

-No podría enorgullecerme más de mi decisión- soltó una carcajada, y honestamente, yo también.

-Eres un idiota, Jong. Prométeme que el lunes, Tiffany noona seguirá teniéndome respeto.

-Claro...volvamos con los SuJu. Está empezando a oscurecer y me da miedo~.

Caminamos de vuelta a la pequeña bodega donde nos resguardábamos, esperando poder descansar como lo merecíamos, puesto que al día siguiente tendríamos un largo día, al menos con lo de hoy nos bastaba para poder invitar a nuestros hyungs algo de comer después. Fue un buen día, después de todo.

“… ¿Dónde estás?...“
“…Un poco más cerca…“

 

Notas finales:

¿Gustó? ¿Regreso a los de Naruto D8? ¿Me oculto bajo mi piedra? *rueda*

No, no me equivoqué de término xD Tae le dijo "appa" a JongHyun.

Jaja~, díganme ¿los asusté un poco con la primera conversación? xD Perdonen eso.

Ojalá les haya gustado esta probadita xD, fue algo cortita a lo que yo tiendo a escribir, pero como dije, es el intro, y no hay mucho, al menos aclaré un poco de cómo viven estos chicos.

Agradecería saber su opinión :) como dije también, es un pequeño experimento mío, es mera curiosidad xD.

Hansahamnida!! <3 :3 *les rewala walletitas*


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).