La culpa la tubo la Banana!~
By:
Yuu Kouyou Shiroyama
(Mikuzita-Chan)
1._ previa averiguación.
Curiosidad, curiosidad oh bendita curiosidad que poseía todo su ser al ver la actitud de su novio junto al bajito vocalista de su banda ¿la razón? Ni pista alguna de cual seria pero de una cosa si que estaba seguro, descubriría tarde o temprano que se tramaban ese par de ladronzuelos.
Se levanto de su cómodo sofá luego de que ambos “criminales” y “cómplices” se escaparan con rapidez de su interrogatorio ¿Qué haría para descubrirlos? Simple respuesta, llamaría a reita así que a paso lento llego a su habitación que compartía con el primer guitarrista y tomo su móvil que reposaba en la mesita de noche y con un simple tecleo rápido su teléfono ya estaba timbrando al del de la bandita.
- Moshi moshi- escucho al otro lado del auricular
- Reita…-respondió en modo de saludo mientras se acomodaba en su mullida cama
- ¿Qué quieres? ¿ruki ya rompió algo?- arqueo su ceja molesto el de la bandita de solo imaginarse como su dinero de fin de mes –el cual ni si quiera había usado un centavo ni para comprar ni un chicle- se escaparía de las manos para pagar cualquier objeto de valor hecho trizas por su chiro novio.
- No, no es eso.-contesto con gracia el pelinegro
- ¿entonces? -suspiro aliviado de no tener que usar su dinero tan pronto.
- Han salido corriendo de aquí hace un rato-comento el pelinegro
- ¿y de que te extrañas?
- Es que ambos actuaban como si hubieran matado a alguien- dijo mientras recordaba los momentos previos a la llamada recientemente hecha- y lo mas extraño…Uruha tenia un extraño libro
- Yo que se del libro- bufo molesto- es tu novio
- Pero el tuyo también esta involucrado, es más Ruki se notaba nervioso y quiso decirme que sucedía pero como siempre…contaba con la astucia de shima quien le cerro la boca- suspiro
- ¿Cuándo no?- dijo reita soltando un leve suspiro- déjalos, seguro uruha comenzó a corromperle la mente al pobre Ruki
- Eso no lo dudo- dijo entre risas el pelinegro- pero me inquieta mucho el hecho de cierta parte de su conversación que alcance a escuchar
- ¿andas asomando los oídos por donde no debes?- pregunto con una leve risilla
- No fue eso- se defendió el guitarrista-
- ¿entonces que fue? ¿Qué escuchaste negro?
- “juguetitos sexuales”-rio al recordarlo contagiando su risa al rubio
- ¿eso nomas?
- Escuche también de unas imágenes de no se que pero iba incluido yo en el paquete
- Pues Aoi, Uruha te tiene como conejillo de indias para sus experimentos extravagantes, no seria raro- se rio ante su comentario provocan do que el mayor frunciera el seño.
- Que gracioso- dijo con sarcasmo- te mantendré informado por cualquier cosa, eh?
- Claro, llámame apenas rellenes al pato- obviamente a Reita le encantaba decir cosas con doble sentido
- Ándate a la mierda Reita- contesto entre risas- adiós-sin más colgó y volvió a su sillón, ni bien coloco su trasero en el mullido sofá la puerta se abrió dejando ver a un uruha algo agitado luego de una buena corrida desde el restaurante de ramen.
- Ufff…-el castaño se apoyo en la puerta ya cerrada mientras se dejaba resbalar por esta, no había notado la presencia del pelinegro en la sala; este lo miraba con bastante atención y en especial aquel extraño cuaderno que se movía al compas de la respiración del castaño debido a su ubicación abrazado al pecho del castaño.- pensé que me seguiría…energía gastada en nada- bufo molesto el primer guitarrista mientras una sonrisa burlona apareció en el rostro de Aoi, sinceramente Uruha se había estado pegando mucho a Kai últimamente así que no era extraño que el mayor don del líder –su característico despiste de lo que ocurre en su entorno- se le haya pegado como garrapata sedienta por sangre.
- ¿Qué tal estuvo la maratón?- pregunto burlonamente el pelinegro pero su burla fue mas grata al ver la cara épica que se colaba en el rostro del menor, de verdad que ese día se iba a divertir mucho.
- ¿de que hablas? ¿desde cuando estas allí?- pregunto asustado el castaño mientras “disimuladamente” – escaso- intentaba de ocultar su súper mega híper extremadamente fabulosa guía de hechos pervertidos y sadomasoquistas.
- Desde que vi asomar tu pico de pato por al puerta –apoyo su codo en el brazo del sofá mientras su mejilla reposaba en su mano- ¿Qué te traes en manos Takashima?- ok, uruha sabia que estaba en serios problemas, no era para nada bueno cuando Aoi lo llamaba “Takashima” esa era la alerta roja, el tsunami llamado “Aoi quiere sacármelo todo con puntos y comas” se aproximaba y no estaba preparado para ello, así que aquí comenzaba su mega híper y fabuloso plan “Olvídate todo y mi trasero será tuyo”…aunque era un nombre estúpido y era ilógico por que ya de por si su maldito trasero con un leve olor a mantequilla ya era de Aoi así que no venia al caso.
- Ahhh…-murmuro- bueno Aoi-shi~-comenzó ha a hacerse el cojudo y el que no sabia nada- tengo que ir a terminar unos acordes así que…-ni bien termino de hablar cuando ya Aoi estaba enfrente de el mirándolo perversamente, ok…al parecer en verdad que Dios lo odiaba, se las estaba cobrando todas y cada unas, maldecía todas las veces que su hermosa y maravillosamente había estado jugando con las personas de su entorno.
- ¿A dónde vas?- le extendió la mano
- Aoi no tengo plata- sabia bien lo que quería el pelinegro pero o se hacia el tonto o no salvaba su trasero de esta.- saca de tu cerdito feo ese que tienes sobre el refrigerador
- Mi cerdito no es feo- reclamo el pelinegro, uruha internamente salto, había conseguido despistar al pelinegro- y no te salvas de esta- ok…su ánimos se fueron a la mierda.
- ¿de que hablas?- pregunto mirándolo sorprendido
- Ay Takashima, no te salvas de darme esa cosa que te cargas encima- señalo el extraño objeto que tenia Uruha entre sus manos
- ¿Qué? Desde cuando acá debo darte o mostrarte todo lo que es mío?- pregunto haciéndose el molesto, debía ser mas inteligente que el pelinegro si o si.
- Desde que tu gordo trasero es mío, así que pasa acá-intento arrancharle el cuaderno a uruha peor este de inmediato se alejo del pelinegro y se coloco detrás de este
- Mi trasero no es gordo- reclamo haciendo boca de patito
- Si lo es y a demás huele a mantequilla- dijo haciéndole burla pero lo único que consiguió fue un fuerte golpe de parte de uruha.
- Por eso estarás en abstinencia- dijo sin mas y salió hacia su habitación seguido de un desesperado Aoi que sabia que Aoi jr no aguantaría quien sabe cuanto sin visitar su amada “madriguera de diversión”
- Uruha, perdóname- chillaba el pelinegro más era ignorado por el castaño, sin duda había ganado el primer round, había despistado a su novio con rotundo éxito, sin duda no lo volvería a molestar por el resto del día y si corría con suerte no se volvería a tocar el tema, así que todos felices y contentos ¿no?.
- No se…-se detuvo en el portal de la habitación y se volteo a ver al pelinegro- déjame pensarlo ¿Qué meritos has hecho por mi?
- Muchos- dijo orgulloso el pelinegro
- ¿Cómo cuales?-lo miro incrédulo
- ¿Quién te soporta…-corto la frase al ver el seño fruncido del castaño- digo quien te acompaña de compras?
- Takanori- Aoi se sintió estúpido en ese momento, era verdad siempre lo acompañaba Takanori pero cuando este no podía – eran ordenes de Reita, por que de ser por Takanori viviría fuera de cada tienda que tenga una oferta- el lo acompañaba con el dolor de sus amados pies y el de sus hermosas manos que soportaban las largas caminatas y las miles de bolsas con las que salía el castaño de cada tienda, si, Uruha no salía con las manos vacías de ninguna tienda así terminara comprando un estúpido prendedor de Rodolfo el reno de la nariz roja pero siempre había un paquetito en sus manos al salir de la maldita tienda.
- Amm… ¿Quién te prepara el desayuno?- esa si que había acertado pero era una pregunta…díganlo de un modo lindo…REALMENTE ESTUPIDA!
- El microondas-arqueo una de sus cejas y miro con burla al pelinegro
- Pero ¿Quién mete la comida en el microondas?- debía acertar aunque sea una
- Tú- siiii, era un punto a su favor, había ganado de la manera mas absurda posible.
- ¿vez? Allí hay un merito- miro al castaño fijamente y con obvio tono de orgullo en sus palabras, Uruha no sabia si reírse o carcajearse de las ocurrencias de Aoi ¿así decían que el era loco? No habían vivido con Aoi como para juzgarlo.
- El “gran” merito de Yuu Shiroyama es que puede abrir la puertita del microondas, meter la comida y aplastar los botoncitos?- se cubrió la boca para intentar de disimular su risa pero le era imposible.
- Al menos es algo- no se dejaría intimidar por Uruha, ganaría- ¿tu que haces?
- Yo…-ok, No tenía argumentos para defenderse pero siempre hay grandes ideas ocultas así que una tenia que salir quisiera o no a flote en ese mismo instante para salvarse el trasero- hago mucho por ti…
- ¿Cómo que?-pregunto incrédulo el mayor, Uruha relativamente no hacia nada, el que limpiaba era él, el que metía la comida en el microondas era él, el que prendía la televisión era él, el que pagaba TODOS los servicios básicos a demás del arriendo era…ÉL!
- Pues yo…-tiro su magnifica guía al piso, se odio en el momento en que lo hizo pero salvaba su pellejo si o si- atiendo a Aoi jr cada vez que esta bastante animado ¿no?- se acerco y todo el disimulado bulto de Aoi, este se estremeció ante el contacto repentino.
- Uru…¿Qué haces?- pregunto sorprendido mientras la mano del castaño se pasaba sobre su miembro que comenzaba a despertar con las buenas- buenísimas- atenciones prestadas por los habilites dedos del menor.
- Mi Aoi-shi Jr pide atención-puso un dulce pucherito en su cara provocando que el mayor se excitara- así que tengo que brindársela ¿no?- se agacho hasta quedar su rostro a la altura del miembro viril del mayor, desabrocho con lentitud el pantalón e introdujo su mano dentro del bóxer negro `para poder sacar el miembro de aoi- Aoi jr, mi amor- sonrio con malicia mirando el pene de su amante
- Uru…-lo miro excitado, la maldita cara que Uruha mostraba era totalmente inocente pero sabemos muy bien que Uruha de inocente ni un huevo tiene.
- Shh..que Aoi jr quiere decirme algo- ok, ruki tenia razón cuando decía que uruha tenia la cabeza retorcida, en el próximo fanfic tal vez lo veamos en el siquiatra- aja…quieres que papito Uru te atienda, ajaaaa y también quieres salir a pasear con patito, no?- beso la punta del miembro de aoi mientras este no pudo evitar jadear.
- Maldición…-mascullo entre dientes, uruha sonrio complacido antes las reacciones de Aoi así que se incorporo y tomo el miembro de Aoi jalándolo para que el dueño de este lo siguiera hacia el interior de la habitación.
Una vez allí Uruha soltó la virilidad del mayor y lo lanzo a la cama, se subió encima de las caderas de Aoi y comenzó a mover las caderas de un lado a otro mientras se quitaba la ropa ante la atenta mirada del mayor; las manos de Aoi comenzaron a mover por el pecho ya descubierto del menor quien no había tardado demasiado en deshacerse de su ropa.
- ¿estas desesperado?-sonrio con malicia al ver y sentir como Aoi recorría cada parte de su piel como si se le fuera a ir de las manos
- No pero no quiero hacerte esperar- 4este comentario descoloco totalmente a Uruha quien luego e unos segundos se encontraba bajo el cuerpo del mayor, las manos de este se deshicieron rápidamente de su propia ropa para luego voltear al mas alto levantando sus caderas y acostando su cabeza contra la mullida almohada.
- ¿sexo salvaje?- pregunto con una sonrisa en su rostro, le encantaba cuando Aoi hacia las cosas rápido y sin consideración a lo que podría causarle al trasero de el mismo.
- Es hacer el amor…sin consideración- mordió uno de los glúteos de uruha con fuerza mientras el otro gemía, sus manos recorrieron el miembro erecto del menor desde la base hasta la punta la cual presionaba con fuerza. Abrió un poco más las piernas del castaño para poder lamer e introducir su lengua en la entrada de este.
- Ahhh Aoi…-gemía sin parar, demasiadas sensaciones juntas en un solo momento, mordió su labio inferior intentado callar sus gemidos mas no le era posible con la expwerta lengua de aoi recorriendo su interior y la mano de este maltratando su erecto pene.
- ¿lo quieres ya?- pregunto para luego lamer desde la entrada del castaño hasta sus testículos
- Ahhh sii…-gimió y luego de unos minutos ya tenia el miembro de Aoi penetrándolo y saliendo de golpe- ahhh maldito- gimió con algo de dolor y placer a la vez, era el precio que tenia que pagar por ocultar las cosas pero era mejor así.
- Ahhh Uruha- gimió el pelinegro al sentir tan estrecho a su candente amante quien movía las caderas al compás de sus embestidas salvajes, tomo de la cadera al menor para poder llegar a la zona deseada, la próstata de su uke.
- Ahhh…ahhh…-los gemidos ya eran parte de aquel acto, sus cuerpos siendo uno, cubiertos de sudor y a los pocos segundos sus cuerpos se tensaban y ambos llegaban al tan deseado orgasmo, Uruha dejando su esencia en la mano del mayor y este en su interior pero el acto no acababa allí, el pelinegro si que estaba con ganas ese días que no lo dejaría pasar…retomo sus embestidas luego de varios minutos y volviendo a endurecer el flácido miembro de su amante junto a una ola de gemidos se divirtieron más de una vez hasta que sus cuerpos no dieron para más.
Si que lo habían gozado, pero para uno de ellos seria…nada agradable.
2._ el inicio de la pesadilla.
¿Cuánto había dormido? No lo sabia pero de una cosa si estaba seguro, el culo le dolía horrores a demás de su cuerpo que le pesaba una tonelada, no quería abrir los ojos pero hacia mucho frio, estaba demasiado cansado pero aun así se volteo para buscar abrigo en el cuerpo de su amante sus manos no se pudieron mover, abrió de golpe los ojos y miro su entorno.
Estaba solo en la habitación y ……
!!!!ESTABA AMARRADO TANTO DE PIES Y DE MANOS A LA CAMA!!!!
Continuará(?)~quien sabe XD