Corazón Egoísta
Sasuke Uchiha, ese es tu nombre, y ese es el nombre de la persona a la que amo, si Sasuke, ¡te amo! Aunque suene raro, aunque sea imposible, aunque no lo quieras aceptar, ni tu, ni nadie. Pero es la pura verdad, y lo lamento por todos, pero hare algo que tal vez tú no quieras, que tal vez con esto que estoy dispuesto a hacer me gane tu odio, y el repudio de aquellos que estén justo en ese momento presentes. Pero no me voy a arrepentir, la vida es una sola, y si no me arriesgo no gano nada, eso ya lo se. No tendré miedo, ni me pondré nervioso. Simplemente hare que te enteres que te amo, porque no importa cuanto te fastidie, cuanto me acerque a ti, no hay forma de que te des cuenta de que en verdad no quiero ser tu amigo sino algo mas. Y se que tu teniendo a prácticamente todas las mujeres de la Aldea, jamás te fijarías en un hombre y menos en mi, que supuestamente para ti soy un idiota sin cerebro.
Si me rechazas, por lo menos podre decir que lo he intentado, por lo menos tendré la satisfacción de que hice eso. Y bueno, tal vez cuando te cruce por la calle me mires con desprecio o tal vez no te vuelva a ver nunca más. Eso lo sabré después de esta tarde, cuando te vea.
Y si tengo la gran bendición de los Dioses y me correspondes, pues que puedo decir, seré el hombre mas feliz del mundo, ya sabes, después de todo seré la pareja del muchacho mas hermoso de la Aldea, del país e incluso me animo a decir que del planeta tierra.
Dije que no me pondría nervioso, ¡pero que rayos! Ya estoy tan alterado que me sudan las manos, tartamudeo y sonrió por cualquier payasada. ¡ja! ¿Que curioso no?, prácticamente como si no estuviese nervioso.
Nadie sabe lo que voy a hacer esta tarde cuando te tenga frente a mi, ya me lo imagino todo, y me da gracia ¿Qué bueno no? Prefiero mil veces que me de gracia antes que sentirme mal por la gran probabilidad de que me termines dando un buen golpe y jamás volver a hablarme. Mejor ni pensarlo, ya me esta dando algo de temor. Pero lo que voy a hacer, lo voy a hacer, ya esta decidido.
Me arreglé tan bien como pude. Nunca fui bueno para vestirme, pero creo que esta vez lo hice bastante bien. Me peiné como pude e incluso me perfumé, ¿buena esa, verdad? Me ciento un idiota al mirarme al espejo, pero creo que estoy bastante bien. La hora de la verdad cada vez se acerca más y más. Ya falta muy poco para que te encare y lo haga. Y juro que lo haré, ohhh si, ¡lo hare!
¿Y de consuelo que tengo? Por ahora nada, pero lo tendré, aunque no me correspondas.
Que mas puedo decir, ¿sabes desde cuando siento esto por ti? Puffff, ni te lo imaginas, sabes, me enamoré de ti cuando éramos pequeños, recuerdo haberte visto por el barrio varias veces y luego en la academia. Que buen alumno que eras por cierto. Bueno, como iba diciendo, cuando éramos niños, ahí pensé que serias mi amigo de toda la vida. Pero creo que me equivoqué ¿verdad? Porque por más que intentara hacerme amigo tuyo, siempre terminabas alejándote de mí, hasta que decidí, sino podía ser tu amigo, seria tu rival. Y así me pude acercar bastante a ti, cuando fuimos parte del mismo grupo ya más grandecitos. Que días aquellos, ¿no? Tantas cosas van pasando frente a mis ojos. Pero no me pondré a pensar en cosas como esas, porque hoy es el gran día, el día del juicio se podría decir, por lo menos para mí.
Salgo a la calle, preparado para hacer lo que tengo que hacer. En el camino me encuentro a muchos conocidos y te aseguro que ninguno se imagina lo que estoy a punto de hacer. Pobres ingenuos. ¡ja! Era joda, ellos no saben nada y punto, pero ahora lo sabrán, el mundo lo sabrá.
A lo lejos te veo, ¡oh si! Estas muy guapo y eso que estas como siempre ¡ja! De nuevo. El solo verte provoca que sonría felizmente, tan alto, con ese cabello azabache que resalta tu rostro pálido. Y esos ojos negros que tanto me gustan. Delgado y etc etc, puedo estar hasta mañana diciendo lo que me gusta de ti, y eso es decir que me gustas enterito.
Bueno, aquí voy con mi sonrisa acercándome por detrás, como si te estuviera asechando… mmm y es algo así. A cada paso que doy, parece que voy más lento. Pero ya te dije, no me voy a acobardar, ¡lo haré! Que pesado ¿No?, es como la quinta vez que digo que lo hare, ya deberías estar diciendo ¡menos charla y mas acción!
Cuando me escuchas detrás de ti, te volteas a ver quien es y me miras a los ojos. Casi, te juro que casi salgo corriendo. Pero me quedé quieto ante tu mirada penetrante. Y sonreí tontamente. Que idiota, habrás pensado seguro, y bueno que más podía hacer.
Me dispongo a hacerlo, Saskue, lo voy a hacer y espero que lo entiendas y lo correspondas. Y sino, que se le va a hacer, así es la vida. Me miras tan serio que creo que descubriste lo que iba a hacer. Diste un paso atrás y te detuve de golpe, agarrándote del brazo. Y seguiste mirándome, esperando algo que yo debía hacer. Y que ¡no me animaba! Diablos, decirlo y hacerlo son dos cosas distintas. Pero ya esta, lo haré. Y perdóname si esto afecta tu reputación de niño perfecto.
Sabes Sasuke, te amo tanto. Tanto que por ti yo daría mi vida entera. Por ti seria capaz de cualquier cosa. Y es lo que siempre intenté demostrarte. Pero como no te dabas cuenta de lo mucho que te amaba iba a hacer algo que siempre quise.
Entonces me acerqué tanto a ti que me podía ver reflejado en tus ojos. Y justo cuando estaba dispuesto a hacerlo, dijiste algo que me heló el alma. Y ahí quede, parado como idiota mientras tú te alejabas. Y una vez que te alejaste, nunca mas pude hacerte volver.
Después de esas palabras surgieron varias cosas. Y un día, por más que te seguí e incluso palie contigo, te fuiste y desapareciste para nunca más volver. Y yo por más que lloré, pataleé y rogué a todos los Dioses que me conocía. Tú no volviste.
Años pasaron. Crecimos en lugares separados, nos hicimos prácticamente adultos y mi vida cambió cuando te volví a ver. Yo estaba en plan de olvidarte como el amor de mi vida, pero no como amigo. Y te juro que cuando te vi nuevamente, me enamoré más de ti. Sasuke, ¿Por qué?
Fue entonces que me di cuenta que no importara lo que yo hiciera. Tú no regresarías. Así que enrollé un pedazo de papel ante tus ojos negros. Lo metí en un tubito y le puse tapa. Entonces, después te miré a los ojos sonriendo, porque sabia que te volvería a ver, no me preguntes como, pero lo sabia. Tal vez para ese entonces me aprecies un poco más o tal vez yo deje de amarte, pero siempre serás mi amigo, eso dalo por seguro. Y si dejo de amarte, haré hasta lo imposible para que tú puedas estar con la persona a la que amas. Porque aun recuerdo las palabras que me dijiste aquella tarde cuando yo estaba por hacer aquello que iba a hacer. Las recuerdo muy bien. Como si me las hubieses dicho hace unos segundos atrás. ¡ay Dios! Te amo tanto Sasuke, pero te lo prometo como amigo, que si me dejas ayudarte lo haré, pero no ahora, sino mas adelante, porque como ya te dije, nos volveremos a ver.
Y luego de mirarte por un rato, y darme cuenta que nuevamente te ibas a ir de mi vista. Te tiré el tubito con el papel dentro.
Sabes Sasuke, yo no juzgo a nadie. Y jamás de los jamases te juzgaría. Espero que entiendas eso, nunca seria capaz de hacerlo. Así que ya sabes. Algún día te ayudare como amigo. Eso si, aun espero que te enamores de mi, y lo esperaré un tiempo mas. No me daré por vencido tan fácilmente.
Y cuando vi que desapareciste, lloré como una niña. Porque como amigo había fallado. Lo se, estuve mal. Pero espero tu perdón. Aun te amo y no podría hacerte feliz si eso me dañaría a mí. Por que todo el mundo dice: “Si la persona a la que amo es feliz con otra persona, yo también soy feliz.” ¡Puras mentiras! Y sabes que es lo peor de todo. Es que te puedo ayudar. ¡Pero no quiero hacerlo! ¿Sabes porque? Porque si te ayudo, te alejaras aun mas de mi.
Lo siento tanto. Soy tan egoísta.
Y no me atrevo a decir nada más. Solo un hasta luego Sasuke. Hasta el próximo encuentro. Y espero que para la próxima vez mi corazón haya madurado más.
Ya te habrás dado cuenta, ¿verdad? Que el papelito que te entregue en el tubito es esta misma carta, en la cual te estoy confesando todo lo que siento. Soy un verdadero idiota ya lo se.
Y me debes de estar odiando. Lo que lamento es no haber hecho lo que debía hacer aquella tarde, ¿recuerdas? Ese día que me dijiste aquellas palabras. Como adiviné, tu te habías dado cuenta de lo que iba a hacer, ¡y si!, ¿quien no se daría cuenta? Si cada vez acercaba más mi rostro al tuyo. ¡Y claro! Iba tan lento que te diste cuenta que estaba apunto de besarte en los labios. ¡Que idiota fui! Lamento tanto no haberte robado rápidamente el beso, así por lo menos tendría esa satisfacción.
Pero me quedé tan helado al escuchar las palabras que pronunciaste. Aquello me partió en 1000 pedazos. Y aun así te seguí amando. Y ya te dije, cuando deje de amarte, te voy a ayudar para que puedas decirle a aquella persona cuanto la amas. Aunque soy un egoísta, ya lo se y tu también ya lo sabes. Porque te podía ayudar, se que después de que te diga esto, no te veré nunca mas, y nunca mas tendré una oportunidad en tu corazón aunque me estuviese equivocando y sí te vuelva a ver. Porque se como ayudarte ¿y sabes como yo lo se…? Porque…
El me lo confesó….
Itachi también te ama.