-Así que piensas que Jinwoon está raro contigo...- dijo mientras metía una papa frita llena de carbohidratos y grasas a su gran boca.
-¡Sí! Es demasiado raro, por lo general llega y me abraza- tome de mi refresco de cola, a continuación mi acompañante me lo pidió y sorbió de la pajilla.
-Pues-continuo dejando el refresco en el portavasos-tal vez, como ya sabe que tienes dueño no quiere tener problemas con mis preciosos músculos.
-¿Cuáles músculos? Lo único que veo ahí es flacidez, prueba de la chatarra que comes- le arrebaté de las manos la caja de papas, a lo que puso las manos de nuevo en el volante.
Conducíamos hacia unas cabañas a las afueras de Seúl. La verdad, no se a donde íbamos exactamente.
-oye…
-¿Si, conejito?
-am, ¿A dónde quedan las cabañas a las que vamos?
-Por ahí- respondió con una sonrisa, enserio, pienso que debería alejarse un poco de GO- mi hyung me dijo donde se encontraban- ah, como si fuera posible…
Recargué mi cabeza en la ventana. Los arboles y farolas pasaban a toda velocidad. Si no fuera el mejor amigo de Mir, no sabría que sabía conducir. Aunque me pone un poco nervioso, si choca, adiós a mi hermosa vida.
-Este lugar te gustará mucho
-¿Es una sorpresa? Si es un pueblito donde no hay agua y esas cosas…
-No, no. Hace frio te gustará- sonrió de oreja a oreja. De esa manera parece un mono de esos que te ganas en las ferias como premio de consolación.
-Hmmm~…
-¡Ha! Si, te tengo un regalo- quito las manos del volante y empezó a buscar en el asiento de atrás. Acto seguido el auto comenzó moverse en zic zac.
-¡HEY! ESTUPIDO EL AUTO.
-¡Ha!-tomo el volante y se enderezo en el camino. Este idiota me matará.
-¿A quién le envías mensaje?- pregunto mirando de reojo mis manos que comenzaban a teclear en mi iphone de funda rosa.
-A Woohyun, le diré que si no vuelvo con vida el lunes, que le diga a mis padres y los miembros que los am…-
-¡Hey!-rio divertido-pero hay un problema.
-¿Cuál?-pregunté mientras miraba mis uñas. Si que necesitaba una manicura ahora mismo.
-tus papas no saben de tu rara atracción hacia los hombres, mi querido novio.
-Da la casualidad que tu también lo eres- tome del refresco.
Sonrió.
-¿Qué es tan gracioso?
-Da la casualidad que antes te daba asco tomar de mi mismo vaso.
-¿Enserio? No lo había notado. Por lo general, la saliva de los miembros no me resulta repugnante como la tuya…
-No, ahora te resulta todo menos repugnante- ¿Puede dejar de este tonto de sonreír una buena vez? Me pone…
-¿Q-Que quieres decir?
Nervioso.
-Qué…-tomo mi mano-amas mi saliva.
Hay olvídenlo.
-Enserio…-a continuación dos papas fritas ya estaban adentro de sus asquerosas fosas nasales. Y presione y presione…
-Esto…se siente raro…Kibum…no puedo respirar…- Quizá debería de quitar mis manos antes de que este tenga un orgasmo.
Y el auto comenzó a moverse en zic zac.
-¡Idiota!- regrese a mi asiento-Pude haber muerto por segunda vez, y te culparían de asesinato forense.
-Tú ni siquiera sabes lo que es un asesinato forense.
-Tu tampoco.
-habrá un día en que no me maltrates…
-habrá un día en que no seas taaaan idiota.
Se quedo en silencio.
-¿Ves?- crucé mis sexys brazos triunfantes. -¿Qué paso con mi regalo?
-Mira…tu siempre tan Diva interesada. ¡Mujer de la mala vida!
-Simplemente dámelo. ¿O lo compraste de adorno?
-¡Esta bien, Esta bien! Sostén el volante mi pequeño saltamontes- ok, evitaré preguntar a que vino esa expresión. Y mientras el se retorcía y yo trataba de maniobrar con el volante (que fue inútil) el auto de nuevo izo su recorrido en zic zac. Mientras el ponía su trasero en mi cara…
El colmo.
-¡Es todo!- lo jaleé del pantalón y lo coloque en el asiento. La verdad no sé como lo hice. Supongo que fuerza de chica supe poderosa…a olvídenlo- ¿Cómo puedes poner tu trasero en MI hermosa cara? ¿Qué hubiera pasado si un gas toxico se te sale y y muero?
-Eso no pasaría conejito, hoy desayune cereal.
-Y yo soy Madona.
-Yo diría que eres un intento fallido de ella- Ignóralo Key, respira, exhala.
-Como sea, ¿Quién diablos te dio el permiso de conducir?
-Una anciana, que por cierto tenía unas sexys piernas que me producen excitación.
Y volvemos…
-¿Sigues con eso? SU-PE-RA-LO.
-Eso fue tan fresa de tu parte…
-¡Cállate! Esa anciana no veía bien de seguro.
-De hecho-prosiguió- me dio el permiso a cambio que la dejara bajar del auto.
Será posible…
-Dime, ¿Qué era lo que me querías dar?-al ver sus manos desprendiéndose del volante, me apresuré a continuar- Yo lo tomaré.
-shhh- un puchero. ¿Enserio? ¿En mí? No funcionara. Querido bang chulyong olvidas que vivo con alguien llamado Lee Taemin.
-Es la caja roja.
-¿Esta?- me incline y la tomé-Es un color un poco cursi ¿no crees?
-Es el color de la pasión~
-Pasión mi cola.
-Esas expresiones…no las dice una señorita.
-aham…-la ignorancia es un perfecto arte que he desarrollado desde que conocí a Jinki. Comencé a abrir la caja. Y me encuentro con un conejito vestido con un pañal y una flecha.
-Lindo ¿no? Eres tú, conejito.
-Eres taaan creativo-El señor Sarcasmo vive en mí.
-¿No te gusto? Puse todo mi dinero en el…
-Pero si aquí dice 1 dólar-repliqué señalando la etiqueta. ¿Quien en su sano juicio no sabe que los regalos no llevan la etiqueta?
-¡Lo ves! Un dólar. Me gaste mi único dólar en ti. Siéntete afortunado.
Claro, Mir.
-¿De qué se supone que esta vestido?-reprimí las ganas de mirar adentro de su pañal.
-Es Cupido.
-Quiero escupirlo.
-¡Hay!, simplemente regrésalo. Apuesto que si hubiera sido de Woohyun, muy felizmente lo aceptas…
-¿A qué viene eso? El nunca me regalaría un conejito. Tal vez uno playboy, quizá…-Lo mire de reojo. Estaba triste.
-oye, Me encanto. Enserio.-Bese su mejilla.
Comenzó a reír.
-Sabia que te gustaría, soy muy bueno escogiendo regalos.
-Así como lo eres escogiendo ropa…
-¿He?
-Nada~
-Enserio, ¿no puedes ayudarme a llevar esto?-me dirigí hacia Mir que cargaba 6 maletas mías y 1 de él.
-Quieres…quieres que te ayude…- Se que dirán, hay Key no es macho y por eso no lleva las maletas, pues fíjense que tienen razón.
-¡Sí! Esta bolsa parece que tiene piedras…y mis brazos son muy finos, creo que deberías de ayudarme.
-Tú ayúdame en algo Kibum, saca la llave de mi pantalón- ¡Lo sabia! Quiere tener sexo al aire libre, este niño…
-Tocarte…ahí…como que no me resulta muy agradable con este frio.
-¡Ya! Simplemente quítala de mi bolsillo trasero.
-¡¿Trasero?!- lo sabía, así empezará todo. Que dirán las personas de mi, ‘que eres gay, Key’ cállate voz interior.
-¡Key!
-Sí, si ya voy- ¿Quién era ese para decirme que hacer? Sí, bueno era Mir. Me dirigí de mala gana hacia su pantalón de mezclilla, y cuidadosamente extraje la llave de sus nachas.
-Una vez, le pedí a Thunder que sacara una llave de atrás de mi pantalón y le lancé un pedo- Hay ser mas asqueroso en esta tierra ¿Dios?
-Porque me cuentas eso…-si se preguntan cómo era mi cara. Bueno, era simplemente desagradable.
-No lo sé, pero creo que será mejor que entremos- evade el tema Bang chulyong eso hiciste cuando encontré una toalla sanitaria en tu bolso. O era en el mío….
Entramos a la cabaña, era totalmente de madera, sacada de un cuento de hadas. Cuento de hadas mi sexy trasero. Si, la cabaña era linda, pero, hacia demasiado frio, mi piel se pondrá pálida y muy pronto mis mejillas se sonrojaran y y…
-Estas rojo Key, que lindo- el mono acuífero toco mi mejilla.
-Tú también estas rojo, aunque no veo nada lindo en ti.
-Hablando de lindo, mira-comenzó a buscar en su maleta hasta sacar dos trapos color rojo con rayas blancas y…un corazón…mátenme.
Dime, Bang chul yong, todas las veces que vimos películas juntos y usaban suéteres de pareja ¿no notaste mi repugnancia hacia ellos?
-¿Te gusta? Lo hice especialmente para ti- cálmate Kibum. Tu ya has mentido antes, simplemente decir ‘si’ y bastará. Pero si lo dices, tendrás que usarlo.
-Tú no sabes coser-logré decir. Sí, eso es, evadiré el tema.
-cierto, me atrapaste Key…-‘Y era solo una broma y no tendremos que usar esto’ -Lo compre por mercado libre.
Vuélvanme a matar.
-Son…lindos- Y lo eran, enserio. Imagínense un suéter súper gigante, con rallas blancas y rojas horizontales y un perro y un conejo juntos. Ni Taemin es más tierno que eso.
Bueno tal vez, si.
-Solo que no van con mi estilo…- No me odies, Mir.
-A…ya veo…está bien…ni porque rompí mi cochinito solo para tener dinero y comprártelo- comenzó a lloriquear. Pero, viéndolo bien, no tiene nada de malo si uso el suéter solo por hoy. Además, en estas fechas no hay nadie en estas cabañas.
-Me lo pondré- le arrebate uno de sus manos, comencé a desvestirme y tadaa~. Mundo les presento a Key el conejito feliz y su novio el cachorrito sin cerebro. Olviden lo que dije.
-¡Te ves bien lindo! Ponte la capucha- hice lo que me dijo. Me acerqué al espejo del recibidor y, un gorro con orejas de conejo en mi cabeza. Enserio, ¿es mera coincidencia que haya comprado uno así?
-Bueno, por lo menos soy más lindo que Gongchan.
-Nadie es más lindo que él, Key.
-Tskk- Antes de poder reprochar un el sonido de ‘kiss kiss kiss’ lleno la habitación. Un mensaje. Saqué mi celular del pantalón y teclee ‘abrir’. Era Woohyun.
Les contaré: Sungyeol fue el que le dijo a Mir sobre estas cabañas. Sungyeol las descubrió por que Woohyun buscaba un lugar de unas minis vacaciones con Sungkyu. Y eso explica que yo esté aquí ahora, y que el vocalista principal este en la cabaña de al lado. Obviamente, nadie, salvo los infinites y yo, sabemos de la ubicación del woogyu.
‘Te vi llegar a la cabaña. Está muy linda ¿Verdad? *--* A ver si Sungkyu acepta que los cuatro nos reunamos D: ‘
-¿Quién es?- mi querido novio comenzó a acercarse a mi celular.
-Woohyun, No es nada- lo cerré.
-mmm, como que últimamente estas muy amigable con el ¿no?
-Tú siempre estas más que amigable con Zico ¿No crees?
-Bien, bien no pelemos conejito, a divertirnos~
-¿A esto le llamas diversión?
Me encontraba en la pequeña plaza, sentado en una banca de madera mientras veía a Mir en la fuente hecha de piedra (muy linda por cierto), con un niño aventando monedas y pidiendo deseos. Como si se fueran a cumplir.
-Keeeey….- un susurro venia a mis espaldas. Un violador quizá, me voltee y…
-¡Seungho!
-shhhhhhhhh- tapo mi boca con su mano. Olía a chocolate. Carbohidratos.
-¿Qué hacen aquí? –susurré.
-Escuchamos la idea de Mir, de venir a las cabañas y tada~ aquí estamos.
-¿Estamos? ¿Vienes con GO?
-así es. Son unas pequeñas vacaciones de cuidar niños.
-¡Vacaciones de esposos! Qué lindo hyung.
-C-Claro, el ahora esta comprándome algo de comer ‘saludable’ dice que debo de cuidar mi dieta.
-Así que comes chocolate…eso es malo. Por ahí veo una llantita saliendo de tu suéter…
-aiisssh, este niño, nada mas no te digo nada porque estamos en área poblada llena de niños-nótese que en la plaza solo estábamos nosotros y una pareja de ancianos alimentando a las ardillas.
-¡vieja!- un GO salía de una tienda con chocolate caliente en una mano, y en la otra un plato de ensalada.
-¡oh! Ya está aquí, debo de partir. Si te preguntan, nunca me viste…uuuuhhh~-comenzó a mover sus dedos de manera extraña (que me dio miedo) y corrió hacia GO, tropezándose con la cola de una ardilla en el camino, esta lo mordió.
-¡Ja!
-¿De qué te ríes?- hasta que mi novio dejo de engañarme con ese niño y vino a mi rescate de morir de aburrimiento. Escuchen esto, además de cerdo acuífero, pedófilo. ¿A dónde ha llegado la juventud surcoreana, señor?
-De ti, y de que un niño de 8 años me quita a mi novio. Está bien, sabes, no soy nada rencoroso y mucho menos violo niños como Michael Jackson.
-Hay, Key. Acepta que estas triste porque tu querida Kim Kardashian ya se divorció- En primera, está en proceso. En segunda, tengo hambre.
-Lo que digas, tengo hambre, ¿Me compras algo?
-Acabo de volver de serte infiel y tienes hambre. Supongo que es mi castigo. Regresaré enseguida- y se fue corriendo como el viento. (Bueno, más bien se fue corriendo como un mono por su banana pero viento suena más poético)
-Key….- un susurro. O es el panzón de Seungho o esta vez sí es un acosador sexual. Me giré y…
-Hongki hyung…
-Cuanto tiempo sin vernos ¿eh?
-Sí…em, ¿Qué no estaban en Japón?
-Sí, pero el sábado volvimos a corea, y Jaejin me hablo de este lugar que le dijo Mir. Así que, aquí estamos.
-¿Estamos? ¡Ha! Vienes con Jonghoon hyung, ¿Verdad?
-¿Con quién más?-HongKi sonrió. Saben, nunca estuve muy seguro de la clase de relación que tenían los padres de Seunghyun, sabía que se querían y de lo que hicieron aquella presentación…esta es una historia sobre mí. Luego les contare, amantes del chisme (¿)
Volviendo a MI historia…
-Ya veo…
-Keeeeeeeeey~
-¡oh! Creo que ya es hora de irme, gusto en verte Key- y se fue corriendo con una sonrisa-¡por cierto!- se giro de nuevo hacia mí, y grito a la distancia- Lindos suéteres de pareja~
Enserio, Lo mato.
Y desapareció entre los bosques.
-Te traje unas galletas, con eso de que las frituras te causan indigestión…
-no me causan indigestión-le arrebaté la bolsa de galletas- simplemente, tienen más caloría que una galleta.
-Eso no es lo que leí en internet.
-Internet siempre miente, mi querido novio-Abrí el empaque de galletas, y comencé a comer.
-aww, Key-puso su brazo alrededor de mi cuello, a continuación me dio un sonoro beso en la mejilla-vamos a casa.
-Si…- Nota mental: tratar de no sonrojarme cada vez que Mir se acerca más de lo que la ley prohíbe que dos hombres se acerquen. ‘Pero si esa ley ni siquiera existe’ cállate conciencia.
-awwwww, hahahaha.
-¿Con quien mensajeas, ahora? De nuevo con Woohyun ¿Cierto?-pregunto mi novio mientras ponía una taza de chocolate caliente sobre la mesa.
-Sí, es muy gracioso. Pero, claro, nadie es más tonto y gracioso que tu, Mir.
-Supongo que-se sentó a mi lado rodeándome con un brazo-eso fue un lindo alago viniendo de tu parte.
-¿Qué quieres decir? Yo si te alago. A mi manera, pero siempre te demuestro mis sentimientos hacia ti.
-Ya ves lo que dicen, ojos que no ven…
-zapatos que pisan mierda.
-aish, enserio, Kibum-empezó a reír. Mi cuerpo fue, poco a poco, rodeando el de él. Mir me abrazo contra su pecho mientras acariciaba mis cabellos. De esta manera, podría quedarme así por siempre…
‘Kiss Kiss Kiss’ sonó de nuevo.
Oh maldito universo yo que te había superado.
-No contestes…- Un Mir se aferraba a mi espalda.
-Si no lo cojo, la canción durara mucho.
De mala manera, Mir me zafó de sus brazos y se cruzo en ellos. Rápidamente, trate de leer el mensaje, pero, no podía ignorar la mirada de enojo del cerdo de mi lado.
-¿Te pasa algo?
-¿Qué me pasa? ¿Qué me pasa… ¡Ja!- ¿Y a este qué? Se está volviendo loco. Bien, Kibum, ya ha tratado con Jinki antes, es solo algo más.
-Estás loco…me das miedo.
-¿Por qué siempre con todos eres así? Siempre aceptas regalos ridículos de Jinki o de Jinwoon…
-Jinki es mi Lider, es como mi hermano mayor, y Jinwoon, es, Jinwoon. Es obvio que él me dará un regalo ridículo.
-Pero, ¡Yo soy tu novio! Cuando eras mi mejor amigo…
-¿Eras?
-Lo eres, pero sabes a que me refiero…
-no, no sé. Quiero que me expliques que quieres decir.
-¡es eso! Yo amo tu personalidad, Kibum. Como puedes ser tan distante y frio a veces y luego te vuelves cariñoso…, pero, nunca desprecias ningún regalo que no te guste de tus amigos. Pero conmigo, es como si te avergonzaras del simple hecho de ser novios. De que yo sea tu novio.
-No me avergüenzo. Nunca lo he hecho.
-Pues, pareciera que así es. Ese suéter, en verdad no te gusto.
‘Me encanto desde que lo vi, por el simple hecho de que tú me lo hallas dado’
Me hubiera gustado decir eso, pero como siempre, mi Diva interior sale a escena.
-Las rayas horizontales me hacen ver gordo.
-¡Lo ves! Odio que siempre saques esas palabras, deberías de ser mas, mas, romántico-¿Romántico? ¿Yo?
-¡Romántico! ¡Como mi canción!
-¡KIBUM! Ya basta. Deja de ser sarcástico, ¿Entiendes? Muchos me han dicho, que nuestra relación no durara. Y la verdad, yo no entendía por que lo decían. Pero ahora lo sé. No pareciera que tú me quisieras, Key. Es como si me usaras nada más, para… -¿Qué? ¿Qué? ¿QUEEEEEEE?
-¿Qué te uso? ¿Tienes idea de lo que acabas de decir?
-Yo no quise decir eso…es solo que…Kibum, perdón…yo no…aarrrrggg.
-Yo, nunca usaría a nadie-logre decir por lo bajo.
-Lo sé, no pensé en lo que decía perdón. Puedes golpearme.
-¿Qué te golpee? ¿Qué te golpee? Deformas mas tu horrible cara no cambiará nada. Si es lo que piensas, está bien.
-No lo pienso, solo quiero decir que…deberías de ser mas…como Jo…-callo.
-termina la frase.
Silencio.
-Termínala saco de rábanos. Que sea como Joon ¿He? Pues para tu información-comencé a sacarme el suéter de mala imitación de Gongchan con orejas de conejo, hasta quedar con una camiseta ligera de mangas largas blanca-Soy más femenino que él, tengo mejo gusto por la ropa, no tengo músculos-tomé mi celular.
-Key…-
-Tampoco tengo su perfecta cara angelical, pero sí, mi cara tiene mejo cutis. Soy más lindo, y adorable, pero sabes, ¿Qué tenemos en común?-caminé hacia la puerta y la abrí de golpe. Haciendo que un viento helado entrara a la cabaña y se me helaran mis delicados y finos huesos.
-¿Qué haces…?
-¡Te estoy preguntando qué, que tenemos en común! –tome las llaves del auto.
-Kibum, ya…
-¡TE ESTOY PREGUNTANDO!
-¡No sé! Dx
-Pues te diré, cabeza de cebolla, que, los dos fuimos unos idiotas en enamorarnos del mismo tonto- cerré la puerta, con un fuerte golpe. Juro que pude escuchar como las ventanas retumbaron del golpe, pero eso no importaba.
Ese tonto, había dudado de mí.
Justo cuando abrí la puerta del auto…
-No sabes conducir, Kibum-Mir apareció recargado en la puerta de la cabaña. En una mano llevaba aferrado con fuerza el suéter.
-Y-y a ti ¿Qué?
-Pues, que si subes, estrellaras mi auto, que me costó una fortuna.
-Ha, pues muy bien-abrí la puerta del auto y me introduje en el. Y esto se malpiensa…
Cerebro, trata de recodar como se encendía un auto. Piensa…piensa…
-No te acuerdas Key-¡Key! La llave. Sabía que mi cerebro se acordaría, tan irónico…- deja eso, o te mataras.
-Es mejor morir…-mis dedos en el volante se aferraron con fuerza, hasta tornarse blancos. Mir ya estaba parado sujetando la puerta abierta del auto.
-Kibum…-cállate y escucha pequeño animal.
-perdón…perdón-La Diva a muerto por ahora.- ¡Perdón! Entiendes…
Mis mejillas ardían.
-Perdón yo. No quería decir lo que dije-acarició mi cuello con su mano.
-Tal vez, debería ser como Joon. El era muy buen novio ¿Verdad?
-Kibum, eso ya no importa.
-¡Si importa! No…no quiero que pienses lo que pensaste. Yo te quiero. Mucho.
-Haha, Lo sé.
-¡No te rías! Hablo enserio, idiota.
-Lo sé.
-¿Qué eres un idiota?
-Eso también-su mano se apretó más a mi cuello. Sonreía.
-Vamos a la casa. Tengo frio y quiero mi suéter de vuelta-tome el suéter que el aun sujetaba en su mano. Al tocarlo…
-Key-me miro a los ojos.
-¿Ha?- ¿Se volvió loco de nuevo?
-Al diablo con la casa y el suéter.
-¿Qué…- Y en un segundo ya había cerrado la puerta del auto y se encontraba arriba de mi. Mi espalda estaba siendo golpeada por el freno de mano. Mir comenzaba a besar mi boca, mi mejilla, bajo por mi cuello….
En ese momento, debería de tener frio. Pero se sentía tan bien….en poco tiempo ya estaba completamente desnudo y ayudaba a Mir a quitarse su ropa.
Los dos suéteres (El de cachorro y el de conejo) estaban en los asientos de atrás, igual que todas las demás prendas.
Ya habían pasado aproximadamente un minuto, desde que, Mir entro en mi (Por así decirlo) mientras hacia los movimiento a causa de sus envestidas, mi espalda golpeo tan fuerte el freno de mano, que esta hizo que se moviera, hasta el punto de romperse. Cabe mencionar, que hace unos minutos Mir, sin querer, le dio la vuelta a la llave del carro.
Entre todo lo que pasaba, en mi, por muy vergonzoso que suene, jadeos-orgasmos…gritos (¿) sentí como si me estuviera acunando. Un movimiento que hacia que todo fuera más despacio y más placentero.
-Mir…- logre decir.
-¿Hmm?-se quejo. Ni que estuviera trabajando o algo por el estilo…bueno tal vez sí.
-Pues…-un movimiento adentro de mi…-aaaah…-que vergüenza.
-Habla de una vez. Ando trabajando.
-Pues…si dejaras de hacer…lo que quiera que me estás haciendo…
Y (lamentablemente) paro.
-Bien, ¿qué pasa?
-Nos estamos moviendo.
-Pues claro, no vez que introduje mi pe…
-¡Sí! Pero, algo más…
-¡El Carro!- Aquel Hámster de Mir, que permanecía dormido, se digno por correr.
Su mano, empezó a buscar atrás de mi espalda, hasta hallar, el freno…roto. Oh, mierda.
-Mir…
-Tranquilo, tranquilo, haber…-busco la llave… y ya no estaba. Pero el auto seguía avanzado.
-Mir…estamos…desnudos…en un auto que anda andando. ¡Andando! ¡Mir!
-Cálmate Key-me zarandeó por los hombros-Saldremos de aquí.
El auto ya iba colina abajo…
-Sí, pero, estamos desnudos, que pensara la gente… ¡AAAAAAHH! ¿Por qué no aguantaste tus ganas hasta llegar a la casa?
-Eso es una pregunta interesante…
-¡Mir! HAAAAAA-el camino seguía en curva, pero nuestro auto poseído iba derecho, cerca de un árbol….-moriremos. Mi vida no puede acabar aquí ¿Entiendes? Aun no me he casado…
-Aww ¿Eso es una preposición? Casémonos ahora, entonces-¿Piensa que estoy jugando? Y este niño con temas de casamiento…aunque no suena mal. No, en que estoy pensando, Dios…
El auto se acerco al tronco, al tronco….y paro. Quedamos justo a un centímetro de chocar contra él.
-Estamos vivos…
-Mi auto…
-Estamos vivos…
-Mi auto no tiene freno….
-¿Hasta ahora te das cuenta, animal?
-No quería hacer drama, hasta saber que tú habías acabado con los tuyos.
-aissh, sufre~ -abrí la puerta del auto para comprobar que estaba vivo y…Una anciana con un niño me miraban de arriba abajo. No comprendí a que se desvió que la anciana tapara los ojos del niño, hasta que un frio helado recorrió mi cuerpo, y comprendí, que estaba desnudo.
-abuela, ese hombre tiene rasguños en el cuerpo, y su pipilingui se ve raro…
-No lo mires a los ojos-la anciana huyo.
¿Porque esto solo me pasa a mi? Entre al auto de nuevo.
En lo que nos la vimos para ir de nuevo a la cabaña.
Al final, regresamos a Seúl con el 87 line. Seungho casi colgó a Mir de sus cosas por romper el auto. Y yo seguí tan tonto como siempre.