Sasuke contra el Rugby
Sábado por la mañana, algo nublado y frió, pero estaba… medianamente bonito, al menos para pasarla con mi rubio de ojos color cielo… -Oye Naruto… ¿estás libre hoy, verdad?- pregunté interesados, hace tiempo que no compartíamos un rato juntos, solos…
¿Qué quién es él? Pues simplificadamente podría decir que todo mi mundo… Uzumaki Naruto, la persona que más amo en este universo, ha estado junto a mí desde la secundaria, apoyándome en todo y desde entonces somos inseparables, por supuesto que tenemos peleas, como todas las parejas, pero como nos queremos tanto nada arruinará nuestra relación, ni siquiera ese estúpido deporte…
-Oh… no Sasuke, lo siento, tengo que entrenar…- respondió sonriéndose en forma de disculpa, rascándose la parte trasera de su cabeza.
-¡¿Otra vez?!...- Dije con desaprobación. No era posible que siempre me cambiara por su amado y queridísimo “Rugby”.
-Pues ya sabes… estamos cerca del mundial y tenemos que practicar muchísimo…- “siempre la misma escusa” pensé- ¿Sabes? me molesta mucho que siempre pongas a tu amado deporte antes que a mi- Sentándome en el sofá, cruzándome de brazos y piernas mientras el se arreglaba para irse-
Hasta que se lo dije… me importaba muy poco que pensara que estaba celoso… y es que ¿Cómo no estarlo?... En ese maldito deporte siempre se están tirando uno encima de otro, se manosean de pie a cabeza y para colmo mi niño SIEMPRE queda debajo de todo el montón, claro que sus “compañeros”, a los cuales detesto profundamente porque son unos acosadores de menores, siempre lo protegen pero… ¿De que me vale que ellos lo protejan de que no lo toquen a cambio de que ellos lo hagan? Es verdad que si no fuera por ese “simpático juego” yo no lo conocería, pero ese no es el punto, además ¿Por qué las duchas no tienen puertas? ¿Qué acaso tan necesario es que se vean? Y para colmo él es tan inocente… ¿Qué no se da cuenta que están apoyándolo? ¿Cómo alguien puede ser tan ingenuo?... Y con esos “compañeros” tan “cariñosos”, malditos condenados en lo que los vuelvo a cazar viéndolo como queriendo devorárselo ¡Los voy a matar a patadas!… Todos ellos son unos pervertidos, en especial ese tal Sai, ¡Como lo odio!, siempre tocando el trasero de MI sexy Naruto, atrevido, como osa siquiera rozarlo, ¡Ese traserito es MIO y sólo MIO!
De todos modos como que no es el único, ese otro… ¿Cómo es que se llama?... Mmmm… ¿Ay cuál era su nombre?... Rayos hasta olvide el nombre del degenerado ese…
-¿Sabes amor?... Neji quería hablar contigo, no sé de que, pero quería verte- Ah ya recordé como se llama el desgraciado ¬¬-
-Pues no iré a verle ¿para qué? Para que me diga “Sasuke comprendo que estas celoso de Naruto, pero no interrumpas sus prácticas y mucho menos los juegos con tus regaños y estupideces de hombre esclavizador”- le respondí haciendo una horrible imitación de él. “Neji” como él le dice, es el maldito capitán del equipo.
-Si tanto te molesta que te lo recuerde entonces deja de serlo- dijo haciendo ese gesto que me ha estado copiando últimamente, mirándome con superioridad y sonriendo de lado-
-Olvídalo, además te estoy cuidando, sólo tú no te das cuenta de lo pervertidos y aprovechadores que son esos desgraciados-
-¿Sabes que?... ya me cansaste- Tomando sus cosas para ir a practicar- ya me voy, te veo luego- abriendo la puerta-
-¡Un momento sexy rubio! ¡¿A dónde cree que va?! ¡Ni siquiera me has saludado!-
-Pues no te mereces ni eso, ya llego tarde, adiós Sasuke- Y se fue, dejándome con la palabra en la boca y el seño fruncido, ah pero me la va a pagar ¿Quién se cree que es para dejarme a media discusión?-
-¡¡¡Esta noche te haré de hule, ya veraz!!! ¡¡¡No vas a poder levantarte nunca más, sólo atrévete a regresar!!!- Grité a todo pulmón incluso después de haberse ido. Pronto oí tocar la puerta y luego abrirse. Genial, había olvidado algo, ahora me iba o oír- ¿Ahora si te vas a dignar escucharme?- dije mirando hacía la puerta sin notar que el que entraba no era Naruto sino alguien más…-
-¿Qué es eso que tengo que escuchar?- preguntó sonriente la “grata” visita.
-¿Ay, tú que haces aquí?- Mirándolo con enfado-
-¿Así me recibes? Eres un atrevido y un mal educado- dijo acercándose a mi- Dime… ¿Por qué estas de mal humor esta vez?- revolviéndome el cabello y sonriendo levemente. Como odiaba que hiciera eso… Lo miré aún más irritado y de un manotazo quité su mano de mi cabeza y me alejé unos centímetros de él-
-¿Y a ti que te importa? No es asunto tuyo, Itachi- Dándome la vuelta y dirigiéndome a la cocina-
-Pues no, si ni sé para que te pregunto total ya me imagino el porqué, con quién y a causa de que te embroncaste hoy-
-¡Y si ya lo sabes entonces hazme el favor y ya no me preguntes!- le grité girándome hacía él.
-Ay… pero que genio tienes hermanito… ¿sabes? Naruto me dijo algo el otro día que lo vi…-
-¿Qué te dijo?- Traté de sonar desinteresado mientras me volvía hacía la mesada y me disponía a cocinar-
-Dijo que ya no sabía si te amaba como antes, que estaba cansado de ti y que no soportaba tus celos y regaños, tú mal humor, tus estúpidas manías, el innecesario y obsesivo orden que le haces mantener, el hecho de que interfieras en su vida deportiva… etc. y etc… en otras palabras dice que lo asfixias y dijo que te dejaría en una semana si veía que no cambiaba la situación pero que antes quería pedirme un consejo además de querer que sea el primero en enterarme- Sentí un dolor muy grande en el pecho, como un puñal, me quede paralizado con la cuchilla en mi mano, con la cuál pretendía ponerme a cortar vegetales. Estaba dándole la espalda así que no podía verme. El aire se me hizo escaso y lágrimas comenzaron a salir involuntariamente de mis ojos casi sin notarlo-
-¿En… en serio… dijo e-eso?- logré decir con mucha dificultad, sentía que se me quebraba la voz. No podía simplemente cree aquello ¿Cómo que me iba a dejar? Bueno no se de que me sorprendo, era lógico, hasta yo mismo a veces me ponía a pensar lo mucho que tiene que soportar Naruto conmigo, en vez de ser una ayuda era otro peso para él, uno más en su larga lista. De hecho si yo estuviera en su lugar y él fuera yo, ya me habría dejado hace mucho, juro que no me soportaría a mi mismo, pero aún así no quería que me abandonara, no quería perderlo…-
-Siiii… ¿y sabes que más?... dijo que se acostaría conmigo porque yo si lo entiendo y puedo satisfacerlo con mi cuerpazo y mis ojos… y mi…- dijo acercándose a mi oído derecho, engrosando la voz, dándole un tono “sensual”- sexy voz…- supe en ese momento que, una vez mas, era parte de una de las “agradables” bromas de mi adorado hermano mayor. Me voltee, aún con la cuchilla y lo miré con tanto odio que creo hasta fuego salía de mis ojos-
-¡¡¡Ahora si ya te pasaste, desgraciado!!!- corriendo tras de él- ¡¡¡Vas a morir, lo juro!!!- corriendo alrededor del sofá de la sala-
-¡Ya Sasuke, era una broma! ¡Perdón, perdón!- Gritaba viendo con temor la cuchilla que le enseñaba con tanto “amor” en mi mano-
-¡¡Creo que me arrepentí, quiero carne en vez de vegetales!!-
-¡No Sasuke, por favor, los vegetales son más sanos!-
-¡¡¡Enserio Itachi, de esta no te salvas!!!- Seguía corriéndolo- ¡¡¡Para mi suerte y tú desgracia Naruto esta vez no está para salvarte el pellejo!!!- Y seguí tratando de alcanzarlo hasta que divisé la puerta de entrada abrirse y me detuve, quedando del lado del espaldar del sofá, mientras que en el lado de enfrente se encontraba Itachi-
-¿Oigan que son esos gritos? Se oyen desde…-Se cayó al observar la situación, yo con un cuchillo en la mano y bastante desaliñado y tal vez con un tic en el ojo y a Itachi agitado y jadeante por la corrida que le hice dar- ¡¿Sasuke qué estás haciendo?! ¡¿Te volviste loco o que?!- A que bien, ahora resulta que yo soy el loco…- Bueno como que muy normal nunca fuiste pero…- acotó innecesariamente.
-Cierra la boca… y… ¿qué no te habías ido tú?- Pregunté agitado también, después de todo yo también había corrido bastante-
-No me cambies de tema, en todo caso sólo te diré que se suspendieron las prácticas por mal clima-
-¡¡¡Naruto…!!! ¡¡Gracias a dios llegaste!!- Abrazándolo y escondiéndose tras de él- Tú desquiciado novio quería convertirme en su cena-
“Más bien en mi almuerzo” pensé- ¡Cierra la boca! ¡Tú aún no estas a salvo, ven aquí!- Grité y me lance sobre él-
-¡Ni sueñes que iré!- Escondiéndose y dando vueltas alrededor de Naruto- ¡Nos vemos luego, Naruto!- Y antes que pudiera alcanzarlo le dio un beso en la mejilla a mi novio y se fue cerrándome la puerta en la cara- ¡¡¡Desgraciado, ya vas a volver!!!-
-¿Y ahora por qué peleaban?- Preguntó confundido y algo desorientado-
-¡Qué te importa!- le grité y me fui al cuarto, cerrando la puerta con un golpe tan fuerte que del estruendor por poco hasta el edifico tiembla-
[Narrado por Naruto]
- “¿Y a este que le pasa?”- ¿Sasuke?... Sasuke responde… Oye lo siento, no debí haberme ido así… ya no lo volveré hacer… ¿si?... “¿Por qué siempre es la última vez que hago de todo?” ¿Sasuke?... ¡Ya Sasuke, ábreme la puerta!- comenzaba a desesperarme, odiaba cuando me regañaba por todo pero más detestaba que no me dirigiera la palabra- ¡Abre la puerta!- Y sin respuesta alguna…- ¡¡¡Sasuke ábreme la puerta o la tiraré abajo!!!- Comenzando a darle de puñetazos y de patadas. -¡¡¡Sasuke!!! ¡¡¡Bastardo!!! ¡¡¡No hagas esto!!!- Finalmente, al no conseguir mi objetivo, me resigné. La pobre puerta no tenía culpa de nada después de todo. -¡Bien has lo que quieras, pero después no me andes rogando perdón!… ¡¡¡Bastardo mal nacido!!!- y me fui al sofá a ver una película o algo que me distrajera-
[Fin de la narración de Naruto]
Estaba realmente molesto, ese estúpido Itachi se había pasado esta vez pero más estúpido era yo por creerle y encima luego se va y yo termino agarrándome con Naruto, si seré imbécil… Mejor como que me disculpo con él…
Me levante de la cama y me dirigí a la sala, y ahí estaba, en el sofá, recostado abrazando un balde de palomitas de maíz que quién sabe donde sacó, porque será muy deportista y todo, pero de cocinero no se la da, conozco como cocina y es horrible.
-Emmm… Naruto…- Hable fingiendo sumisión y arrepentimiento, bueno arrepentimiento no, pero lo otro… tal vez si- ¿Naruto?- No recibí respuesta, al parecer estaba evitándome o haciéndose el enojado. Decidí acercarme más. Quedé justo apoyado en el espaldar del sofá con mis manos sobre el mismo- ¿Naruto?- Inclinándome hacía delante, note que estaba profundamente dormido… “cuando no mi rubio dormilón”. Me acerque y acaricie su mejilla suavemente con mis dedos y luego acerqué mis labios a los suyos hasta acabar sobre ellos. Tomé su cara con una de mis mano y luego mordí, sin ser brusco, su labio inferior, provocando el despertar de mi bello durmiente-
-Sasuke… mmmh aaauuuhhh…- Bostezando y desperezándose con lentitud- Me quedé dormido…-
-Si ya lo note… -besándolo de nuevo- ¿Me perdonas?-
-No…- Enseriándose-
-¿Por qué no?- Haciendo un gracioso pucherito y, saltando por el espaldar, me senté sobre mis piernas apoyadas en el almohadón del sofá- ¿Aún sigues enojado conmigo?- Acercándome gatunamente hacia él, besando su cuello-
-Si… y mucho…-
-Peeerdóooon…- pedí mordiéndole el lóbulo de su oreja suavemente-
-Eso no funcionará…-
-¿Enserio?… mira que el gatito está hambriento…- recorriendo con mis labios la zona del cuello y la clavícula.
-Bueno, entonces el minino tendrá que esperar porque está castigado…- Me dijo empujándome levemente-
-¿Seguro?- Comenzando a bajar con mis labios por su pecho cubierto por la estúpida camiseta-
-Si…-
-¿Me lo juras?-
-Si… y además no estoy de humor…-
-¿Seguro, seguro?- Descendiendo con mi mano y acariciando desde su pecho hasta su abdomen-
-Ya… lo digo enserio, quítate…- Finalmente quitándome de encima y tirándome al piso-
-¡Hay mi espalda!- Me levanté con dificultad puesto que había caído sobre el bolso de Naruto “¿Qué rayos es lo que lleva ahí, piedras?” - ¡Bien!… me iré a cocinar…- Me hice el enojado y me fui-
[Narrado por Naruto]
“Eso para que aprendas” Pensé riéndome con superioridad… “Aunque… pobre… me da pena…” jugando nerviosamente con mis manos- ¡Ay no! ¡Mentira Sasuke, ven! >.<-
FIN!!…