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Una segunda oportunidad. por Shadaly91

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Notas del capitulo:

Bueno aquí traigo este pequeño one-shot para el día de San Valentín, se que fue ayer pero no pude publicarlo antes, estuve ocupada así que hoy aquí lo traigo para que lo disfruten.

La cursiva es usada en casi toda la historia al ser recuerdos.

No les entretengo más y que tengan una muy buena lectura.

Era un día especial para todo el mundo, las floristerías y tiendas estaban vendiendo productos en cantidades bastante considerables con respecto al resto del año, había decoraciones de Cupido por toda la calle, y la gente se veía feliz. Hoy era San Valentín, día de los enamorados, fiesta que era bastante conocida en casi todo el mundo y se celebraba siempre en pareja, las multitudes de personas salían a calle en pareja, pero entre toda esta multitud en la enorme calle principal de Tokio se distinguía a un joven bastante apuesto, de piel pálida como la nieve, pelo corto rebelde negro y ojos azabaches  con una mirada penetrante que intimidaría hasta a los hombres más violentos. Llevaba en la mano un enorme ramo de rosas rojas, las chicas solteras y comprometidas que pasaban por su lado se morían de envidia de la “afortunada” novia que tendría ese joven comiendo de su mano.

 

El joven se llamaba Sasuke Uchiha, de 23 años de edad un chico serio y solitario con un toque misterioso, lo que atraía a las mujeres y a algunos hombres, nadie que lo conocía sabía lo que su corazón guardaba…un secreto, el más hermoso de los secretos para él, que jamás le revelaría a nadie. Caminando llegó a su destino, el mismo lugar dónde iba cada año por esas fechas, la zona estaba vacía como siempre, entró cruzando la puerta andando lentamente hacia donde estaría “él” los recuerdos invadieron su mente, recuerdos de hace exactamente 10 años cuando solo era un niño…

 



Sasuke se encontraba en la cama de su habitación en la gran mansión Uchiha, llevaba ya varias semanas en reposo después de un enorme mal estar sufrido en una de sus clases y estaba harto, quería salir de ahí y volver a su vida rutinaria de siempre pero se lo tenían prohibido hasta que el doctor le diera el alta. Pronto sería San Valentín y después de varios meses planeando algo especial para la persona que más amaba esta repentina caída de salud le iba a fastidiar su plan. En verdad a él el día de San Valentín poco le importaba, pero había decidido que si tenía que confesar sus sentimientos lo haría ese día aunque se sintiese estúpido de seguir una moda publicitaria y tonta. La verdad era que estaba enamorado de su hermano mayor, lo único que le quedaba en esta vida de importancia para él, sus padres murieron en un accidente de coche hace 5 años, un golpe duro para un niño de 8 años, crecer la mejor etapa de su vida sin sus padres, pero al menor tenía a Itachi, él siempre estuvo a su lado y sanó sus heridas con el hermoso amor que creció por él desde entonces aunque últimamente no estaba en casa, se la pasaba de arriba para abajo con papeles en las manos y solo venía a verle en las noches con unas enorme ojeras que empeoraban con los días, mientras tanto su tía Uruchi, hermana de su padre lo estaba cuidando y aunque le tenía cariño, Sasuke siempre prefería ser cuidado por su hermano aunque eso no se pudiera dar del todo, sabía de la enorme responsabilidad que le cayó a Itachi con la muerte de sus padres, la empresa Uchiha lo reclamó por completo quitándole todo el tiempo que antes tenía libre para su hermano pequeño.


Al fin llegó la noche, Sasuke se sentó como pudo en la cama al oír el coche de su hermano llegar a la mansión, un dolor agudo en el pecho lo inundó, aún no se sentía recuperado del todo pero ya estaba harto de estar tumbado y quería hablar cara a cara con Itachi cuando llegara por lo que siguió esforzándose hasta que una voz lo detuvo.


-Sasuke no te levantes…aún te ves mal- Itachi, su hermano mayor entraba por la puerta con una sonrisa hermosa y acostó de nuevo a Sasuke en la cama.- No deberías forzarte o no saldrás de esa cama nunca.- acarició sus cabellos con cariño a lo que Sasuke se sonrojó levemente y su corazón empezó a palpitar fuertemente, esta era la clase de reacciones extrañas que Itachi le hacía sentir siempre con su simple presencia.


-¿Cómo has pasado el día? ¿Has tomado tus medicinas? – le preguntó Itachi a Sasuke una vez lo tapó bien con las frazadas de la cama para que no cogiera frío.


-Si, tía Uruchi me cuida muy bien…lo sabes hermano…solo deseo salir ya de esta mugre cama…-dijo Sasuke suspirando, Itachi lo miró era normal para un chico de su edad aburrirse ahí acostado cuando debería estar corriendo y saltando pero él bien sabía que eso era imposible para Sasuke en su estado actual.


-Si sigues las instrucciones del doctor en nada ya estarás saltando…tranquilo pequeño tonto, mientras tanto te he traído algo- Itachi sacó de su maletín de trabajo un libro bastante grande, de al menos 800 páginas.- Es el libro que querías para el trabajo del colegio, entretente un poco y lo lees así cuando regreses podrás hacer el examen.


-Si…-Sasuke miró a su hermano con pena, él lo que en verdad quería era pasar más tiempo con él, no leer un libro pero no podía decírselo directamente o sonaría algo extraño y podría delatarse antes de tiempo.


-¿Pasa algo Sasuke?- Itachi en verdad se preocupaba, esa mirada de Sasuke no le gustaba para nada… ¿acaso ya sospechaba algo...? no seguro que no, debían ser imaginaciones suyas.


-¿Por qué tengo que pasar tanto tiempo en cama? Ya estoy harto…quiero ir aunque sea en silla de ruedas al colegio, tantas horas en este sitio me disgusta ya a pesar de ser mi habitación.- Itachi comprendía pero no podía decirle nada, simplemente le mentiría como llevaba haciendo este tiempo, todo por ocultar la verdad que lo lastimaría más.


-Ya sabes que tienes un problema respiratorio Sasuke…y muy severo, debes estar en reposo un tiempo, tomar tus pastillas y comer sanamente, en poco tiempo…estarás bien ya lo verás…no dejaré que te pase nada…nunca…-Itachi tomó una mano de Sasuke y se la besó dulcemente con todo el amor que su corazón sentía hacia su pequeño hermano. Sasuke se sonrojó ante tal atención, en cierta parte le sorprendía, no es que Itachi no fuera cariñoso con él sino que en esta ocasión lo fuera más de lo habitual. Itachi fijó su vista en la de su hermano y este le volteó la cara, estaba rojo, sentía sus mejillas arder pero no quería que Itachi se diese cuenta. Itachi simplemente tomó entre sus manos el rostro de Sasuke y lo fue acercando al suyo.


-Itachi… ¿Qué…? –no pudo continuar hablando, los labios de Itachi se lo impedían…Itachi...SU Itachi lo estaba besando con una dulzura increíble, no pudo evitar corresponder ese gesto, sentía su corazón loco de alegría, amaba tanto a su hermano, no podía evitarlo lo amaba aunque a su corta edad supiera que eso estaba mal, porque ambos eran hombres y aparte de eso, hermanos, pero no le importaba, para Sasuke Uchiha su hermano mayor era su mundo entero. A los pocos minutos Itachi dejó de besarle y acarició su rostro con cariño, tenía tantas ganas de volver a besarlo pero no lo haría… ¡era su hermanito por dios! ¿Qué estaba haciendo? Se levantó y empezó a dirigirse a la salida no sin antes añadir.


-Descansa Sasuke...mañana nos vemos…-se giró regalándole una cálida sonrisa antes de cerrar la puerta dejando a un Sasuke rojo y feliz, su hermano lo amaba, lo había besado…eso significaba que lo amaba, estaba tan feliz definitivamente mañana le haría algo especial, una tarta o algún dulce que le gustase todo por su hermano mayor, aunque a Sasuke no le gustase los dulces estaba dispuesto a hacer uno para la persona que amaba. Le habría gustado confesarle lo que sentía pero ya se lo diría el día de San Valentín junto al pastel que estaba dispuesto a hacerle después de todo solo faltaban dos días; con esa felicidad Sasuke Uchiha pudo conciliar el sueño tranquilamente volviendo a soñar con el beso de su hermano.


A la mañana siguiente Sasuke despertó más feliz de lo habitual al saber que mañana sería San Valentín, pudo ponerse sentado en la cama sin notar molestias, seguramente se encontraba mejor, miró el reloj, eran las 5 de la mañana lo que supuso que Itachi y su tía estarían durmiendo aún, eso le daba una ventaja de dos horas cómo máximo para ir a hacer el pastel rápido y que nadie supiera y fuera una sorpresa.


Se levantó con cuidado sin hacer apenas ruido, le costó bastante caminar después de varias semanas en la cama pero aun así logró cambiarse de ropa sin ningún problema y salió de la habitación, mientras iba caminando por el pasillo empezó a sentir una pequeña molestia en su pecho, la ignoró completamente siguió caminando hasta llegar a las escaleras, las fue bajando lentamente y fue cuando el dolor le dio más fuerte, no lo soportaba más era tan intenso, fue cayendo escaleras abajo, pero ni los golpes que se daba contra las escaleras eran nada comparado con el martirio que el pequeño Sasuke sentía en el pecho. Ya no veía, no sentía nada…lo único que escuchó fue la voz de su hermano gritando de lejos su nombre y unos brazos rodeando su cuerpo.


-I…ta...chi…- lo demás se volvió oscuridad completa.

 



 Abrió los ojos lentamente, los sentía tan pesados… ¿Dónde estaba? Fue la primera pregunta que se hizo al ver que se encontraba sobre una cama  dentro de una habitación pequeña con las paredes blancas… y él, con varios cables por el cuerpo ¿Un hospital? Es lo primero que se le pasó por la cabeza, fue girando la cabeza lentamente y vio a su tía Uruchi a su lado durmiendo sobre un sillón, se le notaba ojerosa, como si hubiera estado llorando durante largas horas. Quiso hablar pero no podía, le faltaba el habla… ¿Qué había pasado? Empezó a recordar vagamente el dolor en su pecho, la caída por las escaleras, Itachi gritando su nombre…Itachi… ¿dónde estaría él que no estaba a su lado? Hizo todo amago de sus fuerzas y habló de forma baja.


-Tía…tía…despierta…-Uruchi se despertó al instante de oír la voz de su sobrino llamándola, abrió los ojos como platos e inmediatamente se despertó.


-Sasuke…tesoro…espera no hables llamaré al doctor...es un milagro….- salió corriendo dejándolo solo con su duda. Sentía el cuerpo pesado, como dormido, pero esperó despierto al doctor. Cuando su tía llegó con el doctor este pareció alegrarse bastante de que Sasuke hubiera despertado, empezaron a hacerle preguntas de cómo se encontraba a las cuales Sasuke respondía lentamente mientras era atendido por varias enfermeras, aunque le era dificultoso hablar. Cuando el doctor y las enfermeras se fueron dejando a Uruchi solo con Sasuke le preguntó.


-Tía… ¿Dónde está Itachi? ¿Qué me pasó?-Uruchi se puso blanca al instante pero hizo el amago de una sonrisa que no le pasó desapercibida a Sasuke a pesar de su estado.


-Itachi está de viaje…me dijo que no sabría cuando volvería pero que me ocupara de ti el tiempo que él se ausentara.-dijo directamente como si esas palabras se las hubiese aprendido de memoria- Y sobre lo que te pasó…te caíste por las escaleras y han tenido que operarte pero tranquilo todo salió bien, no te preocupes por nada y duerme.-Sasuke no quedó muy convencido pero asintió volviéndose a dormir con la esperanza de que cuando despertara pudiera ver a Itachi a su lado cuidándolo.


Pasaron varias semanas, Sasuke notó una gran recuperación en su cuerpo, ya no había molestias ni se sentía cansado pero aun así estaba mal emocionalmente, Itachi no había ido a verlo ni una sola vez a comparación de otros familiares, sus tíos Madara e Izuna fueron a verlo en múltiples ocasiones a pesar de estar muy ocupados, así como primos suyos lejanos como Shisui, sin embargo él no era estúpido y aunque los notaba contentos de verlo bien, tenían un deje de tristeza en su mirada que no pasaba desapercibida para Sasuke.


La mañana antes de que volviera a casa preguntó si sería Itachi quién lo llevaría, más su tía negó diciéndole que sería Madara quien lo llevaría a casa y que Itachi se encontraría seguramente en su habitación trabajando. “¿Más importante es el trabajo que yo?”  Le dijo a su tía con deje de molestia, definitivamente lo mataría cuando lo tuviera delante “Un día me besas y al siguiente me botas…” es lo que pensaba decirle cuando lo viera frente a él.


Cuando Madara estacionó el coche frente la enorme mansión Sasuke no esperó más y salió corriendo escaleras arriba mientras su tía le gritaba desde abajo cosas a las que no prestó atención, Uruchi quiso seguirlo pero Madara le puso una mano en el hombro negando con la cabeza, diciéndole que lo dejara ir tranquilo.


Sasuke llegó frente a la habitación de su hermano y abrió de un portazo gritando fuertemente.


-¡Itachi! ¿¡Por qué no has venido a verme!? ¿De verdad es más importante el trabajo que tu propio hermano?- más Sasuke no recibió respuesta alguna, Itachi no estaba en su habitación, es extraño…su tía le dijo que se encontraba ahí, echó un vistazo a la habitación, la cama y las cosas perfectamente ordenadas como si nadie hubiera pisado el lugar por semanas…¿Qué estaba pasando?


Fue cuando se fijó que encima de la cama había una carta con su nombre “Para Sasuke”. Sasuke la cogió observándola, definitivamente esa carta estaba escrita con la letra de su hermano. Se sentó encima de la cama y comenzó a leerla.


“Sasuke, me habría gustado tanto poder decirte todo esto en persona, pero nunca me he atrevido a hacerlo, ahora solo este papel y esta pluma con la que escribo serán tu respuesta. Quiero que sepas que todo esto te fue ocultado para no hacerte sufrir más de lo que ya sufrías por la muerte de nuestros padres, yo siempre quise llenar ese vacío con mi amor de hermano pero sé que nunca pude llenarlo con mis numerosas ausencias a causa del trabajo. Ahora préstame atención, te contaré toda la verdad, mi verdad y la tuya, que desde tu nacimiento te fue ocultada.

A mis 8 años tu llegada a mi vida fue como una bendición, estaba tan feliz de poder tener un hermanito aún me acuerdo de las numerosas veces que me dormía sobre el vientre de nuestra madre únicamente para poder sentir tus lindas pataditas y movimientos, pasaban los meses y yo solo deseaba que salieras ya del vientre de mamá para poder tenerte entre mis brazos y abrazarte. Al parecer en el parto hubo un problema, a mamá se le adelantó antes de tiempo, a causa de la poca formación de algunas de tus órganos internos lo que más sufrió daños fue tu corazón, estuviste varias semanas en el hospital, entre la vida y la muerte metido en una incubadora. Yo te visitaba todos los días después de mis clases rezando porque no te pasara nada y las enfermeras solían decirme que notaban una mejoría en ti cuando notabas mi presencia. Me sentía tan feliz de saber eso y simplemente a causa de los numerosos esfuerzos de la gente que te atendía y un milagro lograste salir adelante, lograron salvarte pero advirtieron a nuestros padres que tu enfermedad seguiría dentro de ti y con el paso de los años sucumbirías a ella bastante joven. Por eso nuestros padres nunca te dejaron tantas libertades, por eso te controlaban la comida y te daban pastillas para el control de tu enfermedad, queriendo mantenerla controlada mientras crecías.

Pero todo empeoró cuando murieron nuestros padres…tantas angustias para tu pequeño corazón solo te hicieron daño y en unos meses empeoraste lo que se pudo evitar en años. Con el paso del tiempo esta te fue empeorando, entre la tía y yo te mentimos diciéndote que esos mareos y dolores eran a causa de un problema respiratorio y una mala alimentación más sin embargo la razón era tu corazón, fue empeorando hasta el fatídico día 13 de Febrero, sucumbiste por completo, ya tu corazón no aguantaría más que unos días como mucho bajo la U.C.I. ya no había ningún tipo de remedio para tu salvación salvo una…un trasplante de corazón. Un corazón… ¿de dónde saco yo un corazón? Más la respuesta me fue fácil…mi corazón Sasuke, este corazón que palpita con fuerza ahora dentro de mí mientras estoy escribiendo es mi regalo para ti hoy día de San Valentín, te regalo mi corazón, te doy mi vida entera para que tú hagas con ella lo que quieras, te ofrezco esta segunda oportunidad de poder vivir, después de todo este corazón siempre fue tuyo desde la primera vez que te tuve entre mis brazos. Quiero que me prometas que no harás ninguna locura, por favor…nunca te rindas, que por mucho dolor que sientas seguirás adelante y escogerás el camino correcto como nuestros padres y yo sabemos que harás. Quiero que sepas que estoy muy orgulloso de ti y del buen hombre que serás en un futuro próximo. Te amo Sasuke, no olvides que no estás solo, yo siempre estaré unido a ti a través de mi corazón para así deberte todo el tiempo anterior que no pude estar contigo.

Siempre tuyo, Itachi.”


La carta se mojó con las lágrimas de Sasuke, tocó su pecho, notaba su corazón palpitar, ¿su corazón? No…era el corazón de Itachi, ahora lo entendía todo, las numerosas ausencias de su hermano, sus cuidados, las mentiras, las visitas tan tristes que recibía en el hospital... ¿cómo dejaron que Itachi hiciera eso? Morir Itachi a cambio de que él viviera, sacrificar su vida por la persona que más amaba, eso era un gran sacrificio por amor, el mejor regalo que pudo recibir Sasuke el día de San Valentín.


-Itachi…Itachi…te amo…te amo hermano…-Sasuke se dejó caer en la cama llorando teniendo presente estas palabras…”No estás solo, yo siempre estaré único a ti a través de mi corazón” apretó sus puños contra su propio pecho, lo sentía…Itachi estaba con él, ya nunca se sentiría solo.



 

Dejó las flores frente a su lápida donde rezaba su muerte el catorce de Febrero, unas gruesas lágrimas rodaron por sus mejillas cómo cada año que iba a visitarlo, al ser que más amaba, su hermano Itachi. Sasuke en todos esos años había vivido como le prometió a su hermano, estudiaba medicina con la esperanza de ser médico y así ayudar a los demás, todo por su hermano. La empresa Uchiha quedó en manos de los hermanos varones de su padre Madara e Izuna, ellos se encargaban perfectamente y le mandaban a Sasuke una cuota mensual para que pudiera pagarse sus estudios. Apretó su pecho en la zona dónde estaba el corazón palpitante de Itachi, de repente sintió una suave brisa rodearle el cuerpo, el había jurado que era el tacto cálido de los brazos de su hermano rodeándole por detrás el cuerpo dándole las gracias, por el simple hecho de estar vivo y no dejarse morir en su desesperación.

 

-Feliz San Valentín…Itachi.

Notas finales:

Espero que les haya gustado, yo personalmente quise hacer un trabajo impecable pero no sé lo que ustedes opinen. Solamente gracias por leer y  sus reviews serán siempre bien recibidos.


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