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Ya no estás solo por Yukikaze

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Notas del fanfic:

Un corto One-Shot que se me ocurrió leyendo un Doujinshi

Notas del capitulo:

Espero que les guste y que lo disfruten

Durante un típico festival de un 10 de octubre sucedió, Naruto se encontraba en lo más profundo del bosque abrazando sus piernas mientras oía la turba de aldeanos buscándole, él ya había cumplido sus 12 años y los aldeanos se habían calmado, pero cuando llegaba el 10 de octubre no podían evitarlo, el dolor afloraba en sus corazones dando como resultado venganza, venganza contra el zorro…contra Naruto

Naruto evitaba a toda costa hacerle daño a los aldeanos, primero porque lo tenía prohibido y segundo porque después de hacerlo no sería capaz de seguir viviendo…no sabiendo que golpeo a alguien inocente que solo se dejó llevar por la rabia y el rencor, no podría hacerlo

La turba se oía cada vez más cerca, las lágrimas comenzaron a caer de sus bellos ojos azules recordando las noches solo durante su niñez, cuando los aldeanos llegaban con toda clase de cosas para pegarle, desde palos de madera hasta cuchillos de cocina y Kunais profesionales a  golpearlo hasta dejarlo al borde de la muerte, su cuerpo empezó a temblar recordando los eventos pasados, una luz comenzó a vislumbrarse en el bosque signo inequívoco de que la turba llegaría en unos instantes

-AHÍ ESTA-Gritó el primer aldeano apareciendo desde detrás de unos arbustos, Naruto se tenso, las lágrimas dejaron de caer y el primer golpe llegó, el rubio ojiazul cerró sus ojos y se dejo ir, poco a poco dejo de sentir, ya no sentía nada…absolutamente nada, la sangre roja y espesa comenzó a derramarse de las heridas leves y profundas que habían provocado los aldeanos

-MUERE, MADLITO ZORRO-gritó un hombre alzando un cuchillo de cocina, en ese momento Naruto abrió sus ojos tan azules como el océano y tan espesos como el cielo y esquivó el cuchillo recibiendo un rasguño, los aldeanos cansados de tanto golpe recobraron sus fuerzas al verlo moverse y alzaron sus armas, Naruto no pudiendo soportar más comenzó a correr todo lo rápido que podía por el profundo bosque intentando fundirse con él y perderse, pero hoy no tendría esa suerte, después de correr durante largos minutos llegó nuevamente a la aldea.

El festival estaba en su apogeo y los fuegos artificiales adornaban el cielo oscuro y despejado de estrellas, Naruto no se detuvo a admirarlo, siguió corriendo desesperadamente, sus ropas rasgadas ondeaban con el viento que arrancaba pedazos de esta, la sangre goteaba en el suelo dejando un rastro de la presa que los aldeanos perseguían, ya no pudiendo más Naruto se recostó contra una pared de un callejón oscuro y no queriendo detenerse comenzó a arrastrarse por esta manchándola de sangre, cuando la pared llegó a su fin Naruto siguió caminando, dando pasos cortos que dejaban un rastro de sangre, su respiración era lenta, estaba perdiendo, esta vez quizá…solo quizá su dolor terminaría para siempre

-Na…ruto-el nombrado alzó la cabeza con un gesto de dolor y no pudiendo más se dejo caer sobre los brazos de aquel desconocido

-Sasu…ke-o no tan desconocido, una vez dicho esto Naruto perdió la consciencia

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Sasuke iba caminando por las oscuras calles de la aldea, a decir verdad odiaba los festivales ya que esto le recordaba a su familia…a su hermano, además de que cada 10 de Octubre una turba de locas se le tiraba encima insinuándosele y él no era capaz de soportarlo ¿es que no tenían vergüenza? Sasuke estaba seguro de que no, ellas serían capases de abrirle las piernas a cualquiera

Los instintos de Sasuke se pusieron en alerta cuando sintió un ruido…como si algo o alguien se estuviera arrastrando, alzó su rostro con una mano sobre su estuche de armas y su respiración se cortó, ese era…

-Na…ruto-pronuncio casi sin aire, ese no podía ser aquel rubio hiperactivo y cabeza-hueca, Naruto alzó su rostro y Sasuke pudo sentir sus penetrantes ojos azules sobre él

-Sasu…ke-pronuncio el rubio cayendo en sus brazos, Sasuke lo atrapo justo a tiempo y enseguida sintió la sangre sobre sus manos, ese liquido vital tan frío y caliente a la vez, sin pensárselo dos veces cargo a Naruto en sus brazos estilo princesa y corrió lo más rápido que pudo a casa ya que los hospitales estaban cerrados debido al festival

Recostó a Naruto sobre su cama y observo sus heridas, tenía magulladuras por todo el cuerpo, la sangre no dejaba ver su tono de piel y había varias heridas que eran bastante profundas, Sasuke no sabía quién le había hecho eso a Naruto, pero sentía unas ganas inmensas de asesinarlo ¿Quién había sido capaz de tocar a SU Naruto? Porque si Naruto era suyo, su rival, su primer amigo, su primer beso, su persona especial y él consideraba que Naruto era la única persona que realmente le había llegado, sobre todo después de aquella misión en el país de la Ola

Sasuke dejó sus pensamientos para después y comenzó a arrancarle los pedazos de ropa que todavía conservaba sobre su cuerpo, un leve sonrojo apareció en sus mejillas al ver al rubio como dios le trajo al mundo, pero desapareció cuando vio aquella herida en su pecho, justo a un lado de su corazón que sangraba sin descanso, se apresuró a ponerle un trozo de tela encima para intentar parar la hemorragia, pero por más que lo intentaba la sangre no paraba su flujo ni mostraba signos de hacerlo

-Vamos Naruto-susurro Sasuke aguantando el trapo llenó de sangre al igual que sus pálidas manos, el rubio no podía morir, no podía dejarlo solo, no podía perder a nadie más, no lo soportaría, no sería capaz de seguir viviendo…no solo

En ese momento la sangre paro tan rápido como había estado fluyendo, las heridas comenzaron a emanar un humo blanco y posteriormente se cerraron casi por completo, Sasuke suspiro aliviado y algo extrañado, no conocía a nadie con una habilidad así

Los ojos del rubio comenzaron a abrirse poco a poco mostrando a cada paso el color azul intenso de estos, Sasuke observo sin moverse un solo musculo, Naruto se llevó una mano a la frente suspirando

-Este año casi me matan-susurro sin percatarse de la presencia de Sasuke que comenzó a emanar una extraña aura negra “¿Este año?” se preguntó mentalmente el moreno

-Naruto-el rubio se giro al instante y deseo no hacerlo, allí frente a él se encontraba Sasuke, sus puños estaban cerrados y su cara demostraba una clara molestia, seguro que por su presencia en la casa de este, pensó Naruto tristemente, por mucho que se esforzara el rubio no conseguía formar verdaderos lazos de amistad y eso le dolía, dolía tanto estar solo

-Sasuke…yo, lo siento-se apresuro a decir levantándose bruscamente provocándole un mareo que le obligo a volver a recostar-…solo un momento y me iré…no te molestaré más…-susurro el rubio con una mano sobre sus ojos y frente, Sasuke tomo la muñeca de Naruto y retiro la mano del rostro del rubio mirándole fijamente

-¿Quién…?-fue todo lo que su ira le dejo pronunciar

-¿Quién qué?-preguntó el rubio extrañado por la actitud de Sasuke

-¿Quién te ha hecho esto…?- Naruto tenso sus hombros y aparto el rostro colocando su mano cerca de la mejilla que había quedado recostada sobre la cama

-Nadie…-dijo en un susurro, Sasuke comenzaba a sentir una furia mucho más intensa, no sabía porque, pero le molestaba…le molestaba no poder vengarse porque después de todo el era un Uchiha y los Uchiha eran vengadores, tomo el rostro del rubio y le obligo a mirarlo directamente a los ojos, esos ojos tan azules que lo volvían loco, el rostro de Naruto adquirió un leve color rojo en sus mejillas e intento apartar la mirada, no quería ver aquellos ojos negros que tanto lo cautivaban, si los veía, él no sería capaz de mentirle porque después de todo Sasuke era el único lazo real que poseía

-Naruto-exiguo Sasuke sin dejar que el rubio apartara la mirada, el rubio entrecerró los ojos y tomó aire

-¿Sasuke tú…sería capaz de…odiarme?-preguntó tartamudeando, la voz le temblaba con solo pensarlo, que Sasuke lo odiara era el fin del mundo para él

-Naruto…qué

-RESPONDE, ¿SERÍAS CAPAZ DE ODIARME?-gritó el rubio observando los ojos de Sasuke directamente, ver aquella indecisión en aquellos ojos provoco que un par de lágrimas se deslizarán por sus mejillas, ¿Por qué estaba llorando?, Sasuke sabía que jamás sería capaz de odiarlo y no entendía el porqué de la pregunta, era por eso que se había quedado pensando, su rostro frío e inexpresivo se desmorono al ver aquellas lágrimas en el rostro de su rubia obsesión (porque ya era una obsesión), con una delicadeza extrema tomó el rostro de Naruto entre sus manos

-Yo jamás…jamás sería capaz de odiarte-respondió sinceramente, Naruto alzo su rostro y mirando aquellos ojos pudo comprobar la veracidad de la respuesta de Sasuke

-Yo…soy un monstruo-dijo el rubio con la mirada perdida, no quería ver esos ojos, no ahora- el zorro de 9 colas reside en mi interior, por esta razón cada 10 de Octubre los aldeanos recuerdan a sus familiares y llevados por el odio y el dolor se ensanchan conmigo, creo que se pasaron esta vez…lo único que lamento es no haber muerto, pero supongo que ni siquiera eso le puede conceder Kami-sama a un monstruo como yo- Sasuke dejó caer el rostro del rubio y bajo la cabeza apretando los puños hasta casi desgarrarse la piel con sus uñas… Así que era por eso, por eso los aldeanos lo miraban con odio…por eso lo trataban de esa manera, pero ¿Qué culpa tenía él? ¿Que culpa tenía Naruto?

El rubio observo la reacción del moreno y las lágrimas volvieron a brotar de sus ojos, ese era el fin, el fin de su lazo…Sasuke lo odiaría, volvería a estar…solo, el rubio se levantó de la cama y se dispuso a correr, pero una fuerte mano apretando su muñeca se lo impidió, giro su rostro para ver qué era lo que pasaba, pero no pudo hacer nada más ya que aquella fuerte y pálida mano tiró de él hasta apretujarlo contra el cuerpo de su dueño, las lágrimas continuaron cayendo sin control desde sus ojos azules desahogándose al fin de todo el dolor que llevaba dentro

-Tu…nunca estarás solo-susurro Sasuke en el oído de Naruto, oyendo esta frase Naruto cerró sus ojos y se durmió en los brazos del moreno con una tranquilidad que nunca había sentido, ahora si estaba seguro de que Sasuke era su único lazo importante y de que no estaría solo…ya no.

 

Notas finales:

espero que lo hayan disfrutado


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