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Aburridos por Ciel_Kuroshitsuji

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Notas del fanfic:

Los personajes no son míos sino de Yana Toboso!! :D 

Disfrútenlo 

 

Un día como cualquier otro en la residencia de los Trancy, estaba la pareja de amantes Alois y Claude aburridos sin algo qué hacer, hace poco habían terminado de grabar la segunda temporada de Kuroshitsuji y ya no hallaban cómo entretenerse. Poco antes de terminar de grabar Alois le confesó sus sentimientos a Claude, quien lo aceptó y correspondió.

 

- Oi, Claude!! Estoy aburrido!!- Decía Alois mientras se sentaba a lado del mayor en el sofá.

- Mph... - Claude como siempre tan callado, prefirió ignorar las palabras de su niño y seguir en su celular.

- Claude!!! - Gritó el rubio exasperado.

- Ya te oí, deja de gritar.

- Pero... Es que... No me prestas atención, me estás ignorando!!! - Seguía con su berrinche el menor.

- Ya cálmate! - Gritó Claude haciendo que el pequeño se callara y se sentara en silencio.

- ... - Alois se levantó y se dirigió a su habitación. 

 

Después de un rato de no escuchar ruido en la casa, Claude se preocupó, ya que eso no era normal en el niño. Fue directo a la habitación de Alois y lo que vio  lo enterneció. Alois estaba dormido en su cama abrazando un peluche de Claude que le regaló la compañía de TV al finalizar Kuroshitsuji II, además tenía rastros de lágrimas en sus ojos y mejillas.

 

Claude se acercó a él y besó su frente.

 

- Alois... - Lo llamó para que despertara.

- Mmm... - El pequeño se removió frotándose los ojos mientras poco a poco los abría.

- Te quedaste dormido. 

- Mm... Sí... - No tenía ganas de hablar con Claude, estaba enfadadó con él por haberle ignorado y luego gritarle. -Bueno, saldré a buscar algo qué hacer. - Salió casi corriendo de la habitación y por poco se cae de las escaleras, si no fuera por Claude que lo siguió de cerca y lo tomó entre sus brazos antes de que cayera.

- Uwaaaah!!! - Gritó Alois aterrorizado porque casi cae.

- Bakaaaa!!!! ¡¿¿¿Qué no puedes ser más cuidadoso???! - Le gritaba Claude espantándolo aún más.

- Lo... Lo siento... - Decía susurrando el rubio mientras lloraba y temblaba.

- ¡¡¿Qué hubiera pasado si caes?!! - Seguía gritando, pero no por regañarlo, sino porque temió que pudiera lastimarse o que le pasara algo peor. Pero dejó de regañarlo cuando notó que lloraba.

- Yo... yo... - Alois no sabía qué decir, Claude jamás le había reprendido de esa forma.

 

Claude se arrepintió y lo abrazó con fuerza agachándose a la altura de Alois.

 

- Perdón... Perdóname, no debí gritarte... Lo hice porque temí que te pasara algo malo. - Lo seguía abrazando y luego se alejó un poco de él para darle un tierno beso en los labios. 

- Yo... Lo lamento, fue mi culpa por tratar de huir.

- Pero, ¿Por qué huías? 

- Porque estaba molesto contigo por ignorarme y luego gritarme, pero... fue una tontería porque yo estaba haciendo berrinche y te desesperé. - Decía Alois con la cabeza hacia abajo.

- Bien, ya no hay que estar enojados. - Le dijo y luego sonrió, una muy extraña acción en Claude.

 

Se alzó completamente y tomó la mano de Alois para bajar las escaleras.

 

- Claude, aún estoy aburrido. - Exclamó sin hacer tanto alarde. 

- Mmm... Y ¿qué quieres hacer?

- No lo sé, ¿Tú qué quieres hacer?

- Estar con mi pequeño novio berrinchudo y caprichoso es muy entretenido para mí. - Mencionó con burla en sus palabras haciendo que su amante se sonrojara e hiciera un puchero muy tierno a su parecer.

- Para mí, estar con mi novio arrogante y mudo no es muy entretenido, ya que siempre me ignora. 

 

Claude sólo esbozó una sonrisa burlona y siguieron su camino hacia la sala. 

 

- Claude... Tengo calor, iré a cambiarme de ropa por algo más ligero.

- Mmm... Claro. - De nuevo tan callado.

 

Alois fue a su cuarto y buscó entre su closét ropa ligera. Encontró un short verde con las orillas amarillas, una sudadera morada y unas calcetas largas de rayas amarillas y rosas. Se cambió rápidamente para seguir con Claude.

Claude se le quedó mirando mientras bajaba los últimos escalones y se acercaba a él. 

 

- ¿Qué tal me veo, eh? - Preguntaba mientras daba una vuelta y reía.

- Bien. - Dijó escuetamente Claude, pero en el fondo estaba babeando.

 

No podía demostrar lo que en realidad pensaba, ya que si lo hacía no se controlaría y haría suyo al pequeño ahí mismo. Aún no habían tenido sexo en los 2 meses que llevaban saliendo, pero Claude no quería presionar a Alois ya que éste era virgen aún y no quería lastimarlo. 

 

- Claude, no seas malo, siquiera observame. - Espetó haciéndo su típico tierno puchero.

- Ya te vi, te ves muy bien. ¿Contento?.

- Mphm... No, pero ya qué. Jugaré PSP, ¿podrías pasarmelo? 

- Toma. - Le llamó mientras le acercaba el juego. 

- Gracias, Claude. - Tomó el juego y le besó la mejilla a su amado haciendo que éste lo volteara a ver. -Jah... Logré que volteras a verme. Ahora dime ¿Cómo me veo?. - Dijo parándose en el sillón y modelando para Claude, pero dio un paso en falso y calló sobre las piernas del pelinegro. 

- Waah... Lo siento Claude.

 

Claude no pudo contenerse y lo besó, un beso apasionado pero tierno, que pronto fue subiendo de tono. Claude comenzaba a pasear sus manos por las piernas de Alois, en tanto éste soltaba pequeños suspiros dentro del beso. 

Se separaron poco antes de quedarse sin aire, pero al instante volvieron a unir sus labios, sus bocas completas. La lengua de Claude se paseaba en la boca del pequeño, sintiendo su lengua algo tímida, sabía que su niño era algo tímido a la hora de comenzar con besos llenos de lujuria y pasión, después de todo aún era virgen. 

 

- Claude... Ahh... - Comenzaba a gemir por las caricias del chico de lentes sobre su cuerpo. 

- Tranquilo pequeño, no haré nada que tú no quieras. 

 

Claude comenzó a bajar el cierre de la sudadera y fue cuando se dio cuenta de que su pqueño niño no llevaba nada debajo de ella, rozaba su pecho con sus manos como todo un experto en la materia. Poco a poco bajaban sus manos a los muslos del ojiazul, haciéndolo estremecer y temblar. Acariciaba cada parte de su cuerpo con delicadeza, pero sin dejar la lujuria de lado. Sin darse cuenta, Claude iba desvistiendo al niño de a poco, ya le había quitado la sudadera y seguía con el short. 

 

- Ahh... Claude... espera. - Lo detenía Alois que comenzaba a ponerse nervioso.

- Calma, ya dije que no haré algo que tú no desees. - Dejó de tocarlo y lo abrazó fuertemente, transmitiéndole confianza y seguridad.

- Claude...

- Dime.

- Quiero continuar... con esto.

- ¿Estás seguro? Recuerda que me detendré si lo quieres.

- Seguro

- Bien. - Claude siguió con lo que había dejado hace poco.

 

Besaba a su pequeño mientras seguía acariciándolo, estaba esperando a que estuviera un poco más confiado para no hacerlo a la fuerza. 

Se quitó su playera y la aventó al suelo, dándole una muy excitante vista a Alois con su torso y pecho descubiertos. Se marcaban sus músculos, pero sin exagerar. Alois comenzó a gemir al sentir la mano de su novio masajeando su pezón derecho, haciendo que se pusiera erecto. Hizo lo mismo con el otro, y con la boca seguía atendiendo al derecho y luego cambio posiciones, la boca en el izquierdo y su mano en el derecho.

Alois estaba que no podía aguantar más, gemía, dejaba que todos sus gemidos salieran, no quería ni podía contenerse.

Claude le quitó su pequeño short y lo arrojó al piso de la misma forma que había hecho con su playera.

 

- Ahh... Claude!! 

 

El mayor de pronto bajo a la altura del pene del pequeño y le quitó sus boxers, dejando al aire libre su miembro ya algo erecto. Claude sonrió de una manera pervertida y comenzó a masturbar a Alois con su mano mientras lo besaba. Rápidamente dejo de hacerlo e inició con su boca a chupar la punta del miembro ya completamente excitado de Alois. El rubio se sorprendió al sentir la lengua del chico de lentes sobre su pene, pero sólo se dedicaba a gemir y a arquear su espalda a consecuencia de la excitación que sentía en ese preciso momento.

Claude se metió por completo el miembro de su novio a la boca y comenzó a moverse de arriba a abajo, sacando y metiendo de nuevo. El niño no podía más, estaba a punto de correrse.

 

- Ahhh... Claude... Detente... AHHHH... ¡¡Me correré!! AHHHHHH... - Demasiado tarde, el de ojos azules se corrió en la boca del mayor, manchando un poco su cara, pero Claude se tomó todo el semen de su pequeño, incluso el que había manchado su rostro.

- Uhmm... Delicioso. Pero ahora viene lo mejor, ¿Estás seguro que quieres continuar? 

- Yo... Sí, continua.

- Bien. - Le dio 3 dedos para que los remojara con su saliva, y así lo hizo.

 

Claude dirigió uno de sus dedos hasta la pequeña entrada de Alois y lo metió.

 

- Ahhh... Claude, me duele. Sácalo. - Decía con pequeñas lagrimitas en sus lindos ojos.

- Tranquilo pequeño... Pronto pasará el dolor.

 

Luego de un corto tiempo, el rubio ya tenía 3 dedos dentro de sí. Claude los movía en círculos y los abría para ensanchar la entrada de Alois.

 

- Bien, creo que ya estás listo.

 

Claude se sacó lo que le quedaba de ropa y la arrojó lejos de ahí. Su pene ya estaba erecto, demasiado para ser verdad, pero tener a su pequeño sólo para él lo había excitado de una manera impresionante.

 

Comenzó metiendo la punta de su miembro en la entrada de su niño.

 

- ¡¡Ahhh!! Espera... Claude... Me duele mucho...

- Calma, ya pasará. - Comenzó a masturbarlo para distraer su dolor. 

 

Se dio cuenta que meterlo de poco a poco sólo haría más daños a su hermoso ángel, y él no deseaba hacerlo sufrir más. Así que lo metió todo de una sola estocada, haciendo gritar y llorar al niño.

 

- Perdón pequeño, pero si lo hacía lento te lastimaría más. Tranquilo.

- Ahh... Claude... me... me duele, por favor aún... no... no te muevas.

- No te preocupes, ahh... no me moveré hasta que estés listo.

 

Claude se sentía de maravilla dentro de Alois, su pequeña entrada lo apretaba de una manera que lo hacía gemir roncamente sin siquiera moverse. 

 

- Cla... Claude... Ya puedes ahh... Moverte.

 

El de cabello negro comenzó a moverse lenta y delicadamente para no lastimar a su amor.

Alois gemía, el dolor cambiaba y era sustituido por un magnífico placer que jamás imaginó sentir. Pronto Claude aceleró las embestidas, con más fuerza, llegando a tocar la próstata del pequeño haciéndolo gemir como nunca, casi gritando. Alois ya no aguantaba. Sentía que si no se corría en ese momento se desmayaría, pero no podía, Claude no lo dejaba, tenía su dedo sobre la punta del pene de Alois impidiéndo que se corriera. 

 

- AHHH!!! Claude... Por favor... por favo, deja que... que me corra. - Decía con pequeñas lágrimas saliendo de sus ojos.

 

El mayor soltó su pene y se corrieron al mismo tiempo, Alois manchando sus vientres y Claude dentro de él. Seguidamente el pelinegro salió del niño y observó como escurría su esencia entre las piernas del ojiazul. 

 

- Perdóname pequeño, no pude contenerme más. ¿Estás bien? 

- Claro, estoy bien, sólo cansado. Y no te preocupes, yo deseaba que esto pasara.- Dijo sonriendo y le dio un beso a su amante. 

- Vamos a ducharnos y luego descansamos. 

 

Ambos se fueron a la ducha y se bañaron rápido. Al salir, Claude vistió a su niño y luego a él, para después acostarse en el sofá. Claude abajo y sobre él su pequeño ángel ojiazul. 

 

Fue cuando se dio cuenta que su niño ni siquiera encendió el PSP y lo encontró a un lado del sillón junto a su celular, así que lo apagó para que no los interrumpieran y se quedó dormido con Alois.

 

♥ FIN ♥ 

Notas finales:

Espero que les haya gustado, no se olviden de los reviews (ya sean buenos o malos) me sirven para mejorar! Y si leen esto pasen a leer mis otros dos fics, para ver si les gustan! :DD Son "El gran malentendido" y "El cumpleaños de Ruki" 

Bien, todo por ahora!! Hasta la próxima!! 

 


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